Capítulo 5: Intriga
Narrador: (Después de varios minutos de silencio incómodo, José vuelve a hablar...)
José: Realmente soy... adoptado... y no solo eso...
(Deja caer la carpeta y los papeles se esparcen.)
Laverne: (Necesito ver esa carpeta, pero los papeles se esparcieron.)
(Laverne empieza a juntar los papeles y los revisa.)
Laverne: (Bien, este dice... no, este no es, a ver los otros...)
(Después de varios minutos de revisar los papeles encuentra el de José.)
Laverne: (¡Lo tengo!, Ahora a ver qué dice...)
(Laverne comienza a leer, y lo que encuentra, la deja boquiabierta...)
Laverne: José, tú...
José: Lo sé, soy adoptado... y no solo eso...
(Laverne empieza a leer más y encuentra una nota.)
Laverne: (Hmm, esta letra parece... ¡La mía!, ¡No parece, es mi letra!)
(Entonces Laverne empieza a recordar...)
Flashback
???: L-lo siento mucho hijo, pero te tengo que dejar aquí... espero que cuando crezcas, comprendas porque te estoy dejando, no es porque yo no te ame, no puedo cuidarte, pero habrá alguien que te de ese amor, ese cariño que te mereces...
Laverne: ¿Hay alguien ahí?
...
Laverne: Oh, ya veo, usted fue la que habló.
???: S-si, solo que le hablaba a mi hijo antes... antes de despedirme...
Laverne: Disculpe que le pregunté pero, ¿Porqué quiere dejar a su hijo?
???: Es... es porque mi hijo es... un híbrido...
Laverne: ¡Un híbrido!, ¿¡Cómo es posible!?
???: Por favor... no grite... lo despertará...
Laverne: Lo siento, pero me podría decir, ¿Cómo es que el niño es un híbrido?, Yo lo veo como un humano, no le veo algo diferente.
???: Yo... me enamoré... de uno y... bueno, no ocupo decir que pasó después...
Laverne: Oh, entiendo eso pero, ¿Porque no tiene otra apariencia?
???: Yo... no lo sé... por favor... encuentre a alguien que... lo pueda cuidar... yo no puedo... me tengo... me tengo que ir...
Laverne: ¡Espere!, (Ya se fue.) Bueno pequeño, te buscaré una familia que te querrá mucho.
Fin del flashback
José: Ella me abandono... ¡Por ser diferente de los demás!, ¡Mi madre me abandono!
Laverne: (Oh no, esto se está poniendo feo...) José, calma, respira profundo y luego lo...
(José cae de rodillas y comienza a llorar.)
José: ¿Porqué... porqué no me quería?, ¿Acaso... no me amaba... por ser lo que soy...?
(Laverne camina hacía José, lo levanta y lo abraza.)
Laverne: No creo que ella te haya abandonado porque no te amará, creo que fue porque no podía cuidarte.
(José también abraza a Laverne.)
José: Ya no se que pensar...
Laverne: Se que enterarte de todo esto te dolió mucho y aún te duele, pero no dejes que eso te domine.
José: Tienes razón... pero que se supone que haga...
Laverne: Eso lo decidirás tú, yo no puedo decirte que hacer.
José: Es cierto, je...
(Ambos se dejan de abrazar, y José se limpia la cara con su brazo.)
Laverne: ¿Estás mejor?
José: Sí, muchas gracias...
Laverne: No agradezcas, además si necesitas ayuda, puedes contar conmigo.
José: Aún así, muchas gracias, por cierto, ¿Qué hora es?
(Laverne mira el reloj que está en la pared y vuelve a ver a José.)
Laverne: Al parecer, son las dos.
José: Vaya, a decir verdad pensé que era más tarde, je.
Laverne: Yo también, ¿Que harás ahora?
José: No lo sé, probablemente vaya a buscar a mi madre, pero no estoy seguro.
Laverne: Sinceramente no se que decirte, pero como lo dije antes, si necesitas ayuda, estaré dispuesta a ayudarte en lo que pueda.
José: (Es muy amable conmigo.) Gracias, solo espero poder encontrarla.
Laverne: Ya hay que irnos, pero antes de eso, tenemos que juntar los papeles y acomodarlos.
José: Es cierto, bueno juntare la mayor parte, después de todo, fui el que hizo más desastre, je.
(Ambos empiezan a juntar los papeles y las carpetas, varios minutos después...)
José: Se me olvidaba dar las gracias por haberme ayudado.
Laverne: Sabes que no necesitas agradecerme, pero ya que, de nada.
José: Je, bueno será mejor que...
(En eso, Casandra aparece.)
José: Oh no...
Laverne: ¿Quién es?
José: Es Casandra, me va querer...
(Casandra se percata de José y de Laverne.)
Casandra: ¡Ahí estás!
(Casandra empieza a correr hacía José.)
José: (¡Daniel salvame por favor!) Cálmate Casandra, ¿Que tal si lo hablamos después?
Casandra: Y lo peor de todo... ¡Alguien más te está separando de mí!, ¡Tú solo eres mío!
(Justamente cuando Casandra llega Laverne se interpone.)
Casandra: ¡No sé meta!, ¡Esto no le importa!
Laverne: Creó que si, no se que te habrá pasado, pero no puedo dejar que José salga lastimado.
José: (¡Daniel, apúrale por favor, que se van a pelear!, ¡Salvanos!) Calma, por favor, Casandra luego hablo contigo, pero necesito que te calmes.
Casandra: ¡No me voy a calmar!, ¡Además está perra te está robando!
Laverne: ¿Acaso me dijiste perra? (Molesta.)
Casandra: ¿¡Acaso es sorda o que!?, ¡Claro que se lo dije maldita perra!
José: ¡Daniel, ven por favor, se van a matar!
(Daniel aparece.)
Daniel: Bien, bien, bien, te ayudaré José, pero ya te lo dije, no siempre estaré para ayudarte, también tengo cosas que hacer.
Casandra: ¡No, tú de nuevo!
(Daniel agarra a José y a Laverne, para luego desaparecer...)
Casandra: ¡Maldita sea!
(De regreso con los tres...)
José: Muchas gracias, ya no volveré a molestar, perdón.
Laverne: ¿Quien eres?
Daniel: ¿Escuchaste el grito de José?, Dijo mi nombre y yo vine.
Laverne: Así que te llamas Daniel.
Daniel: Corrección, me llamaba Daniel, aunque no tengo problema si me quieren llamar así.
José: Bueno, ahora que estamos haciendo preguntas, ¿Cómo es que tienes esos poderes?
Daniel: Es una larga historia, espera, ya te la había contado pero muy resumido.
José: Ya lo recordé pero, ¿Que tiene que ver eso?
Laverne: ¿Que cosa?
Daniel: En resumidas cuentas, "morí" y "renací", después de eso conseguí los poderes, o mejor dicho, esos poderes ya los tenía pero estaban "dormidos".
José: (Hmm, me sería útil uno para poder defender o escapar de ella.) ¿Me podrías dar uno?
Laverne: José, no deberías preguntar eso.
Daniel: No hay problema pero, ¿Cuál te gustaría?
(Tanto José como Laverne quedan sorprendidos, y el ambiente se pone intranquilo...)
Fin del capítulo V
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