Ya estaba preparada para salir a donde estaba ya organizada la rueda de prensa, donde se se llevara a cabo en la parte baja de un gran hotel de la cuidad, por mas que me había negado Renato me había insistido en que debía por lo menos, colocarme un poco de maquillaje, no quería la verdad, no soy muy amante del maquillaje y no lo creí oportuno pero luego termine por aceptar y dejarme un poco de polvo y base.

Me maquillaba, claro que si, ¿que mujer no lo hacia? Pero normalmente solo en ocaciones especiales, cualquier celebración o algo que realmente fuera de importancia, mi día a día era solo polvo compacto y corrector de ojeras ya que se me eran bastante notorias.

Estaba nerviosa, sentía que iba a morir en cualquier momento.

Llegue al lugar de aquella conferencia junto a los chicos y Renato quien era el organizador de ello, suspire pesadamente al saber que ya era momento de que esto comenzara y de dar las declaraciones que estaban esperando.

-¿Estás bien?- lo mire con la mirada perdida, ni siquiera yo sabia lo que estaba haciendo.

-Si, ¿a quien le miento? Estoy asustada.- suspire pesadamente.

-Tranquila, estará todo bien.- me dedico una sonrisa leve, para luego escuchar como era llamados.

-Gracias Joel.

-De nada, bueno vamos que ya es hora. Solo respira eh.- me dijo en broma, causando que una risita apareciera en mis labios de manera fugaz.

-¿Lista?- se me acerco con una sonrisa, estaba totalmente tranquilo, esto para él no era algo nuevo.

-Si.- muy a mi pesar, pensé.

-Oyeme, estará todo bien.- me tomo de la mano, dedicándome una sonrisa amigable.

-Gracias vale.

-Vamos bella, esto ya comenzó.- me dedico una sonrisa.

Suspire y seguía los pasos de los demás, mis manos comenzaron a sudar al notar las personas que estaban allí al frente, serían unas treinta personas, micrófonos, cámaras. Mire de reojo a los demás, estaban tranquilos, y una sonrisa se dejaba ver en sus rostros.

Me indicaron sentarme entre Christopher y Joel, en el centro de la larga mesa.

Mierda, yo siempre y mi jetota.

-Buenas tardes.- hablo Renato a través del micrófono, saludando a todos los presentes -. Así damos inicio a esta conferencia.

-Primera pregunta.- sonrió Christopher.

-Primero, ¿quien es la chica que los acompaña? Y segundo, ¿que fue lo que realmente ocurrió la noche de ayer?- pregunto una de las chicas al frente, mire a el chico a mi izquierda.

[...]

Salí de aquella sala intento asimilar lo que Christopher había dicho a aquella pregunta; ¿Que son ustedes?

Ahora de aquí no salia viva de ninguna manera, me iban a asesinar a quien me le cruzase en el medio, ¿como se le ocurrió decir semejante mentira?

Claro, y no me quería exponer antes sus seguidoras, y le pareció magnifica la idea de ir y comentar como si fuese lo mas normal que estamos intentando algo mas.

Mierda.

-¿Como se te ocurre decir eso? ¿Te has vuelto loco?- lo confronte al estar ya en una parte mucho mas privada en la que solo estábamos los otro cuatro, Renato, él y yo.

-No te molestes, fue algo que...- le interrumpí.

-Me va a arder troya a mi con todo esto, me van a matar en serio.- dije con molestia.

-Fue idea mía.- me voltee  y le dedique una mirada a Renato -. ¿Que no es cierto?

-¡No!- negué -. Entre él y yo, ya no hay nada ahora.

-Era necesaria esa declaración, ¿sino que hacían ustedes dos, solos, en la noche, en la calle?-  pregunto retorico.

-Pero es una falsa, eso no... esta muy mal.

-Vuelvan, ya esta confirmado.-dijo con total tranquilidad.

¿Que mierda?

¿Que tu no eras el que no les permitía tener relaciones publicas?  

Mierda, esto me ponía mal.

Mire a Christopher, quien solo se encogió de hombros.

-No, yo no estoy de acuerdo con esto.- dije antes de desaparecer de su vista, saliendo por aquella puerta a no se donde, solo quería estar sola.

Camine por diferentes calles sin un rumbo, me sentía frustrada, ¿para que hacer de algo publico que realmente ahora no existe? Aun sabiendo lo eufóricas que son sus fanáticas y que si me consiguen sola harán de mi una piñata.

Literal, no exagero.

Me senté en aquel pasto de la plaza en la que acababa de llegar, cerré mis ojos, ¿que va a ser de mi ahora?  ¿que va a pasar con mi vida privada?

Apagué mi celular, lo menos que ahora quería era hablar con alguien mas, ni siquiera con mi mamá o Karol que debe estar que me mata por no ¨contarle que hemos vuelto¨ después de meses separados.

-Perdóname.- alce mi mirada -. Debí contarte de ello antes.-  se sentó a mi lado, sin apartar su mirada de mi.

-Me van a matar.- sopese mirando mis manos -. Tus fanáticas odian a quien se te acerque, me van a quemar  y con toda razón.

-¿Deberíamos importar solo nosotros dos, no?

-Es que no hay un nosotros dos, ahí esta la vaina.

-Pero puede haber un nosotros.- dijo haciendo que le mirara. 

-¿Que quieres decir con eso?

-¿Tu me quieres?- no sabía que responder a eso, ¿que era lo que realmente él me hacía sentir? ¿De que manera lo seguía queriendo?

-Te quiero.- me esforcé a decir, me costaba ser sincera pero creo que este era el momento indicado.

Él me dedicó una sonrisa. Sonreí igual.

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Elecciones presidenciales, gana la misma mierda y seguimos hundiendo mas a un país que tiene mucho para dar y que por un mal manejo esta sufriendo.

¿Han visto, UP- Una aventura de altura?

Esa película fue inspirada en Venezuela, en Canaima .

Hay grandes cosas que Venezuela aun no ha podido mostrar.

Este país es hermoso, lo feo es quien lo maneja.

Sencillo; se cambian por mierda y se pierde el pote.

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¿Es normal que ¨primera cita¨se me pego y no paro de tararearla?