Jajaja no mms, en el cap anterior escribí vaso con B.

Perdón, es que no le presté atención a la ortografía xd.

La razón por la que no le pongo atención: porqué Wattpad no permite tanto lujo.

Claro la ortografía es importante, pero aparte de que me da weba, Wattpad no te lo permite.

Por lo que la escritura será básica, al menos en esta plataforma lo es...
.
.
.
.
.
.
.
.

Hace un rato, Ais-san vino aquí. El por qué, no fue otro que la preocupación, eso me hizo feliz, muy feliz.

Yo no quiero involucrarla en esto, me sentiré mal si dependo de ella siempre...

Aunque, ciertamente ella se ofreció a darme entrenamiento, algo así como un método de distracción-me negué al instante, no quería que perdiera el tiempo con alguien como yo.

No soy digno de siquiera estar a su lado, por lo que, aunque me duela, no podré verla de nuevo.

Bueno, eso es lo que me hubiese gustado hacer. Sin pensarlo acepté, es contradictorio con mi pensamiento actual.

Ya no se que pensar de mi mismo, hace no mucho que era verdaderamente feliz, llevaba una vida normal-aventurándome en la exploración del calabozo.

Asesinando monstruos del infinito laberinto, ahora no siento ningún interés por eso.

Tal vez, ya no crea necesario hacerlo. Sin kami-sama. ¿Que sentido tiene?.

Actualmente estoy en la habitación, de la cual Ryuu-san me ofreció.

Normalmente uno pagaría, pero con la intervención de Ryuu-san y Seal-san, Mama mía no me cobra.

Es difícil de creer, sabiendo su afición por el dinero.

Tienen un horario estricto, un sistema de control organizado por la dueña del pub.

A las 6 A.m. se desayuna, con un tiempo límite de una hora.

Luego pasado eso, aproximadamente a las 8 A.m. se empieza a abrir el local.

Con un menú específico en la mañana, desayunos y postres ligeros, es lo que se sirve.

Este local, se caracteriza por su cambiante menú, dependiendo de la hora a la que ingresas.

Como todo restaurante, a la hora de almorzar, sirven platos contundentes.

Pastas, pescado, pollo y una gran variedad, que me tomaría más de 30 minutos decirlo.

Sin tomar en cuenta la noche que es donde se puede decir que brilla, la tarde es la hora más pesada para el trabajo.

Las meseras moviéndose de un lado a otro sin descansar, claro que ellas están acostumbradas y sin mencionar que son aventureras de segunda clase.

El cansancio no es muy notorio, pero sin duda la que lo pasa peor es Seal-san, ella no posee <Falna>, al igual que yo.

Ahora, es el turno de noche. Donde los aventureros salen del calabozo y van a celebrar.

A esta hora, es donde el pub se llena, si quieres comer aquí, tendrás que reservar una mesa con antelación.

Esto dificulta mucho a los aventureros espontáneos que simplemente van y vienen.

Ryuu-san y las demás están atendiendo abajo. Yo, me encuentro en la segunda planta, donde esta mi cuarto.

Estoy recostado en la cama, mirando el techo sin expresión alguna.

¿Debería acaso bajar a comer algo? No lo creo, mejor me quedo aquí.

Interrumpiendo mi hilo de pensamientos, la puerta se abrió.

Seal-san estaba apoyada en la puerta mientras me miraba tímidamente.

Parecía querer decir algo, pero no tenía el valor para hacerlo.

"Seal-san ¿sucede algo?"

Al momento de hablarle, noté como se puso nerviosa.

Estaba ligeramente temblando, movía sus dedos, chocandolos entre sí.

"Verás... Mama mía quiere que ayudes"

Aaah, sinceramente me lo suponía, esto lo estaba esperando en el momento que llegué.

Al principio pensé que se estaba tardando mucho, así que me preparé mentalmente para hacer mi mejor esfuerzo.

Dirigí una sonrisa a Seal-san y luego de afirmar mi presencia, la puerta fue cerrada.

Toda esta información, fue dada por Ryuu-san al momento del descanso.

Al principio me sorprendió que se tomara el tiempo de explicármelo, y aun mas en su tiempo de descanso.

Pero, para ser exactos, creí que no me tomarían en cuenta.

-Ese fue el verdadero motivo de mi sorpresa.

Como un invitado, no era necesario apegarme a las reglas de los trabajadores, por lo que, sí me dejo desconcertado.

Luego entendí que yo no era un invitado normal, yo no pago hospedaje así que lo normal seria ganarlo.

No suena mal ganarme la vida trabajando junto a Ryuu-san y Seal-san, dejando atrás mi antigua profesión como aventurero.

XXX

Cambié mi enfoque del techo, moviendo mi rostro hacia la puerta, que solo hace unos segundo había sido abierta.

Me levanté, ordené mi cama, sacudiendo las sábanas. Me cambié de ropa, me puse mis botas marrón y mi abrigo del mismo color.

Frente a la puerta, dude por un momento, tenía miedo de salir al mundo real.

Vacile entre mis pensamientos íntimos, posicione mis manos en mi cabeza, me aferre fuertemente y luego respire profundamente.

No tenía porqué dudar, tengo que ser fuerte...

Abrí lentamente, un olor exquisito fue lo primero que llegó a mi, seguido de una vista general del ambiente.

Como era de esperarse, estaba lleno de numerosas especies, hombres bestias, elfos, enanos, pallums...

Una variedad de colores abundaba en el escandaloso panorama.

Entre ellos hablaban, murmuraban de la belleza de algunas mujeres de ahí.

En cambio el público femenino, que no era tan abundante como su contraparte, percibí sus palabras triviales.

No podía escuchar las conversaciones, mi <estado> estaba bloqueado, por lo que era un ciudadano común.

Además, con todo este ruido era imposible hacerlo.

Por lo que solo era suposición mía.

Baje las escaleras, de un lindo material café, madera pulida.

Conforme seguía el camino, mi expresión tranquila cambiaba ligeramente.

Esto me traía recuerdos, cuando después de una larga jornada dentro del calabozo, Lili, Welf y yo, íbamos aquí a comer.

Eramos clientes frecuentes.

Correcto. Mi rostro se entristecia a cada segundo.

Sacudi mi cabeza alejando todo esos pensamientos innecesarios.

Pase por un lado del concurrido bar, donde estaban las mesas llenas.

Camine por un pasillo, al lado de la barra donde Mama mía atendía.

Y entre a una sala unida al hall principal.

El cuarto no era muy grande, las paredes estaban echas de roca con detalles rudimentarios.

No era elegante, más bien parecía ser del tipo acogedor.

Más hogareño, ese era la intensión de este pub. Hacer que te sientas como en casa, las paredes de madera en la sala principal, junto al interior decorado burdamente.

Ahí dentro estaba Seal-san.

Tenía un delantal en su mano derecha, era blanco, el mismo que ellas usan.

Estaba usando el uniforme del pub, un vestido color hoja, junto al mismo delantal blanco que sostenía. Llevaba unas calzas dentro de unos zapatos cafés oscuro.

"¿Podrías ponértelo?"

Habló nerviosa, sus mejillas estaban teñidas de un rojo tierno.

Miraba al suelo, e inocentemente me habló.

"... Mama mía dijo que lo necesitas..."

Solo asentí de sobre manera. De un extrapolable sentido del humor, me reí junto a Seal-san.

Yo, no soy tan tierno como ustedes. Esas fueron mis palabras ante el repentino momento, que creó una atmósfera vergonzosa.

Ciertamente el chiste fue nefasto, siento que Seal-san solo se río por pena.

Después de eso, salí por una puerta abierta, con un contraste medieval.

Nuevamente el escenario alegre inundó mi vista, próxima a mi, la figura de una hermosa elfa entró.

Ryuu-san estaba parada en frente mi.

"Veo que ya estás trabajando"

Ella en verdad no tiene tapujos al hablar...

Me reí y nerviosamente respondi.

"Si... Este. Bueno tengo que atender..."

Rápidamente corte la conversación, me volví hacia el ruidoso público.

Agarre con ambas manos una bandeja de madera, que fue entregada por Seal-san y caminé.

Hoy, yo, seré un mesero...

XXX

Si.

Claro.

En seguida.

Un montón de confirmaciones eran dichas, expuestas por un chico de cabello blanco.

Iba de mesa en mesa, atendiendo a los comensales.

Se adaptó con suma facilidad.

Era tan rápido como Seal, una trabajadora antigua del pub.

Cerveza y comida contundente, era lo que más abundaba en las mesas.

Seguido de un ruido propio de un lugar así.

De la nada, Anya gritó.

Llamando la atención de todos.

"Los que reservaron, ya llegaron"

Esto...

Si, parece un deja vu. Incluso si esto lo fuera, no es del todo cierto.

Pues yo, ahora soy un mesero.

Desde la entrada principal. Una doble puerta de madera fina.

La presencia de una concurrida <familia> hizo aparición.

Los altos rangos de la <Familia loki>, estaban aquí.

No solo eso, sino que algunos miembros destacados igual.

Una demi-humano con orejas de gato color negro y de ojos del mismo color, junto a un hombre de una apariencia joven pero madura, acompañaban a la élite.

Incluyendo la diosa de la familia.

Al momento de entrar, se llevaron toda la atención, pero sin duda la que más destacaba era la <Princesa espada>.

Como era de suponer, opacaba la atención de todos, y aún más la del sexo opuesto.

Sin prestarles atención al bullicio, se sentaron sin decir palabra alguna.

Una mesa cercana a la puerta, ubicada en el centro.

Como aventureros reconocidos, estaban acostumbrados a ser el centro de atención.

Todo aquel que los veía, los admiraba.

Son el orgullo de los aventureros, los más fuertes, el pináculo de toda raza.

—<Aventureros de primera clase>—

El estaba estático ahí, hace ya un minuto que dejó de moverse.

Al momento en que los vio se quedó así.

Los pensamientos de las meseras eran compartidos.

La que se acercó y lo sacó de su trance fue Ryuu.

"Cranel-san, debería seguir trabajando"

¡¡¡¡¡¡Eehhhhhhh!!!!!!

Yo, ¿me quedé así?

En serio, me quedé estático.

Salte del susto al oír repentinamente a Ryuu-san.

De la sorpresa, casi le doy con la bandeja en el rostro.

Aunque ella lo esquivó sin problemas, me disculpe.

Volvió a hablar.

"Te parece si atiendes a la familia loki"

Ella ciertamente no lo dijo en tono de pregunta.

Me lo ordeno. Movi la cabeza de arriba a abajo, con un poco de miedo.

Tenía una mirada aterradora.

A Ryuu-san no le gusta que uno holgazanee en el trabajo.

Ella es muy recta, y si alguien no sigue las reglas ella se encargaría de disciplinarte.

"Si, si. Yo los atendere"

Casi de inmediato, salí de ese peligro.

Ryuu-san paso de ser una cálida amiga a una peligrosa jefa.

Sentía como mi orgullo caía por los suelos.

No quería que Ais-san me viera así.

Me acerqué suavemente a la mesa, que en realidad era una unión de dos.

"¿Que pedirán?"

Casi como susurro.

La atención de toda la familia se dirigió a el.

Y enseguida, justo lo que no quería que pasara paso.

"Pero si es el hijo de la enana"

Loki, la diosa de la familia habló en un tono burlón.

Dirigió sus ojos en mi, como queriendo mirar mi alma.

Al instante siguiente, Ais-san pareció reaccionar.

"¿Bell?"

"Eeh, yo, yo..."

No sabía que decir, sentía como mi corazón en cualquier momento mi corazón saldría de mí pecho.

Mi rostro se enrojecío, y humo empezó a salir de mi cabeza.

Temblaba ligeramente, sudor caía por todo mi cuerpo.

Mi intención era tomar su orden, y antes de que alguien notara que era yo, salir de ahí.

Pero parece que fracasó.

Los subestime, loki-sama se dio cuenta y me atrapó en el acto.

¡Argonautaaaaaaaaaa-kuuuuuuuuuuun!

Tiona-san...

Con su característica actitud, que difería de la mayoría de la <Familia Loki>.

Con un rostro confuso, tiona se levantó de su asiento.

"¿Que haces con eso? Argonauta-Kun"

Bajo su rostro, mirando fijamente la bandeja de madera que sostenía Bell.

Puso su mano en su mentón, tomando una posición curiosa.

El callado chico, logró alcanzar un nuevo color rojo. Su pálida piel blanca, ahora era como un tomate maduro.

"Yo..."

Al instante siguiente, un hombre lobo interrumpió.

"A nadie le importa... hahaha, eso es lo que un debilucho como tú debería hacer"

Descriptivamente alzo la voz.

Tiona se enojó, y empezó a gritarle: "Cállate perro".

Bete no dudo en responder, y el ambiente nuevamente cambió, de uno nervioso a uno de pelea.

No... Para.

Bell había regañado a Tiona.

"El tiene razón... un debilucho como yo no debería ir al calabozo"

Abrió los ojos de golpe, desvió la mirada de bete y miró a Bell.

Estaba sorprendida, no sabía a que se refería.

Pero, por alguna razón, esto la impactó demasiado.

Sintió una sensación intensa en su pecho, sentía como si su corazón fuera apretado desde dentro.

Ais bajo la cabeza y se quedó en silencio.

El sonido de fondo, de las conversaciones cesaron.

Silencio, un silencio sepulcral.

"Argonauta-Kun ¿A que te refieres?"

Bell tenía la mirada gacha.

Apretó su puño y cerró con fuerza sus ojos.

"Que yo... No merezco ser aventurero. Yo, fracase"

En vez de respuestas, más preguntas inundaron a Tiona.

¿Él fracasó? ¿Que significa eso?

Esto la desconcertó tanto, que su expresión amigable desapareció.

Y una mirada seria se hizo presente.

"Si, así es basura. Es bueno que reconozcas tu lugar. Será mejor que vayas con esa diosa pobretona"

El seguía hablando, su descortés tono lo enojaba. Pero podía soportarlo, después de todo se lo merecía.

Pero lo que no soportaría, era que insultara a su diosa.

"¿Que dijiste de Kami-sama?"

"¿Eh?... Ya vete de aquí, y ve a complacer a esa inútil diosa"

¿Eso, acaso era necesario?...

El no tenía el derecho de ensuciar el nombre de Kami-sama.

Apretó sus dientes, frunció su ceño. Agarro al Demi-humano del su ropa y pronuncio prejuicios.

"¡No te atrevas a insultar el nombre de mi diosa!... ¡MALDITO!"

La intensa situación no pasó desapercibida, e innumerables murmullos rodeaban a los causante del acto.

-Ese chico está loco.

-Está amenazando a un miembro de la familia Loki.

-No solo eso, sino que a un nivel 6.

-Está demente...

En un momento al otro el agarre de bell fue roto. La abrumadora fuerza de Bete le permitió mover con facilidad el brazo de Bell.

"No me toques, ¡Escoria!"

El tenso ambiente se calentó aún más, por parte de ambos lados, todo era ira.

Un fuerte estruendo sacudió todo, un puño había sido dirigido a Bete.

Bell lo había golpeado en el rostro.

Con el impacto, sintió como sus huesos se quebraron al contacto.

La dura resistencia de un Lv. 6 le pasó factura.

Todo los huesos de su mano se rompieron, si hubiera ejercido mas fuerza, sus huesos se hubiesen molido.

"Te atreves a golpear a un nivel 6... Maldita basura insignificante, te mostraré lo que es la fuerza"

El tiempo se detuvo.

Bell sintió como un golpe iba dirigido a el.

Iba tan rápido que el viento de fluctuaba al entrar en contacto.

Sus ojos no podían seguir el ritmo, vio como desapareció de su vista.

Moriría... Con la fuerza ejercida, aún si tuviera un estado moriría.

Ese era el resultado, y era inmutable e inamovible.

A centímetros del impacto.

Un fuerte estruendo que rompió todo el espacio, con un bomb sónico.

Una patada fue dirigida a Bete.

La fuerza fue tal que, reformó su rostro al instante. Su nariz fue rota y más de un diente, dejándolo inconsciente.

Ais había dado una patada, y no se tomó la necesidad de medir su fuerza.

Antes de siquiera darse cuenta, el cuerpo del hombre lobo estaba incrustado en la pared.

Una pequeña onda de viento se desvaneció del cuerpo de Ais.

¿Acaso ella usó <Ariel>?

No, esto no fue preciso, sin embargo la fuerza implementada fue lo suficiente para dejar fuera de combate a un nivel 6 de un golpe.

Ella verdaderamente tenía la intención de dañarlo...

"Maldito... Perro bastardo"

Ais pronuncio esas palabras en silencio, yo logré escucharlo.

Aunque no le tome atención.

Su rostro estaba torcido, estaba tan enojado que no sabía ni siquiera que estuvo a punto de morir.

La onda de viento había infligido daño colateral a Bell.

Sangre salía de su mejilla, que estaba ligeramente cortada.

"Maldito bastardo... ¿Que se cree? Yo... Yo..."

Sus ojos ardían...

XXX

La <familia Loki> decidió irse.

La primera experiencia de los destacados, no fue muy agradable.

Finn los había invitado a celebrar junto a ellos, pero el resultado no fue común.

El pequeño pallum, pagó los daños causados y pidió perdón.

"Gareth, ¿podrías cargar a Bete?"

"Claro"

Las preguntas no tardaron en llegar.

Y la princesa solo respondía con silencio.