Me sentía agotada, las plumas iban y venían a gran velocidad, junto con una gran cantidad de fuego.

Mis piernas comenzaban a flaquear.

- Oi, baka, no te esfuerces tanto -hablo Bakugo presionando su puño sobre mi espalda-

- Gracias Kaachan -mantuve mi rostro serio, el asintió para de nuevo seguir con los robots hasta que estos se detuvieron-

- Que extraño -susurró Kirishima, yo caí rendida al suelo, regrese mis plumas sintiéndome más libre para volar-

Una fuerte explosión nos hizo alarmarnos, levante la mirada para ver como un gran pedazo de concreto venía hacia nosotros.

Iba atacar Katsuki pero Todoroki se interpuso para destruir el concreto sin hacernos daño. Tome la mano de Bakugo antes que hiciera alguna tontería.

- Estas cansado, debes mantener tu energía en caso de que algún enemigo se interponga, puedas usar ese poder explosivo para derribarlo enseguida

«Tiene razón el bicolor debo admitir»

Como tenía que ser, Bakugo se infló por ese comentario.

- Tampoco te creas tan importante -le encaje una pluma en su cabeza bajándole los humos-

Sentí que tenía energía de nuevo a lo que puse plumas en cada uno y los elevé para ir enseguida afuera donde se originó la explosión.

- Allí están! -gritó Kirishima, Deku y All Might peleaban contra el enemigo-

- Yuki, llévame con ellos enseguida -dijo Todoroki, yo asentí para llevarlo a gran velocidad para ver cómo el detenía un ataque con su hielo-

Comenzamos a ayudarle a Deku para que no fuera atacado por el enemigo, pero vimos cómo este crecía, haciéndose demasiado gigante para todos nosotros.

Pero Deku y All Might no se rindieron, ambos lograron derribar el enemigo.

Conseguimos mantener el orden en la isla, pensamos que nos regañarían por actuar sin órdenes de un mayor pero no podíamos quedarnos con los brazos cruzados, como los héroes que próximamente seremos necesitamos actuar cuando se necesite.

Realmente se que fueron unas vacaciones muy extrañas ya que dentro de un día sucedieron muchas cosas, pero al siguiente pudimos aprovechar un poco lo que es la isla, comidas, museos, entre otras cosas. Tuvimos que irnos ya que nuestro vuelo saldría pronto, yo a la vez ya quería irme para ver a Aizawa, lo extrañaba mucho.

En tan poco tiempo se ha convertido en alguien muy importante para mi.

- Joven Takami, es hora de irnos -aviso All Might con una sonrisa en su rostro-

- Claro All Might, vamos -tome mi maleta para comenzar a caminar para el avión, Deku ya estaba listo a lado de Toshi-

El peliverde seguía pensando acerca de lo que sucedió ayer, se entiende, realmente fue algo asombroso pero también ya sabe lo que puede pasar pronto.

El retiro de All Might.

Aunque esperemos que sea dentro de un tiempo muy lejano, la realidad es que ya está casi a la vuelta de la esquina por como va avanzando el golpe y cómo afecta su tiempo de transformación.

Deku ya tiene que hacerse fuerte.

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Ya en el aeropuerto yo y Deku nos fuimos por separado, All Might para no causarnos problemas se fue antes que nosotros con su típica transformación.

Me encontré de entre la multitud un Aizawa ya recuperado y con su rostro serio.

- Aizawa! -sonreí para volar hasta el y abrazarlo con emoción-

- Ya tardaban mucho -Deku aún era muy nervioso cuando estaba ante Aizawa a lo que el se mantuvo un poco alejado-

Vi como ya llegó la mamá de Deku y Aizawa se mantuvo como el profesor, yo ya estaba a su lado con mi maleta.

- Muchas gracias Aizawa-sensei -hacía reverencias mientras se ambos se retiraban-

- Vámonos niña -hablo Aizawa tomando mi hombro-

Asentí y comenzamos a caminar para salir del aeropuerto. Nos dirigimos a un carro negro con vidrios polarizados y subimos.

Subí mi maleta a la cajuela con ayuda de mis plumas, tenía miedo que si lo cargaba Aizawa podría lastimarse de nuevo.

Llegamos a casa.

Casa.

Realmente tenía una casa? Digo, vivo con Aizawa, pero puedo ya tomarla como mi casa? Hogar? El dijo una vez que era mi tutor provisional, no se si lo separaran de mi o cuando cumpla la mayoría de edad me pueda ir de aquí.

- Yuki? -escuche a Aizawa, voltee a verlo asustada ya que me agarró muy adentrada de mis pensamientos-

- Perdón, qué pasa?

- Te preguntaba que si querías algo de comer pero creo que estás ocupada pensando en algo

- Yo, perdón...-baje la mirada para luego voltear hacia la ventana-

- Sucedió algo que no me hayas dicho?

- No, algo personal no -suspiré- pero...pa, puedo decirle casa a tu casa? -pregunte y el se quedó en silencio-

- Se que te dije que era tu tutor provisional, pero peleare contra todos para tenerte bajo mi protección y mi techo -yo voltee a verlo sorprendida-

- Gracias Aizawa -abrace su brazo con delicadeza-

Al llegar a casa deje mis cosas en mi cuarto para tirarme a la cama boca abajo, me sentía muy exhausta.

Sin querer me quede dormida, un sueño muy cómodo y relajante, donde la única imagen que tenía en mi cabeza era el cielo azul con nubes y el aire corriendo.

Solo era yo.

Disfrutando la brisa, mis pies sintieron algo muy extraño, al bajar la mirada vi que estaba en la playa. La arena entre mis pies y el agua salada golpeándome levemente era como masaje para ellos.

Mis alas se abrieron dejando que mis plumas bailen con el aire.

Mis ojos se cerraron ante la satisfacción de la escena.

- Que feliz me siento -susurré-

Al despertar sentí como se movió mi cama levemente, abrí mis ojos y vi a Aizawa quien estaba a mi lado con su mano sobre mi hombro.

- Perdón, no quería despertarte -negué-

- Ya había terminado mi siesta

- Siesta? Yuki, ya es otro día -dijo con una sonrisa-

- Que?! -tome mi celular, Aizawa tenía razón, ya era el siguiente día-

- Venía a checar que no estuvieras muerta -bufé y puse mi cara de nuevo en el colchón- ven, vamos a que desayunes algo

- No quiero -susurré pero el me tomó de la muñeca y me arrastro por la cama-

Al estar en la orilla decidí moverme y pude levantarme a tiempo antes de caer al suelo.

- Oi! -Aizawa sonrió y yo solté una sonora risa-

- Anda, a comer algo pajarita -ese apodo era nuevo, me gusta mucho-

Suena muy lindo.