Extra #2: La cena

—Sagitario.

Lo llama el rubio saliendo de la ducha mientras el centauro está desparramado en la cama.

—¿Sí?

—Voy a ir una cena con mis padres esta noche.

—Esta bien, me traes algo si pasas por la tienda—dice el chico sin dejar de jugar en su nintendo switch.

—Y tu vas a ir conmigo—agrega.

Sagitario deja caer la consola y lo voltea a ver sorprendido.

—¿Qué? ¿Yo? ¿Ir a tu casa? ¿Ya?

—Si, bueno, tenemos tres años juntos y creo que es hora de que te presente a mi familia, ¿está bien contigo?—el león dice mientras se sigue secando el cabello con la toalla.

Sagitario salta hacia él y lo abraza por la espalda.

—Claro que quiero—sonríe—. No pensé que fueras a decirle a tus padres algún día.

—Bueno, creo que es hora, ¿tú piensas decirle a tus padres también, no?

—¡Claro! yo solo lo guardo en secreto porque pensé que así lo querías tu, además dije que iba a esperar hasta que estuvieras listo.

—Gracias por esperarme, sé que tarde mucho—el león sonríe de lado.

—Esta bien, te perdonó— le frota su mejilla con la suya—, tomaré una ducha.

...

—No puedo creer que el tiempo pase tan rápido y que nuestros amigos sigan juntos, digo ya han pasado casi tres años y ninguno se ha separado.

—Lo sé, es genial ¿no lo crees?

—Lo es... ¿pero nosotros qué?

—Por el momento yo estoy bien, no tengo prisa.

—Es verdad, tenemos desde entonces viviendo juntos y nunca has salido con alguien.

—Es solo que, tu sabes todo lo que estoy haciendo y... creo que no estoy listo para tener una relación—se encogió de hombros.

—Yo sé que no tienes tiempo, pero en lugar de pasar tu día libre aquí sentado conmigo jugando videojuegos deberías buscar con quien salir—le sugiere mientras aprieta rápidamente algunos botones.

—Prefiero estar aquí escuchándote odiar el mundo mientras matamos zombies—Ofiuco ríe y regresando su atención a la pantalla.

Aries se queda mirándolo seria.

—¡Ja, perdiste!—se burla Ofiuco.

...

—Sagitario deja de temblar, me estoy poniendo nervioso también.

— Perdón, es solo que voy a conocer a tu padres y quiero dar una buena primera impresión—dice el chico caminando de un lado a otro con el cuerpo más tieso que el corazón de Capricornio.

—Entiendo pero, ¿tenías que vestirte así?—mira de arriba a abajo el traje del centauro—, solo vas a conocer a mis padres, no a pedir mi mano en matrimonio.

—Pues es casi lo mismo.

—Solo actúa normal.

—¿En serio crees que eso sea una buena idea?

—Tienes razón— se acerca a ayudarlo después de mirar por un rato como trataba de ponerse la corbata azul—. No hables de más, solo responde las preguntas que te hagan, yo me encargaré de decirles y todo saldrá bien.

—De acuerdo, si tú lo dices es porque así será.

—No estés tan asustado—le da un ligero golpe en el hombro.

Leo está por abrir la puerta pero Sagitario lo jala hacia él y lo abraza fuertemente.

—Déjame estar así unos segundos más—susurra.

Leo le da unas palmadas en la espalda y sonríe.

—Tranquilo, estaremos bien—se recarga en su cuello.

Ambos se quedan así en un silencio que lejos de ser incómodo es reconfortante.

—Bien, ya estoy listo—lo suelta después de segundos y toma algo de aire.

Leo asiente y al abrir la puerta ambos entran mirando a todos lados. El rubio se quita los zapatos dejándolos a un lado y mira a Sagitario esperando que él haga lo mismo.

—No puedo—niega frenéticamente.

—¿Porqué no? —El pregunta pero cuando el castaño se le queda mirando el león frunce el ceño—No me digas que traes esos calcetines.

—Son los de la suerte—le dice haciendo un puchero y su novio solo suelta un suspiro—. Ay vamos, los necesitaba hoy.

—Solo quítate los zapatos—lo ordena.

El chico solo obedece dejando ver sus calcetines de Pokémon con los dedos de diferentes colores.

—¡Mama, papá, ya llegué!—grita Leo caminando a la sala con Sagitario detrás de él.

Se escuchan ruidos de la cocina y sale su padre, un hombre alto, canoso y con una gran sonrisa a recibirlo.

—Vaya hasta que te dignas a visitarnos muchacho—su papá se apresura a ir hacia él y le da un fuerte abrazo acompañado de unas palmadas en la espalda

—Lo siento he estado algo ocupado...¿y mamá?

—¡Mi bebé!—su madre, una mujer de aspecto jovial baja rápidamente las escaleras con los brazos extendidos y lo abraza fuertemente—. ¿Cómo has estado? ¡Te he extrañado tanto!

—Bien mamá, yo también te extrañé —el chico la abraza feliz y Sagitario sonríe incómodo aflojandose la corbata cuando siente la mirada de ambos encima de él.

—¿Y este chico? ¿Un amigo?—le pregunta su padre sentándose en el sofá.

—Noches buenas hola—Sagitario sonríe nervioso y al darse cuenta de su error sacude la cabeza y baja la mirada para leer las notas que había escrito en la palma de su mano —. Digo, hola buenas noches...soy Sagitario.

Los padres de Leo solo lo miran confundidos y sonríen levemente.

—Hola—Lo saluda Lucía de manera animada y luego regresa la mirada a su hijo—, por cierto, dijiste que ibas a traer a tu novia, ¿no pudo venir?

Sagitario y Leo intercambian miradas.

...

—Shaggy me mandó mensaje diciéndo que iría a conocer a los padres de Leo, incluso me mandó una foto frente a la puerta—la chica ríe mostrándole la foto.

—Oh, ya era hora—Capricornio deja las botanas frente a la chica—. Pero me preocupa Sagitario, esperó todo salga bien,

—Ojalá, si no aquí lo vamos a tener de huésped por unos días de nuevo.

—¿Porqué siempre que se pelean Sagitario termina quedándose aquí?—se sienta a lado de ella.

—Porque no tiene otro lugar donde quedarse.

—Debería quedarse en la casa de sus padres. Siempre toma mis cosas, ya se ha llevado más de cinco de mis camisas, se a acabado mi colonia y ni mencionar lo que tarda en la ducha—se queja.

—Ni en su casa lo soportan—dice la chica tomando un poco de salsa con la tostada—, pero es divertido tenerlo aquí le da vida al apartamento, como un perrito.

—Es verdad—asiente—, en fin, ¿Te gustó la salsa?

—Te quedó deliciosa—la chica le sonríe—¿no la has probado todavía?

—No, quería que fueras la primera en probarla.

Géminis le ofrece una tostada con salsa a lo que Capricornio sonríe levemente y le da una mordida.

...

—Sobre eso...tengo algo que decirles—el chico apretó sus labios algo nervioso.

—Oh no, no me digas que terminaron—su madre se cubre los labios con preocupación.

—No nada de eso, lo que pasa es...que
...bueno, él...—señala al castaño y toma una bocanada de aire—, Sagitario es mi pareja.

Ambos se quedan callados y conforme pasan los segundos sus ojos se abren con sorpresa.

Su padre está a punto de abrir la boca pero Leo lo interrumpe.

—Y no, no es una broma, tenemos tres años juntos y pensé que sería bueno que lo supieran—les confiesa el rubio y cuando Sagitario nota que comienza a temblar le toma la mano apretándola fuertemente.

Su padre se levanta del sillón con la cara descompuesta y ambos chicos se hacen para atrás alarmados.

—¿Cómo?

—Cariño cálmate—Lucia se pone frente a él para que se siente de nuevo y regresa la mirada a Leo.

—¿Estás seguro que es en serio?

—Mamá...—la llama algo decepcionado.

—Lo siento cariño, lo siento—la rubia se sostiene la cabeza—, es sólo que esto no es algo que podamos digerir fácilmente—lo toma de los hombros  y trata de sonreír para que su hijo se relaje—. Necesitamos algo de tiempo¿Sí?

—¿Tiempo? ¡Cielo! ¿Tu crees que esto está bien? ¿Pero que es esto?

—No digas esas cosas—ella lo mira mal.

—¡Solo mira la cara de ése sujeto! ¡Se nota que no sabe ni como abrocharse una camisa!

—¿Cómo lo supo?

—Shh, te dije que no digas nada—le susurra Leo.

—No solo es un hombre si no que es...es— el hombre no encuentra palabra para describir a Sagitario—. ¡Solo míralo!

...

—Y eso es todo, los veré la siguiente semana, recuerden que subo videos cada martes y jueves ¡Hasta pronto!—finaliza Libra apagando la cámara y soltando un suspiro dejándose caer en la silla.

—¿Terminaste al fin? Estuviste grabando casi 5 horas—le dice Arthur poniendo una taza de café sobre la mesa.

—Si pero ahora toca editar— la chica masajea su cuello.

—¿Quieres ayuda?—el chico se ofrece.

—No, esta bien, me gusta mucho editar mis videos.

—¿Segura?—Arthur alza una ceja—. Se que hay algo que puedo hacer por ti.

Libra abre los ojos de más y lo mira.

—Es verdad ¿lo harías?

—Claro.

Arthur sonríe y se acerca a ella poniéndo sus manos sobre los hombros de la joven y comienza a masajear la zona.

Libra suelta un suspiro pesado y sonríe relajada.

—Lo necesitaba.

—¿Quieres ir a comer algo antes de que me vaya mi casa?—le pregunta el chico.

—Me gustaría, pero tengo mucho trabajo.

—Vamos, tienes tres días grabando y creo que ni te has bañado ¿cierto?

La chica se huele un poco y sonríe apenada.

—No, pero no huelo tan mal ¿o si?

—Iré a prepararte la ducha tu termina tu café—Arthur camina a la puerta.

Libra lo sigue con la mirada un poco confundida pero sonríe de lado.

—Gracias

...

—Eso fue duro—el castaño suelta un suspiro algo decaído quitándose la chaqueta y dejándola sobre el sillón para después dejarse caer en el mismo.

—Te aceptarán al final—le dice tratando de animarlo sentándose a lado de él—, al menos ya no tendremos que ocultarlo y es como un peso de encima menos.

—Me da gusto que te sientas bien—el chico sonríe levemente y pone su mano sobre la del rubio—, sé que sonará raro pero ahora siento que nuestra relación va avanzando. En unos años quizá nos casemos.

—¿Casarnos? ¿No estás pensando muy en el futuro?

—Quien sabe, no me importaría casarme contigo ahora—le dice divertido.

—No digas tonterías—Leo le da un golpe en la cabeza y se levanta—. Ya vamos a dormir.

—No tengo sueño, tengo ganas de hacer otra cosa—el centauro sonríe y tira de él sentándolo en su regazo.

—¿Es en serio? ¿A esta hora?

—Ay, ya tiene rato que no lo hacemos—Sagitario hace un puchero.

—Estoy cansado y ya es muy tarde—el ojiazul niega levantándose.

— Oh vamos, mañana trabajas en la tarde—Sagitario lo detiene—. Una rápida ¿Sí?

—No, la última vez hiciste trampa.

—No hice trampa no es mi culpa que seas tan malo jugando Kombat X, vamos dos de tres, el que pierda lava los platos por toda la semana—le propone.

—Esta bien—Leo cede y cruza los brazos—. Pero si vuelves a hacer trampa vas a lavar el baño por un mes.

—Vale—Sagitario asiente con una gran sonrisa—, Enciende la play y yo voy a hacer las palomitas.

—Mejor al revés, recuerda lo que paso la última vez.

—Si mejor—Sagitario le sonríe apenado y se levanta a conectar la consola.

Leo suelta un suspiro.

—Hay cosas que no cambian.




¡Hola chicos!

Yo sé que este extra fue puro Sagileo, pero yo sé que les encanta.

Perdón por tardar tanto. El 2019 fue un año muy complicado y justo cuando pensé que todo iba a mejorar el 2020 me dice 'pues no mi ciela' pero bueno, cómo suele decir mi madre, ya vendrán tiempos mejores.

Y he vuelto :D

Los quiero <3

Dreamie-san.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top