Narra Neville:

Aparecimos en casa instantes después, y April cayó de rodillas nada más tocar el suelo. Sus ojos estaban anegados en lágrimas y sollozaba con fuerza.

—April... —dije arrodillándome a su lado—. ¿Qué ha sucedido?

Mi abuela salió de la cocina alarmada.

—¿Estáis bien?

Yo asentí en respuesta y le pedí que trajera un vaso de agua.

—¡Está... Está muerto! —casi gritó la joven entre sollozos.

—¿Quién, April? ¿Quién ha muerto? —Estaba realmente preocupado; sin embargo, no conseguí que me dijera nada más, pues las lágrimas no le permitían hablar.

Me limité a abrazarla con fuerza y a acariciar su cabello, que ahora estaba suelto y alborotado, hasta que se calmó. Pasados algo más de cinco minutos, dejó de sollozar, respiró hondo y se separó de mí para beberse el vaso de agua que mi abuela le tendía.

—Dumbledore ha muerto... —dijo por fin, limpiándose las lágrimas—. Lo ha matado Snape.

Sentí como si me golpearan con fuerza y no pude evitar que algunas lágrimas resbalaran por mis mejillas. Ella se abrazó a mí y permanecimos unos instantes así, en silencio. Mi abuela nos atosigó a preguntas, pero al ver que estábamos muy cansados se marchó a su habitación. Nosotros no tardamos en hacer lo mismo. Ni si quiera cené, me di una ducha rápida y me acosté. Solo quería dormir, pero en cuanto me tumbé en la cama, todo el cansancio me abandonó.

Pasada la media noche, mi puerta se abrió con suavidad. Me giré sobre el colchón para ver a April cerrar la puerta con cautela. Avanzó hasta mi cama, donde se detuvo dudando.

—¿Tú tampoco puedes dormir? —murmuré haciéndome a un lado.

Ella negó con la cabeza y se tumbó junto a mí, apoyando su cabeza en mi pecho mientras yo la abrazaba.

—Mientras luchábamos —comenzó diciendo en voz baja pasados unos instantes—, Lupin recibió un patronus de Kingsley.

—¿El que trabaja en el ministerio? —pregunté.

—Sí, es un infiltrado de la Orden del Fénix —respondió, e hizo una pausa antes de seguir—. Los mortífagos han matado al ministro de magia, por eso nos han atacado hoy... Nos hacen pensar que ahora nos gobierna Scrimgeour, pero realmente él está sometido a la maldición Imperius, es Voldemort el que tiene el control y por eso los mortífagos han podido realizar hechizos tan potentes para destruir las defensas de la Madriguera.

—Buscaban a Harry, ¿verdad? —pregunté tras unos instantes de silencio.

April asintió.

—¿Qué crees que pasará este año en Hogwarts? —preguntó.

—No lo sé, sin Dumbledore ya nada nos asegura que estaremos a salvo.

—Tú sí estarás a salvo, yo soy una traidora...

—Me han visto luchando en dos ocasiones junto a los miembros de la Orden del Fénix, el colegio ya no es un lugar seguro para nosotros.

No sé cuánto tiempo permanecimos así, abrazados y en silencio, tal vez una hora, o solo unos minutos.

—Para una vez que dormimos juntos, me habría gustado no tener tantas preocupaciones en mente —suspiró.

—Habrá más noches... —murmuré acariciando su cabello.

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¡¡¡Preguntaa!!!

Esta no está relacionada con los libros de Harry Potter, pero tenía curiosidad.

De las tres novelas que llevo publicadas, ¿cuál es vuestro momento Aville favorito?

Yo, personalmente, siento predilección por el momento de su primer beso :3

Bueno, siento que este capítulo sea tan corto, pero es que mañana temprano cojo un avión a Escocia :)

Tranquilos mis pequeños lectores, como ya dije, seguiré actualizando aún estando allí.

¿Os gustaría que subiera en mi novela de avisos importantes algunas fotos de los lugares relacionados con Harry Potter que visite??