Stiles estaba acostado en su cama reflexionado sobre los últimos acontecimientos en su amada cuidad... Habían tenido que recuperar a Jackson, un cazador sin escrúpulos había utilizado un conjuro antiguo para hacerse con el control del Kanima Negro, les costó mucho esfuerzo el poder dar con el homicida Gerard Argent, padre de Crhis y abuelo de Alison.

Detenerlo no había sido fácil, más aún sabiendo que tenía a un miembro de su manada bajo su control. Gracias a la eficiencia de los diferentes miembros de la manada y la ayuda de Crhis  y Allison pudieron no sólo rescatar a Jackson, sino también descubrir una red de tráfico y contrabando de criaturas mitológicas creado por cazadores corruptos con sed de venganza, poder y aires de grandeza.

La verdad, estába bastante preocupado. El tiempo se había acabado, no tenía más opciones, debia revelarles quién era realmente él, porque de su mentira, su misión, el peso que cargaban sus hombros. La vida y su madre le habían dejado una tarea demasiado grande e  iba a necesitar la ayuda de toda la manada.

El nemocon, está más activo que nunca... desde el principio de la historia los nemocones fueron símbolos de la naturaleza, el equilibrio, lo sobrenatural, la magia, el poder, el balance entre el bien y el mal. Con el tiempo los seres humanos olvidaron estos árboles, se centraron en las cosas banales y perdieron el contacto con la naturaleza, con la madre tierra... las criaturas mitológicas tuvieron que esconderse, disfrazarse de humanos, mezclarse buscar a sus parejas y tener descendencia. Mi madre Claudia era una silfo como yo, criaturas mitológicas criadas y destinadas a cuidar el bosque, a cuidar el equilibrio, a destruir lo que intente  corromper, su misión estaba llena de sangre, de dolor y de muerte. Como la criatura más inteligente cómo el ser más sabio sabía que no todos podían ser perdonados... le daba miedo la reacción de Scott su mejor amigo, su hermano, él no había querido mentirle, pero no tenía otra opción, no quería que se viera involucrado en una guerra sin cuartel.

Las cartas estaban sobre la mesa los bandos estaban hechos y la guerra se estaba formando.

Lo más paradójico del asunto es que la guerra era en contra de humanos, personas inescrupulosas qué buscaban el poder Stiles sabía que esto sólo era la primera prueba, de aquí en adelante su misión era resguardar el mundo mitológico, no podía permitir que acabaran con las criaturas que todavía existían,  sin la magia de ellas la tierra sucumbiría y la oscuridad reinaría destruyendo todo el reino vegetal, acabando con los animales, secando el agua y por último consumiendo la vida de todo ser viviente en la tierra.

Stiles decidió mañana mismo contarles todo a la manada, sabía que debía ser honesto no guardarse nada, le atormentaba decepcionarlos por haberles mentido, pero,  sabía que sus amigos no lo iban a abandonar, lo iban a ayudar, lo iban a proteger y sobre todo iban a pertenecer al reino de los silfos, era hora de crear el grupo que lo iba ayudar a proteger el mundo sobrenatural, no sólo de las amenazas hechas por el hombre, sino también por las que los mismos mitológicos provocan, era hora de poner orden y aceptar el destino que había sido marcado en su vida desde antes de nacer.