Valentina

— Por favor no hagan ruido que puede despertarse — advertí antes de entrar a la habitación.

— Y cómo se supone que caminaremos hasta su cama, si todo esta oscuro...no podré ver!

— Riqui! Para eso están las
velas — le respondió Carolina.

Ruedo los ojos.

— Bien, ya está todo listo, haber revisemos: torta.

— Aquí! — responde bajo Carolina.

— Guitarra.

— Aquí mi amor — me responde mi bestia junto a una sonrisa.

— Globos.

— Aquí — me responde al unisono Riqui y Gloria.

— Y por último — pienso — Así! Los regalos.

Todos asintieron.

— Bien.

Abrí sigilosamente la manija de la puerta. Entramos lentamente a la habitación de Mike, ya que ahí se encontraba durmiendo Pic debido a un castigo que el rey le había dado pero ya eran las 11:59 de la noche, así que ya estábamos a un minuto para que se acabara el castigo.

— 5,4,3,2,1 ya!

Mi bestia comenzó a tocar la guitarra, suaves melodías se comenzaron a escuchar en la habitación.

Estas son las mañanitas que cantaba el rey David

Que casualidad que esa pequeña estrofa la cantó el rey.

A los muchachos bonitos se los cantamos aquí.
Despierta mi bien despierta mira que ya amaneció

Pic se comenzaba a mover en su cama, al parecer ya estaba despertando. Claro que sí! Porque sus ojitos se estaban abriendo.

Ya los pajaritos cantan la luna ya se metió.

Despertó y llevo sus manos a su pequeña boca.

Cumpleaños feliz, te cantamos a tí.

Comenzamos a cantar todos mientras dábamos palmas.

Cumpleaños felices, te cantamos a tí.
Tara raram ta tan
Queremos que partan la torta, queremos que partan la torta, queremos que partan la torta o si no nos vamos de aquí!

Terminamos la canción sacándole la lengua.

Feliz Cumpleaños Pic!
Gritamos al unísono.

— Neta, si no parten la torta, yo no me voy de aquí EH — advierte mi bestia y yo río.

— Pide un deseo y sopla las
velas — le dice Carolina mientras le acercaba el pastel.

Pic asintió con una sonrisa pero antes de cerrar los ojos para así pedir su deseo me mira con una sonrisa. Luego cerró los ojos y segundos después apagó las velas, todos aplaudimos.

— Ya ya! Andale Pic, queremos que muerdas la torta — le dice Riqui con su clásico movimiento de manos.

— Que? No no — negó con la cabeza — No volveré a caer, está sería mi octava vez que lo hago y ya tengo experiencia, así que no lo voy hacer...me niego rotundamente!

— Y si te lo pido yo — le digo y pongo carita de gato con
botas — Mira que es la primera vez que celebramos tu cumple juntos.

— Bueno...así pos sí — me responde con cierto color rojizo en sus mejillas — Pero solo será una mordita eh, no quiero que me aplasten toda la cara en ese delicioso pastel de chocolate.

— Ni loco hecharía a perder ese delicioso pastel, más aún si mi bonita lo hizo.

— Bella tú lo hiciste?

— Bueno tampoco me voy a llevar todo el crédito — tomo una mano de Carolina — Caro me ayudó mucho — sonrio.

— Chido! — ríe — Bien lo haré.

Acerca lentamente su boca al pastel. Mi bestia quería plasmarle su carita en ella pero yo lo evité con un suave golpe en el pecho.

— Auch! Eso dolió — que mentiroso, si le di muy suave.

— Pinocho — le respondo rodando los ojos. En ese momento se acerca y me muerde suavemente mi mejilla.

— Auch! Eso dolió — le dije y el sonríe para luego darme un pequeño beso en el cuello junto a una palabra «Copiona».

No se en que momento pero Pic ya había mordido la torta y ahora se encontraba recibiendo sus regalos.

El rey le regaló un videojuego nuevo.

— No manches! Ouslat 2!  Que padre! Muchas gracias mi
rey — le da un abrazo — Hey bestia! Mira lo que tengo — le dice con el cd del videojuego que tenia en su mano derecha.

— Epa padre! Osea yo soy tu hijo y no me das cosas como esas — hay mi amor — Na pos así no se vale wey.

El rey se le acerca y le toma de las mejillas.

— No te preocupes mi amor que cuando cumplas diecinueve te compraré uno, sí — esto es gracioso — Ya mi chiquito hermoso no te me pongas celoso — le decía mientras le apretaba los cachetes.

— Papá basta, no soy un
niño — quitó las manos de su padre de sus mejillas — Y tú de que te ríes? No es gracioso — me dijo.

Iba a responderle pero Pic se me adelantó.

— De tí, no es obvio — sonríe — Ya bestia no te preocupes, yo sé compartir.

— Ya estuvo bueno, ahora le toca a la madre de este niño, darle su regalo — habló Gloria.

Pic sonríe y recibe su regalo.

— Oh que chido! Gracias
mami — le da un abrazo.

— Un chavo del 8? — dice mi bestia agarrando el peluche en sus manos.

— Oye que te pasa! Y dame mi chavito que no eres digno de agarrarlo! — le quita el peluche de sus manos. Yo río

Ahora Riqui se acerca con su regalo.

— Ropa? — que tiene? Está muy bonita — Ricardo Aurelio Garcia Parodi, me compraste ropa?

— Es oufit, no ropa y como que  compraste? Obvio que no querido, yo la diseñé con estas bellas manitas — besa sus
manos — Y no me llames por mi nombre completo que me da escalofríos — mueve las
manos — Hoy en la noche tienes que presentarte muy bien en tu fiesta, créeme te verás muy
chulo con eso — eso es cierto.

— Bueno...gracias supongo — responde el pequeño. En ese momento mi bestia ríe.

— No sé de que tanto te ríes, ni crea que se escapará
señorito, tengo el oufit adecuado para que lo luzcas hoy en la noche — advierte Riqui, Mike deja de reír y ahora ríe Pic.

— Bueno, cuidado que el mío sea mejor, no quiero opacar al enano en su día — le molesta mi bestia al pequeño y este deja de reír.

— Mike deja de molestar a
Pic — le reprocha su hermana — Bien, ahora toma — le da una pequeña bolsita que tenia en sus manos.

— Chocolate! Muchas gracias Caro — le da un abrazo, junto con un beso en la mejilla.

— Bueno...ahora me toca a
mí — dice el príncipe David con una sonrisa amigable.

— No entiendo porque el idi... — lo mire mal — digo David, tiene que estar aquí — me susurra bajo mi novio.

— Tú que haces aquí? Quién te invitó? Ni creas que me compraras con esa cosa que tienes en las manos — Pic!

— Pic! — le reprocha el rey — Pequeño, aquí el príncipe trata de ser amable contigo y tú lo tratas así?

— Lo siento mi rey pero usted sabe muy bien como soy de transparente y a mí el príncipe de Texas, no lo paso ni con agua.

— Niño, yo sé que no nos llevamos bien pero me gustaría que tratáramos de ser amigos.

— No lo creo. Tú eres enemigo de la bestia y el es como mi hermano, así que si eres su enemigo por lo tanto eres el mío también — en ese instante mire a Mike quien por cierto tenia una sonrisa en los labios pero se la quitó cuando vio mi expresión.

— Definitivamente aún sigues siendo un niño — es un niño — No entiendo porque mezclar las cosas pero bueno, no pienso discutir ese tema. Por mi parte quisiera que seamos amigos, así que Feliz Cumpleaños — le alcanza el regalo en sus manos.

Pic no sabe si tomarlo o no. Me mira y le hago una mueca para que tome el regalo, luego mira a Mike.

— Bueno te lo acepto — toma el regalo — Solo por que quiero mis regalos y nomás te digo que no ilusiones porque tú y yo, nunca seremos amigos.

Veo que tanto el rey como Gloria ruedan los ojos.

— Un libro? Esto es broma o que?

— Pic! — le reprocha su madre.

— El título es el principito — dice con un tono infantil mientras mira fijamente a Mike — Pensé que te gustaría, así que dije “Porque no” entonces te lo decidí comprar. Además no te conozco muy bien y no sabía que regalarte.

— Ti intiindo “Principiti”

— Hay Pic — toca su cabeza — Disculpelo por favor su
majestad — le dice Gloria y David asiente.

— Creo que es mi turno — dice mi bestia para luego entregarle la bolsita que tenía en una de sus manos — Espero que te guste enano.

— No manches wey! La colección completa de Dragón Ball, neta que te lusiste mi bestia — se le acerca y lo abraza, Mike le desordena su cabello — Oye! — se quejo — Bien, ahora es tu turno mi Bella — me mira con una sonrisa tímida.

— Como que tu Bella?

— Tú callate Bestia!

— Cierra los ojos Pic — interrumpo su discusión.

— Q-u-e...aca-so tu...tu... — comenzó a jugar con sus dedos, que estará pensando este niño?

— Te va a dar tu regalo — le interrumpe Mike.

Pic decide ignorarlo.

— Vamos cierra los ojos — le digo para luego acercarme a él.

Sus mejillas estaban totalmente rojizas, cierra sus ojitos negros muy lentamente mientras ponía la boquita en forma de trompita.

Lo tomo de las mejillas que por cierto estaban muy calientes para así darle un suave y tierno beso en su frente.

— Ya puedes abrirlos.

Abre sus ojos muy lentamente.

Una sonrisa se le formó en el rostro.

— Feliz Cumpleaños mi pequeñito.

Con sus manitas toma el cuadro, que había adornado yo misma con diversas pinturas y también donde había dos fotos. Una donde estaba toda la familia y otra donde estábamos, Mike, Pic y yo.

— Gracias mi Bella, está muy lindo...aunque la segunda foto creo que sale sobrando la
bestia.

— Enano!

— Que? Lo siento bestia pero aquí arruinas la foto.

No pude evitar sonreír al ver como Pic y mi bestia empezaban a discutir entre ellos.

...

~ En la noche ~

Pic

Quería, lo anhelaba, lo deseaba...ajá eso! Deseaba que se me cumpliera mi mayor deseo. Cuando mi Bella me dijo que cerrara los ojos yo pensé que mi mayor deseo se hiba a ser realidad pero todo se fue abajo cuando sentí sus dulces labios besar mi frente.

Tal vez se haya confundido de lugar, si eso.

— Feliz Cumpleaños Pic — me dijo mi mejor amigo que tengo en la primaria.

— Gracias Lucas.

— Oye y dime por fin podré conocer a tu novia.

Sí, mentí. Pero es una pequeñita mentira. Ahora el problemas es, como hago para decirle a Bella que es mi novia, claro de mentiritas. Pero yo sé que en el futuro lo será.

— Eh si...pero aún no ha llegado.

— Hola Pic y feliz cumpleaños — interrumpió Yeison.

— Oh gracias, oye y mi
regalo? — ah no! Ni piense que entrará a mi fiesta sin MI regalo!

— No traje — y todavía responde de los más normal y
relajado — Pero te tengo un buen regalo — se acerca y me abraza.

— Ah ya, osea que quieres matarme con el olor asqueroso que te manejas, ese es mi regalo?!

— Oye! El regalo era el
abrazo — eh? — Y como que huelo feo? Bueno...esta bien que no me haya bañado por un
día — arqueo la ceja — Bueno tres pero eso que? Me bañe en perfume wey!

No por algo le dicen el oloroso.

No le doy mucha importancia y veo que la bestia empieza a bajar las escaleras. Definitivamente el terno me queda mejor a mí que a él. Cuando ya esta en la sala veo como mis amigos del salón comienzan a inclinarsele. Era obvio, es el príncipe de Tamaulipas.

— Hey enano — ni que se atreva a despeinarme el peinado que me hizo Riqui, que me tuvo tres horas sentado en una silla — Discúlpame por ser el centro de tu fiesta — si claro.

— Ya te dije que a mí me quedan mejor los ternos — eso es cierto, hasta la misma Bella me lo ha dicho — Soy un cuero, mirame soy un galán de telenovelas!

— Oh si claro, mira — me señala un grupo de niñas — No te despegan el ojo, eh galán de televisa.

No soy tonto! Lo están mirando a él, no a mí. No me afecta, en mi salón somos así. A los chicos les gustan las niñas más grandes y a las chicas los chavos más grandes.

A mí me gustan mayores.

— Hola Pic — esa voz, por favor que no sea lo que estoy imaginando.

Cruza los dedos Pic. Cruza los dedos! Volteo y...aj es ella!
Porque! Porque! Porque!

— Hola Luciana — respondo no tan alegre — Lástima, llegaste muy tarde — la tomo del
brazo — Así que te acompaño a la salida.

Todo iba bien, hasta que la bestia nos interrumpe.

— Hey enano...que crees que estás haciendo? — quiero que se vaya, acaso no es obvio.

— La fiesta ya se acabo, verdad Bestia — lo miro con complicidad, sígueme el juego por favor! Te lo suplico!

— Oh majestad.

— No pequeña, no es
necesario — Porque le tiene que sonreír? Y porque sus mejillas están rojas? — Bueno, creo que los dejo solos — no te vayas! — Suerte galán — me susurra.

— Help me! — le susurro pero igual el cabezotas se fué.

Y ahora que hago? A esta niña le gusta estar como chicle a mi lado, si le gusto pero a mí no. Y se lo he dicho como miles de veces pero ella no se da por vencida.

— Pic...no me vas a decir
nada? — vete! — Pic.

— Que quieres que te diga? — respondo con cierta molestia.

— No me...no me vas a decir como me veo? — que?

Ruedo los ojos para así mirarla atentamente.

Traía un vestido celeste, bonito, el vestido no ella. Su cabello castaño se encontraba suelto y liso, bonito, el peinado no ella. Sus ojos negros tenían cierto brillo que jamás había visto, tal vez porque no los había mirado fijamente y tan de cerca, bonito, sus ojos no ella.

— Porque...porque me miras tanto? — que! Como que... Yo? Mirarla...a ella? No...no.

Sentía mis mejillas arder con mucha fuerza. Que! Bella es la única que hace que me sonroje, me estaré enfermando?

— No...nada — porque estoy nervioso?

— Y...no me dijiste...como me veo — bonita. Que! No no!

— Eh...te ves...bien.

— Gracias — que linda es cuando se sonroja, QUE! no! Ella es fea! Si fea! — Por cierto, feliz cumpleaños Pic — se acerca y me da un beso en la mejilla, no pude evitar sonreír.

Porque siento como unas cosquillas en la panza? Definitivamente me estoy enfermando.

— Hey Pic — porque nos interrumpen!

— Que quieres Lucas! — respondo de mala gana.

— Vente, ni te imaginas carnalito...hemos visto a un angelito, a la niña más bonita del mundo...

— Tiene los ojitos azulitos más hermosos que cualquiera — lo dudo, los de Bella son los más bonitos.

— Y sus cabellos rubios, no te lo creerás pero esta hecha una diosa y con ese vestidito parece una princesa de cuentos de hadas — Bella es una diosa. Esperen! Acaso dijo rubios? Ojos azules? Ah no!

— De quién me están
hablando? — le pregunté a Lucas y Yeison quienes tenían cara de tontos.

— De la niña que está allá — me señala donde había un montón de chavos en forma de círculos.

Miro bien y...es mi bella! Ah no! Como se atreven! Solo yo y la bestia podemos mirarla!

Camino lo más rápido que pude, y así llegar a ella. Quito de mala gana a los niños que se encontraban rodeándola, la tomé de la mano.

¿Donde esta la bestia para protegerla de estos tontos? Y eso que es su novio, no cabe duda, todo lo tengo que hacer yo, como siempre.

— Dejen en paz a MI novia — les digo muy serio y molesto a la vez.

— Cómo que tu novia? — Hay no!
Me giro y me encuentro con la bestia y ahora que le digo.

♥