PoVNarrador:

Pasada ya una larga semana, todo había estado normal ese tiempo. O lo normal que se espera de una casa habitada por las criaturas mas temidas.

Los Creepypasta continuaron día a día con sus actividades en la sociedad. Jugaban su juego favorito a manos de sus fieles armas de matar. Jeff, orgulloso, presumía una vez mas de ya haber superado su anterior récord de 45 personas en una semana. Siempre habían piques entre los asesinos.

Luego llegaban las burlas y los momentos de molestarse entre ellos. Jane enojada replicaba a Jeff que eso era imposible. Ben solo rodaba los ojos y luego divertido metía cizaña.

Creepness miraba las disputas mientras jugaba con Sally en un lado del salón.

-Creepny...-Llamo la pequeña. La pelinaranja la miro y sonrió igual que siempre.

-¿Si Sally?- Preguntó.

-Quería preguntarte algo- Esta sonrie.

- ¿Algo?¿El que?- Volvió a preguntar curiosa Creepness.

-Quiero que seas... mi mami- esta sonrió amplio. Creepness ladeo la cabeza sin entender.

-Oh... ¿Tu mami?- Creepness la miraba.

-Si, como Slendy es mi Papi... Tu me caes muy bien y quiero que seas mi mami- Sally la abrazo fuerte y sonríe. Creepness solo le acaricia un poco.

-Pues... no se... nunca he sido mami de nadie- Dijo ingenua.

-Da igual, seguro seras buena mami- Hablaba Sally.

-Ah........ Su tu dices- Creepny si quiera se enteraba de nada. Solo había aceptado ya que parecía divertido.

PoV Slenderman:

No se si esto me pasa por escuchar conversaciones de otros. Pero la broma ya estaba lejos. ¿Enserio Sally había pedido a Creepness ser su madre? Pensé un momento y mire hacia afuera. Ya de noche. Una semana llevaba aquí y todos parecían locos con la llegada de esa chica. Algo en ella hacia que todos se olvidaran de su tarea y solo pensaran en divertirse. O eso me había parecido.

No voy a mentir, conmigo también había echo efecto aquella chica. No me había cruzado de mirada con ella desde la ultima vez que hable con ella el día después de que llego. Los sucesos me tenían pensativo a veces.

Cerré los manos en puños y negué de nuevo.

-¿Se puede saber porque Sally habrá pedido eso a Creepness? Enserio, esta niña cada vez me sorprende mas...- La puerta se abrió, mire y Sally me miraba con tranquilidad. Perfecto, ya quería hablar con ella.

-Papi... ¿Puedo decirte algo?- Me había preguntado.

-Si, pregúntame Sally- Respondí simplemente.

-¿Puede ser Creepny mi mami? ¿Siiiii? Porfiiiii- Puso ojitos, yo la mire serio. Iba a decir que no, era obvio. Yo no amaba a Creepness como para que fuera la madre de Sally. Pero cuando dije eso en mi mente sentí el vacío en mi pecho. Un vació mas amplio del que ya sentí. ¿Acaso esta mintiéndome?¿Estaba enamorado de esa chica? Imposible, ni apenas acababa de llegar. Yo no creo en esas bobadas del amor a primera vista. Además tengo cosas mas importantes que andar como jóvenes buscando el maldito amor. Solo asentí para contentarla. Sally feliz me abrazo.

-¡Gracias papi!- Decía feliz.

Luego salio del despacho. Pero no duro mucho en que de nuevo la puerta se abriese. Ahí estaba ella, Creepness. Sally la había traído cogida del brazo. Ambos nos miramos. Sally rió divertida y salio cerrando la puerta.

-¿Porque aceptaste?- Le pregunte.

-¿Porque?- Ella respondió con una pregunta mas. Yo le mire totalmente serio.

-Si, porque aceptaste ser madre de Sally- Realmente quería saber.

-Hm... Me pareció divertido. Además Sally es una buena niña... Supongo me agrada la idea... Aunque nunca fui mami de nadie ella dice que seguro seré buena. Y eso me entusiasma- Esta sonríe. Parecía tomárselo como un juego. Siempre para ella era importante la diversión. Suspire pesadamente.

-Bueno, si tu dices...- Mire de nuevo a la ventana. Creepness se puso a mi lado mirando también por ella. La mire un momento. Algo cálido recorrió mi pecho. Sentí un impulso y cuando quise darme cuenta mis brazos la giraron hacia mi. Esta me miraba ladeando la cabeza. Con su expresión confundida. Pero curioso, su sonrisa seguía ahí. 

-¿Ocurre algo?- Pregunto tranquilamente sin alterarse.

-....- la solté y mire a un lado- No... ya vete, quiero estar solo- La mire de reojo. Esta seguía ahí de pie. Mirándome. Me sentí nervioso. No me gusta que me observen así de ese modo. Es incomodo. Entonces ella tomo de nuevo mi mano, La mire de nuevo fijamente volviendo mi cabeza a ella. El silencio recorrió la habitación. 

PoV Creepness:

Si alguien me preguntase porque estaba haciendo eso. Creo que ni se. Solo sentí que Slendy parecía demasiado serio. Exceptuando que no tuviera rostro, algo me decía que no estaba feliz. O que al manos, no estaba cómodo con mi presencia. Lo tome de la mano, logrando llamar su atención.

Era muy alto, varias cabezas me sacaba. Tal vez 3 o 4. Este pareció inclinarse hacia mi. Yo, instintivamente aunque nunca había estado en una situación así me puse de puntillas y mis labios se pusieron donde, supuestamente, deberían estar los de el.

Cerré mi ojo, solo los tres segundo que tardo aquel pequeño beso. Este pareció quedarse algo paralizado. Yo sonreí como siempre, y tras soltarlo de la mano salí tranquila de aquella sala.

Ese beso, había sabido tan bien. Un sabor lejos de saber a una manzana podrida.

PoV Slenderman:

¿Enserio me había besado?

Senti extraño ese contacto. Era cálido. Realmente no me molesto pero... ¿Realmente yo la amaba?

Estaba muy confuso ahora. Me senté y pensativo deje pasar las horas.

[Capitulo revisado y Re-novado]