Un nuevo día ya estaba encima de Gravesfield, y en la casa Noceda, se veía a Luz que estaba ya arreglada para el día, sentada en un escritorio que tenia enfrente de la ventana de su habitación.

No faltaba mucho para que su madre le hablara y le dijera que ya estaba el desayuno, y capaz iba a mandar a Vee para que le avisara, pero ahora mismo tenia la mente puesta en otra parte.

Se sentía demasiado metido en todo lo que el Coleccionista le había dicho ayer, después de todo lo que tuvieron que pasar ella y sus amigos en los últimos meses antes de volver a las Islas Hirvientes, la verdad es que no creía que de nuevo tuvieran algo de lo cual encargarse.

Aun así, lo que el Coleccionista le conto al respecto era algo que no paraba de correrle por la mente, realmente le era bastante complicado saber que es lo que pudo pasar para que llegase alguna especie de perturbación en las islas, y aunque si bien le dijo también que no había algo de que preocuparse por ahora, no estaba segura de que ese fuera el caso más a futuro.

Sea como sea, había que estar preparada para lo que sea que pasara les tuviera preparado para echárselos encima.

La chica se encontraba tan metida en los pensamientos que tenia alrededor de su mente, que no escucho que la puerta de su habitación se acababa de abrir, o más bien, que alguien acababa de abrirla.

-Luz, Camila dice que ya esta listo el desayuno. -se escucho una voz femenina que llamo la atención de la mencionada.

En ese momento, la castaña volteo después de que la llamaran, y ahí vio a una chica de su misma edad, con la piel bronceada y el cabello rubio de tono opaco con las puntas de color azul oscuro, viste un suéter amarillo y naranja con pantalones negros y botas cafés.

-Oh, hola Vee, buenos días. -dijo Luz al mismo tiempo en que se levantaba del escritorio para saludar a quien era ahora como su hermana adoptiva.

-Buenos días a ti también, ¿que es lo que haces? -pregunto Vee con curiosidad.

-Pues nada en particular, solo pensando en lo que haremos hoy. -dijo Luz mientras se rascaba un poco la nuca y con una mirada pensativa.

Con escuchar esas palabras, para la basilisco no fue muy difícil saber acerca de lo que su figura de hermana adoptiva le estaba hablando, pues ayer tanto Luz como Camila le explicaron la platica que tuvieron con el Coleccionista acerca de la perturbación extraña que había en las Islas Hirvientes.

Y si bien, en un principio ella no estaba segura de si creerlo totalmente, tras ver que Luz de hecho fue capaz de crear un hechizo de luz justo como lo hacen los brujos en las islas, fue que ya no tuvo nada de que dudar al respecto.

Sin duda el mundo se volvía cada vez más loco, ya sea si se trata del Reino Humano, o el de los Demonios.

-Por cierto, ¿como te fue con tu salida con Masha ayer? -pregunto Luz con lo ultimo sonando picara al pronunciar la pregunta.

-Eh, oh yo... -decía Vee sacada de onda mientras sus mejillas se comenzaban a tornar de un color rosado, sin saber que decir ante lo que dijo su figura de hermana adoptiva. -Bueno... fue mejor de lo esperado, realmente nos divertimos. -termino de decir al mismo tiempo en que desviaba la mirada hacia otro lado.

El ver esa reacción de parte de la joven basilisco, la joven castaña no pudo evitar el recordarse a si misma cuando comenzó a darse cuenta de lo que sentía por Amity, y la verdad es que, si bien era consciente de que en un inicio es complicado tratar de afrontar lo que implicaban esos sentimientos, también sabía que era del tipo de cosas más bellas por las que cualquiera podría llegar a pasar cualquiera, ya sea un humano, una bruja, un basilisco o un demonio.

El amor era algo que todos eran capaces de sentir, sin importar quien seas o de donde seas, eso es algo que ella aprendió, y lo ha vivido con gran cariño y determinación.

Sin más, Luz se acerca a Vee, para luego poner con gentileza una mano sobre el hombro de su hermana adoptiva, haciendo que esta ultima al volteara a verla, y de esa forma ambas conectan su mirada con la otra.

-Vee, oye esta bien si así te sientes de momento, bien sabes que eso mismo me paso a mi cuando comencé a sentir algo por Amity, en un inicio no estaba segura de muchas cosas, y hay veces en las que creo que fue una suerte el hecho de que ella aceptara querer ser mi novia. -decía Luz con cierta nostalgia al recordar su inicio en la relación con la menor de los Blight, y como es que si bien tuvo sus dudas en el momento, sin duda fue una experiencia que valió la pena vivir, y una experiencia que todavía persiste a pesar de todo. -Lo que quiero decir, es que a veces esas emociones sin duda pueden llegar a dar miedo, pero se que Masha es afortunada de que tu sientas algo por ella, porque eres asombrosa Vee, eres una gran amiga y una gran hermana, no tienes que dudar nunca de eso. -termino de decir con una sonrisa cariñosa en el rostro.

Por su parte, Vee estaba sin duda más que asombrada por escuchar las palabras de la joven castaña, desde que ella y sus amigos llegaron al Reino Humano después de los eventos del día de la Unidad, entre ambas se apoyaron para poder afrontar el hecho de que ya había estado de vuelta.

Y si, en ocasiones eso pudo llegar a ser algo complicado en el inicio, pero conforme el tiempo paso y ella fue conociendo más acerca de la vida de la chica por medio de lo contado por Camila y por la propia Luz, fue que se hizo más fácil el entenderse con ella.

Entendió que, ambas eran mucho más parecidas de lo que hubiese esperado en un comienzo, en si eran como hermanas sin duda, y eos ultimo que ella agradecía de todo corazón, y así es como iba a ser siempre.

-Gracias Luz, me alegro de que estés conmigo, y si la verdad es que disfruto de la compañía de Masha como no te imaginas y, la verdad es que no niego que tal vez sienta algo por ella... pero me da miedo. -dijo Vee con lo ultimo mientra su felicidad decaía. -Ella... ni siquiera se como reaccionaría si... supiera lo que soy en verdad. -termino de decir al mismo tiempo en que se volteaba a ver en un espejo. 

Eso ultimo no fue complicado de entender para Luz, ella sabía acerca de lo insegura que era Vee en cuanto a tratar con algunas personas, en especial con el tema de su verdadera identidad de por medio.

Pero, al mismo tiempo entendía bien todo lo que eso conllevaba, ella sabía que era un dilema demasiado complejo, por no decir casi imposible.

Eso ella lo entendía, sabía como eran esos tipos de dilemas que carcomen desde el interior de la mente de uno, es algo en lo que ella se vi envuelta más de una vez antes de que fuera lo del Día de la Unidad, y vaya que fue algo muy duro tratar con todo eso.

Pero aun así, era comprensible la situación similar que tenia Vee entre manos, y al menos, tal vez podría apoyarla en algo.

-Se que a lo mejor no entiendo mucho sobre como es estar en tu lugar Vee, si bien pase algo similar con Amity cuando me di cuenta de lo que empezaba a sentir por ella, en mi caso fue más que nada porque mis prioridades no las tenia del todo claro, aun ahora siento que a veces mi cabeza esta en más de un lugar. -decía Luz mientras se pasaba una mano por su cabello, recordando bien cuando comenzó a percatarse de sus sentimientos por su ahora novia. -Y, si soy honesta hasta conmigo misma, muchas veces me pregunto que fue lo que realmente termino viendo en mi, porque la verdad es que muchas veces, siento que la he llegado a arrastrar a mis problemas, aun cuando se que ella también trataba con los suyos, no se creo que en un momento sentía que no era el momento de dar un paso así entre nosotras. -termino de decir mientras recordaba su relación con Amity a lo largo del tiempo que estuvieron juntas.

Vee por su parte, solamente se limito a escuchar, ella siempre supo que había una historia entre su hermana adoptiva y la menor de los Blight, no dudaba de que dicha relación y el comienzo de la misma llego a tener sus altibajos, pero si aun así eran felices, eso quiere decir que siempre podían dar con la manera de seguir adelante, y su relación seguía adelante con fuerza.

-Pero bueno, mi punto es que sea lo que decidas yo te voy a apoyar. -decía Luz para luego poner una mano sobre el hombro de la basilisco disfrazada, así logra que esta la voltea a ver, es cuando sus miradas conectan entre si. -No importa que es lo que se termine por dar, pero nunca dudes de que tanto mama como yo siempre vamos a estar para ti... siempre. -termino de decir al mismo tiempo en que se formaba una sonrisa cariñosa en su rostro.

Por otra forma, al escuchar lo dicho por la castaña, Vee no pudo evitar sentirse conmovida, esas palabras dichas por Luz sin duda le llegaron a lo más profundo de su ser, y llegaba a solamente una conclusión.

No importaba que es lo que fuera a pasar de ahora en adelante, o si Masha terminara por saber quien era ella realmente o no, sabía que fuera de eso había gente que la apoyaba, y que sin importar nada siempre iban a estar para ella.

Ahora mismo tenia a una de esas personas enfrente suyo, Luz Noceda no era solo su amiga... ella era su hermana, no de sangre pero si de lazo,  así como Camila que también ha sido como una madre para ella, agradecía que ambas fueran parte de su vida, no cambiaría eso por nada del mundo.

-Gracias Luz, gracias por todo... hermana. -dijo Vee para luego abrazar a la mencionada, quien no tarda en corresponder al gesto conmovida.

-No hace falta que lo digas hermana, siempre estaré a tu lado. -dijo Luz con una clara sonrisa en su propio rostro.

...

Y Fin.

Bueno, hasta aquí llego el capitulo, espero les guste.

Me da gusto traer de vuelta este fic, y el hecho de que Camila haya cuidado de Vee pues, fue lo que me inspiro a desarrollar el capitulo de esta manera, y va a ser increíble ver que es lo que se dará después, ya más o menos hay algo, solo es cuestión de tiempo.

Los invito a que dejen sus votos si les gusta el capitulo, además de que también los invito a que escriban sus opiniones en los comentarios, nos vemos.

Bye.