Capítulo 12
-¡CÁLLATE! ¡CÁLLATE! ¡CÁLLATE! ¡Mi madre siempre tenía la razón! ¡Así que yo también tengo la razón! - su cara comenzó a ponerse roja mientras no paraba de gritar como un niño haciendo pataleta.
Trey y Crowley se acercaron a Riddle para hablar con él e intentar calmarlo, en ese momento en la mente de la más joven se formó un antiguo recuerdo; la primera vez que vio un "overblot" o como los llamaban en su mundo "entintados".
Fue por la noche, empezó a escuchar mucho ruido y decidió salir de su habitación para investigar, caminó por unos minutos evitando cámaras de seguridad y trabajadores del lugar. Llegó a la planta de abajo y encontró una gran mole de tinta destruyendo todo a su paso, muchos enfermeros intentaban detenerlo pero no lo lograban, no recordaba muy bien quién o cómo fue derrotada la criatura. Lo que la preocupaba era la sensación de que algo parecido pasaría ese mismo día y eso solo la estresaba más.
Algo la sacó de sus pensamientos, el sonido de un huevo rompiéndose, prestó algo de atención a su alrededor y se horrorizó al ver cómo alguien le había tirado un huevo a Riddle. Todo se quedó en silencio hasta que Riddle empezó a gritar completamente fuera de sí.
- ¿¡Quién lo hizo?! ¿¡Quién me arrojó ese huevo?! - pero nadie contestó enfadando cada vez más al líder - ¡no importa cuántas veces les arranque la cabeza, no importa cuán estricto sea, seguiréis rompiendo las reglas! - su expresión era una mezcla de desesperación y locura - ¡Sois solo un montón de idiotas egoístas! Si nadie lo va a admitir ¡Entonces os castigaré a todos! Off with your head!! - en ese momento un montón de collares comenzaron a aprisionar los cuellos de los residentes del dormitorio haciendo que el pánico cundiese con rapidez, los únicos que se salvaron fueron Cater, Trey y Dire - ¿¡Qué tal?! ¡Ahora nadie volverá a levantar una mano en mi contra! - gritó con una mirada de superioridad - Lo sabía ¡el cumplir las reglas me hace alguien mucho más correcto!
Dire y Trey volvieron a intentar hablar con Riddle para calmarlo, pero en ese momento entró Ace para cagarla aún más.
- ¡Oye tú! No todo siempre saldrá como quieres y ¡hacer un berrinche es exactamente la razón por la que solo sigues siendo un bebé! - todos se giraron hacia el de dibujo de corazón con caras hostiles.
- ¡Retira eso en este instante! A menos que quieras morir atravesado - tras decir estas palabras Inku se puso delante de Ace de forma protectora apuntando a Riddle con su pluma - ¿Oh? ¿Te crees que puedes acobardarme haciendo eso? Ni siquiera puedes usar tu magia - se rió de la pequeña, pero ella no se movió enojando cada vez más al pelirrojo - ¡si no te mueves os mataré a los dos! - en ese momento los rosales comenzaron a flotar asustando cada vez más a todos, la más joven estaba paralizada por el miedo, se había puesto instintivamente delante de Ace pero después no se podía mover. Tanto sus brazos como piernas no paraban de temblar, pero no bajó la pluma en ningún momento o se apartó de delante de Ace, aunque él intentó alejarla.
-Rosales carmesís
¡Prestad atención a mi llamado!
¡Y hagan pedazos al enemigo!
En ese momento los rosales se lanzaron contra Ace e Inku, pero antes de que pudiesen impactar Ace lanzó a la heterocromática lo más lejos que pudo y se cubrió con los brazos esperando el ataque. La fémina observó con horror como los pétalos se cernían peligrosamente hacia su amigo.
- ¡Ace! - gritó extendiendo su brazo hacia él e intentó acercarse, pero era demasiado tarde. Un resplandor cegó a los presentes y al abrir los ojos pudieron ver como los rosales se habían transformado en unas barajas de cartas.
Al ver esto la pelirrosa se alivió un poco, una sonrisa nerviosa apareció en su rostro, Trey había usado el Doodle Suit y había salvado a Ace, también había hecho desaparecer los collares así que todo iba a estar bien o eso era lo que pensaba la de pelo trenzado hasta que vio como Riddle empezaba a susurrar cosas para sí mismo enfadado.
Tras unos segundos los ojos de la menor se encogieron con temor al ver cómo poco a poco la sombra de Riddle lo consumía por completo, el sonido del goteo empezó a resonar en su cabeza taladrándola, el cuerpo le ardía haciendo que el dolor fuese más insufrible, lo único que pudo hacer fue tumbarse en el suelo hecha una bolita con las manos en la cabeza esperando que así el dolor cesase.
- ¿Inku? ¿Estás bien? - preguntó Grim preocupado por su compañera poniendo sus patita sobre su hombro.
Ella no respondió, el calor que sentía era comparable a la sensación de estar quemándose vivo, es más, si prendieran ahora mismo su cuerpo en llamas sería menos doloroso que lo que estaba sintiendo en ese momento. Tras unos segundos notó algo líquido y pegajoso en los brazos, se arremangó y ahogó un grito de terror. Las manchas de tinta se estaban expandiendo con rapidez pos su cuerpo, consumiéndola lentamente. Desesperada empezó a rascarse intentado deshacerse de estas, pero lo único que lograba era hacerse más daño, empezó a sentir que se ahogaba aumentando más la angustia que estaba sintiendo, Grim iba a buscar ayuda pero Inku agarró con fuerza su patita y le miró a los ojos aterrada.
- N-no m-me abandones, p-por favor - le suplicó mientras lágrimas de miedo empezaban a salir de sus heterocromáticos ojos y aunque Grim quería ir por ayuda decidió quedarse al lado de la pequeña.
- Inku - la llamó una voz masculina que conocía a la perfección.
- ¿D-Damián? - susurró sin levantar la cabeza del suelo.
- Sí querida, escúchame ¿vale? Tienes que tranquilizarte, respira conmigo - ella no le podía ver, suponía que estaba tras ella pero aún así hizo caso a lo que le decía y comenzó a respirar con algo más de tranquilidad - vale, ahora que estás más tranquila piensa en una solución ¿sí? Sé que puedes hacer esto y mucho más, estoy orgulloso de ti - en ese momento sintió como si su hermano acariciase su cabeza con suavidad, esa sensación desapareció tras unos segundos sobresaltando a la más joven.
- ¡Damián! - gritó saliendo de su trance y buscando a su hermano con la mirada.
- ¿Quién es Damián? - preguntó Grim ladeando la cabeza confundido.
En ese momento Inku se dio cuenta de que su hermano no estaba en ese mundo, si no en el suyo, estaría en el hospital recuperándose del accidente que habían tenido, eso quería pensar ella.
- No es nadie, Grim, no te preocupes - le dijo con una sonrisa, después se incorporó un poco y se quedó mirando a Riddle el cuál había entrado en overblot.
Se quedó pensando unos segundos y en ese momento recordó lo que había pasado la primera vez que vio un "overblot". La criatura se había girado hacia ella y justo cuando iba a atacarla ella gritó con todas sus fuerzas "Kyushu" y el sujeto en cuestión se desplomó dejando ver a uno de los hospitalizados.
Sacó su pluma y se levantó con algo de dificultad del suelo apuntando con su pluma a Riddle, su cuerpo temblaba demasiado, tenía bastante miedo de Riddle y de lo que podía llegar a pasar si no hacía algo, además, de sus extremidades goteaba ese líquido negro que tanto aborrecía la más joven, las lágrimas se convirtieron en tinta, su ojo derecho se había cubierto completamente de la sustancia en cuestión, pero no le importaba, había dejado de sentir su cuerpo hacia un par de segundos.
En ese instante Riddle se giró hacia la pequeña con una sonrisa burlona, haciendo que su cuerpecito se tensase.
- ¿Y qué tenemos aquí? ¿Acaso quieres hacerte la heroína? Qué patético, pero si tantas ganas tienes de ser aplastada, con gusto cumpliré tu deseo - dijo con una sonrisa cínica y lanzó un ataque hacia ella.
- ¡Inku aléjate de ahí! - gritaron Ace y Deuce.
Trey y Cater no pudieron exclamar nada, estaban en completo shock y esto estaba pasando demasiado rápido.
- ¡Inku! ¡¿Qué haces?! ¿¡Tenemos que salir de aquí?! - exclamó Grim tomando la manga de la más joven e intentando sacarla de ahí, pero ella no se movió ni un centímetro. Ninguno de los presentes pudo ayudar a su amiga ya que estaban demasiado lejos de ella, pero tenía la situación bajo control o eso esperaba. Agarró con fuerza su pluma y apuntó al líder de Heartslabyul sin vacilar y con una expresión impasible.
- ¡KYUSHU! - gritó la pelirrosa con todas su fuerzas haciendo que un gran resplandor cegase a los presentes, por instinto la fémina cerró los ojos para que la luz no los dañase y se cubrió el rostro con los brazos.
Parpadeó un par de veces para poder acostumbrarse a la luz del lugar, bajó los brazos y miró el cuerpo de Riddle tirado en el suelo inconsciente. Los pocos que quedaban allí miraron la silueta del pelirrojo y después a la de pelo trenzado con una expresión de asombro. En la cara de Inku apareció un pequeña sonrisa.
- L-lo hice, ¡Sí, lo hice! ¡lo hic-! - pero no pudo acabar la frase, sintió como si todo a su alrededor se hubiese detenido y unas ganas de vomitar la asaltaron con fuerza y en ese momento una gran cantidad de tinta salió de su boca formando un charco a sus pies, después su mirada se oscureció y se desplomó como si se tratase de un cadáver. Lo último que escuchó fue una voz llamándola ¿era su hermano? Realmente no lo sabía y en ese momento no le importaba demasiado, estaba muy cansada y solo quería descansar.
____________________________________
Dios mío esto ha estado intenso ¿no creéis? Y creo que por fin voy a acabar el arco de Heartslabyul \(:D)/ si no es en el siguiente es en el siguiente a ese, pero bueno, siento que este capítulo haya estado corto, pero quería dejarlo por aquí, dentro de poco actualizaré, creo.
En fin tengan un buen
día/tarde/noche y nos vemos en el próximo capítulo.
Continuará ❤️❤️❤️❤️❤️❤️
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top