~Capitulo 14~
Narrador omnisciente
Cierta castaña le costaba dormir, puesto que no dejaba de pensar en Diana y en el porqué no pueden estar juntas. Abrazaba su almohada imaginándose a la rubia a su lado.
Narra Akko
En serio necesito verla...ella se ha vuelto muy importante para mí en tan poco tiempo, la amo tanto...
Narrador omnisciente
La joven Cavendish se encontraba en su cuarto de hotel viendo por la ventana el cielo con las estrellas adornando.
Narra Akko
Es...es hora de ponerle fin a ésto...
Narrador omnisciente
La chica se dirigió al baño tirando algo al inodoro y jalando de la palanca viendo la escena con mirada seria.
Diana: Mañana terminará todo...
Al día siguiente, el sol comenzaba a dar a la vista sus primeros rayos de luz.
Narumi: Hija, hora de despertar. (Tocando tras la puerta)
Akko: Si...
Narumi: Voy a entrar. (Abriendo la puerta)
La madre al ingresar a la habitación de su hija y ver su rostro soltó un pequeño grito.
Narumi: Dios! Pareces un zombie... ¿No dormiste bien?
Akko: Solo unas cuántas horas...
Narumi: No pareciera, el desayuno está listo, pero si quieres descansa un poco más, te vez muy mal.
Akko: No, tengo que ir a ver a Diana.
Narumi: Entiendo, tú padre te llevará y recogerá para más seguridad.
Akko: Está bien.
Narumi: Estaremos esperándote para el desayuno.
Akko: Si, en un momento bajo.
La mayor se retiró del lugar, Akko dio un bostezo y se alistó para poder bajar a desayunar con sus padre.
Kenta: Buenos días bella durmiente.
Akko: Hola papá.
Kenta: Avísame cuando quieras que te lleve con Diana ¿Entendido?, Recuerda que no podemos dejar que vayas por ahí sola.
Akko: Lo sé.
Narumi: Recuerda que mañana tienes que ir a tú chequeo.
Akko: Si, aunque aún me falta bastante para completar el dinero.
Kenta: Ya te dijimos que te ayudarnos con eso.
Akko: Y ya se los negué muchas veces, esa operación será para mí y quiero pagarla con mí esfuerzo.
Kenta: No hay cómo hacerte cambiar de opinión ¿Verdad?
Akko: Nop.
Narumi: Bueno, el desayuno se enfría, a comer.
En el hotel dónde se encontraba Diana, el joven Andrew tocaba la puerta de la habitación de su amiga.
Andrew: Saldré a comprar algunas cosas. ¿Necesitas algo?
Del otro lado de la puerta la rubia se encontraba viéndose en el espejo de su tocador, lucía muy cansada, tampoco había dormido muy bien.
Diana: No, no necesito nada...
Andrew: ¿Estás bien?
Diana: Si, ya puedes irte.
Andrew: Bien...Si pasa algo no dudes en llamarme.(Yéndose)
Pasadas unas horas, horas en las que Akko se había preparado mentalmente para hablar con cierta chica.
Akko: Listo, ya podemos partir.
Kenta: Bien, vámonos.
Narumi: Cuídate hija y suerte.
Akko: Gracias mamá.
Kenta: ¿Quién necesita suerte y protección cuando estás con Kenta Kagari?
Narumi: Con mayor razón...iré por el agua bendita.
Kenta: Amor no seas así.
Narumi: Solo bromeó, no vuelvan tan tarde.
Akko: Está bien.
La castaña y su padre ingresaron al auto arracandolo y emprendiendo su camino.
Akko: Papá..
Kenta: ¿Si?
Akko: ¿Sabe si hay florerías por aquí?
Kenta: Creo que pasaremos por unas dentro de pocas cuadras, ¿Quieres comprar unas?
Akko: Sip. ¿Podrías ayudarme a elegirlas?
Kenta: Claro, soy un experto en flores.
Akko: Mamá me contó que cuando aún asistían a la universidad y hicieron un experimento de cuidar un frijol, el tuyo nunca creció.
Kenta: E-Estaba defectuoso.
Akko: Ajá.
Kenta: Hablo en serio! ¿Desde cuándo tu madre te cuenta cosas sobre nosotros de jóvenes?
Akko: No quieres saber.
Kenta: Ah...
Pasados unos minutos llegaron a una florería y estacionaron el auto. Al entrar al negocio, se podía percibir el olor a las flores, era delicioso.
Kenta: Bueno, ¿Qué tipo de flor le pensabas regalar?
Akko: Unas rosas, pero estoy pensando en qué color, Diana me contó que tiene ojos azules y cabello un tono amarillo...
Kenta: Jeje no creo que encontremos una flor idéntica a Diana.
Akko: Tienes razón, ella irremplazable e irrepetible.
Kenta: Esa chica te tiene hipnotizada eh.
Akko: C-Claro que no.
Kenta: No porqué sea hombre significa que no me dé cuenta que te gusta la señorita Diana.
Akko: .....
Kenta: Me alegro que al fin pudieras enamorarte, ella es una gran persona.
Akko: Si, lo es...
Kenta: Oh! encontré unas.
Akko: Huelen muy rico.
Kenta: Bien, compraré un ramo.
Akko: Gracias.
Kenta: No hay de qué.
Al volver al auto y seguir su camino, llegaron a pocos minutos al hotel, afortunadamente Akko se había acordado del nombre de éste, de no ser así, no hubiera podido encontrarla tan fácilmente.
Akko: Puedes dejarme aquí.
Kenta: ¿Segura?
Akko: Si, yo me encargaré del resto. (Sacando su bastón guía y el ramo de flores)
Kenta: Bien, avísame cuando quieras que venga por ti, iré a hacer compras.
Akko: Está bien.
El padre se retiró y Akko entró al hotel, yendo a la recepción con ayuda de su bastón.
Akko: Buenas tardes, quisiera ver a Diana.
Recepcionista: Identificación.
Akko: No traigo...
Recepcionista: No puedo dejar verla, tampoco sé si en realidad la señorita Diana la conozca.
Akko: Viene el otro día.
Recepcionista: Por si no te has dado cuenta, hoy es mi día laboral, ayer le tocó a mí compañera.
Akko: Por si usted no se ha dado cuenta soy ciega.
Recepcionista: Bien por usted, venga otro día y con identificación, así tal vez pueda dejarla pasar.
Andrew: Ella es una conocida mía.
Recepcionista: Joven Andrew...
Narra Akko
¿Andrew? ¿Qué hacia él aquí?
Andrew: De echo, la estaba esperando.
Recepcionista: Está bien...
Andrew: Vamos señorita Kagari. (Tomando la mano d ella castaña guiandola al elevador para después llegar a las habitaciones)
Akko: Amm... Andrew ¿Qué haces aquí?
Andrew: Es una larga historia, pero creo que no me corresponde a mí contartela, si no ha Diana.
Akko: Espera... ¿Conoces a Diana?!
Andrew: Si... Viniste a verla ¿No?
Akko: S-Si.
Narrador omnisciente
El joven sonrió al ver a la chica un tanto nerviosa y con un leve rubor en sus mejillas.
Andrew: Le atinaste.
Akko: ¿A qué?
Andrew: A las rosas, son sus favoritas.
Akko: ¿De verdad?
Andrew: Si. (Deteniéndose) Bueno, aquí es, solo tienes que tocar.
Akko: .....
Andrew: ¿Lista?
Akko: Si.
CONTINUARÁ
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top