Narrador omnisciente

Diana aún tenía su libro en mano, fingiendo leerlo, puesto que miraba disimuladamente a la chica que yacía en frente de ella, aunque aún no podía visualizar su rostro,por otra parte, Akko solo tenía su mirada hacia la ventana.

Narra Diana

Ésta chica en serio es extraña... No es como si me importará saber en qué tenía sus pensamientos, aunque sería un poco interesante...

Amanda: Aquí está su orden.

Diana: Gracias.

Narrador omnisciente

Amanda se retiró y la joven Cavendish se dispuso a tomar un sorbo de su café, aún quería intentar hablar con la castaña, aunque no sabía cómo empezar, hacer amigos y ese tipo de cosas no era algo que le sentaba del todo bien.

Narra Diana

Maldición, ésto en serio es incómodo, aunque ella no parece pensar lo mismo.. vamos tú puedes hacerlo...¿Desde cuándo se me dificulta hacer algo?

Alcé mi mirada, me quedé muda al verla, ella seguía entretenida con su vista en la ventana, lucía tan calmada y tenía un pequeña sonrisa en sus labios, ¿Qué es ésto? Ni yo podía explicarlo... No se cuánto tiempo he estado viéndola, pero está tan distraída que ni si quiera se ha dado cuenta, bien.. aquí voy..

Diana: Disculpa...

Akko: ¿Si?

Su voz resonó cómo un eco en mi cabeza, haciéndome sentir muy rara, era una muy dulce e inocente, pero eso no fue lo que más me sorprendió, cuando posó su mirada en mí, pude verlos, esos hermosos ojos carmesí... ¿Cómo podía tener alguien tan bellos ojos? Otra cosa que tampoco sabía, pero eso no importaba ahora, solo quería que el tiempo se detuviera para poder seguir apreciando ese precioso color que era tan atrayente...

Akko: Amm... ¿Todo bien?

Salí de mi trance, rayos! ¿Se habrá dado cuenta? No creo que fui lo suficientemente discreta... Tendré que disculparme.

Diana: Lo lamento.

Akko: ¿Porqué te disculpas?

Diana: Creo que te hice sentir incómoda...

Akko: Para nada, solo me pareció extraño que me hablaras y después quedarás en silencio.

Diana: Cierto, de verdad lo siento.

Akko: No hay necesidad de disculparse, de echo... también pensaba decirte algo.

Diana: ¿Qué cosa?

Akko: No lo sé jeje, soy buena en las conversaciones, pero sinceramente no sé qué decir ahora.

Tal parece que no se dio cuenta que me le quede viendo un buen rato, de la que me salve...

Akko: Su acento es diferente...viene de otro país ¿Verdad?

Diana: Así es, vengo de Gran Bretaña.

Akko: Oh... cómo los dos jóvenes de las noticias.

Diana: ¿Noticias?

Akko: Sip, todo mundo anda hablando de ellos, aunque no estoy muy involucrada en el tema, solo me han contado que son de apellidos muy importantes y de las personas más ricas del mundo.

Diana: Dinero...

Akko: ¿Uh?

Diana: Dime algo...¿Crees que el dinero lo es todo?

Akko: Tengo opiniones diferentes respecto a eso...

Diana: ¿Crees....que es necesario para alcanzar la felicidad?

Akko: Yo..

Narra Akko

Sus preguntas en serio me hicieron pensar demasiado...cosa que no hago mucho, pero yo siempre he dependido de eso...por mi condición de no ver, si fuera rica, no tendría ningún problema en pagar mi cirugía y por fin podría ver el mundo como muchos me lo han descrito...

Akko: No lo sé...

Diana: Entiendo...

Akko: La verdad es que...yo siempre lo he necesitado...

Diana: .....

Akko: Y aún lo necesito, es mi objetivo para por fin alcanzar mi sueño.

Diana: Pensé que serías diferente...

Akko: ¿Qué?

Diana: Pensé que serías de esas personas que son felices con lo que tienen, no de las que nunca están satisfechas...

Akko: N-No quise decir eso, es solo que...lo necesito para si poder ver a mis amigos, familia, lo que me rodea...

Diana: ¿Qué tiene que ver eso con el dinero?

Akko: Parece que no te has dado cuenta jeje, soy ciega.

Diana: No puede ser...

Narra Diana

No podía creerlo, en realidad no lo parecía, ahora me siento una tonta..

Diana: Yo...

Akko: Espero no pienses disculparte otra vez.

Diana: Tengo que.

Aún tenía mucha duda de lo que dijo, quería comprobarlo pero no sabía cómo, agite ligeramente la palma de mi mano cerca de sus ojos, tal parece que es verdad...

Akko: jejeje

Diana: ¿Uh?

Akko: Aunque no pueda ver, puedo sentir cómo mueves tu mano frente a mis rostro, se siente el aire.

Genial...eso su fue una falta de respeto de mi parte.

Diana: Perdón...no quería ser mal educada..

Akko: Descuida, no eres la única que hace eso.

Diana: ¿Y no tienes bastón?

Akko: Si, solo que a veces es un tanto estorboso, de echo lo tengo aquí. (Tomando su bolso, sacando el bastón y tirando una libreta)

Diana: Déjame ayudarte.

Akko: Si amm respecto a eso, ten cuidado cuando la..

Tomé la libreta y accidentalmente cayeron varias hojas que venían dentro.

Akko: Levantes...

Estaba segura que se enojaría, me he estado comportando cómo una tonta.

Akko: Jejeje.

¿Se está riendo? No la culpo, estoy haciendo un show de circo en una cafetería...bien echo Diana..

Diana: Ahh...que patética..

Akko: No digas eso.

Termine de recoger las hojas y la libreta, dándome cuenta que eran dibujo de personas.

Diana: Wow...

Akko: ¿Qué pasa?

Diana: No sabía que te gustará coleccionar retratos.

Akko: Yo los hago.

Diana: ¿En serio?

Akko: Se que es poco creíble, pero si, ha eso me dedico desde que era muy pequeña.

Diana: Es fantástico, tienes un gran don. (Entregándole la libreta)

Akko: Muchas gracias.

Narrador omnisciente

El celular de la Cavendish sonó, siendo su amigo quien le hablaba.

Diana: (Contestando) ¿Y ahora que hiciste?

Andrew: Necesito tu ayuda, estoy por un centro, pero no sé exactamente cuál y tampoco sé cómo regresar al hotel.

Diana: ¿No ibas con los guardaespaldas?

Andrew: Amm los perdí de vista...

Diana: Ahg no puede ser... Mándame tu ubicación y espérame ahí, no tardó.

Andrew: Vale, gracias. (Colgando)

Diana: Ahhh es un caso perdido...

Akko: ¿Quién?

Diana: Un amigo mío, aunque lo considero más como un hermano mayor.

Akko: Tal parece que te necesita ¿No?

Diana: Así es, bueno... Fue un placer conocerte amm...

Akko: Atsuko Kagari jeje.

Diana: Está bien miss Kagari, soy...

Narra Diana

Por alguna extraña razón no quería decirle mi apellido...

Diana: Amm puedes llamarme Diana.

Akko: Espero nos volvamos a encontrar Diana.

Diana: Lo mismo digo.

La rubia salió de la cafetería, dejando a Akko con una sonrisa en su rostro.

Akko: Qué chica tan amable y linda jeje, ojalá la hubiera visto físicamente...

En eso su amiga que trabajaba ahí, se dirigió rápidamente a ella.

Amanda: Akko, tenemos que hablar urgente.