Capítulo 20

Coramora, 05 de Octubre del 2018

—Parece que tienen a Jane en una rueda de prensa—les dijo Axel llegando con Gino, le dio una mirada curiosa a Griffin—. Ya logramos armar nuestras carpas, o eso creemos, queríamos que T.J las revisara.

T.J los miró con fastidio para luego levantarse de donde estaba sentado y caminar con los dos chicos a revisar su producto armado. Griffin se acercó más a Jane y le tocó su hombro. Jane lo miró y él le sonrió cómplice.

—No te libras de la pregunta, Sanders—le dijo—. O mejor, ¿cómo te llamas ahora? Porque como Jane Sanders no apareces.

—Soy Jane S. Mell—respondió—. S de Sanders, un tanto obvio.

—Mell—dijo Griffin—. ¿Por qué? —ella suspiró.

—Es el apellido de la tía de mi papá, con la que estuve cuando estuvieron aquí buscándome.

—Todavía no logro entender por qué te marchaste—Jane suspiró—. Axel estuvo muchos meses sin querer saber nada de ti, luego quiso encontrar respuestas, por eso te buscó hasta que llegó a un punto en donde le eras indiferente y sólo hablaba a través de las canciones. Pero tú ignoraste todas sus búsquedas, preferiste alejarte de él sin dar una explicación.

—La tenía Griffin, en serio, sólo que es más complicado de entender—mencionó—. Le arruinaría la vida. Conmigo no hubiese sido Axel Trail, quería abandonar sus sueños por mí, y no podía ser egoísta con eso.

—Fuiste egoísta al irte y no decirle por qué—respondió—. Ahora está con Miranda—mintió—. La están pasando increíble, nunca lo había visto de esa forma—la miró de reojo para poder medir su reacción, Jane se movió un poco incómoda y sólo asintió.

—Me alegro mucho—dijo, Griffin sonrió.

—Ves—señaló a Axel quién tenía la mirada en su teléfono—. Está hablando con ella seguramente—hizo un falso suspiro—. Tienes que verlos, le brillan los ojos a ambos. Seguro lo entiendes, te debe pasar lo mismo con Eric.

—Sí, eso suelen decirme—comentó—. Lo de brillar los ojos—suspiró y miró hacia Axel, estaba escribiendo algo en su teléfono y supuso que Griffin tenía razón.

Para el mundo entero, la relación de Axel y Miranda era una de las mejores cosas que había sucedido ese año, dos mundos distintos que decidieron conocerse de forma inesperada. Aunque la realidad era otra, una realidad que sólo pocas personas sabían y que Axel no le había comentado a Jane. Él no salía con Miranda y ella había caído junto con el resto en las mentiras que Howie McDonalds daba.

—Había escuchado rumores de que habían terminado, pero veo que es falso—Griffin asintió.

—Sip, muy falso—respondió—. Axel anda muy flechado y no llevan ni un año, imagino que es verdad lo que dicen: no es el tiempo, es la persona.

Jane asintió sin decir nada y Griffin supo que había dado en el blanco.

~•~

Axel observó a Jane hablar con T.J mientras que ignoraba lo que Gino le estaba diciendo. El castaño movió su hombro quejándose y logrando sacar a ambos chicos de su campo de visión.

—No me estás escuchando.

—Sí, pero no en este momento—dijo con sinceridad, Gino rodó los ojos y lo empujó tumbándolo de la silla—. Deblin Gino—se levantó y se sentó nuevamente.

—Deja de ver a Jane, es el fruto prohibido—respondió, Axel frunció el ceño.

—Yo la veo si me da la gana—respondió, Gino alzó una ceja y luego se echó a reír—. No te rías, no sé ni por qué dije eso de esa forma—mencionó, volvió a ver a Jane para luego dar un suspiro—. ¿No te parece loco esto? Tengo a Jane al frente y me siento con más dudas de las que tenía antes de verla.

—Quizás es mejor si sólo fuese un recuerdo—dijo Gino encogiéndose de hombro—. Pero los recuerdos no siempre te llenan, incluso pueden acabar contigo poco a poco.

— ¿De qué forma?

—Al pensar constantemente en algo—dijo—, todo se vuelve más denso. Te cansa, te hace sentir peor.

—Ella era mi constante "qué hubiese pasado si" —mencionó—. Que hubiese pasado si no hubiese aceptado ir a Leosville, o no estuviese en Kloss o si no hubiese sido castigado esa primera vez en clases.

—No serías el Axel que conozco hoy en día.

—No sería ni la sombra del Axel que soy ahora—respondió—. No sería amigo de ustedes, no conocería a Jane, no tuviese a Griffin en mi vida. Me gusta la vida que escogí, con o sin Jane.

—Pero ahora es un con, ¿no?—Axel miró a la chica.

—No lo sé, tengo muchas dudas.

—Eric es una de ellas—Axel asintió—. Sé que Griffin en algún momento no se contendrá y se lo preguntará, cuando pase te lo dirá; cotilla se nace no se hace. Hablando del rey de Roma—mencionó observando cómo Griffin se acercaba.

—Jane S. Mell—comentó el pelinegro—. Su nombre actual es ese, por eso no podíamos encontrarla. Cambió todo, tanto legal como social, Jane Sanders murió en el 2009.

—Vaya—pudo decir.

—Sí, vaya—continuó—. Es loco porque siento que estuvimos perdiendo el tiempo buscando a alguien que ya no existe.

—Bueno, realmente sí existe—dijo Gino, Axel negó.

—No, la chica que conocí ya no existe—dijo serio—. No es la misma, no es ni lo más cercano a ella. Y quizás si esto hubiese pasado hace varios meses atrás, lo más probable es que habría decidido alejarme; el Axel de unos meses sólo quería encontrar a su Jane, pero esa Jane no existe, sin embargo, el Axel de hoy quiere conocer a esta nueva chica, quiere iniciar desde cero con ella.

»Decidí que no me importa lo que haya sucedido, sólo quiero disfrutar el tiempo que ella decida quedarse conmigo.

~•~

Coramora, 07 de Octubre del 2018

Jane se encontraba mirando la televisión en su sala cuando el timbre sonó. Pensó que podía ser Eric que, a pesar de tener llave siempre prefería tocar el timbre, pero cuando abrió se sorprendió al ver a su más grande miedo parado al frente de ella.

Howie McDonalds.

Ahí estaba otra vez, ¿será que la había descubierto?

Howie pasó sin esperar la confirmación de la chica y Jane no dijo nada al respecto, no era la primera vez que la visitaba desde la primera vez que la amenazó, pero había pasado mucho tiempo de la última vez que lo vio. Él le había escrito un mensaje hace una semana pero ella prefirió ignorarlo, así que imaginó que por eso estaba ahí.

—No respondiste mi mensaje, ¿será que no me recordabas? —preguntó y le dio una mirada de superioridad.

—Pensé que lo había hecho.

—Sí, imaginé que se te había pasado, por eso estoy aquí—le dio una mirada a su casa—. Pintaste las paredes desde la última vez. Vine a hablar sobre Axel.

— ¿Sobre Axel? —fingió no entender y deseó que él no supiese que estaba viéndolo a escondidas.

—No ha estado escribiendo últimamente, casi todas las canciones de este nuevo álbum son compuestas por los demás chicos, así que necesito que te aparezca de forma repentina un día, y luego vuelves a alejarte como sabes hacerlo—Jane alzó una ceja.

—No soy tu juguete para que la estés moviendo a tu manera—respondió—. Y Axel no merece ser utilizado como una máquina de escribir canciones.

—Es por el bien del chico.

— ¿Por el bien de él o el bien de tu bolsillo? —preguntó seria, Howie cambió su expresión a una más apática—. No te tengo miedo.

—Pues deberías—respondió—. Kloss estará el martes en la feria firmando un par de autógrafos, quiero que te pases por ahí y que Axel te vea. Intentará hablar contigo y tú lo rechazarás, quiero que lo hagas llorar para que pueda escribir sólo como él sabe hacerlo.

— ¿Y qué si no lo hago?

—Tú sabes qué sucederá si no lo haces, Jane.

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