Capitulo 16

"Verdades ocultas"

Byeok. (China)

Tres días después del incidente con su tío.

Me asegure de ser cuidadosa y muy silenciosa, como un ratón evitando al gato. La oficina de mi abuela, quedaba literalmente en el centro de la casa, y a pesar de las pocas personas que quedaban en esta enorme casa, es posible que aparecieran en el lugar menos esperado.

Tenía la oscura sensación de que mi abuela, sabía algo y lo ocultaba muy profundo de sus documentos. Ser una jueza te da la capacidad de archivar casos congelados sin resolver.

Usando la llave que Wen me facilito, abrí la muy antigua puerta. La oficina de la abuela es tal y como lo recordaba de mi infancia, pulcra, un estilo chino antiguo, todo en su lugar. Y un enorme retrato del abuelo se posaba plácidamente en un bello altar ornamentado.

Solía observar el hermoso retrato pintado con amor, el intrincado dote del artista al realizar tan exquisita obra. Mostrando como era realmente mi abuelo. Es chistoso que mi padre lo dibujara con los ojos cruzados, abuelo solía hacer esa mueca cuando estaba triste. Me sentaba en su regazo y decía "Mira, Byeok tu abuelo te hará reír, rie para mí". Para luego sacar la lengua y cruzar sus ojos, yo me reía , lograba hacerme feliz con solo ese pequeño gesto de su rostro. Sus bellos rasgos gráciles de la edad.

Mi padre quiso retratarlo como era con nosotros, no era ese endurecido general, era un hombre lleno de amor por su familia.

Depósito un suave beso en la punta de mis dedos, y lo colocó con amor en el retrato.

-Lamento estar haciendo esto abuelo, pero necesito información. - le digo al retrato, es en mi opinión, un permiso para registrar a diestra y siniestra las cosas de mi abuela.

Y empiezo con la requisa, la biblioteca fue mi primera opción, muchos libros sobre leyes, algunos ya llenos de polvo, leyes muy antiguas y ya derogadas.

Mi siguiente opción fue el cajon del escritorio, que descubriendo sin sorpresa alguna estaba bajo llave. Trate de forzar el cajón, pero era inútil. Me di por vencida, pero algo me decía que ese cajón tenía algo de suma importancia. Lo deje para después.

Decidí tomar asiento en la silla giratoria y prendí la computadora. Y de nuevo, sin ninguna sorpresa alguna, tenía contraseña. Mi abuela realmente es meticulosa con sus cosas, pero algo me decía que a pesar de todo, era algo muy erróneamente fácil. Por mí bien obvie eso, y proseguí con mi investigación, ¿si fuera mi abuela, que usaría como contraseña?. Probé varias fechas, pero ninguna era la correcta. ¿Tal vez fue una combinación de fechas?. Solo tengo una oportunidad, antes de que la computadora se formateara por completo borrando toda la información que yacía en ella. Estaba sudando frío de los nervios.

Con manos temblorosas, tipee las fechas, el mes de cuando se conocieron mis abuelos, el mes de cuando nacio Mi-Suk, el día en que manifeste mi enlace y el año que murió papá. Mientras observaba con impaciencia y nerviosismo el proceso de reconocimiento, cuando la computadora confirmo la contraseña solté un suspiro de alivio, mis hombros se destensaron de inmediato.

De forma inmediata busque en los documentos más recientes, fue algo difícil ya que habían un sin fin, muchos casos, fotografías, muchas fotografías de víctimas, muchas de abuso, otras que no pudieron controlar su habilidad. Pero había una en particular, se trataba de un periodista, él había estado investigando sobre una red de tráfico de blancas en Venezuela, y al parecer habían políticos involucrados.

Ese hombre era un enlace de Glotón, se supone que son propensos a inmolarse mientras duermen, pero eso se puede evitar si toman un enfriador específico para evitar semejante combustión espontánea.

Ese hombre se encontró muerto en su apartamento en la calle Huaihai. Al parecer se inmoló mientras dormía, la policía llegó al sitio después de escuchar la alarma de seguridad. Su cuerpo estaba completamente chamuscado. La apariencia de ese hombre era irreconocible, y su investigación fue destruida. Todo se quemó en el incendio, pero me resultó extraño. Un año y medio antes de haber descubierto a un poderoso magnate del continente africano involucrado en un escándalo sobre creación de armas y experimentacion ilegal.
Que también era participe el hijo de un político de Latinoamerica. De la nada el periodista al regresar a su hogar, ¿se inmola dormido?.

Es lo mismo que ocurrió en Venezuela, sobre ese fusilamiento de un escuadrón de la GRO, que tacharon de traidores, esa noticia fue a nivel mundial, todos los miembros fueron juzgados en una corte Marcial y luego condenados a muerte.

Y según el informe forense, a ese hombre le faltaba un dedo, la lengua y las dos orejas. Es más que obvio que fue torturado antes, También se descubrió que la puerta fue forzada, y que el incendio fue provocado por una causa externa no interna.

Pero al parecer, las autoridades simplemente desecharon el caso, dijeron que fue una simple combustión y lo dejaron así, archivandolo junto con un sin fin de sucesos.

Al parecer, mi abuela fue la jueza asignada para llevarlo a cabo. Los familiares de ese hombre querían justicia, pero ese muchacho tenía mucho poder. No podía creer que mi justa abuela se dejará sobornar o en el mejor de los casos amedrentar por un niño mimado. No quería creerlo, hasta que logré dar con una cuenta bancaria dónde se encontraba una fuerte suma de dinero. Pero por lo visto, nunca fue tocado. Ya ese caso tenía alrededor de seis años. Y mi abuela no había tocado ese dinero sucio. No sabía si sentir alivio o indignación.

Pero de algo estaba segura, la madre de ese muchacho fue tratada como una loca, acosada por los medios, su esposo no aguanto y termino quitándose la vida, o eso parecía ser.

Seguí revisando, y di con un historial de los más buscados. Eran mercenarios que fueron degradados por deshonra. Hombres que cometieron crímenes de guerra y eran buscados para rendir cuentas con la ley que los imputa, pero lograron escapar, estaba segura de que esos mercenarios se encontraban en algún pais Africano como Uganda o Nígeria. Esos países son conocidos por albergar a la peor escoria de la humanidad. Ya que son países muy corruptos donde la ley es casi un chiste. Y los guerrilleros eran comunes.

También conseguí un permiso de importación, firmado por mi abuela, Venezuela y China tienen un convenio donde China puede exportar a Venezuela y viceversa, es algo que se lleva haciendo desde hace mucho, pero se requiere de una inspección minuciosa del empaquetado. Y cuando se considera óptimo, se solicita la firma de un juez para confirmar su envío o recibo. Es curioso, las fechas eran recientes, desde hace un mes antes de llevarse a mi abuela.

Sabía que no podía permanecer más tiempo aquí, así que utilizando un pendrive que había preparado con antelación, guarde toda la información que me pareció necesaria.

Me puse alerta, cuando escuché sonidos provenientes del pasillo. Estaban algo alejados pero no quise arriesgarme a que me consiguieran aquí, tampoco quería meter en problemas a Wen, ya que a pesar de lo que me diga, estoy más que segura que esa llave se la quitó a Xiang.

Ya sabía a quien recurrir para poder investigar más a fondo. Definitivamente, aquí había más de lo que se deja entre ver.

Al apagar la computadora, y reorganizar todo, logré divisar un pequeño papel con el apellido Okallo en el. Ese nombre se lo escuche a mi abuela en varias ocasiones.

Según mi abuela es un hombre poderoso. Tiene muchos recursos y puede hacer mucho con ellos, pero ¿Que tiene que ver con mi abuela?.

Tal vez no sería demasiado descabellado con el hecho de que mi abuela podría estar relacionada con ese hombre. Necesitaba llegar al fondo de esto.

(....)

No perdí el tiempo en llegar al bar de Jang-Keng. Sabía que estaría temprano haciendo su trabajo de preparación antes de que llegara la hora de la cena. Entré corriendo y mi cantinero favorito, parecía sorprendido, pero no disuadió de su habitual expresión cansada y neutral.

-Byeok. Llegas temprano hoy, ¿qué está pasando?

-¿Dónde está tu hermana?.

Él arqueó una ceja.

-Está en la parte de atrás tomando un descanso para almorzar, ¿por qué?.

No respondí mientras corría hacia la trastienda en busca de Tekirai. La atrapé mirando a través de su teléfono en la oscuridad mientras abría la puerta de golpe solo para asustar Tekirai hasta el punto de dejar caer su teléfono.

-¿Qué quieres?

-¿Todavía hackeas?.

Sus ojos se abrieron un poco más ante eso. Se inclinó para agarrar su teléfono y luego se levantó mientras se sacudía.

-... A veces... Cuando estoy aburrida. ¿por qué preguntas?

-Necesito que me hagas un favor

Se frotó la nuca y suspiró.

-Antes de aceptar cualquier cosa. Necesito hacer algunas preguntas. ¿Vas a seguir interrumpiéndome?

Me senté en la silla más cercana a ella y escuche. Teki hizo lo mismo y agarró una silla con el respaldo al frente. Ella cruzó los brazos sobre el respaldo de la silla, a pesar de la oscuridad, pude ver los vendajes en su cuerpo, y la cantidad de costras y piel quemada que cubrían su cuerpo blanco.

-Entonces, ¿por qué de repente estás interesada en mis servicios?.

-¿Te suena el apellido Hitoshi?.

-Sí, ese periodista me busco gracias a una conocida, necesitaba que lo ayudara a investigar sobre un negocio turbio en el cuál se metió de yenó. Él pobre ni siquiera dormía, estaba completamente paranoico. Le advertí sobre meterse en ese problema.

Solo asentí en reconocimiento, sabía que mi prima hikikomori sería de ayuda. Ella es una persona difícil, pero gracias a su condición. Logró aprender a usar las computadoras, y conoció a una cierta persona muy reconocida en el mundillo cibernético.

-Y...sobre Okallo, se que trabajaste para su hijo. ¿Dotia?.

Ella negó -Kisai. El chico necesitaba información sobre un rival comercial de su padre, el conglomerado Anagunye. Quería que perdiera su credibilidad y luego les hizo firmar su empresa. Era un maldito con el que trabajar, con toda la honestidad.

No me sorprendí con eso. Eh visto lo que se dice de Kisai Okallo. Muy diferente de su hermano Dotia, siempre manteniendo un bajo perfil. No se dice mucho de Dotia en las noticias, pero de Kisai, el chico era la comidilla favorita de los medios.

Saque el pendrive de mi chaqueta, y se la mostré a mi prima.

-¿Podrías ayudarme con esta información?. Te pagaré si es necesario.

Ella parecía considerar mi favor. Se levantó de la silla y se dirigió a buscar algo que estaba en su escritorio. Regreso con su laptop.

-Te ayudaré - dijo, mientras se acomodaba y abría la laptop con seguridad.

Me acerqué a ella emocionada.

-No te cobraré, eres familia...y siendo sincera, eres de las pocas personas que me ven como un ser humano, y no como un monstruo quemado. - estira la mano para recibir el pendrive. Lo coloca en el puerto USB -Tampoco me ves con lástima. Es difícil ser una enlace de Fénix que no puede regular el calor.

Ella tipeaba números binarios y cosas extrañas en la computadora, cosas que ni entendí, en mi punto de vista solo eran galimatías.

-Sentir la piel desconcharse, que tus órganos se sientan sobrecalentados y perder partes...no es por lo que condenaría a nadie, ni siquiera a mi peor enemigo.

La escuche con calma, mientras Tekirai trabajaba.

-Ese desgraciado quiso experimentar conmigo. Quería saber dónde se almacenaba el calor, y porque conmigo no funcionaba correctamente. - Tekirai había traspasado, la primera barrera de seguridad. - Era su manera de decir amablemente, que era defectuosa. Y que serviría como conejillo de indias, ya que no tenía nada que perder por mi rostro deforme.

Podía escuchar la amargura combinada con tristeza resignada.

-No eres un fenómeno - lo único que pude decir. Tekirai iba por la segunda barrera. Se suponía que estaba indagando en la base de datos de las empresas Okallo, la cual tenía un sistema de seguridad muy pesado. Me sorprendí de lo rápido que ella lograba evitar a la IA de Tefari Okallo. Creó que era en parte por su tiempo trabajando para Kisai que se le facilitaba el ingreso.

-Es curioso que del primer hijo no se sepa mucho, ese muchacho raramente aparece en público, del segundo ni se diga, pero nunca creí que tuviera un tercero.

¿Un tercero? ¿Okallo tiene tres hijos?. Tekirai agrando una foto familiar, en ella se podía ver a un niño pequeño. De rostro inocente, cerca de la que supuse era su madre.

-Mira, también descubrí algo interesante - abrió un documento encriptado sin ningún problema, en el se podía ver claramente una lista de compradores. Esos compradores se veían poderosos, con influencia internacional. Esas personas parecían ser compradores recurrentes del mercado negro de la Deep Web. Era... inquietante.

-¿Eso...es lo que creo que es? - mire temerosa una lista en particular, era una lista de venta y compra de personas, también incluía la contratación de personas de trabajo dudoso, y mi sangre se helo al darme cuenta de que eran los mismos mercenarios que se buscan en mi país. No solo eso, el nombre de mi abuela estaba en la lista de compradores de Okallo.

¿Elysium?

Convencí a Tekirai que se metiera en el sistema de la policía, y al hacerlo pude ver una cantidad increíble de personas desaparecidas. Muchas eran de bajos recursos o eran personas huérfanas sin ningún familiar que se preocupara o importará su desaparición. Lo más turbio era que la policía hacia la vista gorda, y mi abuela solo archivaba los documentos.

Ella lo sabía todo, mi abuela...¿estaba metida en estos negocios retorcidos?. Permitía que Okallo prosiguiera con su negocio clandestino de fabricación de armas. Y la experimentación de seres humanos. ¿Y solo para usar Elysium?

-Uh-Oh - escuche a Tekirai decir por lo bajo.

-¿Que pasó?. No me digas que viste algo peor.

-Te diré que no, si eso te hace sentir mejor.

-No lo hagas, dime la verdad. La mentira solo por lástima es mucho peor que la verdad dolorosa.

-Hace poco contrataron a un grupo de mercenarios, parece que fue principalmente para deshacerse de alguien.

-Continua.

-Al parecer se trata del mismo político que perdió a su hermano policía en un suicidio.

-¿Se suicido?.

-¿En mi opinión?. No lo creó, este policía tenía familia, era un hombre decente, era el comisionado. - Tekirai sonaba muy convencida de lo que decía, hasta me mostró una noticia vieja que hablaba del mismo policía. Diciendo que lo consiguieron colgado en su casa. Unos días antes había celebrado el cumpleaños de su hija más joven.

-Eso es extraño.

-¿Y sabes que es más extraño?. Que un mes antes él mismo había desmantelado una red de narcotráfico que se extendia desde Colombia y Brasil hasta Venezuela. Que también se dedicaba a secuestrar a personas. Y no solo eso, la droga que traficaban, pero no completo el report, esa droga era Elysium.

-Eso es grave Tekirai.

-No solo eso ...-Tekirai hizo una pausa, dudando si proseguir o no con decirme todo. Hasta que se decidió - Parece que la GRO estaba involucrada. Hubo un incidente unos años antes en Bahía Portete. Que casi llevo al exterminio de un grupo étnico de ese lugar. Se descubrió residuos de Elysium en esa playa.

-Escuche de eso, pero se supone que los condenaron a pena de muerte, ¿No?.

-No, a esos no, ese caso fue oculto al ojo público. Tú te refieres al Escuadrón 17. En ese todos fueron fusilados...menos uno.

-¿Quién?. - cada vez mis nervios incrementaban, me sentía aprisionada. Cómo si mis pulmones se llenarán de agua.

-Era el Capitán en jefe. Su nombre es Atlas Romero...- Tekirai hizo una pausa, algo incómoda por lo siguiente que diría - el hijo mayor de Asunción Romero...el politico que perdió a su hermano.

Al escuchar ese nombre creí que me desmayaria, me estaba volviendo loca definitivamente. Recordé lo ocurrido con la GRO, fue algo vomitivo. Esa noticia era digna de una pesadilla. Duró alrededor de un año completo hablando de semejante cosa.

Mi cabeza daba vueltas. Pero me costaba creerlo ya que durante el cargo de Atlas todo era impecable, eran diligentes en su trabajo, cuidadosos incluso con las puertas, y cuando fue el momento de la luna de sangre.

Pero hubo un incidente con Pociones o mejor dicho, drogas o Elysium para ser específicos, enloquecieron a los civiles. El condenado líquido de color rojo intenso no era compatible con su sistema.

Esa droga contaminó a muchos, provocando una pandemia abominable, las personas empezaron a actuar como demonios, se devoraban entre ellos, se destruían, la anarquía. Se asesinaban, violaban, despertaban un lado primitivo, donde la moral no existía. Después, como una enfermedad terminal, sangraban por los ojos y oídos, vomitaban sangre y su corazón explotaba para luego morir de forma trágica y lamentable. Fue parecido a lo ocurrido en Bahía Portete.

Culparon a Atlas y su escuadrón por permitir eso. Hasta los acusaron de ser cómplices. Fueron condenados a pena de muerte fue sacrilegio y acto terrorista. El vaticano les dio la espalda.

Después de eso la GRO se fue cuesta abajo. Cambiaron sus reglas, eran menos violentos con los demonios, y al parecer a habido un incremento en incidentes que los involucra.

-Esto me parece asqueroso. Ya que Hitoshi llegó a hablar con Atlas en un momento dado. Hitoshi hizo su investigación en Latinoamérica, Atlas debe de saber algo. Tuvo que haber visto algo desde esa perspectiva. Pero no sé a sabido nada de él, desde entonces.

-¿Que es eso?. - digo señalando un pequeño nombre que no sobresale mucho. "Nuevo sujeto de pruebas".

-Ese debe de ser el conejillo de indias de ese hombre - Tekirai parece sorprendida y extrañada al mismo tiempo -Wow. Un enlace de hiena, son muy raros. - ella entrecierra los ojos para leer mejor -¿De donde lo abra sacado?. Son muy extraños.

-Podrías darme más detalles -no quería ser grosera con Tekirai, pero si puedo ayudar a esa persona, antes de que se vuelva un nombre más en esa lista, me haría sentir mejor. Se a ciencia cierta que es un niño, los prefieren por sus órganos sanos y frescos.

-Mierda -Tekirai, jura después de encontrar lo que buscaba. -Byeok...tienes que ver esto.

Me acerque más, para poder ver la imagen. Y mis ojos no podían creer lo que veían. Tefari eres un animal desalmado. Los mismos mercenarios de la lista fueron contratados por una segunda vez. Pero en esta ocasión, para secuestrar...Tekirai se había inmiscuido en la base de datos de la policia del país de dónde proviene Tefari. Uganda, y se descubrió que de muchas aldeas autóctonas, la guerrilla había saqueado y destruido muchas de ellas, también se llevaron a muchos niños. Lo más turbio era que los mercenarios, son sub internos de esas guerrillas y habían hecho exactamente lo mismo. Note, que esos niños ninguno era un enlace de Hiena. Ese enlace en particular es muy extraño, es como un caso fortuito. Al parecer en Uganda se pueden contar con los dedos. Y casi todos los enlaces de hiena eran de la familia de Tefari.

Estaba segura, de que esos tipos eran cuidadosos con la tecnología, pero deben de tener algo. Cualquier artefacto que me ayude a localizarlos.

-Puedes rastrear un teléfono o algún aparato?. ¿Saber dónde se localizan, así sea en un desierto?.

-¿Me ves cara de maga?. -Tekirai sonaba irritada, se que es mucho pedir...pero por el momento a hecho lo imposible, puede intentar algo más. Ella vio mi seriedad como una afirmación a su pregunta, suspiro y volvió a tipear.

-Pude rastrear algo, y... ¿están en Kampala?.

Me congelé. Es una ciudad de Uganda. Eso, me hizo sumar dos y dos. Enlace de Hiena, desapariciones masivas de niños, solo hay alrededor de 8 enlaces de hiena en Uganda. Y 4 ya habían muerto. Y 1 estaba en Alcatraz. Una prisión de máxima seguridad.

Eso solo dejan a tres personas, Dotia, Kumal y al mismo Tefari. Ese hombre no usará a su primogénito para algo así. Tampoco creo que se use así mismo, Kisai es un enlace de Gacela, eso deja... realmente el lodo me está llegando al cuello...la implicación casi me hace vomitar.

-Tengo que irme. - Quise irme lo más rápido posible y agarrar el primer avión hasta Uganda, sin importarme los riesgos, pero Tekirai me detuvo de la muñeca.

-¿Adonde crees que vas?. ¿Acaso, no recuerdas que son mercenarios? ...¿Y que posiblemente la policia este involucrada?.

Tekirai trato de razonar, pero quería confirmar si de verdad mi abuela hizo todo eso, si fue participe de esas cosas atroces...y si tuvo algo que ver con lo de ese pobre político. También si había permitido el ingreso de Elysium al país.

-Tú no entiendes, Tekirai. Tengo que llegar al fondo de todo este desastre. -trate de sonar segura, también debía de admitir que es una forma egoísta de escapar de todo lo que me estaba pasando. No quería casarme , no quería cargar con la deuda de mi hermana tampoco quería sentirme responsable de la enfermedad de mi madre y menos ser familia de una criminal.

Tekirai parecía considerar todo. Frotó su nuca con vendas y se resigno.

-Espera...déjame preguntarle a Jang-Keng. Puede que tenga algún contacto que te pueda ayudar con eso. Tiene un amigo pilotó, que estudio con él en la universidad cuando viajo al extranjero. Tiene su propia avioneta, y permiso de volar en aguas internacionales - hace una pausa ominosa - Recuerdo, que le debe un favor...al igual que a mí.

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