Juno sonrió cuando puso la última camisa en el armario. Su cola empezó a moverse suavemente. No pudo evitarlo y tampoco quería hacerlo, estaba en su naturaleza canina.

Cerró el armario y se sentó en su nueva cama, se acostó abrazando la almuada y aspiro el olor a ropa recién lavada. Todo era tan nuevo y emocionante. Muy diferente al olor a perfume que tenía sus mantas en casa, ya que solía olvidar cambiarse de ropa antes de dormir.

Se levantó de un brinco y miro sus compañeras de cuarto. Todas estaban desempacando sin hablar con nadie, no parecía importarles que una loba acaba de olfatear sus sábanas.

"Talvez después del recorrido estemos más cómodas" penso, sin sentirse desanimada. Estaban en un lugar nuevo lejos de la comodidad de su hogar y familia, era normal en caninos ser reservados en esta situación. incluyéndola.

La única razón que le daba fuerza a su cola para moverse era la novedad. Una nueva escuela y un mejor inicio. Aquí nadie la conocía y podría demostrar de que estaba hecha Juno, la loba gris.

La escuela primaria le había dejado un sabor agridulce en el paladar. Muchas personas se metían con ella y aunque solo se basó en comentarios y algunas miradas de parte de algunos estudiantes Herbívoros. Consiguieron algo notable y era aislarla del grupo.

Si, había tenido amigas que le hablaron y la invitaron a pasar el rato. Pero la amistad no fue lo suficientemente fuerte y la lista de contactos en su teléfono era prueba de ello.

Los recuerdos no dolieron solo causaban que se desanimarse un poco.

Su mente regreso a la actuación de teatro que se hizo un unos días antes de que los de primero empezarán el año escolar. Le resultó bastante interesante y espectacular. En especial la actuación del ciervo.

Sus palabras parecían sacadas de lo más profundo de su alma y no un texto memorizado de un papel. Sus movimientos.

la segunda actuación fue muy extraña pero no menos impresionante. Un carnívoro tomo el papel del protagonista y hubo una pelea que se vio casi real. Y todo pudo haber terminado ahí.

O pero la obra tiene que inspirar a los estudiantes...a los herbívoros en específico.

Rompiendo la cuarta pared. El ciervo apareció una vez más, solo que esta vez no la dejo pasmada de admiración como el resto. A su manera de ver, prácticamente dejo en ridículo a los carnívoros. No había pasado por alto los boztesos del lince que está sentado a su lado.

Ellos sólo querían ver al ciervo, apesar que los demás se esforzaron dando su parte en la obra.

Su enfado se calmo bastante después de ver cómo ayudo al lobo a levantarse. Sosteniendo ambas manos en alto. Herbívoros y Carnívoro juntos

Se veían poderosos.

Los aplausos rompieron la tención y ella se unió a ellos. Tomando una desición

Quería pertenecer a ese club.

Ya se había enmendado. Y sólo faltaba esperar la respuesta del profesor que supervisaba y el líder de los actores.

Ese era el puesto que necesitaba. Con el le seria mucho más fácil hacerse conocida en la escuela. El club de teatro será la herramienta que esculpiria su imagen y armaría su escalera a la cima para ser...

Un Beastar

Haci sus puntos de vista serán relevantes para la sociedad. Se asegurará de que la discriminación hacia los carnívoros se la menos posible.

Observó sus manos grandes y fuertes. De uñas largas, pero con la punta redondeada por una lima para evitar accidentes. No era de su agrado cortarse las uñas, siempre sentía un cosquilleo desagradable en sus dedos, y podía sentir(de alguna manera) su ausencia por varios días, solo se calmaba cuando empezaban a crecer otravez.

Oyó un sonido estraño.

Sus orejas se giraron hacia su origen y sus ojos las siguieron un momento después.

Su compañera( un chiwawua negro) sucumbió a la naturaleza nerviosa de su raza. Des empaco de su mochila un táper y dentro había unas galletas que por la forma irregular de las esquinas y las partes chamuscados. Pudo deducir que fueron hechas en casa.

Ella las comió lentamente provocando el sonido que llamó su atención en primer lugar. Los sonidos crujientes que salían de ese pequeño hocico eran tan diferentes a los gruesos sonidos de destrucción que sonaba de las fauces de su familia.

Lamió inconscientemente sus labios, sintiendo sus propios colmillos presionar su lengua. Algunos dicen que la lengua de un carnívoro es suficiente para dejarle un moretón a un animal pequeño. La Fuerza, sus garras, colmillos. Eran animales hechos para ser fuertes y proteger a los débiles.

Sintió su pelaje, suave y bien cuidado. De un color un tanto peculiar para un lobo gris. Los músculos tonificados de su cuerpo. moldeando una hermosa figura femenina, pero fuerte al mismo tiempo gracias trotes por la mañana y ejercicios antes de dormir. Ojos grandes, voz dulce. Nadie puede negar que es hermosa y estaba orgullosa de ello.

Garras, colmillos, la fuerza. Eran máquinas de matar.

Y eso es todo lo que ven. Todo lo que es su especie. Pero ella no quería...

Ella era mucho más que un consumidor de carne.

El chirrido de las camas la sacaron de sus pensamientos. Miro al reloj ¿Ya eran las diez?
Dentro de Diez minutos empezaría el recorrido. Había terminado de desempacar a las nueve y media ¿Tanto tiempo estuvo escribiendo un monólogo en su cabeza?

Se levantó con un chirrido y acomodo su uniforme. Su cola recuperó su energía¡Ya quería conocer la escuela!

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La escuela como era de esperarse era enorme. Los colegios mixtos (carnívoro/herbívoro) eran considerados de alto rango. Pues las oportunidades de trabajo se incrementaban, no debido a su fama como escuela elite ni por su nivel académico. Si no por la variedad social. Leer el nombre de esta escuela en un currículum de trabajo. Era casi asegurar que podías trabajar con cualquier especie. Al ser un internado. Obligaba a los estudiantes a una vida segura de independencia dentro de los muros.

O no tan segura.

El asesinato de la alpaca aún estaba presenté.

Y odiaba al asesino. Por culpa de animales como el, los carnívoros eran mirados con miedo envés de respeto.

Si en algún momento tenía a oportunidad. Vengaría a la alpaca, un estudiante, un alma pérdida.

El profesor dio por terminado el recorrido. Ahora eran libres de pasear lo que quisieran hasta el toque de queda. Mañana empezaran sus classes. Lo estudiantes empezaron a dispersarse en grupos y ella siguió su ejemplo. Caminando por los pasillos llenos de animales, mirando puntos de referencia, olfateando olores discretamente.

Sus pasos sonaron cada vez más fuertes mientras las voces y el escándalo de los demás estudiantes se volvían más débiles. Toco la campana y los últimos estudiantes de años superiores se fueron a clases. Dejándola sola.

Pero no paro de caminar por un pasillo solitario. No tenía ganas de buscar a alguien de su grado. Se le pasó por la cabeza volver a la habitación e intentar entablar una conversación con sus compañeras de cuarto.

-¡Oye! ¡Ten cuidado!

- Lo siento- estuvo tan metida en sus pensamientos que no se fijó por donde caminaba. Le tendió la mano a una cierva, ella apenas le llegaba a la cintura cuando estuvo de pie una vez más.

-de verdad me disculpo.

-esta bien ¿Ok? Solo mira por donde caminas- dijo en tono brusco la más bajita mientras recogía su libro del suelo. Estaba siendo un poco grosera pero Juno no Hiba a seguir su ejemplo.

-soy Juno, de primer año- ella hizo una ligera inclinación como saludo y una sutil disculpa. Las orejas de la otra hembra temblaron un poco.

-Yumi. Tercer año- ella hizo énfasis en la segunda palabra, pero siguió mirando un poco al suelo.

-perdone mi curiosidad Yumi-Chan, pero qué tipo de animal es usted?- quería entablar una conversación con ella.

-Uhm...un ciervo Pudu-

-¿Pudu?

-..si, somos uno de los ciervos más pequeños del mundo. Muchos animales no conocen la monarquía de los ciervos. Pues los más conocidos son los alces, los ciervos rojos y los ciervos de campo.

-jiji, usted es muy aplicada a los estudios, Yumi-chan-le agradaba está chica, talvez ya estaba haciendo su primera amiga.

-Bueno. Sería estúpido no saber de mi propia especie. Eres un lobo gris ¿Verdad?-pregunto aunque sono más como una afirmación. Sonrió con orgullo sin mostrar sus colmillos.

-si, soy de una especie muy conocida. Nunca an tenido dudas de mí linaje.-juno se rasco la oreja izquierda. La conversación si se le podía llamar haci, se estaba volviendo forzada.

-bueno...los herbívoros tenemos que hacernos notar- ella levantó la cabeza por primera vez. Tenía ojos ojos negros.

Y en ellos había miedo y enojo.

El mundo de junio se detuvo por unos segundos. Segundos donde solo miro al pequeño animal al que creía sería su primera amiga herbívora, su primera compañera de secundaria.

Su primer avance a una mejor sociedad. A un ejemplo de que los herbívoros no deberían temer a los carnívoros por lo que son. Si no por lo que hacen

La mira en blanco de la loba empezá a asustar a Yumi. No era muy fanática de los carnívoros debido a su tamaño y que por eso, podrían tragársela viva sin que nadie se enterará. Su cuerpo quiso corres pero lo ignoro estúpidamente. Ignoro el estado de la loba tras sus palabras y expreso como se sentía.

-estoy Artá de que me miren por encima del hombro y tener que ver sus colmillos desde aquí abajo. En esta escuela todos los animales van sin importar su categoría. Pero rara vez se hablan entresi. Y me gustaría que se quede haci.

Pero si ese carnívoro no hizo nada. ¿Es justo que lo vean haci?...

- muchos de nosotros mueren por buestra culpa y no hacen nada para mejorarlo ¿Tan dificil es dejar de comer carne?

Como si nacer carnívoros fuera un pecado y fuera nuestra culpa...

Para Juno era claro que yumi, su supuesta senpai. No era nada más que una ignorante, no sabía de lo que hablaba. Ser un carnívoro es una responsabilidad tal como los herbívoros. teniendo que producir comida de sus cuerpos para abastecerlos de nutrientes.

-si hubiésemos ganado la guerra. Ustedes no estarían aquí...estarían...

Gruñido

Yumi solo sintió un tirón en sus piernas antes de correr y Juno la persiguió. Presa y depredador, ambas dominadas por sus instintos básicos.

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Te atrapare ¡TE ATRAPARE!

Nunca me había sentido haci pensó Juno con voz tranquila. Mirando a yumi correr desesperada con sus pequeñas piernas. Era tan pequeña, tan frágil con una lengua demasiado larga.

Podría correr un poco más rapido, y la tendría en sus garras. La des membraria lentamente y vería su sangre derramarse. Y por alguna razón no le asusto ese pensamiento. Pero no aceleró. Simplemente corrió tras ella pisándole los talones, sus movimientos bruscos no le impedían ver las reacciones de su cuerpo herbívoro al miedo. Su cabello erizado y su incapacidad de gritar por ayuda.

Algo dentro de ella se estaba riendo de la situación y no se asusto por eso. Se sentía como si estuviera viendo una película desde el fondo de su mente. Podía oírse jadeando de manera exagerada y podía sentir su sangre correr furiosa por sus venas, repartiendo adrenalina por todas partes.
Pero no podía sentir sus brazos como parte de su cuerpo, se movían desgarrando el aire detrás de su presa. Todo Hiba en modo automático.

Se estaba burlando de ella, su cuerpo se estaba riendo y gruñendo de furia a la vez.

Vio con indiferencia como corrían hacia la puerta principal.
Ella se impulsó para abrirla de un empujon.

Tubo suerte de que las puertas se habrán hacia fuera escucho un susurro seductor de alguna parte de su mente.

Eso la tomo desprevenida y cerró los ojos por un momento. Eso basto para perder de vista a yumi.

Recobro momentáneamente el movimiento de su cuerpo y callo de rodillas jadeando, se Apollo con sus palmas en el suelo. Miro curiosa el suelo.

Aún era de día pero el sol no estaba presente y por esta parte de la escuela no había aulas.

Tu presa se va a escapar.

Esa voz

"Quién eres, que quieres" en su mente habia una bruma. No sentía nada que no fuera hambre. Y no quería más que enterrar sus colmillos en algo blando y tierno.

Soy lo que siempre serás no sentía miedo de esa voz. Pero algo de razonamiento empezó a llegar a su cabeza.

Un monstruoso carnívoro

A la mierda.

Se impulsó con sus brazos y piernas, empezó a correr a cuatro patas. Olía su aroma. Era más claro que nunca, tan claro que casi podía ver el rastro de su olor. Haciendo un camino en el suelo como en el cuento de Hansel y Gretel. Quitando al club de teatro.

Entró y era un ambiente muy diferente al de afuera, oscuro. con un siguió que no sabía que tenía y que no le importaba saber su origen. Siguió el rastro gateando. Su boca empezó a salivar y...Salto

Se estrelló contra un montón de cajas, que calleron haciendo un gran escándalo.

GRrrr

GRrrr

Se recompuso y salto. Su vista siega de hambre.

Y lo atrapó.

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Louis solo había ido al club de drama solo para recoger su tarea de su oficina. Estando temporalmente liciado. No podía ser parte de las actividades y se había dedicado ese tiempo a estudiar.

Cuando de repente un montón de cosas cagendose lo hicieron darse la vuelta. Intento ver algo pero estaba oscuro y la puerta por donde entró se había cerrado.

GRrrrrr

El grito se quedó atrapado en su garganta cuando fue empujado contra el piso. Su muleta salió de su brazo y quedó olvidada.

Sintió una presión fuerte al rebedor del cuello que casi no lo deja respirar. Un peso superior al suyo en su respaldo y otra mano apretando su muñeca. El brazo restante fue aplastado por una rodilla.

¿Era el asesino de tem Buscando otra víctima?

Sintió el cosquilleo de un osico respirando en su nuca. No podía moverse, su corazón latia muy rápido.queria forcejear pero no pudo, su cuerpo no se conectaba al cerebro como debería.

La mano en su cuello empezó a a apretarse cortando su respiración por completo. El pánico llegó bastante rápido. Y empezó a llorar lágrimas silenciosa mientras intentaba pararse sin éxito.

Tenía miedo. Mucho miedo.

Si vida paso en un segundo frente a sus ojos.

-mi vida no vale nada...-susurro Louis antes de caer inconsciente.

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Hola. Este es mi primer fanfic de beastars. Tenganme pasiencia porfavor.

No soy buena esperando cosas

Gracias por leer