después del peligro
Louis escucho el sonido de la puerta cerrándose. Su atacante aparentemente se había ido pero lejos de echar a correr como alma que lleva el diablo, se quedó en el suelo. Sosteniendo su cabeza adolorida, en su cien ya podía sentir los indicios de un hematoma y su espalda no estaba en mejores condiciones. Tenía que levantarse e irse sin alarmar a alguien. Coger sus botiquín de primeros auxilios y tratar sus heridas.
Se repetía una y otra vez sin siquiera intentar levantarse. Se quedó un buen rato pensando en cosas triviales como la tarea de biología que tenía que entregar en tres días, el club de teatro, su padre. Repasando cada recuerdo tranquilo que tenía y preguntándose si lo que acababa de pasar fue real.
Por qué no lo parecía, no tenía sentido. Estar otra vez bajo las garras de un carnívoro era un pensamiento muy vago. Que siempre se ocultó en el fondo de su mente, junto a sus primeros cinco años de vida, cuando no era Louis el ciervo rojo. Cuando solo era carne.
No sintió miedo, ni Tristeza, ni siquiera pánico. Era como si sus emociones se hubieran apagado, se sentía extrañamente tranquilo y aliviado. Aliviado de que el otro animal hubiera decidido no comérselo.
Olvidó el dolor de su espalda y de otras partes del cuerpo que fueron víctimas de las garras de su agresor. Todo se sentía tan irreal.
Intento pararse, pero su tobillo protesto. Entonces recordó que tenía una lesión en uno de sus tobillos, solo podia sentarse. Levantó la cabeza para buscar su muleta pero aún seguía muy oscuro. Quiso moverse y gatear hacia el interruptor de la luz, pero el sonido de la puerta lo congelo.
El estaba dándole la espalda a la puerta. La luz exterior formó una especie de lienzo en la pared en frente de el. Donde pudo ver una silueta enorme interfiriendo con la luz del día. No podía saber que especie era pero solo sabía que era muy grande.
Su verdugo había regresado. El miedo y la incredulidad sacaron del trono a la tranquilidad y ahora se peleaban por el puesto. Se sintió estúpido por no haber actuado más rápido, pero todo sucedió muy rápido. Solo le había dejado un momento para relajarse. Para después romper su tranquilidad con un miedo más fuerte que el anterior.
La puerta chirrido mientras la cerraban, llevándose con sigo el único rayo de luz de esperanza que tenía y pintando la pared con negro, dejando otra vez oscuridad.
Viendo el tamaño de su verdugo. Estaba más que claro que no podría ganar contra el y mucho menos escapar con vida. No se dio la vuelta cuando se oyó un resoplido detrás de él y grandes pasos se acercaron asta estar demasiado Serca.
Podía sentir su presencia detrás de él. Su mirada viéndolo desde arriba como algo insignificante, una hormiga o algo más minúsculo. Oyó el sonido de la ropa cuando el se agachó y el aliento caliente le tocó el pelaje de la nuca mientras las grandes fosas nasales lo olfateaban.
Las heridas antes olvidadas volvieron a gritar en dolor. Sintió los rasguños más ligeros picando su entrepierna y otros lugares debajo de la ropa. Recordó la figura enorme y masculina del animal detrás suyo y sus ojos picaron con humedad.
Hiba a terminar el trabajo? Y después se lo Hiba a comer?
Su corazón latía a mil. No quería morir, tenía muchos problemas y cosas por las que sufrir. Un padre al cual complacer siendo un Beastar, un escenario donde brillar. Sollozo no quería morir.
Alguien debió escuchar sus plegarias. Pues el gran animal solo se limitó a alejarse y caminar hacia alguna parte Serca de la puerta. Sus ojos se cerraron por reflejo cuando la luz de las bombillas nublo su vista. La puerta chirrido otra vez y dio un golpe cuando se azoto.
Esta vez miro detrás de él. Ahora viendo con claridad que su muleta estaba a solo un metro de distancia. Impulsado por la adrenalina se estiró asta atraparla. Se levantó con prisa y casi se resbaló.
Aún había sangre en el escenario.
Eso le trajo algo de dejabu pero no le dio más vueltas. Estaba entre decirle a alguien o no, y de inmediato eligió la segunda opción. La policía hizo la vista gorda con el asesinato de Tem. No podía proporcionar muchas pistas, salvo que era un animal grande y talvez la saliva contaminada por su propio ADN en su espalda.
Este era el asesino de Tem. Y obviamente le había dejado un mensaje. Dejó las luces encendidas para demostrar que no vendría otra vez y que le había perdonado la vida.
Sufrió un temblor al ver la cantidad de sangre en el suelo. No debería ser mucha para su especie, pero sus problemas de desarrollo y crecimiento hicieron esto, una perdía significante.
Pensó en como limpiarlo. Tenía que eliminar la evidencia no solo a la vista. Los fluidos corporales de cualquier tipo siempre dejaban un rastro duradero.
Pensó un momento. En el armario había productos de limpieza muy fuertes. Para eliminar los olores de los animales. Algunas especies marcaban su territorio solo caminando por el, y las feromonas tienden a molestar a los otros carnivoros. Debería ser suficiente no solo para borrar la mancha escarlata, sino que también para quitar su olor.
Mientras que avanzaba con su muleta. No pudo evitar sentir que estaba siendo un cómplice del asesino limpiando sus huellas y callando la verdad. Su orgullo era demasiado alto para su bien. Pero de nuevo, no tenía pruebas para ofrecer y solo causaría un pánico innecesario en la escuela.
Abrió la puerta del armario y dentro estaba lo que necesitaba. Agarró la botella de desinfectante y la olfateó después de abrir la tapa. Un olor muy fuerte a alcohol lo golpeó y le hizo lagrimear .
"Definitivamente, es el correcto" volvió a tapar el recipiente, arrugando la nariz.
Oyó la puerta por tercera vez.
Louis se preguntó si el universo se levantó con ganas de putear su vida. Las luces estaban encendidas, pero no quiso darse la vuelta. Se oyeron pasos pero estos eran dimitutos.
La tención no desapareció. Si bien era otro animal no muy alto y por lo tanto no su atacante. Eso ya era un punto a favor en este día de mierda. Por otra parte, podía ser un profesor y sus planes estarían por los suelos. Se escuchó una inalación brusca.
—¡¿Lou..Louis senpai?!— solo entonces se dio la vuelta. Era otro ciervo. Uno muy pequeño, del tamaño de haru. Pudú era su raza.
Ella estaba estática frente a la puerta. Mirando horrorizada el charco de sangre y a el. Se preguntó cómo pudo conectar ambos puntos. Asta que noto que había dejado huellas de zapato y de su multa siguiéndole asta su ubicación.
"Mierda"
—Lamento asustarte...Tuve un pequeño problema con un carnívoro...pero no es tan grave como parece—sintio dejabu otra vez. Pero a diferencia de haru, esta hembra si lo conocía. La inestabilidad de su semblante se desvaneció. Combiertiendola en un gesto desinteresado. Signo de alguien que vivía estás cituaciones a menudo.
Lástima que la inflamación de su garganta mando a tomar por saco ese tono autoritario. Las palabras se oían ahogadas y ásperas. Aún le costaba respirar con regularidad y tubo que dar dos bocanadas de aire durante era oración. Solo alarmó más a la pudú en vez de tranquilizarla.
— ¡Que!.¿¡Pero,está bien?! ¡Déjeme llamar a un profe..
—¡NO!
El "no" hizo un eco de ultratumba. La hembra se quedó callada, su pensamiento frenético se detuvo debido al inesperado estallido del otro animal.
Louis se arrepentío por cuarta vez este día de sus decisiones estúpidas. El esfuerzo en su garganta lo hizo convulcionar en un ataque de tos. Las heridas y golpes en todo lo que vendría siendo su torso lo castigaron con dolor y al toser para quitar la sensación de algo en el cuello, solo le dieron más ganas de toser. No podía respirar bien y no podía parar, estaba en un pequeño siclo de reacción/reflejo tortuosa.
Tos-dolor-tos y haci sucesibamente.
Una mano más pequeña que la suya acarició su cabeza y la otra se limitó a tener contacto con su brazo.
—deje de toser y envés de eso respire suave...—la voz de la hembra se convirtió en un susurro que pretendía ser calmado. Pero la angustia rompía la intención de su tono. Bueno, no todos sabían finjir como el ni estaban en un club de teatro para pulir esa habilidad.
Pero sus instrucciones tenían sentido.
Lentamente dejó de toser y se enfocó en solo respirar. Era una tarea complicada, cada inalación era desesperante. Tenía la impresión que su garganta se cerraría y no lo dejaría respirar más. Pero las caricias de el pequeño mamífero lo tranquilizaron poco a poco. Sentir a alguien a su lado ayudo más de lo que creía.
Pasando los minutos. Pudo controlar su respiración. Miro a su costado y la hembra arrodillada a su lado le dio una sonrisa alentadora y tímida. No había notado en qué momento se había arrodillado al piso.
Se quedaron callados un momento. Era ese tipo de silencios calmantes después de una emoción fuerte y desagradable. Quería quedarse en ese momento para siempre.
—tenemos que decirle al director Gon—
Oh cierto, no podía. Tenía que convencer a esta hembra de no andar con el chisme.
—No sabemos quién fue... solo vi su silueta y nada más. No servirá de...nada— ella lo miro como si hubiera perdido la cabeza.
—¡Ahí un asesino suelto, no podemos callarnos algo haci! La policía sabrá que hacer—el la miro irritado.
— Las autoridades no hicieron nada...con Tem la alpaca cuando se encontró su...cuerpo. dudo que hagan algo por mi— las palabras las dijo entre pequeñas pausas para tomar aire, alimentos no estaba tosiendo.
—¡!P..pero hay que decirles!!...ellos tienen que saber..el director tiene que saber...los carnívoros son un peligro!! Tienen que irse—las palabras fueron dichas con tanto veneno que los dragones de cómodo seguro se sentirían orgullosos.
El levantó una ceja. Esta chica empezaba a molestarlo, sonaba como el tipo de persona que habla de cosas que no sabe. Le recordaba a esos animales de los canales para herbívoros. Todos hablando de atrocidades de carnívoros y seguro nunca vivieron una. Hablan en nombre de los animales que si las vivieron.
La chica pareció olvidarse del tema principal, empezó hablar sobre la biología de los carnívoros (la mayoría falsos) sobre cómo no tenían instinto y comían a otros herbívoros por conciente placer.
El no tenía tiempo para esto.
—si le dices a alguien. La escuela correrá peligro. Es mejor hacer como si no supiéramos nada. Cuando podamos. Investigaremos. Y tendremos algo sólido que darle a los oficiales.
Los ojos de la chica brillaron. Y una sonrisa de venganza destello sus adorable rasgos.
—Se quién fue—
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Ya volví. Este cap es más corto porque me descoloque un poco. No sabía qué hacer a continuación para que no se viese forzado. Creo que sería mejor darle un cierre suspensivo.
Lo de los problemas de desarrollo de louis tienen más sentido que la falta de alimentación en la niñes. Los compañeros de celda de Louis se desarrollaron normalmente y el es el único que parece no tener el peso y la altura ideal para su especie. Cuando Kyuu-nueve le habla, expresa que está feliz de que allá crecido un poco. Y a lo largo de l manga se dan ciertos guiños a eso.
También tiene sentido para otros dos puntos:
Se supone que era ganado ¿No se supone que tiene que estar gordito para que se lo coman? No tendría sentido que vendieran algo tan caro y de tan mala calidad(por muy cruel que suene)
Tiene más sentido que sus padres lo hayan abandonado por ser débil. Y no querían cargar con un hijo haci. Incluso es posible que tenga algún problema mental hereditario. Eso de que mantengo actuando y sea tan manipulador e insensible no se me hace normal.
Hay un canal que se llama"el geek furioso de la literatura" que trata de libros, os recomiendo las reseñas de libros, te diese lo que no debes hacer en una novela de una manera muy divertida y para nada aburrida.
El tío es la pollo. Os dejo esto para que se diviertan un rato.
Asta luego y no salgan de casa
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