Narra Neville:

Me encontraba en el Gran Comedor, acababa de terminar de desayunar y la profesora McGonagall repartía nuestros horarios para ese curso. En cuanto tuve el mío, me acerqué a la mesa de Ravenclaw para ver en qué horas estaría con April.

—Tenemos Herbología juntos —dijo ella tras beber un poco de zumo de calabaza.

—¿Y Defensa Contra las Artes Oscuras? —pregunté.

—Querrás decir Artes Oscuras, ahora lo llaman así —respondió con un bufido de indignación—. A esa hora tengo yo Trasformaciones, pero nos vemos en Encantamientos.

—Esperaba que pudiéramos coincidir en más clases, estoy en casi todas con los de Slytherin —bufé.

—Al menos nuestras horas libres coinciden —dijo April animándome—. Bueno, tengo que irme, no quiero llegar tarde a mi primera clase de Pociones —añadió tras coger una última galleta—. Nos vemos a la hora de comer —se despidió besando brevemente mi mejilla.

La vi alejarse para reunirse con Hannah, que la esperaba a la entrada para dirigirse juntas a clase.

—Eh, Neville —me saludó Seamus—. ¿Vamos a clase?

Yo asentí y le seguí.

Aquella mañana apenas volví a coincidir con April, me la encontré en un par de ocasiones por los pasillos, pero poco más. Por suerte, al terminar de comer, pudimos reunirnos un rato en los jardines del castillo.

—¿Qué tal el primer día? —pregunté al llegar junto a ella.

—Agotador y aburrido —respondió cogiendo mi mano y echando a andar—. ¿Qué tal tú?

—Más de lo mismo, casi me duermo en Historia de la Magia...

—A mí me lo vas a decir, ayer las chicas y yo nos quedamos hablando hasta tarde, después de dos meses sin vernos teníamos muchas cosas que contarnos —dijo con un leve bostezo. Tras unos instantes pensativa, volvió a hablar—: ¿Crees que podríamos ir esta noche a la Sección Prohibida?

—Podríamos intentarlo —respondí tras sopesarlo un momento—. Aunque esta vez no tenemos la capa, tendremos que ir con más cuidado.

Ella asintió.

—He estado practicando hechizos desilusionadores, podrían servirnos en caso de toparnos con alguien —comentó.

—Espero que no lleguemos a usarlos —musité.

-Gracias por ayudarme, saber más acerca de mis poderes es importante para mí.

—Lo sé —respondí abrazándola por la cintura.

—¿Necesitas mimos, Longbottom? —preguntó haciendo un puchero.

Yo aflojé un poco mi abrazo y bajé la vista algo sonrojado.

—Ven aquí, tonto —añadió acercándome más a ella con una sonrisa.

April se puso de puntillas, unió sus suaves labios con los míos y enroscó sus dedos en mi cabello. Sentí mi corazón latir con más rapidez en aquel momento, a pesar de llevar un año y medio juntos, la emoción que me producía besar sus labios era igual de intensa que el primer día.

—Tengo que irme —me dijo separándose de mí poco después—. Alison tiene una cita en unas horas y las chicas y yo le dijimos que le ayudaríamos a prepararse, es importante para ella, está hecha un manojo de nervios.

—Bueno, te acompaño a la torre de Ravenclaw —dije en un intento de pasar más tiempo con ella.

—Genial —respondió esbozando una sonrisa.

—¿Quién es su cita? —pregunté poco después.

—Se llama Louis, es de tu casa, ¿lo conoces?

—Sí, aunque solo de vista, no hemos hablado nunca.

—Y, ¿cómo es? Alison apenas nos ha contado cosas acerca de él.

—Bueno, es algo reservado y no pasa mucho tiempo en la sala común, pero parece buena gente.

—Espero que lo sea, porque como haga daño a Alison se las verá con nosotras —dijo como si nada.

No pude evitar reír con fuerza al escucharla.

—Tienes suerte de caerles bien a las chicas —bromeó.

—Supongo Jacke ya estará pagando las consecuencias de romperle el corazón a Hannah.

—Por supuesto, no íbamos a dejar que se fuera de rositas... Propuse ponerle crema depilatoria en el champú, pero Hannah no me dejó; así que estoy pensando en algo más leve que reciba la aceptación de mi superiora —respondió riendo.

—Hemos llegado —dije finalmente deteniéndome al pie de las escaleras.

April subió un escalón para quedar a mi altura y esbozó una sonrisa.

—Ven aquí, Longbottom —dijo tirando de la manga de mi camisa.

Apenas unos instantes después de haberme acercado a April, comenzó a besar mis labios con una pasión impropia de ella, pero que, he de reconocer, no me disgustó. Notaba mi corazón golpeando contra mi pecho y sus dedos juguetear con mi cabello.

Al separarnos no pude evitar mirarla sorprendido.

—¿Qué? —preguntó enarcando una ceja con una media sonrisa—. Pensaba que querías mimos —añadió y yo sonreí—. Te espero a las 10 en las escaleras de la torre de Gryffindor —dijo mientras subía las escaleras.

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¡¡Preeeeguuntaa!! xd

Si pudierais salvar a un solo personaje de todos los que mueren en la saga, ¿a cuál salvaríais?

Yo, sin duda, a mi querido Sirius. Creo que Harry necesitaba tenerle a su lado.