Hany

Buscaba la oportunidad de irme cuando antes aunque me sentía halaga de que Jun Pyo se fijará en mí esto no era parte de mi plan, para empezar no quería tener que vermelas con su madre, aunque después de todo mi familia posee casi el mismo poder económico y social que el grupo Shinhwa y puede que no tenga los mismos problemas que Jandi, pero aún así no me atrevía ha acercarme más a él de lo que debería.

—Joven amo Jun Pyo, el té y las especias que pidió están listos—aviso el mayordomo principal haciendo pasar a las sirvientas con bandejas en las manos

Cada una de ellas traía consigo diferentes postres, tazas decoradas, un jarrón de cristal y flores para adornar la mesa. No recordaba algo así en el original, pero algo parecido llegó a mi mente. ¡Oh por todos los cielos! No puede ser, aquí es cuando una abeja ataca a Jun Pyo. Pero esa no escena paso hasta de que Jandi se fue ¿Acaso los postres y la taza de té también fueron preparados para ella en el original?

—Preparé esto especialmente para ti, vamos toma asiento y disfrutá. Luego puedes marcharte si lo deseas—ofreció Jun Pyo pero lo pase de largo pues mi objetivo era evitar que la abeja saliera de las flores y lo espantara

—Me gustan estas, me las llevaré—tome el ramo entero que había como centro de mesa y me dispuse a salir cuando Jun Pyo tomó mi mano

—¡Espera! ¿Qué crees que haces? —cuestionó bloqueando la puerta

—Solo iré afuera—respondí intentando soltarme de su agarre

—¿Y por qué te llevas las flores? Si estas planeando irte por lo menos prueba algo, me tomó mucho tiempo preparar todo esto—protestó llevandome nuevamente hacía la mesa

—No me iré, solo déjame llevar las flores afuera —pedí pero ni yo misma encontraba sentido en las palabras que salían de mi boca y es que no sabía como decirle que estaba tratando de protegerlo de su peor temor

—No digas tonterías, no voy a caer en tus excusas para escapar. Ya dije que te podías ir después de probar el té y los postres—repitió algo molesto e intento quitarme el ramo de flores

—¡Jun Pyo, espera! —en medio del forcejeo del ramo salió volando y la abeja que había dentro

—¡Ah! ¡Ah! ¿Qué es eso? —gritó Jun Pyo saltando espantado se escondió detrás de una silla que había cerca

—Te iba a decir que había una abeja en las flores—susurré

—¡Ah una abeja! Alguien deshagase de ella rápido, atrapenla rápido ¡Sáquenla!—les ordenó a sus sirvientes

De pronto todos empezaron a perseguir al pequeño insecto por toda la habitación, mientras yo no entendía como un animal tan pequeño podía causar tanto alboroto.

—¡Alto! —levanté la voz para detenerlos—Yo me encargaré—dije para ir hacia las ventanas y abrirlas completamente

Bastó con agitar un poco las manos para guiar a la abeja hacia la ventana para sacarla afuera de la mansión.

—Listo, volvió sana y salva—avise para que Jun Pyo dejara de esconderse debajo de lo primero que encontró

—¡Esas flores! ¿Quién preparó las flores? —gritó Jun Pyo hacía las sirvientas

—Lo siento mucho no era mi intención—se disculpó una de ellas inmediatamente

—¡Despidela! —ordenó

—¿Qué? Jun Pyo—le reproche—Solo fue un accidente, ella ya se disculpó ¿Por qué la despedirías? —reclame

—¿Un accidente? —preguntó con ironía—Pude haber muerto—me sorprendía lo exagerado que podía llegar a ser 

—¿Estas bromeando? Solo era una abeja—le recordé

—¿Solo una abeja? Era un insecto espantoso—replicó

—Señorita Park, el amo Jun Pyo detesta los insectos desarrollo mucho temor ante ellos ¿Podría comprenderlo solo por esta vez? —pidió el mayordomo junto a él

—Silencio ¿Quién dijo que se lo contarás? —Jun Pyo le reclamo al mayordomo muy descortésmente

—¡Jun Pyo! —volví a regañarlo

—¿Ahora qué? —protestó

—Lo siento, señor. Me retiraré ahora mismo—el mayordomo agachó la cabeza antes de irse llevándose a las sirvientas con él

—Jun Pyo ¿Qué te pasa? ¿Cómo pudiste hablarle así? Él solo se preocupa por ti—le reproche muy enojada

—Nadie se lo pidió, terminemos donde nos quedamos, siéntate—más que una petición era una orden que no estaba dispuesta a obedecer

—¡No! —me negué y esquive su mano pues sospechaba que probablemente usaría la misma estrategia de hace unos minutos para hacerme sentar en silencio junto a él—Sabes, las abejas son muy importantes para el medio ambiente, debes recordar tratarlas con respecto, aún si les temes ellas nunca te harán daño si recuerdas darles su lugar y no molestarlas—traté de explicarle

—¿Qué es lo que las hace tan importantes? ¿Qué podría hacer una abeja que no pueda hacer yo? El dinero lo soluciona todo incluso si llegan a extinguirse...

—Si eso llegará a pasar no sería nada bueno porque a nosotros, los humanos, nos quedarían solo cuatro años de vida—aseguré teniendo la certeza de que había visto esa información en algún documental—A menos que la abeja Jun Pyo pueda hacer su trabajo y polinizar medio continente cada día—bromee con él y solté una carcajada imaginando una abeja con el peinado de Jun Pyo, sin pensar que podría enojarse

—Si tu lo pides trataré de dejarlas en paz—Jun Pyo parecía amable—Y también puedo hacer eso

—¿A qué te refieres? ¿Protegeras a las abejas o te convertiras en una? —pregunté curiosa por lo que diría

—Digo que puedo encontrar una manera de protegerlas—aseguró—Haré que un grupo de científicos las estudien así no tendrás que preocuparte por si se llegan ha extinguir me aseguraré de que eso jamás pase, creo que sería horrible contar con solo cuatro años de aquí en adelante—trato de sonar algo despreocupado y casual mirando a otro lado mientras hablaba pero parecía haberse tomado en serio mis palabras y eso me agrado

—Eres realmente tierno Jun Pyo—sonreí contiendo una carcajada pues realmente me pareció lindo pero también muy cursi todo lo que dijo antes, aún así se veía que lo decía de corazón así que no podía reírme, no quería burlarme de sus sentimientos—Sabes no tienes que hacer eso, por ahora es suficiente con que recuerdes no atacarlas y te disculpes con el mayordomo y la sirvienta a la que despediste —sugerí

Sabía que no podía quitarle ese temor que siente hacía los insectos después de todo es normal que la gente experimente fobias, pero al menos podía hacerle saber que lastimar a otros por más pequeños que sean no estaba bien.

—No puedo hacerlo—replicó

—¿Por qué no? —pregunté

—Porque ya no están aquí, lo haré más tarde. Por ahora puedo hacer algunas llamadas para organizar un refugio de abejas, un invernadero o donde sea que vivan haré que construyan uno en la escuela—se apresuró a buscar su teléfono en la repisa de la sala

—¿Qué? ¡No espera! —corrí tras él para detenerlo

Debí sospecharlo, después de todo Jun Pyo era un poco impulsivo y por qué no decirlo estaba un poco loco, era en parte mi culpa por no aclarar lo de proteger a las abejas, pero por todos los cielos, esa era una forma de decirle que también debía ser más amable con las personas a su alrededor.

To Be Continued...

🌸Hola,
Muchas gracias por leer.
Este es un capítulo especial y se ubica antes de que Hany discutiera con Jun Pyo.

Este es el primero de dos especiales.
♡Dedicado para a quienes le gusta la pareja de Hany × Jun Pyo
No se preocupen porque Hany × Ji Hoo también tiene un especial.
Espero se hayan divertido y les haya gustado.
Hasta pronto🌸