Capítulo 4
Pov. Aitana
Me costó un poco pero conseguí llegar al club, miré en la entrada a ver si las veía, no tardé mucho ya que las chicas me estaban llamando a gritos desde la fila.
-Siento el retraso, pero no encontraba el club.
-No pasa nada - dice Sofia.
-¿Y tu hermano? - pregunté al verlas solas.
-Enseguida viene, pero no te preocupes, él estará con su amigo y no nos molestaran - dice Paula, pero cuando dijo amigo, lo dijo con molestia.
-¿No te cae bien? - le pregunto.
-No, no me cae bien, es un cerdo mujeriego que siempre enreda a mi hermano, si no fuera porque son mejores amigos, ya le habría dado una paliza hace tiempo.
-Me pregunto qué ha hecho - formulo mi pensamiento en voz alta.
-La pregunta correcta sería ¿qué no ha hecho? - me contesta, yo me pongo a reír de solo pensar en ello, ella me mira seria - si lo supieras, no te reirías tanto.
-O vamos, no puede ser tan grave - respondo y tanto Sofia como yo nos reímos.
-Pueden pasar - nos dice el portero, al cual le decimos gracias.
-Creanme, si lo digo es por algo, solo que no lo entenderían - esa frase me hizo pensar que tendría que ver con el hecho de ser licántropo, con lo que no quise entrar en detalles para no descubrirme.
-¿Qué quieres decir? - sin embargo Sofia sí, no tenía ni idea de por dónde iban los tiros.
-Es complicado, lo mejor es olvidarlo - Sofia iba a decir algo, pero yo no la dejé.
-Ya sabes como es Paula, cuando se cierra no hay nadie que la haga hablar - Sofia asintió, pero se veía que no estaba conforme - déjalo ya - le digo y ella se queda confundida - estamos aquí para que disfrutéis, no para discutir, así que vosotras a bailar cerca de la barra, para que yo pueda sentarme y vigilarlas.
-Ya somos grandecitas como para que tengamos niñera - dice Paula.
-Lo sé, pero yo no bailo, y quiero que estén seguras, ya sabéis como soy.
-Cierto, pues a bailar - dice Sofia dando inicio a su baile.
Paula y yo reímos por sus actos, no tardó mucho Paula en unirse a Sofia, todo por supuesto cerca de la barra, donde yo me bebía mi Coca Cola totalmente segura y asegurándome de que ellas estuvieran bien.
Pov. Alexander
Son las diez y media, y estoy con John en la fila para entrar al club, la verdad, que haya tantos chicos aquí no me gusta, no me gusta que mi hermanita esté en un lugar con tantos chicos.
-Relájate bro, disfruta de la noche, no parezcas un vejestorio.
-Lo intento, pero pensar que Paula está rodeada de tantos chicos no me gusta en absoluto.
-Ella es mayorcita, y no está sola, tiene a sus amigas.
-Esa es otra, quiero conocer a sus amigas para saber si son una buena influencia.
-Seguro que lo son, ya relájate, le prometiste que no las irías a molestar, y no dices siempre que un hombre de bien nunca falta a su palabra - eso último lo dice con burla a lo cual me molesto, y él se da cuenta - solo era una broma, ni eso se te puede hacer, sabes, desde que eres alpha eres un gruñón, y después de perder a tu mate aún más.
-No me lo recuerdes, han pasado casi cuatro años, cuatro malditos años que he estado sin ella, créeme cuando te digo que cuando encuentres a tu mate, y si te pasa lo que a mí, estarías igual o peor que yo.
-Lo que tú digas - rueda los ojos y dirige su vista al frente donde teníamos al portero mirándonos.
-No sé yo, algo me dice que vais a causar problemas.
-Ya verás que no, lo que pasa es que aquí mi hermano - me señala - está algo molesto por la ruptura de su novia, y yo quiero animarlo un poco - el portero duda pero nos deja pasar - gracias.
El club es bonito, todo el local luce con luces de neón, en el aire hay muchos olores, olor a tabaco de la zona de fumadores, olor a sudor de algunos por estar tanto tiempo bailando, ¿es que no utilizan desodorante?, también puedo oler la colonia tanto de hombres como mujeres. Pero entonces me llegó ese olor, el olor que hacía tanto tiempo deseaba volver a oler, pino y menta.
Es ella, nuestra mate, búscala no puede volver a escapar - dice Conor, cierra el link y yo me pongo a buscarla.
Me siento emocionado, después de tanto tiempo podré tenerla entre mis brazos, esta vez seré más directo, no pienso perderla otra vez. Dejo a John atrás algo confundido, pero no puedo pensar en él en este momento, tardo un par de minutos antes de que la vea, está intentando hacerse paso entre la gente, que es mucha, intento pensar que la diré cuando esté frente a ella, pero después me acuerdo de lo que dijo Sara, la bruja de la manada, y me doy cuenta que ella ya sabe de mi existencia, lo cual me lo pone mucho más fácil.
Al fin la alcanzo y la cojo del brazo, esta se gira y me mira, cuando se giró se podía ver enfadada, pero al verme su cara mostró sorpresa, lo sabía, ella me ha reconocido, yo muestro mi mejor sonrisa.
-Por fin te encuentro mi Luna.
-¿Qué haces aquí? - ella estaba aún en shock, pero su pregunta afianzó lo que pensaba, y una inmensa tristeza me sobrecogió.
-¿Me estabas evitando? - mi voz salía rota, mi lobo aullaba de dolor.
-Yo...- no le salían las palabras, y eso me dolía aún más, ella no me quiere, ella sacudió su cabeza y me miró más calmada, suspiró y volvió a mirarme esta vez segura de sí misma - no puedo estar contigo - siento como mi corazón se hace trizas - no por ahora, tengo planes, y si los supieras, no me dejarías - me mira directamente a los ojos, se libra de mi agarre - cuando acabe nos volveremos a ver y hablaremos, pero hasta entonces no puedo estar contigo.
Mi mate se fue corriendo y yo traté de seguirla, enseguida la perdí de vista por culpa de la gente, así que me empecé a guiar por el olfato para poder alcanzarla, la verdad es que es muy rápida y ágil.
Pov. Aitana
Maldita sea, maldita sea, y mil veces maldita sea, ahora que estoy tan cerca del final, de alcanzar mi venganza, tiene que llegar él, ni siquiera sé su nombre, sé que es mi mate, y le vi claramente dolido, pero no puedo dejar que me frene, y no lo hará, no he estado estos cuatro años intentando llevarla acabo para que lo estropee.
-Brrr - mi móvil inalámbrico suena, ese número solo lo saben los del gremio de cazadores, lo cojo, me lo pongo en el oído, y contesto.
-Más vale que sea importante porque si no, date por muerto.
-Que genio, tranquila CV, pensaba que querrías saber que tenemos información sobre el rey de los vampiros - ese es el agente Shadow, sin duda, y aunque me sea difícil tengo que ir a la organización.
-Dame cinco minutos.
-¿Qué pasa muñeca, tienes problemas?
-No es asunto tuyo - no le doy tiempo a responder cuando ya le he colgado.
Miro hacia atrás, he salido del club y estoy en la calle, a pesar de estar lejos puedo verlo, no quiero hacerle daño, al fin y al cabo cuando termine mi venganza quiero tener una oportunidad con él, y sé que esto lo puede estropear, tendré que confiar en el amor de mates para que eso no pase.
Cuatro minutos más tarde estoy lo suficientemente lejos como para perderlo de vista, sé que con su olfato puede encontrarme, y borrar mi olor de golpe puede hacerle sospechar de mi condición, si es que no lo sabe ya. Uso un hechizo para que aparezca mi ropa de cazadora, seguido hago otro hechizo para crear un portal al gremio, espero por su bien que no me haya mentido, porque si no, juro que deseará no haber nacido, sabe que este tema es muy importante para mí, y ya partí las piernas a uno por mentirme en este tema, y cuando digo que le partí las piernas lo digo literalmente.
Haya vamos, voy a por ti Damián, y con o sin mate, te mataré.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top