Los ojos de la de pelo trenzado comenzaron a abrirse con algo de dificultad, se incorporó y empezó a mirar a su alrededor mientras se rascaba la cabeza. Se quedó completamente helada al darse cuenta de que volvía a estar en el hospital de su mundo. Delante de ella había un hombre con una bata de ingresado, expresión enojada y posición hostil. Ella estaba tirada en el suelo y le dolía el cuerpo, lo más posible es que aquel hombre la hubiese empujado y se hubiera caído al suelo.

-¡Te he dicho que te apartes! - gritó la persona que había ante ella.

- P-Pero él no lo hizo aposta, por favor no le hagas daño - aquello salió inconscientemente de la boca de la pelirrosa de forma temblorosa. En ese momento empezó a recordar todo lo que pasó aquel día. Detrás de ella podía escuchar el llanto de alguien, bastante joven, y notaba como ese alguien se aferraba a su ropa denotando su miedo. También recordaba quién era él, su único amigo del hospital.

- ¡Apártarte ahora, monstruo! - ordenó el contrario a punto de golpearla.

- ¡No te acerques! - gritó la heterocromática cubriéndose la cara con sus manos y cerrando los ojos. Tras ese acto escuchó un grito desgarrador y un golpe seco.

Poco a poco fue bajando sus brazos y cuando pudo ver el pasillo se encontró con aquella persona que había intentado atacarla, tumbada en el suelo al otro lado del pasillo, completamente inerte. Tanto la pared como el suelo estaban manchados de tinta y algo de sangre.

Todo lo escuchaba amortiguado y su cabeza comenzaba a doler, su vista empezó a volverse borrosa y del techo caían gotas de tinta según su cordura iba desapareciendo, no tardó mucho en sentir que dos pares de manos se apoyaban sobre sus hombros tirando de ella de forma brusca hacia atrás.

Levantó la mirada encontrándose con dos de los enfermeros de allí empezando a llevársela. Todo pasó tan rápido que ni siquiera se dio cuenta del momento en el que se liberó del agarre de los dos funcionarios mientras salía corriendo por el pasillo para alejarse de ellos. Sabía lo que pasaría si la atrapaban pues ya había vivido aquella situación, así que lo más sensato era huir.

Pero no tardó mucho en volver a ser atrapada y arrastrada por los pasillos a un lugar que ella conocía a la perfección. El infierno. Daba igual cuanto gritase, daba igual cuanto se retorciera, suplicara o pidiera perdón; era muy tarde, ya no podía hacer nada...

Cuando se dio cuenta la habían encerrado en una "habitación" que era más bien una celda oscura en una de las plantas bajas de la estructura. No importaba cuanto gritase o golpease la puerta para que la liberaran, ellos no le harían caso. Podía sentir que había más personas allí con ella, más personas atrapadas que eran como ella. Al final el agotamiento pudo con ella y se sentó en el frío y duro suelo mientras abrazaba con fuerza al señor abrazos contra su cuerpo. Lo último que quería era quedarse dormida pues cuando vivió aquello no acabó precisamente bien. Pero acabó por ceder ante el cansancio.

El sonido de la puerta blindada que impedía su libertad abriéndose logró despertar a la pequeña, quién no tuvo el suficiente tiempo como para reaccionar al sentir que algo la sujetaba boca abajo contra el suelo y la impedía moverse. Ella comenzó a retorcerse y a gritar intentando que alguien la ayudase, el pánico la impedía pensar con claridad y ni siquiera sabía que estaba pasando. Bueno, realmente sí, pero no acababa de recordarlo por el miedo que sentía.

En ese momento sintió algo aprisionando su cuello y escuchó un click metálico en esa zona. La presión que había sobre ella desapareció haciendo que ella retrocediese hasta una esquina de la celda mientras abrazaba con terror a su compañero y observaba con estupefacción a dos sombras de ojos brillantes que había delante de ella, ellas eran las que habían impedido que pudiera moverse.

- Por fin ha despertado, me alegro - habló una de las sombras, que realmente era una enfermera del lugar, con una sonrisa de oreja a oreja.

- ¿Q-Quieneis sois? ¿P-Por qué estoy aquí? - preguntó la pequeña intentando disimular sus nervios y su miedo. En ese momento, su mano fue a su cuello dándose cuenta de que tenía un gran collar metálico alrededor de este.

- Verás querida, al parecer ayer tuviste un pequeño, eh... incidente con otro ingresado y como resultado acabaste descontrolándote - explicó la anterior enfermera sin dejar de sonreír, pero su tono no sonaba nada alegre, lo cuál ponía más nerviosa a la pequeña haciendo que comenzase a rascarse los brazos frenéticamente - como ya sabrás, las personas como tú tienen una condición... especial, por lo que deben de ser controladas para que no se hagan daño ¿entiendes? - cuestionó sin dejar de sonreír y recibiendo una respuesta afirmativa de la pequeña, que aún no se fiaba de ella - Entonces, hemos tenido que tomar medidas para que el incidente de ayer no vuelva a pasar - y tras decir aquello, sin borrar la sonrisa de su rostro, tomó un pequeño mando que traía su compañera y con algo de fuerza apretó el botón de este mientras su sonrisa se ensanchaba y su expresión se volvía bastante cínica.

En aquel instante la pelirrosa sintió una dolorosa descarga en su cuello que hizo que se tirase al suelo y comenzase a retorcerse mientras gritaba. La sensación no duró mucho, pero para ella fue como una eternidad. Cuando todo pasó se quedó mirando a las dos sombras con ojos llorosos mientras sus manos descansaban en su cuello para intentar aliviar el dolor, su respiración estaba revolucionada y su pecho comenzaban a doler por esta razón.

- Esperemos que lo de ayer no se repita, tenga un buen día - y tras decir aquello, la maldita sombra se marchó mientras la otra se acercaba para devolver a Inku a su habitación.

...

- ¿Cuánto tiempo vais a seguir durmiendo? ¡Despertad! - aquella voz, junto a un portazo bastante agresivo, ayudó a la pequeña a despertar de aquella pesadilla, se dio cuenta de que aún seguía en Scarabia, pero aún así estaba bastante alterada y no se encontraba del todo bien - ¡Marcharemos 10 kilómetros hacia el Oasis del Este!

- ¿Diez kilómetros andando por el desierto? ¿Por qué tenemos que hacer algo así? - cuestionó el animalito metiéndose entre las sábanas para escapar de la situación, aún era muy pronto.

- ¡Deja de quejarte! ¡El prefecto ordenó que os unierais! ¡Daros prisa! - ordenó el alumno del dormitorio

- ¡¡GYAHH~~!! ¡¡NO QUIERO!! - empezó a gritar el animalito mientras era arrastrado junto a su compañera fuera de su refugio. A ambos se les dio algo de tiempo para que se pudiesen cambiar al igual de algo de ropa de un tamaño parecido al de la pelirrosa.

Al acabar de prepararse, salieron de la habitación para ser llevados junto a los demás para el inicio de la caminata.

____________

- ¡Todos ustedes paren! - ordenó Kalim bajándose del elefante cuando llegaron a su destino.

- ¿Ah? ¿Por fin llegamos al oasis? - preguntó el animalito acercándose al lugar donde, en teoría, debía estar el oasis.

- Descansaremos durante 15 minutos y luego marcharemos de vuelta al dormitorio - habló el de ojos chocolate dejando a la heterocromática en el suelo. Una cosa eran los extremos entrenamientos de tu malvado plan, y otra muy distinta, era obligar a una niña de 11 años que no te ha hecho nada a hacer esos entrenamientos, así que sí, Jamil había llevado a Inku en su espalda durante toda la caminata.

- Agua, agua... ¿Qué? ¡Este oasis no tiene agua! - exclamó el animalito entre enojado y triste.

- ¿A... gua...? Agua... ¿Quieres un poco de agua? - preguntó amablemente el líder de Scarabia mientras la sombra de ojos brillantes que la de pelo trenzado veía se desvanecía.

- ¡Por supuesto...! ¡Mi garganta está seca...! - gritó el de orbes azules bastante enojado.

- ¡Si quieres puedo dejarte probar un poco de mi agua fría especial! - contestó el de tez morena con una sonrisa - "Descansa en las arenas calientes para un banquete sin fin. ¡Ahora canta! ¡Baila!"
Oasis maker! - exclamó haciendo que comenzase a llover.

- ¡¡Whoa~~!! ¡¡Bendita lluvia!! - el de orejas flameantes miró hacia arriba alegremente mientras disfrutaba de la frescura de la lluvia junto a los demás alumnos del dormitorio.

- Delicioso ¿no es así? - cuestionó el de ojos rojizos sin dejar su característica sonrisa de lado - ¡puedo hacer que llueva tanto como quieras! Mi magia única, Oasis Maker, me permite crear cualquier cantidad de agua usando poca magia - explicó orgulloso.

- Yanno... "Crear agua" suena bastante corriente para una magia única - comentó el contrario algo decepcionado y recibiendo una mala mirada de su compañera. A ella le parecía bastante útil, de alguna manera.

- Aw, no seas así - se quejó el peliblanco algo deprimido por el comentario del felino - hacer mucho con poco esfuerzo es la ventaja de mi magia única. Aunque es bastante mediocre en una época en la que el agua está disponible para todo el mundo ¡Aún así! ¡Estoy seguro de que el agua que produzco es la mejor que existe! - finalizó soltando una alegre carcajada al final.

- Ahora que lo mencionas... Tienes razón - comentó el de cola de tridente pensativo - tiene un frescor suave y la temperatura correcta. Es el tipo de agua que realmente refresca y me hace querer beberla sin parar, yanno.

- Guau, ¿puedes notar la diferencia entre esta y otra agua? - preguntó la pequeña mientras sus ojos adquirían un brillo inocente.

- ¡Por supuesto! - contestó Grim orgulloso mientras ponía sus patitas en sus caderas - ¡mi sentido del gusto no tiene paralelo, yanno! - exclamó con una gran sonrisa dentada en su rostro.

- ¡Sabía que Grim sabría la diferencia! Muy bien, te daré otra galleta como regalo~ - dijo el de tez morena con una sonrisa dispuesto a darle "su premio" al animalito.

- Ugh... tengo hambre, pero no quiero comer algo tan seco... - murmuró el de pelaje grisáceo retrocediendo un poco.

- Es como si fuera una persona diferente ahora... - comentó la de ojos bicolor en un tono muy bajo para que el albino no la escuchase.

- Tienes razón... era totalmente diferente cuando dejamos el dormitorio - añadió su compañero en voz baja.

- ¿Hm? ¿Dijisteis algo? - preguntó el líder del dormitorio sin borrar la sonrisa de su expresión.

- Kalim, el descanso ya casi ha terminado. Reunamos a todos y volvamos - dijo el de pelo largo acercándose al grupo.

- ¿Ya? ¿No podríamos dejarles descansar un poco más? - pidió amablemente el de ojos rojizos.

- Dentro de poco el sol estará en lo más alto y la temperatura aumentará con ello. Entonces será más difícil regresar - explicó el de ojos chocolate intentando convencer al contrario.

- Entiendo, entonces regresemos - ordenó el peliblanco haciendo que todos comenzasen a caminar de vuelta al dormitorio.

____________

- Caray... Quiero irme de aquí, pero... ¡La comida aquí es tan buena! - murmuró el de orbes azules mientras devoraba la comida. La pelirrosa disfrutaba de unos bollos de carne y verduras al vapor, casi sin especias hechos por Jamil especialmente para ella.

- ¡Comed cuánto queráis! ¡Esta vez tenemos queso azul hecho con leche de vaca! ¡Pruébalos con unos crackers! - exclamó el líder de Scarabia obligando al felino a comer un cracker con queso y haciendo que la de pelo trenzado entrase en pánico, no quería que que el de ojos rojos obligara a su amigo a comer algo que no quería, otra vez.

- No lo obligues a comer algo de repente - le reprendió su compañero serio - Grim podría ahogarse.

- Whoa, tómate tu tiempo, ¿vale? ¡Tenemos mucho tiempo! - exclamó el albino con una sonrisa.

- Ese no es el problema... - murmuró el de orejas flameantes sin dejar de comer.

- ¡Hoy también tenemos helado para el postre! ¡Mezclamos los sabores que tenemos y luego tomamos toda la cantidad que ponemos con una gran cuchara! ¡Yo lo llamo "La forma Kalim"! - explicó el albino sin dejar de sonreír - traeré un poco, así que espera aquí - habló a punto de levantarse para ir a por el postre.

- Espera Kalim. Voy a prepararlo, así que siéntate - dijo el de tez morena parando a su compañero.

-No te preocupes, solo tengo que sacarlo de la nevera ¿no? - preguntó Kalim sin dejar de sonreír.

- Idiota, ¿qué tipo de sirviente hace que su amo trabaje por él? Deberías ser más consciente de tu posición social. Si descubren que te hice trabajar tus padres me regañarán - habló el de ojos chocolate con los brazos cruzados y una expresión seria.

- No te preocupes Jamil, somos compañeros de clase ahora, así que debería estar bien - contestó el albino sin dejar de lado su característica sonrisa.

- Lleguemos a un acuerdo. ¿Por qué no me ayudas a traerlo y yo lo preparo? - propuso el moreno recibiendo una respuesta afirmativa de su compañero.

- Estoy empezando a confundirme - comentó el animalito cuando los dos jóvenes se habían ido - quiero decir, volvió a ser amable.

- Todos ustedes... - los presentes se dieron la vuelta al escuchar esa voz encontrándose con el líder del dormitorio, pero en el caso de la pequeña era esa maldita sombra que llevaba viendo casi todo el rato durante su estancia allí, un escalofrío recorrió su espalda pues sabía que algo malo iba a suceder - ¿cuánto tiempo planean hacer el vago? ¿Quién os creéis que sois? - cuestionó de brazos cruzados mientras fulminaba a todos con la mirada, dejándoles en shock - ¡Limpiad esto de inmediato! ¡Comenzaremos a entrenar justo después! - ordenó completamente enojado.

- ¡Kalim ha vuelto a dar miedo...! - exclamó el animalito aterrorizado mientras se ocultaba un poco tras la fémina.

- Vosotros dos no os librareis de esto - les habló a los del dormitorio abandonado en un tono algo hostil - ¡Haré que ambos entrenen hasta altas horas de la noche! ¡Al jardín! ¡Ahora! - les gritó haciendo que la heterocromática se levantase de golpe y saliese corriendo al patio junto al animalito.

- (N-No creo que esto sea simplemente inestabilidad) - pensó la pequeña bastante asustada.

____________________________________

Jamil es una mamá luchona, change my mind :v, no en serio, me dio bastante ternura escribir los momentos donde Jamil trata bien a nuestro pequeño rollito de canela uwu.

Aunque el principio estuvo bien triste, mi pobre niña 😢😢😢 😢si tenéis alguna duda sobre su pasado podéis preguntarme. Quería explicar los orígenes de algunos traumas que tiene Inku.

¿Qué les ha parecido? ¿Tienen alguna teoría?

Tengan un buen día/tarde/noche y nos vemos en el próximo capítulo.

Continuará ❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️