Audrey despertó y a su madre la recibió con una sonrisa. Lentamente con la ayuda de sus codos se incorporó sobre su antigua cama y entre quejas logró apoyarse sobre las almohadas. 

-¿Como amaneces?

-Bien mami- Responde y observa una bolsa de regalo que tenía cerca de sus pies.

Audrey tenía tres semanas de haber regresado del hospital y se estaba quedando en la casa de su madre mientras se recupera completamente. Era veinticuatro de diciembre y su madre le estaba entregando su primer regalo de Navidad.

-Es veinticuatro- Dice y acerca el obsequio hacia ella. Audrey sonríe  recibiéndola y mira curiosamente por un pequeño orificio antes de destaparlo.

-Ábrelo cariño- Le anima su madre sonriendo con cariño, observando su actitud, rápidamente su mente se transportó varios años atrás, cuando  tenia cinco años.

Audrey obedece  y pausadamente abre el obsequio con sus largos, su madre la observa detenidamente, analizando cada movimiento.

-¿Te gusta?- Le pregunta mientras seca con el dorso de su mano una lagrima.

-Esta precioso mami, muchas gracias.

Era un lindo vestido.

-Para que te lo pongas está noche- Audrey parpadeo boquiabierta y pensó que le estaba tomando el pelo.

-Esta muy lindo mamá- Lo aparta con cuidado hacia el costado de su cuerpo- Pero no estoy presentable para lucir un vestido.

-¿Como que no?- Contradice. - Estas linda mi amor.

Audrey suelta una risita irónica y se pone enormes los lentes.

-Ese vestido se te va a ver muy lindo- Acaricia su mentón con cariño y le da un beso en la mejilla- Y se que alguien le va a gustar mucho vértelo puesto.

Audrey sonríe, sin embargo no hace que cambie de opinión, su aspecto no es el mismo y en estos momentos cualquier prenda de ese estilo, no lo quedara nada bien.

-Pero si no te lo quieres poner está bien- Se levanta del borde de la cama- No te voy a discutir, ya te traigo el desayuno.

Audrey Suspiró y cerró los ojos cuando estuvo sola.

El cantante iba a pasar la noche de navidad como le había dicho antes de irse a Australia. Todo será en total discreción así que el chico no pasará toda la noche con ella, sólo después de la doce para no levantar ninguna sospecha.

Él platicó con Audrey acerca de decirle la verdad al mundo sobre su relación y ella aceptó con la condición que su cabello haya crecido hasta sus orejas, porque no le gustaría aparecer en televisión calva y sin ninguna preparación, a Niall le fascinó la idea.

La noche llegó y Audrey recibió lindos mensajes de sus amigos y también cantidades de regalos, se colocó el vestido que su madre le regaló y aunque no estaba cómoda con él no iba a estar bien si no se lo ponía.

Ya se habían dado el abrazo de navidad y en el living  acompañada de sus padres ella esperaba con mucha ansiedad al irlandés, hace unos minutos le había avisado que estaba cerca de la casa y ella se colocó muy nerviosa.

Los padres le dieron un caluroso recibimiento al cantante, le ayudaron con los regalos que había traído para ellos y después los dejaron solos para que tuvieran privacidad, momento que no habían podido tener mucho.

- Hola mi amor- Audrey sonríe tímidamente escuchando su voz acercándose- Wo- Dice observándola con los ojos brillando de admiración.- Estas guapísima.

-No mientas- Contradice y se pone de pie.

-Te ves linda ¿Por que mentiría?-La toma de la cintura.

- Para no hacerme sentir mal, se que no veo bien sin cabello...

- A mi me encanta lo que veo- Dice interrumpiendo con un beso.

- Gracias- dice ella sonriente mirando sus ojos, rozando sus labios- Gracias por hacerme sentir todo eso que me hace bien y me hace feliz.

- Me encargaré de hacértelo sentir todos los días de mi vida.

- Yo también lo voy hacer - Cepilla sus mejillas- ¿De verdad me veo bonita?

-No- negó y sonrió al ver su rostro triste- Te ves divina, una diosa, una preciosa mujer que acaba de ganar la batalla más grande de su vida. Eres mi guerrea.

-Y está es la secuela de esa guerra- Dice con humor- A mi también me gusta lo que veo.

-¿Y que ves?

-Veo un hombre maravilloso- Niall rodea su cintura.

- Y sexy - Añade y ella se ríe.

-Sexy y  de linda nariz.

-Mi nariz  es bien fea.

- Tu nariz es preciosa.- Se ríe y baja la mirada, se da cuenta que tenía puesta la cadena que ella le regaló- La traes puesta.- Dijo señalando  y se miró.

-Desde que me la diste no me la quité más.

-¿Y no te han dicho nada?

-Han comentado y me han preguntado si tiene algún significado para mi- Audrey lo mira fijamente  - Pero  yo los dejó con la intriga cambiando de pregunta.

Audrey se ríe incrédula y lo abraza, apoya su cabeza sobre su pecho y él responde al abrazo estrechando su cuerpo. Se sientan en el sofá y Niall la besa dulcemente en los labios.

-Feliz Navidad mi amor- Dice tiernamente él viendo sus ojos llenos de brillo.

-Feliz Navidad Niall- Susurra ella  manteniendo su mirada, sintiendo cosquillas por todo su cuerpo y mariposas en el estómago, igual que él, una batalla campal estaba desencadenada en todo su cuerpo la compañía de Audrey desequilibra cada sensación de su cuerpo, ama pasar tiempo a su lado, es una sensación indescriptible que nunca lo había experimentado antes, Audrey es todo lo que una vez soñó y no se imagina una vida a su lado.

- Muchas Gracias  por todo-

-No vamos a llorar- Pide él con los ojos a punto de cristalizarse, detallando los de ella- Hay que celebrar que estamos juntos y que pudimos vencer el cáncer.

-No lloro de tristeza, lloró de alegría- Se limpia las lágrimas- Es sólo eso- Ella aprieta los ojos al sentir un leve dolor en su cicatriz, Niall se le acelera el corazón del miedo y la toma por los hombros . Ya había visto esos gestos-Tranquilo, tranquilo es la herida que todavía me duele.

- ¿Segura mi amor no estás diciéndome mentiras?- Ella negó con sinceridad y sostuvo su rostro entre sus manos.

- Estoy bien.- Besó cortamente sus labios- Sólo me quiero acostar, me siento cansada.

-¿Y los regalos? 

-Podemos abrirlos en mi habitación- Sugirió Audrey.

- De acuerdo- Se toman de la mano para dirigirse hacia la recamara- Tenia pensado irme después de darte te los regalos pero he cambiado de opinión ¿Quieres que me quede?

Ella da una mirada cautelosa hacia la dirección de sus padres.

-Si quiero - Responde tímidamente sonrojada.

-Pero en tu cuarto- Dice con una sonrisa picara.

-Bueno-Susurró bajito Audrey nerviosa.

-¿Que dirán tus papás?

- No lo sé- Se mordió las uñas al mismo tiempo que hincaba los hombros- Ya veremos.

Niall se ríe y la besa profundamente en los labios.