Capítulo 1: Aunque No Reencárnenos Seré Tu Hermana Pequeña
Distrito Rojo
Todo era un caos total las llamas terminaban de quemar cada rincón del distrito dejando en cenizas, esos dos seres que amenazaban con destruirlos ahora seres sin vida, quisieron devolver un poco de sus dolores...
No pudieron con los cazadores los dos perdieron la cabeza esa noche, la rabia y resentimiento que pronto se convirtió en remordimiento.
Entre gritos de odio y enojo ambas cabezas se desintegraron sin saber que nada había terminado era el comienzo de una nueva historia...
En un limbo aquel peli verde observaba confundido todo a su alrededor no había absolutamente nada, giro a otro lado sin hallar a nadie y alguien lo llamo por su nombre captando su atención.
-¡Hermano! No me gusta para nada este lugar ¿Dónde estamos? Haz algo por favor odio este lugar.
-¿Ume? Si estas aquí significa que tu también haz... - decía el peli verde.
-¿A dónde vas? Gyutaro – llamaba la inocente hermana menor.
Gyutaro no pudo hacer nada bien en toda su vida solo fue dolor, sufrimiento y soledad le daba igual ir al infierno estaba dispuesto a pagar sus pecados al menos quiere que su hermanita tenga un mejor futuro...
-Gyutaro ¿Por ahí es la salida? – pregunto Ume aun mas confundida.
-Ya es suficiente, hazme el favor y no me sigas nunca mas... aléjate de mi lado, ya no tienes porque seguir a mi lado.
-¿Hermano? Porque dices hermano yo...
-¡YA TE DIJE NO ME SIGAS, HAZME CASO AUNQUE SEA SOLO UNA VEZ! – Le grito Gyutaro en furia.
Hizo un gesto de molestia tras decirle eso, Gyutaro no pudo proteger a nadie y tampoco fue capaz de hacer feliz a ninguna persona, creía que su existencia solo traía desgracia...
Ume sabe en su interior que su hermano seguía molesto por lo de antes de desaparecer, quiso disculparse aun si es una sola vez...
-¿Estas molesto por lo de antes? Por favor hermano perdóname lo que te dije que eres feo no lo creo de verdad, fue por la rabia.
-...
-Rabia de haber perdido, lo siento no quería admitir que nos habían derrotado por mi culpa, siento no haber estado a la altura.
-...
-Si fuera mejor peleando no habríamos perdido, siento haber sido un lastre para ti por favor hermano discúlpame.
A ambos los separaban la luz donde estaba Ume y por su parte Gyutaro en la oscuridad, dos hermanos que sufrieron el peor dolor del mundo y ser victimas de la crueldad humana vivieron en aquellos días tristes y helados sin cariño ni amor...
-Tu y yo ya no somos familia ni nada, hoy dejamos de ser hermanos me iré para este lado tu ve al otro hacia el camino de la luz.
Gyutaro no pudo hacer feliz a su hermana creyó que sola estaría mejor sin mas dolor y desprecios por parte de la gente a su alrededor, al menos si va a la luz tendrá la oportunidad de reencarnar...
Debido a que Ume nunca eligió ser un demonio, fue Gyutaro el que decidió por ambos la inocente hermana no poseía nada de culpa, se volvió así porque fue el quien la crio de esa manera...
No se esperaría que Ume saltaría a su espalda aferrada a su querido hermano.
-Oye!! – se quejo Gyutaro con molestia.
-¡No quiero ni hablar no me iré, no te pienso abandonarte y dejarte solo, vamos a estar siempre juntos, da igual cuantas veces nazca seguiré queriendo ser tu hermana pequeña!
-...
-Por favor no me regañes, no me odies, no te desprecies... no me dejes sola ¡Nunca te lo perdonare si me abandonas!
-Ume...- le dijo un Gyutaro destrozado emocionalmente.
Solo se oía los llantos de una pequeña Ume aferrada a su única familia, no quiere alejarse de Gyutaro el la crio y estuvo a su lado cuando mas la necesito y jamás la abandono.
-¡Eres malo!¡Muy malo! ¿Olvidaste que lo prometiste, acaso ya lo has olvidado? No olvides la promesa de los dos – dijo Ume en llanto en la espalda de su hermano.
¿Ha olvidado la promesa que hicieron? Hace cuanto tiempo que Gyutaro lloro? Lo recuerda como si fuera ayer la trágica noche que la ataron y quemaron viva a su hermana, la dejaron a su suerte.
Ese día algo cambio en el, su odio hacia los humanos solo aumento drásticamente su actitud cambio y se volvió un ser sanguinario aun conversando humanidad en el mismo...
Aquellos días tristes y helados en los que ambos hermanos eran unos niños, se protegieron entre ellos y se amaron, bajo los climas fuertes Gyutaro protegía a su hermana del frio con un viejo pastal...
-Hermano... ¿Estas bien? Porque estas llorando? Tengo mucho miedo – dijo Ume con preocupación.
-Estoy bien, no estoy llorando de tristeza, sino de felicidad por tener a mi lado... todos siempre me despreciaban por mi apariencia, pero tu te quedaste y fuiste leal.
-Porque tu estuviste a mi lado hermano siempre te voy a querer... así que por favor no me abandones.
-Eso no pasara jamás mi dulce hermanita... mientras estemos juntos nadie nos lastimara.
-¡Onii-chan!
-Gracias por quedarte a mi lado Ume... nunca dejare de amarte porque tu nacimiento me trajo felicidad a mi vida y eres mi única fuente de luz.
Las nevadas aumentaban cada vez mas Gyutaro cubrió la cabeza de su hermana y toda la nieve solo sobre el, la cuidaba de los malos climas y cualquier que intentara lastimarla, y el sonríe débilmente...
-Juntos somos los mas fuertes, aunque tengamos hambre o frio no nos pasara nada te prometo que siempre voy a estar contigo jamás te abandonare ¿Ves? Ya no debes tener mas miedo, Ume y lo prometo yo nunca te dejare porque estaremos bien juntos...
Gyutaro lo recordó y ya tomo una decisión debe aceptar su destino aunque no puede hacer cambiar de parecer a su hermana, la cuidaría por siempre la sujeta de ambos muslos empezando a caminar a las llamas del infierno donde pagaran sus pecados por la eternidad...
Mientras se escucha el llanto de aquella pequeña, de esta vida al nacer los dejo solos aquel amor que a pesar del dolor creció entre los dos, solo los hizo cada vez mas fuertes hasta el final, unidos estarán para siempre la vida y la muerte inseparables...
Aquellas palabras las recordé "Cuando estamos juntos somos mas fuertes con hambre o frio estaremos perfectamente y lo prometo yo nunca te dejare porque si seguimos juntos no hay nada a que temer"
Siempre juntos...
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Arco: "La Luz Del Alba De La Promesa"
Sentí un leve cosquilleo en todo mi cuerpo solo oía unas voces familiares lo ultimo que recordaba es que fue al infierno junto a su hermano, al despertar noto que estaba sobre el techo de una casa.
Lo mas sorprendente poseía su apariencia de humana vestida con un kimono rosado claro a cuadros.
-¿Dónde estoy? Lo mas importante que hago en un techo, ¿Habrá sido una ilusión todo lo que viví? – se pregunto Ume a si misma.
La peli blanca se bajo de los techos hacia el suelo y noto que aun conservaba sus habilidades, fuerza sobrehumana y posiblemente arte de sangre demoniaco...
-No se que paso, pero debo hallar alguna forma de volver a casa espera... ¿Eso es posible? Estoy muerta o no – se dijo en su mente con rostro de póker.
Algo choco contra ella había sido un carrito si bien no fue tan potente si sintió dolor en su hombro Daki se acerco dándose con la sorpresa de que el responsable era un panda gordo y adorable.
-Vaya, vaya que tenemos aquí... un panda hace tiempo que no veía a uno, oye grandote puedo decirte algo – llamaba la peli blanca.
-Eh? Que cosa? Adelante pero que sea rápido tengo prisa pronto nombraran al guerrero dragón y llegare tarde.
-Primero que nada modales ante todo, me llamo Ume Shabana la mas hermosa.
-Oh! Mi nombre es Po hijo de Mr. Ping y vendedor de fideos.
-Oh que sorpresa!
-Ume, verdad? Conoces a mi padre?
-Nope, solo acércate aunque sea solo un poquito.
-Okey... no pierdo nada – dijo el panda desconfiado.
El panda se acerco recibió un golpe de lleno en el estomago que solo hizo rebotar el puño de la chica, Daki fue mandada hacia atrás ¿Qué pasaba? Un panda es mas fuerte que ella...
-¡Idiota ese golpe me dolió aprende a conducir tu carrito de fideos para la próxima! – le regañaba Ume.
-Oh! Ja Ja Ja parece que tu golpe no funciono.
-Imposible, tu grasa corporal lo protege? No logre tocar ninguno de sus nervios, que absurdo es este lugar – se dijo Ume a si misma.
Le dio otro golpe sin lograr nada el panda solo se reía burlonamente, parecía tomárselo como parte de una broma Daki se detuvo y suspiro.
-Me doy... es imposible ganarte... tal vez estas gordo pero eres adorable dan ganas de abrazarte eres como osito cariñosito – se reía la peli blanca.
-Oye te agradezco el cumplido pero no creo poder darte un abrazo mi padre es muy sobreprotector.
-¿Hijo de un ganso? Esa es una estupidez... este lugar no tiene nada de lógica ¿Dónde esta el truco? ¿El chanchullo? ¿La maldita treta?
-Que rara... oye te noto hambrienta ¿Compartimos mi galleta de la suerte?
-Eh? Me vas a dar la mitad de tu galleta porque eres muy bondadoso, no tengo hambre – diría Ume al hacerse a un lado.
Para su mala suerte su estomago la delato al sonar, no pudo evitarlo Daki se avergonzó al 100%, había sido un momento incomodo para ella.
-¿Quieres la galleta o no? – preguntaría Po.
-Hmmm? Trae para acá – respondio Ume.
La peli blanca tomo la galleta se la comió rápido e hizo un puchero enojado, luego le hizo señas al panda.
-Pero te estoy vigilando grandote...así que cuidadito.
-Una niña no debería ir por estos lugares, ¿Dónde están tus padres?
-No tengo padres, no te incumbe grandote.
-Si supongoooooo!! Eres muy mona.
-Si claro... espera que acabas de decir? – pregunto Ume.
-Que eres linda, con tu permiso iré a ver la ceremonia donde elegirán al guerrero dragón no puedo perdérmelo.
-Que tipo mas raro...
Po rápidamente se retiro corriendo con su carrito de fideos, por su parte Daki no pudo sentir un poco de empatía por ese panda y fue bueno con ella e incluso le dio comida es algo que nunca le sucedió...
-Mi Onii-chan ¿Qué haría en esta situación? Resolverlo hablándolo... o patear traseros? Gyutaro – dijo una albina algo melancólica.
Flashback.
En una pequeña cabaña Gyutaro capturo algunos peces y empezó a asarlos en una fogata debido a que no tenían una estufa, alguien lo llamaría resulto ser su hermanita pequeña...
-Hermano! Hermano! Hermano! Gyutaro! – llamaba la pequeña albina.
-¿Qué pasa, Ume? A que viene tanto ruido.
-Iba caminando por la calle y un hombre me elogio dijo que soy linda ¿Eso es malo, hermano?
-Mmm eso es...
-Eso es? – se confundió la albina.
-No lo se pero a veces me siento extraño cuando te veo dormir ahora lo se, eres linda.
-¿Soy linda? – se sorprendió la hermana menor.
-¡Eres malditamente linda! La mas hermosa de todas esa es mi hermana!
-Ahhhh!! Me hace muy feliz que me lo digas tu hermano – dijo la albina con las mejillas enrojecidas.
Ume salto a los brazos de su querido hermano dándole un cálido abrazo, Gyutaro la recibió dándole caricias en la cabeza a la hermanita sabe que algún día tendrán que alejarse uno del otro...
Y ya no estará el, para salvarla y protegerla.
-Vamos hermanito dilo una vez anda – suplicaba la albina.
-Si después de todo eres muy linda, Ume... prométeme que siempre serás una chica de buen corazón cuando ya no este a tu lado.
-Hermano?
-Seguro conocerás a gente amables y bondadosos diferente a esta gentuza de aquí, no importa que forme adopte o en que reencarne siempre protegeré lo que es valioso para ti...
-Si Onii-chan! – respondio la albina con una sonrisa inocente.
Fin del Flashback
La chiquilla se subió encima del carrito de fideos sin que el panda se diera cuenta quería creer en las palabras de Gyutaro, pasaron los minutos Ume se quedo profundamente dormida ahí arriba...
-Por fin! Llegue después de tantas escaleras, llegue – dijo un Po agitado.
-Buaaaah! – bostezaba la peli blanca.
-¿Qué es eso? ¡¿Eres tu?! Como llegaste aquí.
-Del mismo modo que tu grandote, y no hagas ruido que tomaba mi siesta de belleza.
-Genial... ahora tengo a una chica que no deja de seguirme, porque atraeré a los villanos.
-Buen punto, pregúntale eso a un villano – dijo la peli blanca con claro sarcasmo.
-¿Y donde encuentro a un villano? – pregunto Po.
-Yo! Ósea soy yo, yo soy la villana a mi es quien debes preguntarle... - decía la albina intentando parecer malvada.
-Olvídalo no tienes cara ni de malvada ni de villana.
-...Enserio no sabes de mi? Soy la Oirán Warabihime de la casa Kyogoku.
-Nada, no me suena para nada además que tanto daño puede hacer una niña tan adorable y pequeña.
-Para empezar ¿Qué lugar es este?
-Estamos en china.
-¡¿China?! Oh no puede ser... a donde he terminado a parar diablos.
-Pareces sorprendida eso quiere decir que eres extranjera.
-Panda tonto...
Por su parte Daki seguía pensando en alguna forma de volver a Japón, hace unos momentos estaba en el distrito rojo en su batalla contra el grupo de cazadores, ahora yacía en china con animales.
-Todo esto es muy confuso! – se quejaba la albina.
-Si tu lo dices.
-Oye panda ¿Qué parte de china es este lugar?
-El valle de la paz.
-Mmm debe haber una forma de volver a casa.
-¿Qué tanto murmuras? Si quieres puedo darte una mano en ello.
-No gracias...
-Anda di que si.
-Vale, vale, esta bien ¿Feliz?
-Aun no, quiero entrar en primera fila a ver al que será el siguiente guerrero dragón.
-Grrr! Que panda tan tonto, ya me lo veo venir hacer una gran estupidez.
Por otro lado Daki seguía dándole vueltas al asunto y se preguntaba si hacia bien en relacionarse con otras personas que no son su hermano, por su parte Po trataba de treparse y termino cayendo debido a su enorme peso.
-Y este panda hace estupideces, no niego que su estupidez es muy divertida Je Je Je – se reía Ume con leves risas.
Y Si definitivamente el panda es lo suficiente estúpido volvió a caer y se levanto, esta vez uso una silla con varios fuegos artificiales en ella, por su parte Daki llevo su mano a su rostro con decepción...
-¿Tratas de matarte o que idiota? Bájate de ahí – regaño Ume.
-No me iré hasta no ver quien será el siguiente guerrero dragón – respondio Po.
-Tu estupidez no tiene limites, eres un estúpido de clase alta no cabe duda – dijo la albina suspirando.
-¿Eso fue un halago o un insulto?
-Tómalo como quieras, bájate de ahí te vas lastimar, panda.
-Nop, iré a ver en primera fila al guerrero dragón – insistía el panda.
Po encendió la mecha de los fuegos artificiales a punto de estallar, por otro lado alguien lo llamaba por su nombre era un ganso.
-Po! Pero... ¿Qué estas haciendo? Y lo mas importante quien esa chica que te acompaña – dijo el ganso.
-Yo? – pregunto Ume.
-Ahhh! Es solo una... ¿Amiga? – decía Po sin tener una respuesta adecuada.
-Ohhh!! Acaso es tu novia y no me avisaste? Tu muchachita escúchame no alejaras a mi hijo de mi lado, yo soy su padre.
-Si clarooooooo! – le dijo la albina con burla.
-Pa... no es mi novia, solo una amiga.
-De cualquier forma que crees que haces olvidaste tu carro de fideos, bájate de ahí Po... te vas a lastimar – le dijo su padre.
-Pero es que yo quiero ver a los cinco furiosos son mis héroes de verdad – respondio Po.
Sin darse cuenta la mecha se había consumido totalmente y exploto causando una gran explosión que elevo al panda por los aires, por su parte Daki con decepción solo soltaría una pequeña risita...
-Hasta yo lo vi venir, solo espero poder quedarme un poco mas aquí panda tonto – se dijo Ume en su mente.
El día de hoy Daki conoció lo que es tener amigos dispuesta a cumplir su promesa con su hermano para hacerlo sentir orgulloso, "Da Igual si renazco miles de veces"
Continuara...
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