🖤
Un chico de cabellos castaños claros observaba atentamente las fuertes y peligrosas llamas de fuego que eliminaba a los tres cadáveres recostados en el suelo, y sonrió debajo de su bozal negro con líneas blancas al ver las chispas que caían en suéter sintiendo su ardor, más no el dolor que debería causarle.
El olor de la carne quemándose traspasó en su bozal y el de piel pálida, hasta llegar a un tono enfermizo, olfateó suspirando del gusto. Sin mencionar el humo que hacía acto de presencia y se elevaba hacia el cielo estrellado de la noche tapando poco a poco la luna grande y redonda pintada de blanca.
⁽⁽—¿Qué te parece?.—⁾⁾
Volteó a su lado encontrándose con su acompañante; un hombre alto de cabellera castaña, llegando a un tono azabache, una chaqueta café con pequeñas manchas de gasolina en las mangas y en su camiseta negra, pantalón rasgado y botas negras con minuciosas evidencias de sangre.
⁽⁽—¡M-Me gu-usta, Masky!.—⁾⁾ le sonrió aún con el bozal puesto
El nombre no estaba sin razón, la persona parada llevaba una máscara blanca con detalles pintados de negro en los ojos y en los labios, lo que creaba una personificación neutral que incomodaba y atemorizaba a muchos.
Pero no para alguien.
⁽⁽—Estos niñitos trajeron muchas cosas para solo acampar.—⁾⁾ exclamó señalando las carpas detrás de ellos
Las cuales tenían manchas de sangre en su interior y rastros de arrastre desde su entrada hasta la fogata.
⁽⁽—Me hiciste recordar al grupo de idiotas que le entregamos el mes pasado al Operador.—⁾⁾ rió abrazando sus piernas contra su pecho
⁽⁽—Por suerte no gritaron mucho,—⁾⁾ el enmascarado se sentó en el tronco y le ofreció una cerveza recién sacada de una hielera ⁽⁽—No había sodas pero con esto entraremos en calor.—⁾⁾
⁽⁽—Gra-Gracias.—⁾⁾ aceptó para bajarse el bozal
Un rostro demacrado se hizo ver decorado con ese tono blanco, con ojeras violetas y ojos levemente irritados. Pero lo que se llevaba la atención era la cicatriz en la mejilla izquierda que dejaba expuesta parte de su dentadura.
Ambos brindaron con el pico de las botellas y tomaron el contenido, en un momento la bebida se le resbaló al menor por la cicatriz. El enmascarado rió enternecido y lo limpió con una servilleta.
⁽⁽—Que ate-tento.—⁾⁾ dijo el más joven
⁽⁽—Contigo siempre, Toby.—⁾⁾ dijo el de la máscara sonriendo ladino
⁽⁽—¿Toby?, ¿ya no soy Rogers?.—⁾⁾ le preguntó burlón
⁽⁽—Me gusta tu nombre, ¿o quieres que te diga «Cariño»?.—⁾⁾ sugirió acercándose más al de ojos oscuros
El contrario se sonrojó e imitó la acción quedando más cerca del hombre mayor que él, exactamente quince años; sus brazos rodearon su cintura mientras sentía las caricias en su mejilla intacta y en su cuello donde resaltaban las venas.
Sin ningún tipo de tapujo unieron sus
labios resecos y saborizados con cerveza en un beso apasionado y descontrolado que provocó movimientos bruscos y la aparición de dientes que mordían con rudeza los labios contrarios.
El susodicho Masky pegó los pechos de ambos para más cercanía mientras lo tenía del cuello, y pronto el menor lamió sin culpa los labios del otro, y él abrió su boca dándole permiso de introducir su lengua, comenzó una pelea entre ellas terminando el mayor como el ganador.
⁽⁽—Te ves muy lindo, Toby.—⁾⁾ halagó el mayor sonriendo
⁽⁽—Quítate la máscara.—⁾⁾ le pidió el de dentadura expuesta jadeante
⁽⁽—Estoy cómodo así y puedo besarte sin problemas.—⁾⁾ dijo comenzando a besarle el rostro
⁽⁽—Quiero ver tu rostro.—⁾⁾ pasó sus brazos por el cuello
⁽⁽—Lo siento, pero estamos afuera de casa, un guardabosques podría llegar y no puedo arriesgarme a eso.—⁾⁾ explicó acariciando la cintura del menor
⁽⁽—Tim, ya estamos aquí con tres cadáveres que funcionan de leña, ¡y yo con la cara descubierta!.—⁾⁾ clamó con obviedad
⁽⁽—Pero nunca te vieron,—⁾⁾ refutó retomando la cerveza ⁽⁽—Hoodie y yo
nos encargamos de mantenerlos lejos y de asesinarlos de ser necesarios.—⁾⁾
⁽⁽—¡Deja las excusas, viejo lesbiano!.—⁾⁾
⁽⁽—Ahora menos.—⁾⁾
Se cubrió de nuevo con la máscara y se alejó de Toby para mirar hacia el lago azul puro con el reflejo de brillantes estrellas que pintaban la hermosa noche.
⁽⁽—¡Masky, hey Masky, hey!.—⁾⁾ se acercó al mayor para decir: ⁽⁽—¡Hey Masky, hey Masky, hey, hey Masky!.—⁾⁾
⁽⁽—Mocoso Molesto.—⁾⁾
Atrapó al menor entre sus brazos y lo pegó a su cuerpo para hacerle cosquillas, y él rió ruidosamente. Pero solo unos minutos hasta que el de cicatriz le tomó las manos y las alejó sin problema.
⁽⁽—Vamos, puedes quitarte eso.—⁾⁾
⁽⁽—No creo que sea lo mejor.—⁾⁾
⁽⁽—Te he visto pocas veces estos días, y en esas tenías esa máscara.—⁾⁾
⁽⁽—Rogers, en serio...—⁾⁾
⁽⁽—Quiero verte.—⁾⁾
El de piel pálida le quitó poco a poco la máscara con cuidado de no lastimarlo, y se sorprendió; la mejilla derecha tenía una cortada recién cocida con los alrededores rojizos, la nariz estaba cubierta con una bandita y el ojo izquierdo tenía un golpe que se tornó a un morado con amarillo.
⁽⁽—¿Qué te pasó?.—⁾⁾ preguntó Toby viéndose preocupado
⁽⁽—Un guardabosques logró darme pelea,—⁾⁾ respondió Masky rodeando los ojos ⁽⁽—Nada grave considerando que lo dejé como un jodido colador.—⁾⁾
⁽⁽—¿Si?, wow.—⁾⁾ soltó sarcástico
⁽⁽—¿Estás molesto?, quizás te sientas hasta asqueado de verme así.—⁾⁾ dijo el mayor con la mirada baja
El chico de dentadura expuesta se lanzó al mayor estrechando su cuerpo con sus brazos, y se atrevió a pasar su lengua lentamente por la herida curada.
⁽⁽—Mmm~ desinfectante para manos.—⁾⁾ susurró sonriente lamiendo sus labios
⁽⁽—Tu favorito.—⁾⁾ indicó Masky sonriéndole sincero
El menor bajó progresivamente hasta el cuello para besar cariñoso provocando carcajadas suaves y casi silenciosas del de ojos oscuros.
⁽⁽—Tú también eres mi favorito,—⁾⁾ dijo el de rostro cadavérico ⁽⁽—Me gustas en todos los sentidos, tu ojo reluce por la tonalidad morada y un poco amarillenta de tu moretón, ¡casi como si estuviera pudriéndose!.—⁾⁾ tocó la herida antes de seguir hablando: ⁽⁽—Tu nariz es bonita y no me importa si queda rara para ti, ¡para mí seguirá siendo linda!.—⁾⁾
⁽⁽—¿Aunque termine como el Jorobado de Notre Dame?.—⁾⁾
⁽⁽—Serás mi Quasimodo asesino.—⁾⁾
Ambos rieron y volvieron a unirse en un beso más hambriento que el anterior, los dientes atacaron con fuerza los labios del otro teniendo como consecuencia la presencia de sangre en delgados hilos, las lenguas peleaban en una batalla por la dominación, terminando Toby como ganador esta vez.
Más pronto que tarde, el menor se le subió encima sentándose en el regazo del otro, quien no se quejó de dicha acción y afianzó la cercanía de ambos tomándolo de la cintura. Nunca se separaron de sus bocas, no tenían urgencia en hacerlo, sino que se unieron lo más posible del otro para dejar su guerra de lengua a una danza lujuriosa entre ellas.
El de ojos cafés pasó sus manos con guantes por debajo del suéter con mangas a rayas de Toby para quitársela viendo una sudadera negra con tirantes dejaba a la vista sus brazos delgados que parecían pegarse a la figura de los huesos, su pecho que casi traspasaba a su ropa debido al sudor, y su torso plano y blanco con heridas auto infligidas en un pasado no tan lejano.
No se negó a tocar cada pedazo de piel, lo que hizo que el contrario suspirara en su boca para soltar jadeos desesperados.
⁽⁽—Me gustas Toby, en serio me gustas mucho.—⁾⁾ confesó repartiendo besos en el cuello del nombrado
⁽⁽—Tú ta-ta-también me gu-gus..—⁾⁾ al de dentadura expuesta se le dificultó hablar
⁽⁽—Tranquilo, respira profundo y exhala suave,—⁾⁾ ordenó dándole palmadas en su espalda ⁽⁽—Tus tics se han calmado últimamente, es un gran avance.—⁾⁾ dijo sonriéndole amable
⁽⁽—Mi síndrome... O-O-O-Ojalá no tuv-tuviera esa mi-mierda en mí.—⁾⁾ se quejó respirando como le fue ordenado
⁽⁽—Shh~ shh shhh, ya bebé, todo está bien.—⁾⁾ trató de calmarlo comenzando a mercerlo de un lado a otro
⁽⁽—No s-s-soy un be-beb-bé, ya tengo diecin-nueve.—⁾⁾ reclamó aferrándose a su mayor
⁽⁽—Un bebé grande entonces.—⁾⁾ bromeó riendo al recibir un golpe
Se mantuvieron así por varios minutos, incluso podía asegurar que pasó casi media hora, pero eso no importaba aquí, sino del estado psíquico de más joven. Masky se dedicó a peinar la cabellera revuelta y, sorpresivamente, limpia de Toby entregándole comprensión y paz.
⁽⁽—No t-tengas lástima por mí, sé que te mo-molestan mis tics.—⁾⁾
El mayor mordió con fuerza su labio y no le importó la presencia de sangre seca en su labio inferior, se lamentaba el haber sido un cretino antes con el menor cuando era otra víctima del asqueroso mundo.
⁽⁽—No es tu culpa tener Tourette.—⁾⁾
⁽⁽—Es que ese bastardo tenía su semen en mal estado.—⁾⁾
Masky rió besando su nuez de Adam causándole cosquillas junto a una burbujeante carcajada. Toby miró al mayor a los ojos y sonrió en pequeño.
⁽⁽—No entiendo porqué te gusto, Masky, soy un tonto y un inútil... Ni siquiera puedo decirte que me gustas.—⁾⁾
⁽⁽—Toby, eres un chico de diecinueve que tiene el estómago y las pelotas para matar a idiotas que se adentran al bosque y molestan al Operador, a tu edad muchos juegan a ser psicópatas pero vomitarían al ver sangre real, tú puedes tener una masacre bajo tus pies y aún así tener esa hermosa sonrisa.—⁾⁾
⁽⁽—Es lo único bueno que tengo en mi cara, no por nada muchos se asustan al verme sin el bozal.—⁾⁾
⁽⁽—Ignóralos, son maricas que se acostumbraron a ver Barbie y sus tetas de Perfect Simbol, a mí me gustan tus ojos, brillan como dos pepitas oro puro cuando asesinas a alguien, tu piel blanca y fría como la misma nieve me recuerda a mi única época del año favorita, tu nariz tan pequeña y refinada con un puente perfecto, esa boquita rojita y con ese gusto a chocolate barato que la vuelve especial y mía, solo mía.—⁾⁾ pasó sus dedos por las herida cicatrizada de la mejilla izquierda y dijo: ⁽⁽—Y esto no es más que evidencia de que el mundo en el que vivimos es oscuro, cruel y egoísta, y al más leve rayo del sol lo destruye... Pero que tú fuiste más fuerte y saliste adelante con esta herida de guerra.—⁾⁾
⁽⁽—Harás que me sonroje, Romeo.—⁾⁾
⁽⁽—Entonces no vuelvas a decir tonterías y solo bésame, Julieta.—⁾⁾
Y así, ambos se fundieron en un nuevo beso pero esta vez no era fogoso ni con aire de excitación, sino más bien amor.
Si, hasta los asesinos más desalmados y con las mentes más retorcidas del mundo pueden sentir el sentimiento que todos buscan pero pocos logran tener de manera tan pura, sin importar que tan machadas tengan las manos.
{ ... }
⁽⁽—¿Qué encontraron?.—⁾⁾
⁽⁽—Víctima masculina, de veinticinco a treinta años, fue golpeado con un objeto que le abrió la cabeza, podría ser una roca o un mazo,—⁾⁾ empezó a explicar la oficial de turno ⁽⁽—Pero no murió, se arrastró hasta unos metros hasta que el asesino lo atrajo en esta gran mancha de sangre, aquí es donde le abrió el cuerpo desde el pecho hasta el estómago.—⁾⁾
⁽⁽—Y lo colgó a la rama,—⁾⁾ terminó el alguacil mirando a la víctima ⁽⁽—¿Fue consciente de todo?.—⁾⁾
⁽⁽—Si.—⁾⁾ afirmó con la cabeza agachada
⁽⁽—Hay que atrapar al hijo de perra.—⁾⁾
⁽⁽—¡Capitán!.—⁾⁾ llamó uno de los tres policías recién salidos de la academia
⁽⁽—Will, ¿ya trajeron a los paramédicos y a los sabuesos?.—⁾⁾
⁽⁽—Los mayores dijeron que tardarían en llegar debido a la distancia.—⁾⁾
⁽⁽—¡Demonios!.—⁾⁾
⁽⁽—Pero detectamos el olor a humo, posiblemente un grupo de muchachos que estén acampando en la zona.—⁾⁾
⁽⁽—O el asesino haciéndose pasar por un simple civil.—⁾⁾
⁽⁽—Es un conclusión muy precipitada, guardabosques Kim,—⁾⁾ habló el capitán del escuadrón ⁽⁽—Rowan, Tyler y Will, vayan con cuidado y procuren el bienestar de posibles víctimas.—⁾⁾
⁽⁽—¡Si, señor!.—⁾⁾
Los tres jóvenes comenzaron a adentrarse al bosque sin saber que su capitán se había olvidado de un detalle, un mensaje tallado en el árbol donde se encontraba la víctima: «No entrar a este bosque, un ser misterioso conocido como Slenderman se ha visto recientemente».
Ni el otro escrito a puño y navaja en la espalda del colgado: «Si entra su vida estará en peligro».
{ … }
⁽⁽—Will, ¿ves algo?.—⁾⁾
⁽⁽—No, pero puedo sentir el olor a humo, estamos cerca de la fogata.—⁾⁾
⁽⁽—Ugh...—⁾⁾
⁽⁽—¿Qué te pasa, Rowan?.—⁾⁾
⁽⁽—¿Tú qué crees, Tyler?, ¡estamos en el jodido bosque donde se encuentra Slenderman!, ¡ESTOY CAGADO!.—⁾⁾
⁽⁽—Espero no de manera literal.—⁾⁾
⁽⁽—Pero que gallina,—⁾⁾ habló Will deteniendo su paso ⁽⁽—Esas son solo historias de niños que se creen los graciosos inventando historias cringe y las publican en internet.—⁾⁾
⁽⁽—¡Hey!, se llaman Creepypastas y algunas son muy buenas.—⁾⁾
⁽⁽—Por favor, ¿un hombre sin cara y vestido de traje?, podría hablar de un político y no habría diferencia.—⁾⁾
⁽⁽—Con la diferencia de que uno se ensucia las manos, o mejor dicho, ¡SUS TENTÁCULOS!.—⁾⁾
⁽⁽—¡CÁLLATE, MIERDA!.—⁾⁾
El oficial que se encontraba enfrente negó con la cabeza y siguió caminando.
⁽⁽—Entonces quédense con sus cuentos de fantasía, debo trabajar.—⁾⁾
⁽⁽—¡Will, espérame!.—⁾⁾
El único que se quedó quieto fue el ya mencionado Tyler, un joven de veintiséis años se había recibido como oficial de la policía del Estado de Colorado, y un friki que disfrutaba de videojuegos como el de leer historias en internet, aclaradas recientemente como Creepypastas.
⁽⁽—¿Y perderme la oportunidad de estar aquí?, ¡si, como no!.—⁾⁾
Comenzó a caminar en dirección opuesta a la de sus compañeros para tomar fotos del bosque, una zona muy complicada de ver en la noche pero al ser iluminada con una linterna se podía admirar su belleza natural. Sacó su celular y tomó varias fotos de su alrededor, e inició un vídeo sonando emocionado al relatar que se encontraba en el bosque de las leyendas urbanas del ser conocido como Slenderman.
Ese vídeo fue la única evidencia de su ataque violento y mortal, de no ser porque fue borrado y el dispositivo destruido.
Mientras que los otros dos oficiales siguieron el rastro del hedor a humo llegando a una zona que daba al lago, dos grandes tiendas estaban puestas y una fogata que llegaba a una altura importante rozando lo peligroso.
⁽⁽—Aquí es, pero no veo a nadie.—⁾⁾ habló Will acercándose a las tiendas
⁽⁽—¡Eso es sangre!.—⁾⁾ indicó Rowan señalando la salpicadura de este líquido
⁽⁽—Y estas marcas de arrastre.—⁾⁾ siguió con la vista y soltó: ⁽⁽—¡Mierda!.—⁾⁾
Pronto notaron que no eran troncos largos, eran campistas con sus vidas arrebatadas y sus cuerpos degradados por las llamas que eliminaban toda evidencia de su existencia y del crimen.
⁽⁽—¡Debemos salir de aquí!.—⁾⁾
⁽⁽—No Rowan, hay que quedarnos y encontrar al asesino.—⁾⁾
⁽⁽—¿¡Qué!?, ¡quedarse aquí es una declaración de muerte, debemos irnos a reportar los cuerpos!.—⁾⁾
⁽⁽—¡Si encontramos al asesino y lo detenemos, por fin seremos respetados en nuestra unidad, ya no nos verán como novatos frikis!.—⁾⁾
⁽⁽—¡Vale mierda, nos seguirían viendo igual de imbéciles!.—⁾⁾
⁽⁽—¡Claro que no!.—⁾⁾
⁽⁽—¡Claro que si, estamos discutiendo estupideces en lugar de irnos y traer a más hombres aquí!.—⁾⁾
⁽⁽—Muy cierto.—⁾⁾
Los policías se palidecieron al escuchar una tercera voz, y rápidamente la identificaron comprobando que no era su amigo al voltear sus cabezas. A una distancia prolongada se encontraba un hombre escondiendo su rostro con una máscara blanca con detalles en negro.
⁽⁽—Masky...—⁾⁾ pronunció Rowan orinando sus pantalones
El nombrado no se tomó más tiempo y apuntó a Rowan con una escopeta recortada, Will solo pudo gritar antes de que los sesos de su amigo volaran por la parte posterior de su cabeza. El único con vida se levantó con lágrimas en sus ojos y sacó su pistola para dispararle en el pecho haciéndolo caer perdiendo la escopeta.
Se acercó a paso lento con cuidado de que el contrario sacara un truco bajo la manga, pateó el arma lejos de ambos y le apuntó a la cabeza.
⁽⁽—¡Pon las manos detrás de la cabeza, AHORA!.—⁾⁾ gritó el sobreviviente sin dejar de llorar
El incapacitado obedeció y subió su rostro hacia él sin decir una palabra.
⁽⁽—¡Eso es, mírame a los ojos, maldito hijo de puta!.—⁾⁾
La verdad es que Masky no miraba al oficial, sino detrás de él donde un hacha golpeó sin miedo en su cráneo provocando que soltara su arma y pusiera los ojos en blanco antes de caer al suelo. La figura de Toby se hizo ver con los ojos llenos de ira y odio, se agachó a la altura del policía y le quitó el hacha para comenzar a golpearle el cuello con la fuerza más que suficiente para separarle la cabeza.
No sin antes de escuchar las pobres súplicas de piedad.
⁽⁽—Nadie lástima a Masky.—⁾⁾ le dijo el menor a la cabeza del policía
⁽⁽—Gra-Gracias cariño.—⁾⁾ dijo el mayor quitándose la bala sin cuidado
Toby tiró la cabeza a un lado para luego correr hacia Masky y envolverlo con sus brazos fuertemente, este solo atinó a corresponderle de igual forma.
⁽⁽—Sé que no fue nada para ti, ¡pero no vuelvas a asustarme así, bastardo!.—⁾⁾
⁽⁽—Lo siento, no lo vuelvo hacer.—⁾⁾ exclamó palmeando su cabeza
⁽⁽—Es en serio, estúpido, ¡prométeme que no lo harás otra vez!.—⁾⁾ dijo Toby viéndolo a los ojos
Masky se quitó la máscara y, con una expresión seria llegando a un tono de amargura, le besó la frente para luego sonreírle y hablar:
⁽⁽—Te lo prometo.—⁾⁾
El menor suspiró y recostó su cabeza en el pecho del contrario, exactamente a treinta centímetros arriba en donde le había dado la bala.
⁽⁽—Por un momento pensé que podrías haber muerto.—⁾⁾
⁽⁽—Somos inmortales, Rogers.—⁾⁾
⁽⁽—¡Y-Ya lo s-s-sé!,—⁾⁾ respondió a la defensiva ⁽⁽—Es-s solo q-qu-que... Me sentí molesto cuando vi que ese hijo de puta te había herido.—⁾⁾
⁽⁽—Te preocupas por mí.—⁾⁾
⁽⁽—Ya quisieras, puto.—⁾⁾
⁽⁽—Ya dilo, me amas.—⁾⁾
El de dentadura expuesta calló viéndolo a los ojos fijamente; Tim supo que quería decirle algo pero no podía hacerlo con facilidad, por lo que se bajó la máscara para que Toby no se sintiera tan agobiado y comenzara a tener sus tics nerviosos.
⁽⁽—Dime lo que piensas.—⁾⁾
⁽⁽—Me gustas T-Tim, en verdad m-m-me gustas mu-ucho... Pero no estoy segu-uro de q-q-que sea lo mejor.—⁾⁾
⁽⁽—Toby...—⁾⁾
⁽⁽—¡No, deja que termine!.—⁾⁾
⁽⁽—Como quieras.—⁾⁾
Suspiró profundamente antes de hablar:
⁽⁽—Mi síndrome es molesto, y mi amnesia empeorará con el tiempo.—⁾⁾
⁽⁽—Compré el paquete entero.—⁾⁾
Volvió a quitarse la máscara dejándola caer al suelo y tomó al menor de las manos para sostenerlas firmes, poco a poco se acercó a sus labios hasta que el contrario lo esquivó sin dejar de verlo.
⁽⁽—Me olvidaré de lo nuestro algún día, recordaré lo malo en otro, terminarás por odiarme y me dejarás al final.—⁾⁾
Tales palabras lo descolocaron momentáneamente, pero reaccionó pegándole con fuerza.
⁽⁽—Deja de tratar de asustarme, no siento nada más que ansias por callarte la boca de una buena vez.—⁾⁾
Manipuló la cabeza para quedar cara cara, volvió a acercarse pero se detuvo cuando el menor lo volvió a esquivar.
⁽⁽—Cometes un error.—⁾⁾
⁽⁽—Probablemente.—⁾⁾
⁽⁽—Indudablemente.—⁾⁾
Nada evitó que el mayor acabara la distancia entre ellos con un beso suave, cariñoso, lleno de anhelo y amor. Para terminar convirtiéndose en una fogosa, descontrolada y desesperada muestra de que se necesitaban uno al otro.
Las mordidas, las marcas, las prendas que caían por doquier, los arañazos, los jadeos, los gruñidos, los gemidos, y los líquidos corporales fueron resultado de una elección consensuada por ambas partes quedando registrada en una de las tiendas de las víctimas ya calcinadas.
{ ... }
⁽⁽—Eso fue...—⁾⁾
⁽⁽—¿Maravilloso?.—⁾⁾
⁽⁽—Si.—⁾⁾
La pareja rió y se besaron mientras otros dos individuos enfrente suyos miraban con desagrado y asco.
⁽⁽—Oigan, ¿pueden parar?.—⁾⁾
Pero no fue obedecido, de hecho, pareciera que al escuchar al de capucha amarilla y pasamontañas con el dibujo de una cara triste en rojo, ellos se volvieron más pasionales al punto de unir sus lenguas sin ningún tipo de vergüenza. Y pudieron ver como Masky acariciaba los dientes de Toby con ella.
⁽⁽—Me están causando náuseas, y no de las que me gustan precisamente.—⁾⁾
Aquello hizo que los novios pararan su afecto amoroso para evitar que la muchacha de desalineados cabellos negruzco y máscara blanca con detalles del mismo tono oscuro vomitara en ellos.
⁽⁽—Suficiente tengo con que me copias el estilo, llegas a vomitar en mi cita y te vuelvo una fuente de sangre.—⁾⁾
⁽⁽—Eso quisieras.—⁾⁾
Los enmascarados se vieron como fieras salvajes esperando a que su oponente cometiera un error para zarpar y consumir su cuerpo como victoria del sobreviviente más fuerte.
⁽⁽—Guarden sus garras, gatitas,—⁾⁾ habló el joven de pasamontañas ⁽⁽—Recibí órdenes del Operador, mañana debemos volver a la base y evitar contacto con el exterior, los guardabosques no tardarán en encontrar los cuerpos y llamarán a los policías para que investiguen.—⁾⁾
⁽⁽—¿Se encargará de ellos mañana?.—⁾⁾
el de pasamontañas asintió y Toby soltó:
⁽⁽—Esto se va a poner feo.—⁾⁾
⁽⁽—Más feo te pondrás tú.—⁾⁾
⁽⁽—Palos y piedras me lastimarán, pero no tus palabras, Kate.—⁾⁾
La chica bufó y comenzó a jugar con la mano quemada usando una rama vieja.
⁽⁽—¿Te aseguraste de borrar cualquier evidencia que nos vincule?.—⁾⁾
⁽⁽—Si, una paliza para el oficial, una corbata colombiana para el alguacil, una bala para la guardabosques y todos lo dispositivos en el fondo del lago, nada que nos incrimine.—⁾⁾
⁽⁽—Buen trabajo, Hoodie.—⁾⁾
⁽⁽—Gracias... Kate, vámonos.—⁾⁾
⁽⁽—¿Qué?.—⁾⁾
Aunque no se viera, el de capucha amarilla rodó los ojos para tomar a la chica del cabello y arrastrarla lejos de la pareja de enamorados.
⁽⁽—¡Cuidado con mi cabello, animal!.—⁾⁾
⁽⁽—Te peinas cuando lleguemos, estamos interrumpiendo su cita.—⁾⁾
La pareja sintieron sus mejillas arder y se cubrieron el rostro, Masky con su máscara y Toby con la chaqueta del mayor. Al rato voltearon a verse sin expresar nada en sus rostros, pero al unir sus ojos vieron ese brillo mutuo que indicaba lo mucho que les gustaría estar devorarse la boca del contrario.
Y por supuesto no se resistieron a tal deseo compartido; sin miedo, Masky acarició ansioso la pierna derecha de Toby mientras que él sostenía con una increíble fuerza el rostro del mayor, dejándole en claro que no iba a soltarlo.
⁽⁽—Mierda Cariño,—⁾⁾ suspiró Masky entre los besos ⁽⁽—¿Me estás invitando a tener sexo de nuevo?.—⁾⁾
⁽⁽—Creí que dirías «hacer el amor» como los viejos pervertidos de tu época.—⁾⁾ rió el menor besándole la nariz
⁽⁽—Pues hagamos el amor entonces, mocoso de ojitos lindos.—⁾⁾ exclamó el mayor atacando el cuello del contrario
⁽⁽—No pierdes tiempo.—⁾⁾ carcajeó dejándose hacer por el contrario
Una noche llena de romance, sangre, pasión y amor por ambas asesinas y macabras partes que tras volver a cometer coito decidieron estar juntos por el resto de sus oscuras y podridas vida.
Fue una cita más que perfecta.
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