- LE DIJISTE QUE? - Soltó Izzy mientras esperaba por su novia que terminara de sacar del horno los últimos alfajores de limón bañados en glace.

- Lo que escuchas. Se le tiró de una. - Dijo Clary dejando la bandeja sobre la mesa, se veían hermosos.

- No me tire de una Clarissa. - Le soltó como defensa a la acusación, ella lo miró mal por llamarla por el nombre entero, lo odiaba.

- Alec no podes hacer esas cosas. Se te van a ir todos los tipos así y yo me voy a quedar sin sobrinos y mama sin nietos. - dijo muy segura.

- HEY! - Clary la miró abriendo los brazos. - HOLA!?

- Ay por favor amor, sabemos que no va a pasar, yo no me voy a arruinar mi hermoso cuerpo y vos con lo flaca que sos... - Se achico de hombros y Clary miró a sus alfajores.

- Sus dramas lesbicos no me interesan, suficiente tengo con los míos. - Dijo Alec mirándose las uñas, empezando a incomodarse.

- Si los tenes. Vino de nuevo al menos? - Dijo Izzy mirando a Alec, ignorando a Clary que estaba rallando unas naranjas con mucho énfasis.

- No, hace dos semanas que no viene. - Alec se enfocó en mirar a la colorada. - No te la agarres con mis naranjas querida, son de selección.

- NO ME JODAS ALEC.

- Okaaaaay, es mi retirada. - El chico apuesto se puso de pie con elegancia.

- No le hables así a mi hermano.

- Que no le hable como vos me hablas a mi? - Salto dejando la fruta con fuerza sobre la mesada.

- No soporto a las mujeres en sus días, me voy. Te amo hermana. - Le dijo dejándole un beso en la cabeza pero esta ni lo noto.

• • •

Alec se paseo por el la casa de té toda la tarde. Estuvo en las mesas con las viejas que lo adoraban con locura. Tenía mucha suerte, las atrapaba con sus encantos y estas volvían casi todos los días.

Cuando todos se estaban yendo su corazón se empezó a acelerar. Que ya no iba a venir? De verdad lo había asustado como había dicho su hermana? Miro para la cocina, no se escuchaban gritos ni nada, seguramente ya se había arreglado.

Se dejó caer sobre el mostrador.

Frustrado.

Molesto.

Excesivamente de mal humor.

Con hambre.

Con sueño.

- Estas durmiendo en el trabajo?

Feliz.

Despierto.

El sol había salido de noche.

No existía Satanás.

Jesús era un mito.

Nadie se mueva.

- Cariño este es un trabajo agotador por si no sabias. - Le contestó levantando la cabeza y luego el cuerpo, poniéndose derecho.

- Ok, entonces nunca bailes. Eso sí es agotador y requiere de una destreza muy física.

- Yo bailo perfecto chiquito. - Apoyó sus codos sobre el mostrador y el bailarín hizo lo mismo.

- Probalo. - Le desafío a tan corta distancia.

Podía oler su perfume.

Sus labios carnosos eran hermosos.

Magnus. Que nombre tan bello.

- Alec? 

Escucho su nombre, pero la boca de Magnus no se movió. Una mano se posó en su hombro y noto que era demasiado real. 

Se levantó de golpe y vio que de verdad Magnus estaba parado ahí. 

Frente a él.

• • •

{ Si pueden hagan estos alfajores, son deliciosos "Link al abajo" no se arrepentiran! Recomendado por Alec. }