Capítulo 37 "Un regalo especial sin siquiera saberlo"
Carolina
— Qué pasó? Por que esa carita cuñadita? — la muy estúpida se encontraba sentada en la cama, así que decidí sentarme a su lado.
— No nada — levanta el rostro y veo como quita una lágrima que se encontraba bajando por su mejilla.
Ni se imaginan como disfruto esto.
— Estás segura? — hago como que me preocupa, soy muy buena fingiendo.
— Sí — asiente junto a una pequeña sonrisa.
La tomo de las manos.
— Vente — la llevo hasta la cocina — Mira, te preparé un desayuno especial — sí, si quiero que me crea tengo que hacer las cosas bien — A poco piensas que lo he olvidado? Feliz Cumpleaños cuñadita! — me acerco y la abrazo.
— Neta? — sonríe — Hay Caro no sé que decir...cómo nadie me — calla y ni se imaginan las ganas que tengo de burlarme — Realmente gracias — me vuelve abrazar y quise alejarla pero no tengo que hacerlo — Aiii! Todo está hermoso.
— Oye no llores — otra vez la vuelvo abrazar — Ya eres mayor de edad eh! — sonríe.
— Sí...sabes ni cuenta me había dado — estúpida.
— Bueno ya — sujeto sus
manos — A comer no?
— Sí — nos sentamos en nuestras respectivas sillas.
Vamos a empezar con mi alegría y diversión.
— Oye Valu y que te dijo
Mike? — veo que deja de comer, agacho la cabeza y sonrio con malicia discretamente — De seguro más tarde te llevará a cenar por ahí, o te comprará flores, chocolates — hago que me ilusiono — O tal vez te esté preparando una sor...
— Ni siquiera me ha saludado — interrumpe y en su voz pude notar tristeza — Creo que...se le ha olvidado.
— Cómo? — finjo sorpresa — Bueno si es así entonces lo llamaré ahora mismo para que...
— No es necesario.
— Pero Valu, como se va a olvidar el cumpleaños de su novia? — veo como baja la mirada con lentitud, así que yo aprovecho en sonreír — Hoy es un día especial para tí y él de tonto que se olvida pero me va a escuchar — tomo mi móvil y ella se da cuenta.
— Qué vas hacer?
— Llamarlo para decirle que hoy es tu cumpleaños.
— No lo hagas...él tiene que saberlo por sí solo, no que alguien se lo esté recordando.
— De seguro se te olvidó a tí decírselo — termino de hablar y me mira fijamente — Digo que quizás nunca se lo contaste? No lo mal intérpretes.
— El lo sabe desde que era una bestia...tal vez solo lo ha olvidado.
— Es humano Valu, puede pasarle a cualquiera — la miro — Cómo a mí porque te cuento que ya antes me había pasado — sonríe ligeramente para luego desviar la mirada hacia su móvil. De seguro la muy idiota está esperando que mi Mike la llame, que ingenua — Estás esperando que te llame verdad?
Deja de mirar su móvil.
— Eh...no, solo esperaba la llamada de...no sé, mi padre o mi mejor amigo tal vez — pues sigue esperando porque no te van a llamar.
— No me digas que ellos también lo han olvidado? — no dice nada — Debe ser bien feo que nadie recuerde tu cumpleaños verdad? Primero Michael que es tu novio, también tu papá o Benicio que es como un hermano para tí pero no te preocupes que yo si lo recordé y es por eso que te preparé este delicioso
desayuno — sonrio.
— Eh...gracias Carito — sonríe. Pude ver claramente que lo que dije anteriormente le dolió porque sus ojos se encuentran llorosos y ni se imaginan como lo disfruto.
Es mi venganza por Matteo, eso le pasa por cancelar el plan. Bueno, seguiré con lo mio.
— Valu, tranquila que hoy es un día especial para tí y no la pasaras sola porque yo estoy contigo — mierda el regalo de Matteo! — Y...— saco la cajita, me le acerco y se lo doy — Te compré esto, espero que te guste — sonrio con dulzura.
— No tenías porque hacerlo.
— Claro que sí, además de ser la novia de mi hermano, eres una gran amiga y te lo mereces — me abraza por sorpresa y no me quedo otra que
corresponderle — No lo vas abrir? Verás que te gustará — abrelo de una vez que quiero saber que es!
Lo abre con lentitud y es...una pulsera? Hug! Es neta!? Y todavía es una pulsera hecha de hilos. Y yo que pensé que era un anillo, que idiota es mi querido aliado, tanto lío por una simple y horrenda pulsera.
Veo que toma la pulsera con sus dedos, levanta la mirada y ahí fué que me dí cuenta que estaba llorando. Y ahora que mierda?
— Valu qué pasa? — me pongo a su altura ya que ella estaba sentada — No te gusta? Si quieres lo puedo regresar?
— Gracias Caro — y ahí va que me vuelve a abrazar sin previo aviso. Qué cree que soy? Su oso de peluche? Ya sacate rubia asquerosa!
No entendía nada pero tengo que saberlo.
— Qué pasa? — junto sus manos con las mías — Por que lloras? Valu...no te gusta verdad? Dímelo, neta que no me enojo...
— No es eso — interrumpe con la voz apagada — Lo que pasa es que... — mira la pulsera que tenía en sus dedos y sus ojos se vuelven a llenar de lágrimas — Sabes, yo tenía una pulsera así de igualita cuando era niña — qué? — Me la hizo mi madre — sonríe — Bueno eso es lo que me dijo mi padre — seca sus lágrimas — La perdí y por más que busqué nunca la volví a ver y ahora tengo una igual en mis manos. Cuando abrí la cajita y vi la pulsera creí que era la que siempre estuve buscando, la que se me perdió...la que nunca pude encontrar pero luego me dí cuenta que no es esa.
— Por que lo piensas? Si dices que son iguales?
— Son iguales pero tienen una diferencia — diferencia? No entiendo — La mía tenía una “V” en la parte de atrás, en cambio esta tiene una “R” — me enseña la parte de atrás de la pulsera y era cierto. Era una “R” la que había ahí. No tendría que ser una “M”. Hug! El idiota se ha equivocado.
— Si quieres puedo ir a la tienda y cambiarla por una que tenga la “V” — propuse.
— No te preocupes, no es necesario. Está hermoso igual, gracias Carito, no sabes lo especial que es tu regalo para mí...neta te lo agradezco.
— Te lo mereces — la abrazo — Te quiero mucho cuñadita — miento.
— Yo igual — sonríe — Cómo supiste?
— Saber que?
— Lo de la pulsera? Cómo lo sabes si nadie lo sabe, a excepción de mi padre y Benicio?
— Valu solo estuve caminando por las calles y vi esa pulsera y realmente creí que era un perfecto regalo para tí. Lo compré pero no me di cuenta que detrás habían iniciales de algún nombre, si fuera así hubiese escogido una que tenga la “V” de Valentina. Nunca creí que esta pulsera significaría tanto para tí, solo quise comprarte un regalo de cumpleaños y resulta que mi regalo te trajo bonitos recuerdos.
— Gracias — me vuelve abrazar — Esto significa mucho para mí Carolina, realmente muchísimas gracias — juro que quiero que se salga encima de mí!
...
Valentina
No lo puedo creer, no puedo creer que ahora mismo tenga puesta la pulsera que hizo mamá para mí, aunque no sea la misma siento que es así. Una pulsera como esta hizo mi madre con sus propias manos y desde que me la dio siempre ha estado acompañándome, siempre ha estado conmigo...hasta que la perdí. Y ni se imaginan la culpa que me inundaba por dentro por haberla extraviado.
Esto lo tiene que saber Benicio!
Rápidamente tomo mi móvil y cuando estuve a punto de marcar su número, recuerdo que nisiquiera ha llamado para felicitarme por mi cumpleaños, ni siquiera un mensaje. En realidad nadie lo ha hecho, nisiquiera mi padre...me parecía raro pero igual trato de alejar mis pensamientos. Quizás lo hayan olvidado, bueno por lo menos hubo alguien que se acordó y ese alguien fué Carolina quién por cierto me ha dado un regalo que sin querer es algo significativo y especial para mí.
Ahora si, definitivamente el concepto que tenía sobre Carolina ha cambiado rotundamente. Me ha demostrado que es una linda y buena chica, no solo por fuera sino también por dentro. Lo que pasó con Benicio quedo en el olvido. Somos humanos y podemos equivocarnos, eso mismo me dijo ella y es la pura verdad.
Lo que sí no lo puedo negar es que...se supone que hoy es un día importante para mí, es mi cumpleaños, se supone que debo estar infinitamente feliz pero no es así...no me importa mucho los regalos o las fiestas, lo que me importa verdaderamente es estar rodeada de las personas importantes y que amo en mi vida, estar rodeada por ellas un día como hoy...celebrar un año más de vida o el hecho de ser mayor de edad con ellos, a su lado.
“Hoy es un día como cualquiera”
Realmente esa expresión y la forma en como lo dijo, me dolió. Me entristece mucho que Michael, el amor de mi vida, mi bestia...se haya olvidado que hoy es mi cumpleaños. Y para colmo me dice que justo hoy llegará muy tarde, prácticamente solo lo vi en la mañana y lo volveré a ver mañana por la mañana, ya que hoy dice que llega tarde. Que pasa si se olvida de nuestra fecha que nos hicimos novios? Ahí si no pienso perdonarlo.
Hoy será un cumpleaños distinto, diferente, solo y triste...bueno aunque tenga a Carolina conmigo. Diferente porque no están las personas que amo conmigo.
— Valu ya estás lista? — levanto el rostro y veo a Caro en la puerta, rápidamente seco mis lágrimas — Qué pasa? — se me acerca y me ayuda a
levantarme — Ya te dije, nada de llorar — sonrio ligeramente.
— Ya no lloraré más,
vamos? — sí, Carolina decidió sacarme a bailar para celebrar mi cumpleaños y no me opuse.
— Piensas ir así vestida?
— Sí, me siento cómoda así.
— Ponte un bonito vestido, junto a unos tacos — tacos?
— No me gustan los tacos, prefiero las tennis — me quejo — Además no sé caminar muy bien que digamos con esos zapatos punteagudos.
— Valentina tienes que ponerte bonita.
— Yo estoy bien así Caro, además ni que fuéramos a algún lugar importante, solo iremos a un antro, ni que fuera la gran cosa.
— Pero es tu cumpleaños y tienes que estar preciosa...tienes que ser el centro de atención — junta sus manos con las mías — Hazlo por mí — no se lo podía negar así que acepté.
...
Una hora después
— Caro, estás segura que este es el camino? — pregunto con miedo. No sé por donde nos habíamos metido, estaba muy oscuro por aquí...además me tuve que quitar los tacos porque por aquí había muchas piedritas y yo soy muy mala para esto.
— Sí, es por aquí.
— Dudo que un antro quede en medio del bosque — reprocho — Hay que regresar, me está dando miedo...ya es de noche y todo está oscuro.
— Me fijé por internet que por aquí había una especie de antro.
— En medio del bosque? — lo dudo.
— Cómo una especie de cabaña — qué?
— Caro neta, mejor hay que regresar — coloco mi mano en su brazo — Además siento como si alguien nos hubiese estado persiguiendo desde que salimos del departamento.
— Qué? Y por que no me lo dijiste? — reprocha.
— Al principio creí que eran ideas mías pero ahora ya no, hay que regresar.
— Tienes razón — volvimos a caminar — Eh...era por aquí el camino de regreso?
— No me digas que nos hemos perdido? — no!
— Por supuesto que no solo...— mira por los alrededores — Sigamos caminando por ahí — señala un sendero.
Que yo recuerde no hemos caminado por ahí.
— No vinimos por ahí.
— Claro que sí, solo que no te has dado cuenta. Vente vamos — comienza a caminar, veo como comienza a desaparecer y yo me quedo parada — Valu vente.
— Está muy oscuro por ahí...casi no te veo.
— Tranquila, estoy aquí. Ven — escuché su voz.
— Neta Carolina, neta no te veo — esto me comenzaba a dar miedo.
— Escucha mi voz, solo siguela...yo estoy aquí.
No sabía si caminar o no pero me decidí por hacerlo. Lentamente con pasos ligeros comienzo a caminar por el sendero.
— Dónde estás? — no escuché respuesta — Caro dónde estás!? — estiro mis brazos con miedo ya que no podía ver nada porque todo estaba oscuro. Nisiquiera la luz de la luna iluminaba porque había grandes arboles que tapaban su vista. Tengo miedo! — Caro por favor respóndeme... Dónde estás!? — daba pasos con lentitud mientras mis manos se movían en la oscuridad — Por favor Carolina respóndeme...tengo mucho
mie...
— Desde que llegaste a mi
vida...
Esa voz.
De pronto unas luces en el suelo se comenzaron a encender, se prendían una por una mientras iluminaban un camino. Las primeras luces se prendieron cerca de mis pies para luego empezar a alejarse hasta llegar a...Mike?
♥
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top