Capítulo 32

Parpadeó un par de veces intentando acostumbrarse a la luz del lugar.

- ¡S-Se están despertando! - escuchó hablar a Grim. Cuando acabó de despertarse se dio cuenta de que seguía en Octavinelle.

- ¿Cuántos dedos estoy levantando? - preguntó el gemelo mayor levantando sus manos delante de Azul e Inku.

- ¿8... dedos...? - dijeron los dos a la vez, la pelirrosa apoyó su cabeza sobre su mano, le dolía bastante.

- Parece que seguís algo mareados, pero... estoy aliviado. La condición de ambos ha mejorado un poco - comentó Jade en un tono de voz tranquilo y con una sonrisa amable.

- ¿Qué demonios... hice...? - murmuró el de lentes confuso.

- Usaste demasiado tu magia y entraste en overblot ¿no te acuerdas? - cuestionó el gemelo mayor acariciando la cabeza de la de pelo trenzado, quién se estaba empezando a quedar dormida sobre sus piernas.

- ¡Estabas quitándole la magia a todos mientras lloriqueabas! - explicó el gemelo menor, fastidiado al recordar lo que había pasado - te veías tan ridículo. Me has decepcionado - finalizó en un tono serio.

- ¿E-no hay forma... de que me volviera loco...? - murmuró el de pelo plata intentando esconder su miedo.

- Ah, bueno, supongo que es normal descontrolarse después de perder todo lo que tenías - habló Ruggie poniéndose en su lugar.

- Pero usar esos métodos es demasiado, ¡deberías reflexionar sobre esto! - le regañó el animalito enojado mientras se sentaba en las piernas de la de ojos bicolor.

- ¡Deberíais ser vosotros quién reflexionasen sobre el uso de notas de otras personas para tomar el camino fácil! - exclamó el de ojos ámbar enojado.

- Por lo que escuché tus notas eran realmente buenas - comentó la de pelo trenzado con una pequeña sonrisa haciendo que el contrario se extrañase.

- Es verdad. Conseguí 90 puntos solo leyendo las notas la noche anterior - comentó el de dibujo de corazón, intentando animar al de ojos azules.

- Sí, realmente fueron de mucha ayuda - añadió el de dibujo de pica.

- Escuché del director que hiciste esas notas al investigar exhaustivamente los exámenes de los últimos 100 años. No puedo dejar pasar las trampas, pero admiro tu esfuerzo - habló el de orejas de lobo finalizando con una sonrisa.

- Hmph... No creáis que me consolareis con unas cuantas palabras bonitas - contestó el de lentes de forma dramática.

- ¿Oh? Parece que Azul va a llorar - comentó el menor de los gemelos divertido.

- Me pregunto si habrá vuelto a su antiguo yo - añadió su compañero con una sonrisa burlesca.

- ¡Vosotros dos! - les llamó enojado - ¡Creo que quedamos en no volver a hablar de eso! - al acabar de hablar, Jade se disculpó pero sin borrar la sonrisa de su rostro.

- Cierto. Aquí está la foto del príncipe Rielle que pediste. El sol aún no se ha puesto así que ¡Hemos ganado! - exclamó Jack mostrando el objeto y haciendo que el contrario frunciera el ceño, su plan se había ido al traste.

- Hay un montón de sirenas en esa foto - murmuró el de orejas de león pensativo mientras observaba la imagen.

- Supongo que es una foto de una clase de primaria - comentó el de pelo cenizo analizando el objeto - ¿para qué querías la foto? - preguntó mirando al líder de dormitorio, pero fue Floyd quién contestó mientras tomaba la imagen.

- Ah, qué nostalgia~ - comentó el heterocromático felizmente mientras miraba la foto - esta fue la foto que nos tomaron cuando fuimos de excursión ¿verdad~? Jade y yo estamos aquí - empezó a explicar señalando a dos pequeña anguilas, todos hicieron un corrillo para ver mejor - Y luego~~~El que está escondido en aquella esquina no es ni más ni menos... - se quedó unos segundos en silencio para aumentar el suspense para después señalar un borde del objeto y con fuerza exclamar - ¡¡Baby Azul!!

- ¡¡Ahhhhh!! ¡¡PARA!! ¡No lo miréis! ¡Por favor no miréis! - exclamó el peliplata completamente avergonzado intentando que dejasen de mirar la imagen.

- Oh, Azul. Parece que ya estás mejor - comentó el gemelo mayor con una sonrisa divertida - ¿qué te parece si vuelves a descansar? De todas formas todos lo hemos visto - y era cierto, todos estaban observando la imagen interesados mientras la comentaban.

- Se ve tan suave y redondito... - susurró la heterocromática con brillitos en sus ojos, Jade no pudo evitar acariciar su cabecita al ver la ilusión de la contraria.

- ¡AAAAAaaaaaHhhh! - gritó el de lentes desesperado y avergonzado.

- Entiendo completamente como te sientes... - murmuró el de dibujo de pica conmovido - ¡Todos tenemos algo en nuestro pasado que no queremos que se sepa! - exclamó con su mano en su pecho - ¡No vi nada! ¡Todos, olvidad lo que visitéis! - ordenó intentando que dejaran de ver la foto.

- Eres... Eres muy impulsivo a veces, eh... - comentó Jack con una gota de sudor escurriendo por su mejilla, la pelirrosa ocultó una sonrisa tras su mano. La situación era bastante cómica.

- ¡Maldita sea! ¡Definitivamente pensé que podría conseguir más personal para el Mostro Lounge y deshacerme de esta foto! ¡Pensé que era un plan perfecto y aún así...! - se lamentó el de ojos azules, lloriqueando - incluso destruí la imagen del anuario y el carrete del fotógrafo... Pensé que me había librado de todas las fotos existentes de mi antiguo yo, pero... Esta era la única que me faltaba.

- ¡Eso no te da derecho a obligar que otros hagan tu trabajo, yanno! - se quejó el animalito indignado.

- Eso no importa - habló Floyd - realmente me gusta este nuevo Azul, se ve más delicioso - añadió sacando la lengua burlándose del contrario.

- ¡Ese no es el problema! - exclamó el peliplata algo enojado - Ya no quiero esto... Quiero volver a mi maceta de pulpo... - murmuró bajando la cabeza deprimido.

La de pelo trenzado se levantó de las piernas de su amigo y cuando estuvo lo suficientemente cerca abrazó al líder de Octavinelle haciendo que el contrario levantase la cabeza extrañado.

- ¿Q-Qué estás haciendo? - murmuró el de lentes sin entender la acción de la contraria.

- Estabas triste y ahora mismo no  puedo prestarte al señor abrazos, así que te estoy abrazando para que te animes ¿Está funcionando? - preguntó inocentemente mientras su mirada bicolor conectaba con la azulada de Azul.

Las mejillas del líder de Octavinelle se tornaron de un color carmesí mientras desviaba la mirada para evitar que la pequeña descubriese su vergüenza. Los demás soltaron una risita al ver la divertida reacción del peliplata, Inku ladeó la cabeza ligeramente mostrando confusión, no acababa de entender porqué todo el mundo se estaba riendo.

- En cualquier caso, cumplimos nuestra parte del trato - habló Jack interrumpiendo el momento y haciendo que la fémina dejase de abrazar al de lentes - asume tu responsabilidad y vuelve a poner todo en su lugar.

- ¡Trabajemos todos juntos! - exclamó la pelirrosa emocionada mientras Jade acariciaba cariñosamente su cabeza.

- Está bien, está bien - contestó el de orbes azulados - pero por favor, dame la foto para que me deshaga de ella - suplicó extendiendo la mano para que le diesen el objeto nombrado.

- Oye, oye, deberíamos volver a ir al museo - comentó el menor de los gemelos tomando la imagen para que su amigo no la destruyese - tengo muchas ganas de ir, así que ¿qué os parece si hacemos una excursión mañana? - propuso sin dejar de sonreír recibiendo respuestas afirmativas de los presentes (excepto por los de Savanaclaw).

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- Por fin en casita... - murmuró la heterocromática aliviada. Después de aquella charla con los de Octavinelle le devolvieron al señor abrazos y la acompañaron un rato antes de dejarla delante del lo que era ahora era su hogar, si solo estuviese su hermano, sería perfecto.

- Oh, veo que has vuelto - habló Malleus apareciendo de repente delante de ella asustándola un poco, Grim estaba tan cansado que se había quedado dormido sobre la cabeza de su compañera - me alegra que hayas derrotado a Ashengrotto.

- Fue gracias a tu consejo, Tsunotaro - contestó la pequeña con una alegre sonrisa.

- ¿Yo? - cuestionó el contrario sorprendido - sin embargo no era mi intención darte una solución, fufu - sonrió dejando a la de pelo trenzado algo confundida - en cualquier caso, supongo que todo salió bien ya que el jardín está más tranquilo que antes. Ver al siempre tranquilo Ashengrotto hacer una cara de horror debe haber sido todo un espectáculo, me hubiera gustado verlo también - comentó sin dejar de sonreír, la fémina iba a negar aquello, pues no le había parecido gracioso ver en primera persona el sufrimiento del contrario, pero ni siquiera pudo decir nada - Hm, quizás debería volver a mi dormitorio. Ahora, buenas noches para ti - se despidió con una sonrisa enternecida mientras acariciaba su cabecita despeinándola, para finamente desaparecer.

- ¿Lo viste? - se giró al escuchar una voz encontrándose con dos jóvenes, uno de pelo verde y el otro de pelo plateado, al parecer no la habían visto.

- No, parece que no está aquí - contestó el de cabello verde algo enojado.

- Podría haberse dirigido al edificio principal - propuso el de ojos violeta pensativo, Inku juraría que les había visto anteriormente, pero no los recordaba demasiado bien, le dolía bastante la cabeza.

- Ah, joven maestro... ¿Por qué se mueve sin sus guardias? - se lamentó el de pelo de forma extraña de forma dramática - ¡Es porque le quitaste los ojos de encima, Silver! - le echó la culpa con un grito que estuvo a punto de despertar a Grim y sobresaltó a la pequeña.

- No es un bebé, así que no hay necesidad de preocuparse tanto - se justificó el contrario mientras bostezaba.

- ¡Será demasiado tarde si sucede algo! ¡No bajes la guardia ni un segundo! - gritó su compañero asustando cada vez más a la pelirrosa, tenía bastante potencia en su voz - ¿Eres consciente de lo importante que es ser guardia del joven maestro? ¡No me digas que has olvidado lo benévolos que han sido para nosotros el joven maestro y Lord Lilia a pesar de que somos humanos! - al escuchar aquello la heterocromática recordó a alguien que se llamaba Lilia, juraría que era la persona que la ayudó en el torneo de Magift, pero no estaba segura.

- ¿Se habrá perdido alguien? - se cuestionó a sí misma la de pelo trenzado algo preocupada, esperaba que no fuese nada grave y que todo acabase bien.

Después de escuchar aquella conversación entró en su dormitorio y subió a su cuarto para echarse a mimir, las últimas noches habían sido bastante duras, debido al estrés de la situación y la falta de su compañero "el señor abrazos", pero por fin, todo aquello se había acabado y podría volver a descansar en su cómoda cama. Estaba tan cansada que ni siquiera se había dado cuenta de que todo el dormitorio había sido remodelado y ahora estaba mucho más limpio.

- Oye... no puedo comer tanto... pez gordo, yanno - murmuró el animalito medio dormido mientras extendía sus patitas al cielo para alcanzar un gran pez que solo existía en sus sueños, una sonrisa se extendía por su rostro.

Inku soltó una pequeña risita al ver a su compañero y después se fue al baño para cambiarse. Al arremangarse se dio cuenta de que las manchas de tinta todavía seguían de un tamaño bastante importante, además de que le dolía bastante la cabeza. Al apoyar su mano sobre su frente se dio cuenta de que estaba bastante caliente, quizás tenía algo de fiebre, pero no sería nada importante.

Cuando acabó de ponerse su pijama volvió a la habitación y miró con ganas su cama.

- Estoy tan cansada... - murmuró sin energía y se dejó caer sobre el mueble tapándose inmediatamente y abrazando con fuerza a su amigo, sus ojos se cerraron según tocó la cama cayendo en los brazos de Morfeo, estaba tan cansada...

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Señores, ha llegado el fin del tercer arco "F en el chat por esto" okno. De todas formas el siguiente capítulo será la visita de los pendejuelos al museo, no sé si habrá algo del siguiente arco, tengo que cuadrarlo bien.

Pero bueno, ¿qué os ha parecido? Yo solo quiero decir que cada vez que se derrota a un overblot la temperatura corporal de Inku aumenta ligeramente y la tinta va disminuyendo con más dificultad ¿esto tiene que ver con algo? Puede que sí o puede que no, no puedo decir nada 😈😈😈😈😈

Tengan un buen día/tarde/noche y nos vemos en el próximo capítulo.

Continuará ❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️

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