Mientras tanto, los chicos no pararon de buscar a aquella chica tan especial para James, ya que nunca habían visto a su amigo tan enamorado, pero cuando llegó la noche del baile, James no paraba de ponerse nervioso:

-Por Dios, espero que vaya al baile- decía James un tanto preocupado.

-No te preocupes amigo, ya verás como irá- contestó Kendall mientras le intentaba animar.

-Yo me alegro de haber conseguido que Camille vaya conmigo- dijo Logan echándose colonia.

-Se lo pedíste porque si no lo hacías te mataría- contestó Carlos de forma evidente.

-Pero aceptó, yo por lo menos no voy solo- respondió Logan enfadado con Carlos.

En ese momento, Carlos empezó a pegarse con Logan y por fortuna apareció la señora Knight para separlos:

-Vamos chicos vais a arrugar los trajes- dijo mientras los separaba.

- Mamá, ¿que escondes ahí?- preguntó Kendall mientras veía cómo su madre intentaba ocultar el vestido de Rose que estaba en la habitación de Katie.

- Oh, eso es de tu hermana, quería que le hiciera un disfraz para Halloween- respondió la señora Knight un poco preocupada.

Kendall se encogió de hombros y se dirigió a sus amigos:

- Vamos chicos, la fiesta va a empezar- informó mientras los cuatro salían del apartamento.

Nada más salir, la señora Knight pudo respirar tranquila y acabar de hacer el vestido.

En el apartamento de Rose, las cosas no iban muy bien:

- Bueno Rose, como ya sabrás, nosotras nos iremos al baile de Roque Records  mientras tú te quedas aquí planchando- dijo Fiona mientras terminaba de arreglarse, ya que sus hijas ya se habían puestos sus vestidos, los cuales les quedaban horribles.

-Si Fiona- obedeció Rose.

En cuanto las tres mujeres salieron del apartamento, Katie, que se había escondido detrás de una planta, vio cómo bajaban por el ascensor y se dispuso a llamar para decirle a Rose que ya tenía listo su vestido:

-Vía libre Rose, vámonos- avisó Katie en cuanto Rose salió a ver quien había llamado a la puerta.

Nada más entrar en el apartamento, Katie fue a buscar a su madre:

- Mamá, Rose ya está aquí- avisó Katie.

- Oh, hola cariño, mi hija me ha hablado mucho de tí- dijo la señora mientras saludaba a Rose.

-Hola señora Knight, es un placer conocerla y no sé cómo agradecerle su ayuda- contestó Rose mientras la sonreía.

La señora Knight no pudo evitar sentir un cariño muy fuerte por aquella chica y ganas de abrazarla para hacerla ver que no estaba sola.

-Bueno, pues aquí tienes tu vestido, quedarás preciosa- dijo la señora Knight mientras le enseñaba el vestido.

Para Rose, era lo más hermoso que había visto era de un color Rosa pálido con brillos en la falda y los zapatos eran de tacón bajo de color blanco y no pudo evitar soltar unas pequeñas lágrimas.

-Muchas gracias, no sé que decir- respondió Rose casi sin poder hablar de la emoción.

-No digas nada mi niña, Katie ya me ha contado que no has tenido una vida fácil desde que murió tu padre y que no has podido cumplir tus sueños y por eso te vamos a ayudar y a proteger y ahora vístete y diviertete- contestó la señora Knight mientras le cogía las manos a Rose.

Rose asintió y se dirigió al baño a cambiarse y cuando terminó, la señora Knight le rizó el pelo y la maquilló un poco y cuando finalizó, Katie no pudo evitarlo y dijo:

-Pareces una princesa- soltó Katie.

-Gracias Katie- respondió Rose sin dejar de sonreír.

-Ah, espera, te falta esto- dijo la señora Knight mientras le daba una mácara del mismo color que el vestido.

-De verdad muchísimas gracias- agradeció Rose mientras abarazaba a sus hadas madrinas.

Y mientras la señora Knight y Katie subían al apartamento de Rose para planchar la ropa de Fiona y sus hijas, Rose se dirigió a Roque Records sin poder imaginarse que su vida iba a cambiar de una forma drástica.

P.D: Agradezco mucho vuestros votos, si llegan a 100, escribiré otra historia en cuanto acabe esta, pero aviso que no será sobre James ni de Big Time Rush. Muchos besos y abrazos.