-Maldita sea- Hestia saltó de la cama, sobresaltando a Valerie, quien se incorporó sobre sus codos, antes de bostezar sorprendida.

-¿Qué te pasa?- preguntó la rubia sin comprender.

-Son las tres, Valerie, las tres...

-¿Qué con eso?- preguntó Rachel desde la cama de Lily- Es domingo, Hest, no creo que alguien nos eche en falta unas horas.

-He quedado con Macavoy en la biblioteca para estudiar- contestó mientras se calzaba sus zapatillas, agarró un poco de ropa informal y se ató el cabello en un desprolijo moño sobre la cabeza- ¿Dónde demonios han quedado mis abrigos?

-Están para lavar- contestó Lily sin despegar los ojos, intentando estirar su siesta.

Hestia se movió sobre sí misma sin razón hasta que sus chocolates se toparon con la chaqueta de Remus, que seguía en el rincón, lejos de todo lo que había pasado en la madrugada.

-Tiene que ser una broma- se rió de la ironía, antes de tomarla por el cuello, coger sus libros y salir de la sala común hecha un rayo.

Jamás había corrido tanto por los pasillos de Hogwarts como hasta ese momento. Conociendose a sí misma, que no iba a poder estudiar con el estomago vacío, tomó un desvío hacía lacocina.

-¿Qué desea comer la ama Robinson?- preguntó una elfina cuando Hestia entro derrapando delante de ella. Su actitud era bastante común por lo que no sorprendió a nadie.

-Un café, muy cargado y sin azúcar- pidió jadeando por la falta de aire- Y donas de chocolate, al menos cuatro. Ponlas en una bolsa, me las iré comiendo de camino a la biblioteca.

-¿Sin tiempo para comer, Hest?- la voz de James a sus espaldas le hizo gritar y pegar un salto hacia delante. Se giro hacía él con el ceño fruncido cuando se recompuso- ¿Qué te pasa?

-Me has asustado- contestó casi ladrandole, mientras aferraba los libros contra su pecho. Las figuras de Remus, Sirius y Peter rápidamente aparecieron detrás de él, provocando que tragara en seco ante la sorpresa- ¿Qué estáis haciendo en las cocinas? Pensé que ustedes habían tenido tiempo para comer.

-Lo tuvimos- asintió Remus, clavando sus ojos en ella- Pero nos concentramos más en discutir ciertas cosas que en almorzar.

El aliento de Hestia se arremolinó dentro de su boca antes de poderlo exhalar.

-¿Qué cosas?- si bien no tenía una real curiosidad por miedo a lo que podían decir, sería extraño que no preguntara si no ocultase nada de ellos.

-Hoy en el almuerzo han dado un anuncio bastante alarmante, por cierto- comentó Sirius, como quien no quiere la cosa- Dijeron que un grupo de cuatro personas encapuchadas se metieron dentro de la sala común de slytherin, revolvieron todo y luego de petrificar a los alumnos presentes desaparecieron sin ser vistos... Obviamente hemos sido interrogados, porque todos piensan que fuimos nosotros. Juraría que incluso los slyhterin piensan que fuimos nostros- su mirada se detuvo fugazmente en el pecho de ella, donde estaba la marca de la M merodeadora en su chaqueta- Es extraño, porque no recuerdo haberme levantado en la madrugada a hacer una cosa como esa.

-Todos sabemos que eres sonámbulo, Sirius- sonrió tensamente la castaña, aferrando el libro contra su pecho.

Peter la miró.

-Sí... Claro.

-Pensé que nadie se atrevería a hacer una cosa como esa sin ser nosotros- dijo pensativo James, cruzándose de brazos- Pero al parecer alguien tiene las armas necesarias para poder multiplicar nuestras travesuras.

-¿Cómo estás seguro de que fue una travesura?

-¿Quién en su sano juicio entraría a la sala común de slytherin a hacer eso? Nadie que nosotros conozcamos. No se han llevado nada y las serpientes solamente terminaron petrificadas sin recordar nada. Su sala común estaba hecha jirones, Hestia, es obvio que ha sido una travesura.

-Y han utilizado nuestra marca- gimoteó Peter- Han ido a las ligas mayores de las bromas. Nos están tocando el orgullo con esto.

-Cuando averigüemos quienes han sido...- pero Remus se quedo en silencio, ya que la elfina apareció dándole su comida a Hestia, provocando que la sonrisa tensa en el rostro de la castaña se convirtiera en una real de agradecimiento- ¿A dónde llevas esa comida?- preguntó, viendo que no iba a quedarse.

-Es para mí- contestó en un suspiro, feliz de que ya se podía retirar- Totalmente para mí.

-¿A dónde vas?- preguntó entonces James, cerrando su mano sobre la muñeca de ella- ¿Porqué tanta prisa?- dio un paso hacía delante- ¿Dónde están las chicas?

-¿Por qué tantas preguntas?

-Soy tu mejor amigo, Hestia, quiero saberlo.

Ambos se miraron estrechamente.

-Las chicas están durmiendo todavía- contestó mientras se deshacía del agarre- Y yo llego tarde a mi cita con Macavoy- internamente se mordió la lengua, sabiendo que esas palabras iban a causarle problemas más tarde.

-¿Brandon Macavoy?- vaciló James mientras sus ojos se ensombrecían.

-Sí, bueno, adiós- esquivándolo, como si se tratara del peor enemigo, aferró los libros a su pecho y las donas con el vaso del otro lado de su brazo, antes de empujar la puerta con sus hombros y salir nuevamente a los pasillos de Hogwarts.

-Hey, Hestia- aquella voz llamándola solo provocó que sus ojos se pusieran en blanco y que girara sobre sí misma, para encontrarse con Marcus Belby, el prefecto de lacasa de Ravenclaw. ¿Acaso se iba a cruzar con alguien más esa tarde?- ¿Sabes dónde está Rachel? La he estado buscando durante toda la mañana y sus compañeras de dormitorio me han dicho que no durmió allí.

Intentó disimular su tono, pero se le notaba en la mirada que estaba completamente alarmado.

-Ah- se mordió el labio, sintiendo que las cosas en sus brazos estaban pesando demasiado- Paso la noche con nosotras. Hace tiempo que no teníamos una noche de chicas y bueno, justo anoche se dio la oportunidad.

-Vaya- el moreno asintió, suspirando de alivio- Me olvidaba que ella suele reunirse con ustedes en la salacomún de gryffindor.

-Sí, bueno...

-¿Quieres que te ayude con eso? Veo que pesa mucho.

-Ah, gracias, Marcus- asintió demasiado cansada para seguir mintiendo en busca de una escapatoria. Le pasó sus libros- Estaba yendo hacía la biblioteca.

-¿Y eso?- preguntó, alzando una ceja sorprendido.

-De vez en cuando estudio- contestó mientras le daba un sorbo a su café- Demasiado amargo- murmuró para sí misma haciendo una mueca- Me reuniré allí con Brandon Macavoy.

-¿DCAO?

-Exacto- asintió- ¿Cómo lo sabes?

-Es uno de los mejores en esa asignatura- dijo, hundiéndose de hombros- Me gusta para ti, es un buen chico.

-Detente- dijo sonriendo de manera tirante. Entre ellos existía una relación bastante cordial, sobre todo porque el joven ravenclaw se esmeraba con las amigas de Rachel- No es como si tuvieras que aprobarlo.

-Prefiero aprobarlo yo a que lo apruebe James, Hestia. Sabes que dentro de tus amigos él es el más celoso.

-Ni que lo digas- se burló, poniendo los ojos en blanco de solo recordar su reacción de tan solo unos minutos atrás.

-Además Macavoy es prefecto, suma varios puntos.

-Solo lo dices por qué tú lo eres- le codeó, sonriendo.

-Vale, haré como que no dijiste eso.

-¿Cómo te va con Rachel?- preguntó, cambiando de tema.

-Ja, me gustaría saberlo- murmuró, derrotado poniendo los ojos en blanco- Todo es muy complicado con ella, ¿sabes? Cualquiera pensaría que es muy fácil hablar con Rachel, pero no es así. Es obstinada y orgullosa, no me perdona haber ido con otra chica al baile de Halloween aunque ella haya rechazado mi invitación.

-Pero de todos modos te gusta.

-Demasiado- admitió sacudiendo con una mano sus negros cabellos- Pero siento que en ocasiones no puedo con nuestra no relación. Quisiera salir con otras chicas y olvidarle. Pero demonios, estamos hablando de Rachel Collingwood. Ella es única para mí entre todas las chicas de Hogwarts.

-Creo que deberías seguir luchando por Rach, Marcus, yo creo que también gusta deti.

-Solo tengo que superar una gran etapa aún.

-¿Qué ella admita lo que siente?

-Peor... Convencer a Peter, junto con el resto de los meroadores, que soy bueno para ella.

Hestia se largo a reír.

-Vale, eso sí que es una mierda. Pero podrás hacerlo. Puedes llegar a Sirius a través de Valerie y puedes llegar a James y Remus a través de Lils, es fácil. Peter terminará cediendo al final si ella se ve feliz. Lo importante es que Rachel ceda.

-Me gusta hablar contigo, Hestia, hace tiempo que no lo hacíamos.

-Soy una mala amiga- pasando un brazo sobre sus hombros, le atrajo para besarle la mejilla- Prometo recompensarte la próxima.

-¿Tomarías algo conmigo en la próxima salida a Homesgade?

-¿Ya se sabe cuándo podremos volver?- preguntó abriendo los ojos como platos- Vale, entonces sí.

-Nos vemos luego- besándole la frente, le entregó los libros- Suerte con tú cita.

-No es una cita- protestó, viéndole irse, antes de entrar a la biblioteca como un rayo, buscando entre los estantes el cabello rubio de Brandon.

-¿Hestia?- preguntó una voz a sus espaldas, provocando que ella girara sonriendo- Pensé que ya no ibas a venir.

Su expresión era divertida, pero se le notaba cansado.

-Lo siento mucho- apoyó sus cosas al lado de las de él, sonriendo- Me dormí.

-Y pasaste por las cocinas- apuntó Brandon sonriendo, lo bastante para que la mente de Hestia se turbara unos segundos.

-¿Una dona?- cuestionó, estirando la bolsa hacía él, provocándole una encantadora sonrisa como respuesta.

***_***_***

-Todo el maldito colegio ya sabe lo que ha pasado- se easperó Valerie mientras las tres se sentaban en uno de los bancos del patio exterior- Es sorprendente que los slytherin lo anunciaran a viva voz en el almuerzo.

-Lo sé- asintió Lily, abrazándose a sí misma para conservar el calor en su cuerpo. Tenía su gorra hasta por encima de las cejas, pero no podía evitar pensar que lo que más le reconfortaría sería la bendita chaqueta de James, aunque reconocía que no era buena idea llevarla en ese momento.

-Es fascinante ver como nuestro último año en Hogwarts se ha jodido por completo.

-No digas eso, Val- le detuvo Rachel mirándole sobre su hombro- Todavía nos quedala mitad del año.

-¿Crees que esto mejorara? 

-¡Valerie!- reprochó Lily, mirándole verdaderamente mal.

-No soy ingenua, Val, solo tengo esperanza de que este jodido infierno en algún momento vaya a terminar- susurró, abrazandose a sí misma- Nosotras somos las culpables de la mayoría de estas cosas. Fuimos nosotras quienes buscamos a los slytherins y seremos nosotras las que tarde o temprano nos enfrentaremos a ellos.

-Nadie va a hacerte daño, Rach- Valerie le atrajo hacia sí, provocando que la cobriza ocultara el rostro contra su pecho- Les prometí que eso no pasaría y no pasará.

-¿Cómo puedes estar segura?

-Tú tienes tus esperanzas y yo tengo las mías.

-¡Chicas!- la voz de Donovan logró devolverlas al mundo de estudiantes, chismes y risas de Hogwarts. Alegremente, el castaño se acercaba a ellas con una de las manos metidas dentro de su bolsillo delantero mientras que la otra aferraba libremente el libro de pociones que habían sacado de los aposentos de slytherin- Creo que esto es suyo- sonrío, agitándolo delante de sus ojos.

-Gracias por lo de hoy- dijo Lily mientras colocaba un mechón de cabello pelirrojo detrás de su oreja y se hacía a un lado, dándole espacio- No sabes la escapatoria que nos has brindado.

-He venido a saber exactamente eso- contestó, mientras dejaba el libro sobre las piernas de Valerie- ¿En qué demonios se han metido? ¿Eh? Todo el colegio se ha revolucionado por cuatro misteriosos personajes que se han metido en la sala comúnde slytherin y les han hecho perder la memoria a los que estaban involucrados ahí. Cabe destacar que yo vi desaparecer las chaquetas de los chicos en tus manos, Valerie, porque aún me mantenía despierto y por lo tanto sé que no fueron los merodeadores.

-Hemos sido nosotras- asintió la rubia, bajo la mirada de las dos prefectas- Nos hemos metido en la sala común de slytherin y hemos cogido el libro que me acabas de dar.

-¿Por qué?- los ojos de Donovan parecían una centrifugadora mientras asimiliaba la información.

-Ahí está el hechizo que me hicieron, Don, también su creador- contestó, hundiéndose sobre sí misma bajo la mirada acusadora del castaño- Ha sido Severus Snape.

-¿Snape?- jadeó Donovan mirando de reojo el libro- ¿Ese cabrón fue quien te hechizó?

-Algo así.

-¡Valerie no le cubras!

-No le estoy cubriendo, Donovan- gruñó, apretando las palmas de las manos contras los muslos de sus piernas para calmarse- Pero te conozco. No puedes ir allí y pedirle explicaciones, ¿vale? Ya es demasiado con que ellos sepan que hemos sido nosotras...

-Alto ahí- Donovan alzó la mano y miró a las chicas- ¿Ellos saben que fueron ustedes cuatro? ¿Cómo puede ser eso posible?

-Ellos estaban atacándome verbalmente y Hestia estalló- murmuró Lily jugando con sus dedos de manera nerviosa- Luego simplemente cayeron en la cuenta de quiénes éramos las demás.

-Mierda.

-Pero me he encargado de que no recuerden- apuntó la pelirroja- Les hechicé para que en sus mentes la imagen de nosotras fuese borrosa, que no supieran diferenciar si eran hombres o mujeres los que habían robado el libro.

-¿Saben lo del libro?

-No tuve el tiempo suficiente para borrar eso también- rodó los ojos- Hestia me jaló yme desconcentró. Después simplemente tuvimos que salir de allí.

-Ellos me vieron con el libro- murmuró llevándose las manos a la cabeza- Me crucé antes de venir para aquí con Malfoy y el chico Carrow, ellos me vieron con el libro. Seguramente piensen que yo fui uno de los que entró.

-¡Donovan!- se asutó Rachel, sintiendo que se iba a largar a llorar en cualquier momento.

-Rach no te mortifiques, ¿está bien?- apretando su mano, le dedicó una sonrisa cariñosa- Yo he decidido meterme en esto con ustedes en el momento en que tome el libro esta mañana delante de toda la sala común... que seguramente una cabos y consideren que sea yo el mejor culpable. Bueno, esto era obvio que sucería en algún momento teniendo en cuenta que duermo con los merodeadores.

-Si es así... ¿Con quién te involucraran?- preguntó Valerie, viendo a su casi cuñado directo a los ojos- Porque si tú eres uno, faltaran los otros tres.

-Supongo que con Fabian Prewett, Chace McLaggen y Patrick Vane- respondió como si no fuese obvio- Ellos son mis amigos.

-Donovan tienes que cuidarlos- dijo Lily, alterandose- Ahora son ellos los que estánbajo el foco.

-Podríamos decirle a ellos también...- aventuró Rachel, apretando los brazos a ambos lados de su cuerpo.

-No, no quiero que más personas sepan que ustedes fueron las que se involucraron con los slytherin- negó Donovan seriamente- Yo veré qué hacer para decirles que se cuiden ahora. Ellos no tendrán problemas con cubrirme si les digo que fui yo...

-Pero no fuiste tú...

-Bueno, Lily, en ocasiones es mejor suponer ciertas cosas- dijo, sonriendo con amabilidad- No podría tolerar que algo les pasara a ustedes cuatro, son como mis hermanas.

***_***_***

Sentía la mirada azul de Brandon recorrerle el costado del rostro, ese que ella disimulaba en dejar de poner tenso cada pocos segundos. Delante de ella estaba terminada la tarea de todo el mes para DCAO y seguramente en el pergamino que se ocultaba debajo de uno de sus libros estaban todas las respuestas del examen mezcladas con algunas otras líneas para rellenar. Debía de admitirlo: Brandon Macavoy era un maldito genio en aquella materia.

-Creo que hemos terminado por hoy- le sonrío él antes de cerrar su libro y meterlo con elegancia dentro de su mochila- Espero que hayas entendido.

-¿Entendido? Tengo un manual de DCAO metido dentro de la cabeza.

-Vale, mejor así- volvió a sonreír, turbándola por unos segundos.

-Te agradezco mucho que hayas tomado la iniciativa para ayudarme con esto- dijo, mientras ambos se levantaban y tomaban sus cosas- Si no lo hubieras hecho te aseguro que el resultado jamás sería el mismo.

-Espera a ver primero, no te emociones.

-¡Ya estoy emocionada! Tengo confianza de que salvaré el examen con la mejor nota de la clase... Bueno, la mejor después de Lily y tú, claro está.

-No sabía que eras tan confiada de ti misma.

-No sabes muchas cosas de mí, Brandon...- murmuró, sintiendo como sus mejillas se ponían rojas de golpe- Digo, puede que...

-Ya, no hay problema- contestó, dedicándole una sonrisa sofocante, de esas que hacía que las chicas en los pasillos pegaran gritos estridentes y que más de una desfalleciera. Sí, seguramente Brandon podía considerarse como un Sirius Black dentro de Hufflepuff- ¿Qué harás en la próxima salida a Homesgade? 

Los ojos de Hestia se abrieron como platos.

-Eh... Pensaba almorzar con Marcus Belby.

-¿El prefecto de Ravenclaw?- preguntó él, algo sorprendiendo, deteniendose para mirarla.

-Ese mismo- asintió, sonriendo.

-Pensaba que estaba saliendo con Rachel Collingwood.

-No salen, ellos simplemente...- deteniéndose, giro rápidamente hacía Brandon, provocando que el chico casi chocara contra ella. Tras unos segundos se había percatado de cómo habían sonado sus planes- Nosotros no estamos juntos ni nada de eso, es que somos amigos y planeamos salir solamente para ponernos al día.

-No tienes que darme explicaciones, Hestia- negó, intentando mantener la sonrisa.

-Ya, es que no quería que entendieras mal las cosas- murmuró, mordiéndose el labio- ¿Quieres quedar conmigo?- pregunt{o entonces, apretando los libros contra un lado de su cadera- Sé que soy una problemática y esas cosas, pero...- y sus labios se detuvieron, seguida de su mente, en el momento que Brandon presion{o sus labios contra los de ella.

-Claro que me encantaría ir contigo- asintió luego de dejar de besarla, sonriendole.

***_***_***

-¿Dónde ha quedado Hestia?- preguntó James enseguida al ver aparecer a Lily, Valerie y Donovan. Los cuatro merodeadores estaban sentados alrededor de la chimenea, aspirando todo el calor posible que pudiese salir de ella mientras que los otros tres gryffindor entraban mirándose seriamente.

Agradecieron que Rachel no estuviera con ellos, ya que seguramente se hubiese quebrado tras la mirada inquisidora que él les dedicaba.

-Me voy a esconder el libro a mi cuarto- susurró Donovan antes de palmear el hombro de Valerie y salir corriendo hacía las escaleras de los dormitorios de los chicos. 

Las dos chicas le quedaron mirando, deseando poder ir detrás de él sin parecer sospechosas.

-¡Hola!- James movió la mano delante de sus rostros, reclamando atención.

-No seas molesto- Lily le golpeó en el hombro.

-No seas agresiva, mujer- protestó, dando un paso hacia atrás- ¿Dónde está Hestia? Supongo que ya se habrá encontrado con ustedes.

-Sí...- medio asintió la cazadora sonriendo- Claro. Se quedó hablando por allí con uno de sus amigos de otras casas, sabes que ella ama hacer sociales.

-Okey...- asintió, entrecerrando los ojos- Haré como que te creo- recibiendo una sonrisa por parte de la rubia se giró hacía Lily, encerrando los brazos entorno a su cintura- Hola para ti- y viendo que unían sus labios, Valerie supo que ya no tenía que hacer nada por ahí, así que camino tranquilamente hasta quedar sentada entre Sirius y Remus.

-¿Qué hacen?- preguntó, como quien no quiere la cosa, antes de sentir el brazos de Sirius pasando por arriba de sus hombros en busca de cariño.

-Intentando consumir calor- contestó el castaño, frotándose las manos- Ya sabes que odio ir a verles practicar estando congelado.

-¿Practicar?- repitió la rubia y sintió como un golpe se información le llegaba-¡Cierto! Hoy tenemos práctica.

-Que suerte que te has acordado- James y Lily, unidos de la mano, cayeron a su lado, mirando a Valerie sonrientemente- Porque salimos hacía la cancha dentro de diez minutos.

-¡Valerie, Lily!- Hestia entró a la sala común derrapando, dejando escuchar por unos segundo el ruido de los gritos de la dama gorda, antes de pararse delante de sus amigas- ¡Suban conmigo! Tengo que contarles tantas cosas.

-¡Hey!- protestó James al ser ignorado, frunciendo el ceño- ¿Qué es lo emocionante?

-No sabías que te llamabas Lily o Valerie.

-Contéstame.

-Será mejor que subamos a cambiarnos- dijo Valerie, antes de besar fugazmente los labios de Sirius y levantarse, seguida por Lily.

-¿Cambiarnos?- preguntó Hestia alzando una ceja.

-Tenemos práctica.

-Mierda- y jalando las manos de sus amigas, las tres desaparecieron rumbo a lasescaleras.

***_***_***

-¿Qué es lo que tiene tan emocionada a Hestia?- preguntó Donovan en la oreja de Valerie, mientras iban directo al campo de quidditch siguiendo a James y al resto de los merodeadores.

-Ni puta idea, ¿sabes?- contestó la rubia, hundiéndose de hombros. La emoción de su mejor amiga distaba mucho de cómo se sentía ella en ese momento- Dijo que tenía que contarnos algo y de repente, cuando estuvimos solas en los dormitorios se quedó callada y salió volando mientras se subía las botas.

-¿Crees que tenga algo que ver con Macavoy?

-¿Ah?- Valerie giró por completo su cuerpo a mirarlo.

-Ya sabes, no le he visto sonreír así desde que, bueno, salía con un chico. Y Macavoy ha estado muy pendiente de nuestra mesa en estos días.

-¿Que esté saliendo con Brando Macavoy?- preguntó para sí misma, antes de girar el rostro para ver a su mejor amiga caminando detrás de ellos, mirando seriamente hacía delante, sin en verdad ver, ya que al parecer estaba demasiado concentrada revolviendo recuerdos en su cabeza- No me lo puedo creer... Puede que sea verdad.

-James se va a poner furioso- murmuró mirando de soslayo al capitán, quien reía de algo junto con Remus y Peter, mientras Sirius les fulminaba con la mirada- Va a querer matarlo.

-Sí, no ayuda mucho que el próximo partido vaya a ser contra Hufflepuff.

-¿A ti no te molesta?

-Claro que no- negó, sonriendo. Sus ojos azules viajaron entre Hestia hasta Remus y sintió como una punzada aparecía en su pecho. Lentamente volvió la cabeza hasta Donovan devuelta- Digo, ella merece ser feliz con alguien, ¿no?

-Sí- asintió el castaño sonriendo- Pero será mejor que Brandon no se pasé o lo mataré yo mismo.

-Tranquilo, Goliat- le codeó, sintiendo la mirada penetrante del chico en su nuca- ¿Has hablado con Fabian, Chace y Patrick?

-Sí, ellos no me creyeron que fui solamente yo el del libro pero...

-¿Pero?

-Están a favor de que los slytherin merecían una pateada de culo, así que no harán nada en contra de la idea de que los apunten el pasillo.

-Espero no estar equivocándome con esto.

-Valerie es la única y mejor opción- dijo, enredando su brazo con el suyo- No me voy a arriesgar a que vuelvan a lastimarte. Ya has sufrido demasiado por este año. Estoy dispuesto a afrontar esto.

-Puede que haya otra opción...

-Nosotros sabemos que eso de las segundas opciones no es verdad, es solo una mentira que las personas inseguras se inventan- murmuró, clavando sus ojos en los de ella- Además, ¿quieres que los merodeadores se enteren de esto? Ya sabes que no les ha caído bien que alguien más se haya metido con los slytherin... pero que hayan sido ustedes estoy seguro que les enfurecerá. Hasta yo tengo mis sentimientos encontrados con saber que han hecho una cosa como esa.

-Donovan...

-¡Bien, calentaremos primero y luego practicaremos!- le avisó James, provocando que ellos se apartaran entre sí y que Hestia volviera a la realidad. Viendo como las figuras de Sirius, Remus, Lily y Peter iban corriendo hacía una de las gradas, aferraron las escobas entre sus manos y tomaron altura.

***_***_***

-Ha sido una excelente practica- Hestia se sentó pesadamente al lado de Valerie- ¿No lo crees?

-Aha- asintió la rubia, pasándose el jersey por la cabeza. 

Como hacía demasiado frío para arriesgarse a ir traspirando hasta la sala común y agarrarse alguna extraña congestión, habían decidido entre todos comenzar a ducharse en los vestuarios. Las dos cazadoras, por ser mujeres, siempre quedaban de ultimas en ese tema ya que los hombres siempre acoplaban las duchas primero, aludiendo el hecho de que ellos podían llegar a apestar más rápido que ellas y que además, las dos tardaban añares tomando una simple ducha, provocando que la situación se complicara para ellas. 

-¿Qué sucede?- preguntó la castaña, cruzándose de piernas para poder girar y estar más cerca de su amiga.

-Dime tú.

-¿Ah?

-¿Te has besado con Macavoy?-preguntó directamente, mirandola a los ojos.

-¿Qué?- pregunto, alzando una ceja. "Esto es una mierda. Que Val y Doni me conozcan demasiado está comenzando a molestarme"- No sé de qué estás hablando... - empezó a mentir, pero al saber que era muy mala bjo presión y que Valerie le conocía muy bien, bufó indignada-  Está bien, está bien, sí, me he besado con él, fue hace un rato... no me mires así.

-Ya sabía yo que eso iba a pasar- murmuró, llevandose las manos a las caderas. Meditó por unos segundos que diría primero y luego suspiró- Oye, Hest, no quiero que te lo tomes a mal y no te estoy juzgando ni nada, pero... ¿Y Remus?

-¿Qué con él?- preguntó ella, entrecerrando los ojos.

-¿No era que estaban juntos?

-Ah, sí, bueno... Verás...

-Hestia...

-No voy a estar esperando que se decida por decirle a James lo nuestro...- contestó finalmente, cansada- O lo que era nuestro, ¿sabes? Yo merezco algo mejor que eso. Sé que lo merezco.

-Lo mereces, Hest- le sonrío- Pero no quiero que luego te equivoques tomando decisiones apresuradas y que te arrepientas cuando las cartas estén puestas sobre la mesa.

-¿Cómo voy a arrepentirme? ¡Acaso has visto de lo que estamos hablando! Bueno, no es justo con Remus ese comentario, pero tú sabes a qué me refiero, Val.

-Ya, todos sabemos de qué hablamos cuando mencionamos a Macavoy,  pero él no es Remus... Y tú no vas a sentir por él lo mismo que sientes por Rem de un día para el otro.

-Lo sé, es que... solo quiero divertirme un rato, Val. Hace tiempo que no tengo diversión en mi vida, ¿sabes?- se cruzó de brazos y se dejó caer hacía atrás, chocando contra la pared- Hace tiempo que un chico no me besa en mitad de un pasillo y provoca que todos nos queden mirando como si fuéramos un componente explosivo. Quiero mucho a Remus, tú lo sabes, pero estoy harta de vivir en el anonimato, de vivir escondiendo lo que siento y no poder decirle a mi mejor amigo algo como eso... Tener que controlar mis palabras es una mierda.

-Ya, lo comprendo- asintió, besándole la frente.

Hestia suspiró, sintiendo un leve cosquilleo en su estomago como cada vez que hablaba con Valerie. Ella era su mejor amiga y simplemente con eso alcanzaba para hacerle cuestionar un montón de cosas que tal vez, por ella misma, jamás se hubiese puesto a cuestionar.

Sin embargo, sabía que por más que Valerie jamás la cuestionaría, no la entendía del todo como parecía. Por Valerie Clapton todos los chicos se deshacían en demostrar una relación, cualquier vinculo que fuese posible de vincularlos. Incluso Sirius, quién era negado a todo lo del romance, había plantado bandera cuando las cosas se habían puesto serias entre ambos.

Lo que ella hubiese dado porque Remus le planeara algo como eso.

-Saldré unos segundos a tomar aire- murmuró pensativa, levantándose lentamente.

Valerie alzó la cabeza, viendo como el cuerpo de su mejor amiga se alejaba, yendo hacía el frío sin un solo abrigo más que sus pantalones de franela y su camiseta de tirantes. Sin embargo no dijo nada, sabiendo que eso era, de cierto modo, una especie de mantra para relajarse.

Hestia salió directo hacía la entrada del campo, sabiendo que solo ahí podría recibir una buena corriente de aire que le aclarara las ideas. Tenía una batidora dentro de la cabeza, porque ya había dejado de ser una ensalada. 

-¡Macavoy deja de atajar mis pases o voy a matarte!- gritó una voz desde un punto en el aire y los ojos de Hestia vislumbraron a los siete cuerpos vestidos de Hufflepuff que reían en medio de la cancha en dirección hacia donde Brandon y un chico moreno, Edgar Bones, su mejor amigo, se mandaban miradas cómplices - ¡Te estoy hablando enserio!- le amenazó el moreno, provocando que todo el equipo rompiera nuevamente en carcajadas.

-¡Pensé que era mi trabajo atajar esa clase de cosas!

-¡Bueno, pero soy tú mejor amigo!

Brandon se echo a reír una vez más antes de que Hestia fuera capaz de darse cuenta que él y Edgar habían frenado unos segundos sus carcajadas para fijarse en ella. 

Vio como los labios de Edgar se movían, seguramente formulando unas preguntas y como Brandon giraba la cabeza para contestarle antes de volver a girarse, esta vez hacía ella, y sonreírle tan encantadoramente como las otras veces, bajo la inquisidora mirada de su mejor amigo.

Ambos se comieron con la mirada durante uno segundos, haciendole comprender a Hestia que quería a ese chico para ella. 

Solamente para ella.