Capitulo 17 Memorias abiertas...


"...Lo mas oculto del corazón...esta frente a tus ojos..."

-ahora voy a recompensarlo, mi querida esposa...-le susurro en su oído mientras el vestido caía lentamente a sus pies, él lucia con el torso desnudo, sin embargo, desprendía un calor inigualable que la embriagaba, la acogía y le hacia sentir una fiebre que emergía desde su interior

-Diamante...-suspiro ella cerrando los ojos, al sentir que las manos ardientes y coquetas del peli plateado viajaban hacia el abdomen dándole leves caricias que subían hasta sus erizados pecho hasta su bajo vientre-te amo...

-lo se...-contesto él con una voz ronca y cargada de excitación, volteándola para besarla ferozmente en los labios, cargándola hasta el gran lecho nupcial, depositándola con delicadeza-como te he extrañado-le susurro en su oído- muero por hacerte mía de nuevo

-y yo muero por ser tuya...-contesto atrapando con sus manos las mejillas pálidas de su esposo mirándolo con dulzura y erotismo

-me vuelves loco...-deslizo sus besos hasta su cuello, un leve gemido por parte de ella despertó todos los instintos mas primitivos de Diamante, aun así, por mas que su cuerpo ardía e imploraba desatar toda su pasión, la tomo con dulzura cada parte de su cuerpo, entregándole besos llenos de significados, anhelos y esperanzas las cuales eran perdidas, deslizándose en su interior con suavidad tanto como la primera vez, formando un vaivén que unían sus cuerpos en una danza de amor singular entre dos personas que se amaban y a la vez se desconocían por completo, su nombre escucho de los labios de su esposa al sentir como ella llegaba a la cúspide, perdiéndose en el placer, mi entras que él, se dejo caer sobre ella exhausto, claro quería mas tiempo unido a su esposa, pero sonreía aferrándose a su piel, sabia que habrían mas noches, además se aseguraría de que en un futuro resistiera mas tiempo, solo le faltaba experiencia y confianza con él

-te amo...-dijo ella acariciando su cabello con ternura, mientras que Diamante posaba su cabeza sobre sus pechos

-yo también-le contesto aferrándose mas a ella-por esa razón, no quiero verte mas de ese tal Seiya- se separo de ella para mirarla fijamente ante los ojos de sorpresa de la joven

--¿Seiya?...

-si, no me gusta que estés cerca de ese sujeto, tu eres mía y de nadie mas-contesto sintiendo ella mas tenso el ambiente, cuando sostuvo su rostro con delicadeza para que la mirara fijamente -¿eh?

-te amo a ti, y solo a ti ¿acaso mi esposo no confía en mi?-le miro con ternura

-claro que si...-beso su frente-en el quien no confió es en él

-esta bien, no tendré contacto con Seiya, pero solo acepto esto para mantener la distancia, es muy incomodo estar cerca quien amas y no es correspondido

-eres demasiado buena esposa...-le respondió acariciando su cabello-por eso debo protegerte...

A la mañana siguiente, Diamante se encontraba en su oficina, revisando unos documentos, en compañía de Rubeus y Darien, ya que después de cada noche apasionante con su esposa, el sentimiento de pertenencia del peli plateado salía a flote, a la vez tenia que hablar urgentemente con su guardia principal, ya que según él, no había hecho su trabajo correctamente

-¿Por qué diablos mi esposa estaba con ese imbécil, Darien?-le pregunto mientras dejaba la hoja sobre el escritorio tratando de mantenerse sereno

-los guardias de la emperatriz me impidieron el paso señor

-¿la emperatriz?

-si señor, ella dejo que la señora conversara con su guardia personal en los jardines del palacio imperial

-¿acaso quería provocar problemas?-pregunto Rubeus

-¿de qué hablas?-ambos lo miraron con rostro atemorizante haciéndolo sentir pequeño e indefenso

-no me miren así, creo que la emperatriz quiere separar a la señora del amo, porque son lo sucesores de su dinastía-indago el peli rojo

-¿tu crees? Es la nación con el mejor ejercito del imperio, seria absurdo- comento el moreno

-si pero ...quizás quiera acabar con el reino de la señora, si el amo la deja desamparada, será la burla social y toda la economía de la nación se iría a un profundo agujero

-es verdad, tienes razón mi esposa tiene mucho poder ahora que es mi mujer, pero mas la tiene su reino natal, pero ella no tiene que pagar los pecados de su inepta familia – se puso de pie para dirigirse a la ventana, mirando la habitación matrimonial donde deducía que ella aun seguía dormida –si siguen estos problemas, intervendré

-pero señor

-tu saldrías ganando Darien-le comento con una sonrisa

-yo no quiero nada de ese lugar

-te corresponde por derecho!-le contesto alterado- o me divorciaré de Serena

-¿Qué?

- si, si no tomas lo que te corresponde por derecho, me divorciare de Serena, así toda tu venganza estará completa ¿no es asi?

-usted la ama, no haría eso

-¿acaso estas expresando cariño por mi esposa?

-¿de que hablan?-les pregunto a ambos Rubues quien lucia muy confundido

-esta bien, -contesto con resignación- pero seré yo quien le dira la verdad a Serena

-solo dependerá si yo intervengo, pero te sugiero que comiences a tomar tu papel enserio en este lugar, no solo eres un caballero excepcional, sino que también puedes convertirte en un hombre muy poderoso económicamente

-tener el puesto de la familia que me desgracio, no me importa-le comento en un susurro

-hazlo por tu madre y por Serena, ambas sufrieron de una manera diferente, pero eran al mismo punto, a la vez se te hara justicia ¿no crees?-le aconsejo, mientras que el peli rojo aun no comprendía lo que sucedía con su amo y el caballero azabache

-Serena esta bien con usted mi señor, mientras este a su lado, ella será completamente feliz

-¿y dónde queda la justicia de tu madre?, hacer justicia a la mujer que te dio la vida es lo mas gratificante que puede haber en este mundo

-señor...

-retírate, ve la custodiar a mi esposa, no mas de 10 pasos de distancia y cualquier cambio en ella repórtamelo

-¿cambio?

-obedece

-si, señor –dio una leve reverencia para retirarse, cerrando la puerta tras él, dejándolo a solas con el peli rojo

-mi señor puedo...

-no-contesto secamente-no puedes hacer preguntas sobre Darien y yo, muy pronto lo sabrás todo, no te preocupes por eso Rubeus, por otra parte Darien recorría los pasillos en dirección a la habitación de la joven de cabello dorado, sin embargo, se abrió una de las puertas de manera sorpresiva, Rei había tropezado torpemente chocando con el caballero haciéndola ruborizar al máximo

-lo siento-contesto con ojos brillantes ante la presencia de él-a...¿a donde se dirige?

-a la habitación de la señora, eres su doncella ¿no?

-así es señor cabello-comento expectante

-tienes mucha suerte...-respondió para volver a su camino, mientras que ella le miraba sin entender a lo que se refería

-vaya, por lo menos te hablo esta vez ¿no? A eso llamo suerte

-MINA!-grito Rei tratando de sacudirla

-por favor, siempre has estado enamorada de él, y fue una suerte que el señor Black, te haya llamado para ser la doncella de la señora-le comento Lita apareciendo detrás de ella

-si, pero sus ojos son únicamente opara la señora ¿crees que le guste?

-MINA!

-no digas esas tonterías-le regaño Rei- puede provocar un problema con el señor

-lo siento...

-la señora es muy buena persona, de seguro le agrada por eso

-¿estas diciendo que nosotras somos unas arribistas? –pregunto Rei con resignación

-¿y si le pides ayuda a la señora?-sugirió Mina

-¿Qué?

-si le pides a la señora que le hable de ti al caballero

-¿¿¿Qué???!!!

Pov Darien

El conde me pide algo que es algo casi imposible para mi ¿yo tomar mi puesto?, nunca lo había pensado, él tiene sus razones que conozco muy bien, ya que ambos nos criamos desde pequeños y me incentivo a que si hiciera justicia a mi historia, es extraño, somos como el agua y el aceite, además lo ahora solo nos une nuestra lealtad y Serena

Es extraño en este juego del destino, Serena termino siendo la esposa de él, con el único fin de escaparse de su reino, y Diamante quiere que tome ese lugar que ha estado corrompido desde mi primer aliento de vida ¿Qué ganaría si lo hiciera?, solo quería acabarlos y ahora él me sugiere que tome lo que corresponde, pero...¿Cómo?...

Recuerdos

-mamá Selene!-decía un pequeño de cinco años en un pequeño callejón, donde se había escondido ya que era buscado intensamente en por una de las sacerdotisas de un orfanato, siendo abrazado por la mujer, encontrando la sorpresa que su barriga estaba notoriamente abultada ya que no podía rodearla ni si quiera la mitad de su cuerpo

-mi pequeño Darien, serás hermano mayor –le contesto acariciando su cabeza, para luego toser escandalosamente

-mamá!

-por favor, cuida a tu hermanita ¿si?, cuando ella nazca, cuida de ella, lo siento tanto...-le dijo en medio de lagrimas que no podía contener –no pude protegerte...como debería

-¿mi hermana? Ella recibirá todo el amor que yo no tuve!-le reclamo, solo porque será una mujer y no tiene derecho al trono

-mi pequeño, por favor...no la odies, me queda poco tiempo y estará sola en este mundo, por favor cuídala mucho...

Fin de recuerdos

-si la cuidare, mamáSelene...


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Holaaaa espero que les haya gustado este capitulo ¿se sorprendieron? ¿Darien es el hermano de Serena? jijijiji mil abrazos!! gracias por leer y comentar!!!

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