Corrían las primeras horas del nuevo año, gente de toda edad pululaba de aquí por allá festejando la llegada del mismo. Juegos artificiales en un intervalo de cada minutos iluminaban el cielo de la ciudad.

Pasar año nuevo sólo más solitario que una ostra, no le molestaba en absoluto.

La persona con la que debía celebrar ese nuevo año, se hallaba molesta, ofendida dado a su libertino comportamiento. Ángelo Casanova como se llamaba justificaba su actitud argumentando que su pareja llamado Afrodita últimamente pasaba con su familia y no le prestaba atención ni en la intimidad.

―espectacular, nuevo año, Afrodita me odia y yo.....―se recargó en un poste―ja, para qué chinches me amargo.

Caminó varias cuadras, su objetivo era llegar hasta la zona de bares, discotecas sitios donde la publicidad pautada en radios muy conocidas de la ciudad promocionaron desde antes de navidad las actividades que las mismas llevarían a cabo con motivo del año nuevo.

Grupos de rock, de salsa, Dj's de música electrónica internacionales y comidas al amanecer eran parte del variado repertorio, el cual Ángelo veía interesante.

Eligió una discoteca cuya fachada semejaba a una casa embrujada, su construcción databa de el siglo pasado, el dueño de la misma la había adquirido por una cantidad exorbitante y posteriormente readecuada para no sólo ofrecer presentaciones de música variada, sino hasta monólogos de reconocidos cómicos.

Un hombre que fungía como guardia de seguridad lo detuvo en la puerta aduciendo que ya el cupo de personas estaba excedido.

―lo siento hombre, pero la disco ya está al máximo de su capacidad.

―para mi diversión no existe límites―replicó sacando de su bolsillo dinero el que mostró con petulancia―apartate y déjame entrar.

―no entendiste, o te lo deletreo.

―no puedes prohibirme nada armatoste―se dispuso a armar una trifulca―o ¿ qué....?

Cinco minutos más tarde, caminaba maldiciendo la forma en que el guardia de la discoteca lo echó, ahora dónde celebraría el nuevo año.....

Sin darse cuenta, sus pies lo condujeron hacia una zona muy apartada del centro de la ciudad, ahí funcionaban varias cantinas donde los ebrios entraban a calmar sus penas y aunque su aspecto no era de lo mejor, Ángelo decidió entrar a la que le pegó su santa gana.

El olor a cerveza y cigarrillo predominaban en el sitio, hombres de miradas desorbitadas y fachas desordenadas que cantaban a todo pulmón canciones rockoleras. El cantinero con mala cara servía en vasos de mal aspecto el líquido dorado el cual los ebrios bebían como si agua se tratase.

Ángelo tomó asiento frente a la barra a lado de un tipo quién tenía un parche en su ojo derecho.

―¿ qué quieres servirte?―preguntó el cantinero.

―dame tres cervezas.

La orden fue despachada en un santiamén, tres botellas con una fina capa de hielo fueron puestas frente a su nariz.

" No sigas diciendo que un amigo tuyo y tu propia esposa....."

Esas líneas sonaban estruenosamente, un parlante viejo reproducía la canción que era tarareada a todo pulmòn por los ebrios.

Los borrachines se fueron marchando a eso de las una y treinta de la madrugada, sólo quedaron él y el tipo pirata que prorrumpió en una estridente carcajada, Ángelo quien se consideraba un hombre rudo que no le temía a nada le dio algo de recelo esa manifestación.

―huyen como ratas, saben que " ella los puede matar".

―vas a comenzar con eso Juanito―reprendió el cantinero secando unos vasos―eso es leyenda urbana.

―nada, Pepe, " ella es real"―enfocó la mirada de su ojo bueno sobre un poster de un cantante de rockola―desde hace siglos ella camina en las calles solitarias buscando tunantes.....

Luego se dirigió a Ángelo.

―yo de ti me fuera ahora mismo, después te tropiezas con " La Dama Tapada".

Chasqueó la lengua en señal de incredulidad, desde que se había mudado a vivir con Afrodita en aquella ciudad oían relatos de leyendas y mitos de la misma algunas databan de la Conquista española. Afrodita si creía en ellas y hasta las contaba a quienes iban de visita.

Prendió un cigarillo, el humo se lo echó en el rostro de Juanito quién no se apartó.

―te crees muy machito ¿eh?

―todo lo que dices son puras babosadas―dicho esto pidió cuatro botellas más de cerveza con las que perdió el juicio por completo.

La bronca que por poco se arma con Juanito fue reemplazada con una charla sobre parejas, infidelidades y chismes de barrio que en su estado sobrio Ángelo diría que eran especialidad de las " viejas chismosas". Reveló que no estaba de buenas con Afrodita, Juanito juzgó que hablaba de una bella mujer.

Por sobre las cuatro de la madrugada, Ángelo se despidió de su nuevo amigo y guardándose cuatro cigarillos en el bolsillo de su pantalón emprendió el camino a su casa.

No había nadie por las calles ya a esa hora, Ángelo completamente borracho tarareaba con énfasis las líneas de una canción de despecho, la distancia hasta su casa era lejana, por decir más concretamente era en los suburbios de la ciudad.

Media hora de camino, ya estaba cerca de esa zona.

Fue cuando frente a sus ojos sin saber còmo una figura femenina caminaba apresurada. Hasta Afrodita fue apartado de su pensamiento cautivado por esa desconocida mujer.

Hechizado, alelado, la figura delicada de aquella dama no hacía más que rondar en sus pensamientos como un bálsamo cálido que incitaba sus sentidos a seguirle el paso. No se dio cuenta, ella le estaba conduciendo a un lugar desprovisto de luces, desértico, las penumbras eran habitadas solamente por variadas sombras que se movían agitadamente al compás del viento que emitía un largo y lejano silbido.

―hey bonita―llamó Ángelo embobado―¿ qué haces a esta hora sola por aquí?

Se detuvo, estática, su figura delgada era mecida por Eolos, elevando su vestido y aquel velo transparente que le daba un toque misterioso. Ángelo, maravillado, contemplativo y ávido por la curiosidad ansiaba el momento preciso para apreciar la figura excelsa y cálida de aquella dama, la imaginaba de aspecto frágil, de ojos latos y brillantes como dos grandes luceros. El olor fragante que destilaba invadía sus fosas nasales de tal manera que vibraba de ansiedad. Dio un giro de manera lenta, hasta quedar de frente, Ángel observó con curioso gesto como el velo aquel que cubría su rostro se elevaba un poco como aleteo de mariposa en vuelo.

―Quiero ver tu rostro, linda― Manifestó altivo.

Ella, de manera suave quitó el velo que a tientas cubría sus cascadas de tono azabache, sus finos y prominentes pómulos fueron careciendo de vitalidad para desaparecer completamente, hasta quedar sin carne, dejando espacio al horrendo espectáculo en que veía su cabeza huesuda, en sus cuencas vacías, dos esferas casi circulares flameaban chispeantes, con inquietante ansiedad. El olor aromático y grácil desapareció, un tufo nauseabundo circundaban en el aire como vaho de tono verdusco. El ambiente místico pasó a ser un escenario grotesco sacado de una pesadilla, hasta el aire estaba cargado con una sensación que paralizaba su cuerpo y cedía al miedo creciente en su palpitar desenfrenado. El espectro aquel acercó su figura con laxitud, hasta quedar firmemente parada, rozando el rostro de Ángelo que creía estar viendo un espejismo o algo peor, la muerte se avecinaba con aire glacial, sus tupidos miembros no respondía por más que deseara escapar. Estaba sumido en aquellas flamas que designaban el momento adecuado para el hálito.

―Ahora, ¿te parezco tan hermosa como pensabas, honorable caballero?

―ta.....ta......mald.....

Huesudos labios se estamparon sobre los del hombre, le otorgó el beso de la muerte.

Ángelo no atinó a responder, ni gritar.

La dama desapareció al cobrar una nueva víctima.....

******************************

Al día siguiente por la mañana, una persona que pasaba por ahí apurada en dirección a su trabajo halló sobre la calzada polvosa un hombre boca abajo, al voltearlo para ver de quién se trataba pues probablemente estaba en estado etílico, comprobó con sorpresa que estaba muerto y con el rostro desencajado del terror.

Había muerto del susto, fue identificado como Ángelo Casanova una de las tantas víctimas de aquella mujer apodada como " La Dama Tapada".

************************

Aclaroque esta es una leyenda surgida en mi ciudad hacia los años 1700, adapté laleyenda en la época moderna para poder aplicar algo de yaoi que como seevidencia es ligero.

Agradezco a mi beta quièn me ayudo a que esta historia fuera posible.

Abrazos n.n