10
No pudo huir otra semana más, finalmente el hombre lo termino encontrando. Se veía incluso más atractivo que la última vez que lo había visto, estaba parado frente a él, recargado en un vehículo rojo, parecía que lo había esperado fuera del bar hasta que terminó su turno, vestía elegantemente pues estaba usando un abrigo negro largo que le llegaba por debajo de las rodillas, pantalones negros, zapatos perfectamente pulidos y el cabello peinado hacia atrás, el rostro limpio y sin maquillaje, sus manos dentro de los bolsillos de su abrigo y las piernas cruzadas. Jodidamente atractivo.
—Quería disculparme por lo del otro día, te cause inconvenientes —Hoseok ya se sabía al derecho y al revés el discurso hetero por ley, ahora el hombre se excusaría manifestando que estaba borracho y lo que pasó nunca debió haber pasado, luego le pediría que lo olvidará.
—Estaba un poco más animado que de costumbre, por lo regular no soy así, permite que te lleve a cenar está noche para disculparme.
Hoseok levantó una ceja pensando que el hombre al menos le estaba ofreciendo una cena por sus servicios, no sabía si sentirse halagado o insultado. Ninguna de las dos emociones le pareció correcta. Asintió sin saber exactamente porque, hasta hace unos días estaba determinado a no volver a involucrarse con el hombre de nuevo, Taehyung lo acompaño hasta el vehículo y le abrió la puerta del copiloto. Entonces Hoseok se percató de que ya no llevaba el anillo.
—¿Qué pasó con tu esposa? —Se atrevió a preguntar una vez que Taehyung estuvo sentado a su lado, no quería ser imprudente, pero tenía bastante curiosidad.
Taehyung tardo en contestar, al menos hasta que el vehículo arrancó.
—Le he pedido el divorcio —dijo finalmente.
—Le has dicho el por qué.
Taehyung resopló.
—Obviamente, una vez que la encaré no pudo negarlo, ella incluso se burló de mí, se rio en mi propia cara diciendo que debí haberlo descubierto hace mucho tiempo. Que debería haber sabido que no me amaba.
Hoseok no supo que decir, desvío la vista al paisaje de afuera, tal vez eso era lo mejor para el hombre, nadie debería estar en un matrimonio sin amor. No podía culpar de todo a la mujer, tal vez ella sucumbió a la exigencia de la sociedad, esa en la que tienes que casarte y tener hijos, como parte de la comunidad LGTB muchas veces fue tentado, fue a algunas citas por solicitud de su madre, cuando se enteró de su orientación sexual, pero no pudo aceptar a ninguna mujer, aunque fueran hermosas, tuvieran un buen trabajo y posición económica. Simplemente no había emoción, finalmente su madre se rindió y lo corrió de casa, llevaba dos años sin hablar con la mujer.
—Es lo mejor para ti.
—Supongo que sí, aunque se negó con lo del divorcio, dice que se niega rotundamente a ser una mujer divorciada, pero yo soy bastante insistente, además, ahora he descubierto nuevos horizontes que me gustaría probar.
El comentario hizo a Hoseok temblar de pies a cabeza.
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