05. Quinta muerte: Primera vez.

"Kim Taehyung" soltó de repente.

Taehyung no esperaba ese tono tan serio de repente, sin esperar a que dijera algo; sonrió.

"¿Llegó mi hora?" se sentó en la cama para después acostarse junto a Yeon; sus ojos estaban algo brillantes mirando a Jungkook. "Hazlo rápido."

"No es eso." Jungkook respiró hondo.

En eso, Taehyung se levanta lentamente; no lo había notado hasta recién pero Jungkook todo este tiempo había estado caminando y en ningún momento levito.

"¿Qué es?"

"Cuando volvamos; morirás." Jungkook no se detuvo a verlo, caminó por la habitación. "Te dejaré elegir dónde."

Taehyung sonrió, "Me alegra, ah." se volvió a acostar.

Jungkook al ver el grado de liberación de las palabras de Taehyung, se sintió confundido y mal; "¿Por qué? ¿Por qué estas tan aliviado?"

"Es bastante horrible estar con mi enfermedad. No puedo hacer nada." hizo una mueca casi formando una sonrisa forzada. "Es un castigo. Lo mejor será que se termine."

Jungkook al oír esto se sintió aún peor, bajando su rostro; solo pudo mirar el suelo. "Lo siento."

"¿Por qué? No es tu culpa."

"No... Es que, la razón por la que sigues aquí aún es por mi culpa."

Taehyung volvió a sentarse. "¿Qué quieres decir?"

"Bueno." Jungkook se sentó en el pequeño sillón de la habitación, se encontraba delante de la cama. "Estire un poco tu tiempo de vida a cambio se mi energía. El problema es que, cada vez necesito más energía. Ahora, ni siquiera Yeon puede mantenerse despierto." apretó su mano en un puño; sentía demasiada impotencia.

Los ojos de Taehyung fueron a Yeon, sintiéndose algo mal.

"No quiero hacerlo pero... Si sigue así, tanto Yeon como yo podemos desapareceremos. Siento ser así de egoísta-"

"Lo entiendo. Entonces, mañana regresaremos." Taehyung se levantó, disponiéndose a guardar la ropa que estaba en la habitación.

Jungkook fue detrás de él. "Te oí decir que te quedarías más tiempo. Puedes quedarte cuanto quieras, no tienes porque irte mañana mismo."

Taehyung lo miró sonriendo. Sin contestar, volvió a guardar sus cosas.
Jungkook se sintió algo frustrado, tomando una remera de Taehyung; se dispuso a no devolverla.
El castaño lo siguió con la mirada, no dijo nada; dejó que se quedara con la remera y cuando ya guardó todo. Volteó a verlo, "¿Me la das?"

Jungkook negó.

"Para ser un Dios eres como un niño."

"¡No sabes nada!"

Se volteó, mirando por la única ventana de la habitación. Afuera aún nevaba.
Taehyung se acercó, agarrando la remera de las manos de Jungkook. Este no se resistió; dejando que dicha prenda se fuera de sus manos.

Se volvió a sentar en el sillón, parecía que sus ojos se habían apagado completamente. Ahora no parecía el mismo Dios que había conocido hace más de cinco años; era un ser completamente distinto.

"¿Por qué haces esto?" Taehyung sintió algo de curiosidad. "Dejarme vivir más, ¿Por qué?"

"No lo entenderías."

"Si lo explicas, podría esforzarme en entender." Jungkook lo miro un momento.

"Soy un Dios de la Muerte desde los tres años. Me enseñaron tres reglas fundamentales que no debía de olvidar nunca; los humanos deben de morir cuando su hora les llega, nunca desproteja a tu animal acompañante y... Nunca enamorarse de un humano."

Esto es particularmente gracioso. Yo no respete ninguna de estas reglas.
Todas ellas fueron hechas por algo y no las cumplí.

Taehyung se mantuvo callado, escuchando todo atentamente.

"¿Te enamoraste de mí?"

Jungkook ladeo su cabeza, "No estoy seguro. Solo no quiero que te vayas..."

Se que no te volveré a ver.

Taehyung suspiró. "Será mejor que acabemos esto pronto."

Jungkook no se dispuso a contestar, "¿No te gusto?"

"Me agradas pero, es un poco fuerte la palabra enamoramiento."

El Dios se sintió algo mal.

Levantó sus ojos, esta vez tenían un poco de brillo; quizá no del bueno. "¡Te odio!" Taehyung se mantuvo callado. Prefería que se enojara en este momento que más adelante. Esto era lo mejor; ya no se trataba de él mismo, estaban también involucradas las vidas de Jungkook y Yeon.

Algo que Jungkook no había dicho era que los Dioses de la Muerte, sólo se pueden enamorar una vez en toda su vida como Dioses. Cuando ese día llega, nunca más vuelven a ser los mismos.
Quedan marcados de por vida.

Esa noche, Jungkook había gritado que lo odiaba y después huyó. No esperaba que hiciera eso pero, sabía que volvería para matarlo de alguna otra forma.
Yeon por su parte seguía durmiendo en la cama, sin energía. De solo verlo, Taehyung recordó al gato que había encontrado en el parque; el mismo día que vio y conoció por primera vez a Jungkook.

Todo era tan lejano. Tan distante.

Al siguiente día, Taehyung abordo en el primer tren en dirección a la ciudad. No hubieron noticias de Jungkook en todo el trayecto.
Por su parte, Yeon había perdido su alas; posiblemente por la falta de energía. Cada vez parecía más un gato normal y solo se la pasaba durmiendo.

Algo cansado, Taehyung miró por la ventana del tren. El vagón donde viajaba estaba completamente vacío; sus ojos se fueron cerrando en un profundo sueño.

Holiwis

Nos preparamos para el capítulo final, estoy muy triste y emocionada al respecto. Esperemos que este a la altura de esta historia su final.
Le estuve dando muchas vueltas se como terminarlo y espero que sea el final correcto.

Gracias por leer y votar, ¡Siempre se agradece!