No pudo creer que mamá me haya hecho esto.

Bueno no es mi madre en realidad pero para mi fue como una...

-Scarlett ¿Estás bien? Te oímos gritar- Entra Tayler, yo estaba llorando y él al verme puso una expresión de preocupado.

Iba a decirle, iba a decirle lo que su madre quiere hacer conmigo pero no puedo, ella me controla y no me deja hacerlo.

-E..Estoy bien, no es nada... -

-Pero entonces... ¿Por qué lloras?- Insiste y yo no podía hacer nada.

-No es nada solo me caí y me golpee nada grave-

-¿Segura? ¿No es por otra cosa por la que estás así?- Siento que si sigue insistiendo lo mataré de verdad...

-¡Que estoy bien! ¡Largate!- Luchaba contra mi misma para no ir y despedazarlo.

Me agarré de lo primero que vi e intenté no soltarme porque si lo hacía lo mataba y no sé el porqué.

Sentí mis ojos cambiar al rojo y mis colmillos salieron al igual que mis garras, involuntariamente.

-¡Tayler vete! ¡Ahora!-

-¡No! No me iré hasta saber que es lo que te pasa- Sentía mi pelaje comenzar a salir y mis huesos romperse y volviendo a fijarse.

Me transformaré.

Lo mataré y no quiero hacerlo...

~Por favor Tayler... vete... no quiero herirte... ~ Decía con lagrimas cayendo por mis mejillas.

Él se acerco a mi y acuno mi cabeza entre sus manos.

-No me lastimaras ¿Sabes porqué?- me quedé en silencio mientras sentía todo ese dolor en mi cuerpo -Porque eres mi hermana... -

Me abrazó aferrándose a mi pelaje yo seguía intentando no matarlo pero mis ganas de matar eran muchas...

Lo empujé rápidamente y dejé salir a Lika mi hermano me miró asustado y preocupado.

Yo lo veía aguantando las ganas de matarlo... aunque quería sentir su sangre caliente entre mis dientes y su carne siendo desgarrada por estos también... pero no, no lo haré...

Le estaba gruñendo pero antes de atacarlo me rasguñé a mi misma para entrar en razón y salí por la ventana.

Escuchaba como me llamaba pero no volvía, no quiero hacerle daño a él ni a nadie...

Narra Tayler

No entiendo qué pasa pero cuando se transformó pude notar que su collar brillaba y no se rompía ni se ocultaba...

Bajé a donde mis padres y Cameron, todos al verme me veían preocupados pero mi madre... fingía preocupación.

Creo que sé que está pasando y tiene que ver con mi madre...

Fui hasta ella y la agarre del cuello.

-¡¿Qué mierda le hiciste, eh?! ¡Contesta!- Gritaba.

-¡Tayler déjala!- Decía mi padre y Cameron.

-¡No! Ella es la responsable de lo que le está pasando a Scarlett-

-¿Cómo lo sabes? ¿Tienes pruebas?- Dice Cameron.

Suspiré y la solté.

No no tengo pruebas.

-Si le pasa algo no te lo perdonaré- Sin mas salí de la casa y me dirijo al bosque para buscar a Scarlett.

En el bosque no se escuchaba nada, tampoco podía ver nada, solo espero poder encontrar a Scarlett antes que otra cosa.

Iba caminando sin parar hasta que escuché una rama romperse y entonces me detuve en seco.

Miraba por todos lado hasta que vi a un lobo marrón oscuro y grande. Es Connor me mira un segundo y se transformó en humano.

-¿Qué haces aquí? Este lugar es peligroso y más de noche-

-Pues que no se te olvide que soy cazador, y venía a buscar a Scarlett- Se puso serio, muy serio.

-¿Qué le pasó?-

-No lo sé... solo sé que ella huyó para no lastimarme-

-¿A que te refieres?-

Mientas le contaba todo lo qué pasó, empezamos a buscarla y no encontramos nada.

-¿O sea que crees que tú madre está detrás de todo esto?- Asentí -Bueno pues yo... - No termina y me hizo parar en seco.

-¿Qué? ¿Qué pasa?- Él hace que me calle y empieza a oler el aire.

-La encontré... -

Por fin.

Caminamos hasta un claro en el bosque donde había una cascada muy hermosa pero vi otra cosa que me destrozó ver...

Scarlett estaba ensangrentada en su forma lobuna mientras estira su collar, pero algo pasa, no puede hacerlo...

De repente aúlla mientras regresa a su forma humana y su aullido se convierte en un grito desgarrador.

-¡Ahh!-

Grita y grita yo me acerco y Connor también pero ella nos mira y se veían esos ojos rojos, colmillos y garras.

-¡Váyanse!- Ruge y vuelve a gritar mientras que se tira de espaldas.

Connor y yo la sujetamos para que ya no se rasguñe más.

-No nos iremos Scarlett... no te dejaremos... - Ella cierra sus ojos fuertemente.

-Ya no resisto más... va a pasar, me controlara ya no pue... -

No termina porque grita de nuevo pero su grito va disminuyendo cada vez y queda con los ojos cerrados y sin forcejear.

La soltamos y la miramos para ver que hace. La mirábamos fijamente hasta que abrió los ojos de golpe, pero no sus ojos verdes si no sus ojos rojos, más intensos que antes, esbozó una sonrisa y se sentó.