Miro entre los estantes del Ejército de Salvación con Ink, tratando de no pensar demasiado.

El suspira.

-Supongo que no entiendo lo que ha pasado.

-¿Qué es lo que hay que entender? Tiene novio. Estoy seguro de que ese es el fin de la historia.

Hace un par de días que no lo veo, y, cuando no está, siempre puedo pensar en las cosas con mayor claridad.

-Pero su forma de mirarte es tan... -Se detiene, tal vez al darse cuenta de que así no está ayudando en absoluto-. Lo siento. Cambiemos de tema.

Sostiene una camisa en alto y me mira levantando las cejas.

-Ese color no te queda.

Vuelve a dejarla en su sitio.

-Y ya que cambiamos de tema, ¿Qué pasa con Night? Le gustas mucho.

-A Nightmare le gusta quien quiera que tenga delante en ese momento.

-Vale, tal vez tenga la capacidad de atención de un insecto, pero creo que podría sentar la cabeza. -Levanta otra camisa y yo asiento con un gesto, así que la añade a la pila creciente que lleva sobre el brazo-. De verdad que es un tipo increíble cuando lo conoces. Van a tocar mañana en La Playa, y para ellos es muy importante. Deberías venir.

Debería ir. Es cierto que Nightmare pega mucho conmigo. A mi madre le gusta, a mi mejor amigo le gusta, Y sé que a estas alturas a mí también podría haberme gustado, si no hubiera otra persona en medio.

Mi mano se detiene en el vestido negro, el que encontré cuando vine aquí con Reaper. Me sorprende que todavía se encuentra aquí. Es increíble. Lo sacó y paso una mano por las cuentas cosidas a mano.

Ink suelta un jadeo.

-Es precioso.

Vuelvo a dejarlo en el estante, y pongo la prenda de al lado, un horrible mono de licra, justo delante de él.

-Ah, ni de coña -dice Ink, que se acerca a mí y libera el vestido-. Te lo vas a comprar.

-No.

-Si.

-¿Por qué? ¿Dónde podría ponermelo?

-Eso es lo de menos. Si encuentras algo como esto, tienes que comprarlo. Esta es la clase de vestido en torno al cual planeas un evento.

Me muerdo el labio.

-No tengo cuarenta dólares.

-Yo si, así que te lo voy a comprar. Será mi regalo de compensación porque te haya jodido un tipo rico.

Me río un poco.

-Te lo devolveré.

~~ • ~~ • ~~

Ink tenía razón: La Playa, un club cuyo nombre es demasiado literal, es un recinto mucho más grande, y me sorprende ver cuánta gente ha ido para escuchar tocar al grupo Bad Guy's. Las olas se mueven detrás del enorme escenario, y el viento salado mejora la actuación. Es un concierto genial, pero yo ya estoy planeando mi estrategia para marcharme pronto. De todos modos, no conseguiríamos hablar con los del grupo después del concierto con tanta gente tratando de atraer su atención.

Ink ha hecho unas horribles camisetas con los integrantes del grupo versión esqueleto, y yo llevo una en contra de mi buen juicio.

-Dos canciones más y tengo que irme -le gritó a Ink mientras Nightmare canta con esa voz suave como la miel.

-Sabia qué tratarías de marcharte temprano, así que he hecho planes para después del concierto.

-¿Planes? ¿Qué quieres decir?

Señala al escenario con la cabeza.

-Los chicos quieren salir un rato.

Echó un vistazo hacia Nightmare, y él me mira a los ojos. Me canta directamente a mí durante un par de versos, y no me extraña que las chicas y chicos lo acosen después de algo así. Mi corazón da un vuelco.

-Vale. Me quedaré.

Ink suelte una risita.

-Pues claro que sí.

Cuando termina la última canción, espero que Nightmare desaparezca detrás del escenario durante un rato, tal como lo hizo en el último concierto al que fui, pero no lo hace. Suelta el micrófono, salta del escenario y cruza entre un público lleno de manos que tratan de agarrarlo, dirigiéndose directamente hacia mí. Para cuando me alcanza, tengo el corazón en la garganta.

-Hola.

Ha dicho esa única palabra de una forma tan rasposa y emocional que me doy cuenta de por qué actúa tan bién.

-Hola.

Me toma de la mano y me la aprieta.

-No te vayas.

-Vale.

Entonces lo hace. Se dirige hacia el escenario, pasa a un lado a través de una fila de hombres fornidos, y desaparece de la vista. La observó durante todo el camino, y cuando se va me sacudo para salir del trance.

-Te dije que estaba loco por ti.

Recobro los sentidos y veo que su pequeña actuación ha atraído mucha atención. Hay demasiada gente mirándome.

-Necesito un poco de agua -digo.

-¿Me traes un refresco? -pregunta Ink, y me entrega un billete de cinco.

Caminó por la arena con los pies desnudos, preguntándome por qué no habré dejado los zapatos en el coche en lugar de haberlos dejado en el guardarropa. Estaban tardando una eternidad en devolver las cosas. Hay un chico sentado en el bar que me resulta vagamente familiar. Y teniendo en cuenta que me está mirando fijamente mientras me dirijo hacia allí, él también debe de reconocerme. Sin embargo, no logró situarlo, y mi mente trata de recordar a toda la gente del instituto. Me doy cuenta de que su cerebro debe de estar haciendo algo parecido cuando sus ojos se iluminan al reconocerme. Ahora es el quien tiene ventaja, porque yo no lo situo.

-Eres el amiguito de Reaper, ¿Verdad?

Su frase apesta a arrogancia, y en cuánto la pronunciación me doy cuenta de que se trata de Lust, el del restaurante. El que creía que me había llamado vagabundo. Estoy comenzando a pensar qué Reaper había mentido para defenderlo.

-Si. Hola.

Me inclino hacia la barra y pido una botella de agua y un refresco.

-¿Te ha traído Reaper esta noche, cariño? -me pregunta Lust cuando el camarero se gira para preparar mi pedido.

Entrecierro los ojos. Ahora que Reaper no está aquí, no siento la necesidad de ser educado.

-No. Conozco al grupo. ¿Cómo has entrado aquí?

Se ríe y me recorre con la mirada.

-Veo el atractivo. Tienes unos buenos...ojos lindura. Cuándo Reaper se aburra de jugar contigo, podríamos quedar algún día.

Nunca había pensado que tuviera el instinto de tirarle un refresco encima a alguien a propósito, pero mi mano reacciona de forma automática. Sin embargo, él también tiene instintos, probablemente ocasionados por una vida de gente tirándole refrescos encima. Su mano sale disparada y me agarra la muñeca.

-Esa no es una buena idea cari -me dice, y unas gotitas de refresco se derraman por el borde-. Esta camisa cuesta más que tú alquiler de un mes.

-Lastima que hayas tenido que vender tu alma para permitirtela.

-¿Va todo bien? -pregunta Nightmare, que aparece por detrás y me rodea la cintura con los brazos.

Estoy apunto de asesinar a alguien, eso es todo.

-Vamonos.

-Tenemos que volver a vernos dulzura -dice Lust detrás de mí. Me cuesta un tremendo esfuerzo no tirarle el refresco encima, con vaso y todo.

-¿Quién era ese? -me pregunta Nightmare mientras nos alejamos.

-Nadie de quién merezca la pena hablar siquiera.

Sólo que no puedo dejar de pensar en él. Es amigo de Reaper. ¿Es así cómo actúa el cuando yo no estoy? Me siento como si estuviera hirviendo de rabia.

-¿Geno? -Nightmare me quita la botella de agua y me sujeta la mano-. ¿Tengo que darle una paliza a ese tipo?

Me agarró a el con fuerza.

-No. No vale la pena -vuelvo a decirme. Pero sé que esto ya no se trata de Lust. Y estoy intentando decidir si ese consejo sigue teniendo efecto.

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En mi colegio ya llegamos a la época de exámenes.

Y por esa razón probablemente tarde en subir capítulo.

Srry xd.

Pero saben que.

Haré lo posible para continuar con el horario de día por medio.

Todo por ustedes :3

Ammm....

Ustedes... Mis....

Aún sigo pensando algún apodo bonito que ponerles. Pero no sé me ocurre nada. Jeje.

Amm....

Ya se \:D/

Mis chocolatitos :3

Pues los amo más de lo que amo al chocolate. Ustedes son el dulzor que alegra mis días. Algo de lo que no me puedo empalagar. Y quiero cada día probar. Amargo o dulze da igual. Pero quiero siempre con ustedes estar.

Que les parece?

Nos leemos el viernes :D

Besitos 💕💕💕