Capítulo 1 - La dama

–Maldición. -espeté mientras trataba de que el corsé no me sacara el poco oxígeno que me quedaba- ¿Por qué esta cosa me asfixia?

Me sentía horrible mientras me veía en el espejo,
tratando de no dejar de respirar mientras observaba a mi doncella que presionaba aún más las ligas de ajuste.

–Su madre mandó a decir que usted debía de estar implacable para la ceremonia de su hermano- dijo con cierto temor haciéndome rechinar los dientes.

–Fiesta maldita- bramé por lo bajo mientras miraba el techo de la habitación.

–Pero es necesario al fin y al cabo- dijo mi madre entrando por la puerta de mi habitación, ya para ese entonces yo estaba rezándole a todos los dioses existentes para que me salvaran de esta desgracia

El karma siempre la tiene conmigo

–Madre, sabes que nunca me gustaron estar en ese tipo de eventos-chille cuando sentí el dolor por el bendito corsé- esto se califica como tortura.

Ella solamente se empezó a reír, amo a mi madre, puedo decir que a pesar de este mundo algo retorcido y de que la mayoría de las damas no se llevan bien con sus hijas, tengo la suerte de que me tocara una madre tan comprensiva y cariñosa, para mi ella lo es todo.

–Eres una escandalosa, que eso no te lleve a la muerte querida Elena- Me dijo sobándome cariñosamente la mejilla mientras yo me acurrucaba en sus brazos.

De un momento a otro me perdí en las palabras que mi madre me daba, al darme cuenta ya estaba completamente lista y ataviada con un vestido rojo

–Gracias Lea, te puedes retirar-ordené cortésmente a mi doncella, ella se fue sin rechistar.

–Espero que hoy te sepas comportar-dijo mi madre separándose de mi para arreglar mi cabello-debes acordarte que es el compromiso de tu hermano es lo que estamos celebrando.

–Lo tengo claro, pero aveces las fiestas necesitan un poco de ya sabes, eso...-dije riéndome y ella solo hizo un gesto raro

–Mientras no hagas trastadas todo estará bien-suspiró y pensó en otra cosa, su gesto automáticamente se convirtió en molestia-Además de eso, no quiero más peleas con Lady Margaret.

Me puse mi mano en mi barbilla en un gesto pensativo

–Lo pensaré, además, ella siempre es la que empieza primero- me crucé de brazos recordando a la venenosa prometida de mi hermano, ella era el infierno, siempre presumiendo que se casaba con el hijo de un duque con mucho dinero, interesada.

Ella siempre que tenía la oportunidad me decía que me quedaría soltera y con el descaro de que si llegaba a casarme con alguien se mataría y me dejaría viuda, nunca me pudo caer bien y aunque lo intenté la marañosa nunca se dejó querer. Bueno, cosas que pasan.

–Ya lo hablamos Elena, no toleraré un error más ante ella-Me señaló con su dedo índice de manera acusatoria.

–Como digas madre-simplemente rodé los ojos mientras la veía marcharse.

–Tienes 25 minutos para terminar de arreglarte, te quiero abajo a las 7:30 para la iniciación, sonrisa y encanto, nunca lo olvides.- me dio un beso sonoro en la mejilla y se marchó.

Ya pensaría en algo para salir de esa fiesta, algo se me ocurriría, con tal de no tener que pasar tiempo con ella.

Si tan solo no hubiese llegado a la fiesta...

Es el primer capítulo, espero les guste... besos 😗