(Foto para que se den una idea de como es la prota, tiene el color de ojos iguales que hawks nada más que su cabello es negro y es un poco mas blanca que su hermano)

Día Siguiente

7 P.M.

Me encontraba arreglándome con un vestido negro para el funeral, me puse unos zapatos negros y para finalizar me coloque un poco de perfume.

- Listo nee-san -el tenía una camisa negra con un pantalón de vestir y zapatos negro-

- Vamos -tome el paraguas antes de salir ya que se veía nublado-

Vi a Bakugo salir de su casa vestido de negro.

- Espera -asintió y fui con el-

- Te acompañare

- Gracias -sonreí ligeramente-

Teigo se fue volando mientras que yo y Bakugo nos fuimos caminando, no era tan lejos.

- Cómo estás? -suspire-

- Bien, supongo -el bajo la mirada y tomo mi mano-

Era un apretón fuerte y con seguridad.

Me transmitía confianza y fuerza.

- Gracias Bakugo -sonreí y me apegué mas a el-

Realmente necesitaba a alguien para apoyarme, me sentía muy débil, no podía estar así por mucho tiempo.

Al llegar ya estaba el ataúd de mi madre sobre la tumba.

- Algunas palabras que quieran dar? -pregunto el padre-

- Yo -me levante y me puse en frente del ataúd viendo la foto de mi madre sonriendo- ella es la persona más fuerte y valiente que he conocido en mi vida, entro a salvarme en una situación donde era muy complicado pasar, ella entro con un extintor y detuvo a mi padre -puse mi mano en su ataúd- me hizo un hermoso traje de héroe antes de todo lo que paso, creó que esto ya lo tenía planeado, pero decidió soportar unos días más para poder tener algo antes de que se fuera -tome aire mientras las lágrimas comenzaron a salir- agradezco haberte tenido durante vario tiempo y darme la fortaleza que a ti te faltaba, agradezco también todos los consejos que me diste, las risas que compartimos y también las lágrimas -mi voz comenzó a romperse- Muchas Gracias Mamá

Regrese a lado de mi hermano y de Bakugo para luego ver como el ataúd comenzaba a bajar lentamente.

Luego de irnos decidí salir un rato con Bakugo, subir de nuevo al techo donde nos sentamos ayer y abrí el paraguas ya que comenzó a llover.

Estábamos muy juntos, el paraguas lograba taparnos de la lluvia aunque mis alas también nos tapan ligeramente de algunas gotas.

- Como estas? -susurro y yo voltee-

- Bien, esa despedida me hizo sentir que mi madre también se despidió de mi

El puso su mano sobre la mía y la entrelazo.

Decidí estar en silencio mientras escuchaba la lluvia seguir cayendo.

No me siento triste, ni feliz, es un estado neutro.

Cerré mis ojos para entregarle el paraguas a Bakugou y soltar su mano.

- No te asustes -el iba preguntar cuando de repente me tiro del edificio-

El aire chocar contra mi rostro, las gotas parecían quedarse estáticas, me quería sentir viva de nuevo.

Quería sentir algo.

Abrí mis alas y regrese con Bakugou.

El me veía algo sorprendido pero al parecer entendía mi dolor.

- Ten, no te vayas a resfriar -me puso su saco y decidí irnos de allí-

- Vamos, quiero comer -sonreí y lo lleve con varias plumas en la parte trasera de su camiseta debajo de mi para que no se mojara-

- Si alguien me viera así perdería mi orgullo para siempre y mi dignidad -yo comencé a reír, era lo más gracioso que había escuchado decir de Bakugou-

Al llegar seguía riendo.

- Ojalá -intenté calmarme- no te hayan visto -tome aire y lo solté con una sonrisa- al parecer si eres gracioso

- Yo soy gracioso! -me grito molesto pero yo seguía con mi sonrisa ahora burlona- tsk, mi mama probablemente ya tenga la cena, quieres pasar?

- No quiero ser una molestia -el me tomo del brazo y me llego- Bakugo!

- Mamá traje a una amiga -dejo sus tenis tirados pero intente arreglarlos, yo los deje a su lado-

Tenía el mismo aspecto de Bakugo.

- Hola -dijo con una sonrisa- y tu?! Donde estabas? Mínimo avisame! -le dió un golpe en la cabeza y luego Bakugou se molesto-

- Tuve que salir vieja! -ella le metió otro golpe-

- Disculpe, fue mi culpa, un familiar mío murió y necesitaba su apoyo -ella paro y su rostro se tranquilizó-

- No te preocupes, mi mas sentido pésame

- Muchas gracias -ella quería preguntar otra cosa pero se lo decidió guardar- usted conocía a mi mamá?

- Fue ella?

Asentí.

- Oh -suspiró para luego hacer una pequeña mueca-

- Quien es...-era el papá, tenían el mismo tipo de cabello-

- No quisiera ser una molestia -dije algo nerviosa pero Bakugou me tomo de la mano parándome-

- No eres una molestia, pequeña -vino con nosotros- íbamos a cenar, quieres comer algo?

- Si, la invité para comer aquí -dijo antes de que abriera mi boca-

- Ven, siéntate -intenté no tirar nada con mis alas-

- Que hermosas alas -mencionó la mamá-

- Muchas gracias -sonreí-

- Cual es tu poder?

- Puedo manipular las plumas con mi mente -salió una y fue al cabello de Bakugo para alborotarlo- también puedo sentir las vibraciones y puedo escuchar ligeros sonidos

- Suena muy buen quirk, se ve que serás una gran héroe -sonrió la señora-

- Muchas gracias Señora Katsuki -sonreí a lo grande-

- Dime Mitsuki -dijo mientras me entregaba el plato con comida-

- Muchas gracias Mitsuki-sama

Luego de servirle a Bakugou y a su papá comenzamos a comer.

Al terminar vi como Bakugou ya había terminado.

- Bueno, ahorita regreso -su mama se quejo y yo la mire haciéndole señas que no se preocupara-

Salimos de su casa y el suspiro.

- Esa vieja -yo comencé a reír-

- Amo a tu familia -lo abrace-

El se quedo estático.

Al querer separarme sentí como el me respondió el abrazo más fuerte, tenía una mano en mi cintura y otra en mi cabello.

Luego de ese hermoso abrazo me dejo en la puerta de mi casa para luego tomarme fuerte de la cintura y plantarme un beso.

- Para que no me olvides -sonreí y se fue-

Vaya forma de despedirse.