Johann:

Nos habíamos despertado ese día y habíamos decidido ir a visitar a Hiroshi. Ya iba más de una semana que no lo veíamos y empezábamos a echarlo de menos.

Estábamos todos sentados en la cocina a las 9:00 desayunando. Nos habíamos despertado 2 horas antes para tener todo preparado, ya que darle de comer a 30 y tanto personas no era un trabajo fácil.

Hiromi seguía en ese momento riéndose de la broma que había echo ayer, se sentía tan orgulloso de que funcionará a la perfección. La mayoría de nosotros nos habíamos asustado, como Sao que se cayó de las escaleras después de correr asustado, Ofuico quien pensó que se había quedado ciego ya que no veía nada, Seijun quién creía que era nuestro final ... en fin, todo un desastre.

Añadiéndole el hecho de que Rachel me había agarrado tan fuerte de la mano subiendo al piso de arriba que me seguía doliendo. ¡Wow esa chica era increíble!

Pero a su vez no fue tan malo. Annie, Amsi y Sao inventaron chistes sobre el corte de la luz, Mason había mostrado su gran talento de liderazgo y habíamos descubierto gracias a Sagitario que la pierna de Jade era larga, dura y suave.

Me senté en la silla y empecé a desayunar en silencio. Hiroshi llevaba días sin llamarnos y empezábamos a preocuparnos por él. Él nos había dicho que quizás encontró la manera se abrir el portal hacía el mundo de la arena y nos pidió tiempo para poder tener todo preparado cuando fuese necesario. Nosotros habíamos seguido entrenando y entrenando, aunque avanzabamos a lenta velocidad. Gin y Hiromi eran los únicos que aprendieron a controlar su máscara, y Max y Helen habían avanzando mucho, así que no me quejaba.

De vez en cuando bajaba al infierno para ver si todo estaba bien y si necesitaban mi ayuda. David, mi mano derecha, se encargaba de todo mientras no estaba y sinceramente sin el todo habría sido un caos. Tenía planeado ir hoy también al infierno pero veré si tendré tiempo.

Terminé de desayunar y salí de la cocina mientras más gente entraba a comer. Me senté en el sillón al lado de Henry y Harry y encendí la tele. Ambos estaban hablando de hacerle una broma a Hiroshi cuando llegaramos a su casa. Me di vuelta para mirarlos y estos sonrieron de manera angelica.

-¿Que están planeando de nuevo?-les pregunté con el ceño fruncido.

-Una broma a Hiroshi.-explicó Henry-o bueno no es una broma.

-Teniamos pensado aparecer rápidamente arriba suyo y intentar atacarlo para ver si sus reflejos mejoraron o empeoraron durante este tiempo.-siguió Harry.

-No es tan mala idea después de todo-dije pensando-ya debería echar de menos ser atacado.

Estos se rieron y se fueron a cambiarse. Después de media hora ya todos estaban listos asi que salimos camino a su casa. Llegamos unos minutos después y bajamos las largas escaleras para al fin estar frente a nuestro científico loco.

Este estaba de espaldas a nosotros, martillando una pieza. Hice un signo de la mano para que todos se callaran y eché un vistazo a Henry y Harry, pero ellos no estaban con nosotros.

De repente escuché un grito y miré rápidamente en su dirección. Henry y Harry habían aparecido unos metros mas arriba de Hiroshi, con un bate de béisbol en mano, mientras caían justo encima de Hiroshi. Este se dio cuenta de su presencia y antes de que estos lo alcanzaran tocó ambos bates y estos se desintegraron. Los gemelos cayeron en el suelo y empezaron a reírse a carcajadas.

-Mis tiernos primos vienen a visitarme después de tanto tiempo sin vernos y estos en vez de abrazarme intentan hacerme desmayar-comentó éste con voz divertida cuando nos acercamos a ellos.

-¡Ay tonto aquí esta tu abrazo!-le dijo Harry apretandolo en sus brazos.

-Oigan no se olviden de mi-Henry se levantó y abrazó a ambos mientras sonreía.

-¿Que es eso?-preguntó Sao sorprendido señalando la enorme máquina que tenía en frente suyo.

-Esta belleza será nuestra entrada al mundo de la arena-explico con aire orgulloso-fue muy difícil de construir y le falta unos últimos retoques-terminó.

-¡Wow es increíble!-dije sorprendido.

-Lo sé, estoy dudando entre ver si funciona ahora o asegurarme primero de que todo esta listo-dijo con el ceño fruncido-según yo todo esta listo.

-Tendremos que intentarlo entonces-dijo Ofuico encogiendose de hombros.

-¿Se dan cuenta de que si funciona irán ahora mismo a patearle el culo a esos tontos?-preguntó nervioso. Todos asentimos.

-Inténtalo-lo alentó Dylan-si funciona iré ahora a salvar a papá y si no funciona tendré más tiempo para entrenar, asi que no me importa si funciona ahora o espero un poco más.

Jules le revolvio el pelo sonriendo.

-No va a funcionar-dijo Jade con tono serio-solo estan perdiendo el tiempo. No va a funcionar ahora-terminó.

-¿Como puedes estar tan segura?-preguntó Hiroshi ofendido.

-No estoy dudando de tu potencial ni te estoy subestimando, Hiroshi, simplemente lo sé. Aunque...-está se quedó callada unos segundos-inténtalo, es mejor estar seguro.

Hiroshi sonrió asintiendo y se acercó a una enorme palanca.

-¿Están listos?-preguntó nervioso.

-No-contesto Hiromi-Pero hay que hacerlo, ¿No?

Asintió y bajó la palanca.

Un montón de luz blanca me cego pero no cerré los ojos sino que puse una mano encima de mis ojos y intenté ver entre los espacios entre mis dedos. Sentí mis rodillas debilitarse y luche contra el deseo de caer de rodillas. Sentí alguien a mi lado moverse con incomodidad y sentí como alguien me tomaba de la mano, la cual apreté con mas fuerza.

Un portal apareció delante nuestro y abrí los ojos sorprendido. De repente una explosión se escuchó y el portal explotó, dejando de iluminar todo y devolviendo todo a la normalidad.

Sentí toda la incomodidad y presión abandonar mi cuerpo y solté la mano de Rachel para agarrarla rápidamente en mis brazos antes de que esta perdiera el equilibrio.

-¡Wow! ¿Que fue eso?-susurró Hiromi.

-Tal como lo pensé, no funcionó-dijo Jade.

Hiroshi fruncio el entrecejo y miró su trabajo decepcionado.

-No funcionó...

Jade se acercó a él y puso una mano encima de su hombro.

-Unos jóvenes niños traicionados llegarán al mundo de la arena-Jade recitó la profecía-aún no hemos sido "traicionados", asi que no iba a funcionar, pero quería asegurarme de si tendría o no doble sentido.

-¡Amigo, fue increíble!-gritó Max abrazandolo-¡Eres un genio!

Hiroshi sonrió agradecido y noté que ya no estaba tan decepcionado.

-Eres el único capaz de hacer que lleguemos al mundo de la arena-le dije ayudando a Rachel a ponerse de pie-hay que admitir que tu y Jade son los mas inteligente entre nosotros, pero eres el único capaz de trabajar con máquina y en muy poco tiempo-este me miró con el ceño fruncido pero le sonreí-todas nuestras expectativas estan puestas en ti, sabemos que lograrás hacerlo. Confiamos en ti.

Hiroshi sonrió y noté unas pequeñas lagrimas formarse en sus ojos.

-De verdad gracias chicos. No los defraudare, abriré el portal y terminaremos con Jack.

Asentí sonriendo y me giré para mirar a los demas.

-Necesito ir al infierno para ver si todo está bien, llegaré algo tarde-les avise.

Todos asintieron y Max se paró frente a mí, y aún antes de que hablara le corte la palabra.

-Quería ir con Leo pero supongo que tu también puedes venir-este me miró sorprendido y Helen hizo un puchero-tu también puedes... ¡Oh vamos¡ Vengan todos, no me importa.

Todos me miraron sorprendidos.

-¿Wow iré al infierno?-preguntó Leo sorprendido.

-Sí, eres mi amo y quería llevarte pero supongo que no podremos irnos solos, mira esas caras de súplica-le dije señalando a los demás. Leo asintió emocionado y se paró a mi lado.

Le di una patada al suelo y unas escaleras aparecieron. Jade rodó los ojos pero Piscis agarró su brazo y ambas desaparecieron. Hice un gesto de bienvenida y sonreí viendo como los demás bajaban.

-¿Hiroshi, vienes?-este negó con la cabeza pero rodé los ojos y lo empuje hace las escaleras.-mirate, estas todo pálido y cansado, necesitas descansar un poco de tanto trabajo.

Este sonrió y bajó las escaleras. Entre yo también y los seguí desde atrás. Después de cientos de escalones al fin llegue abajo y tomé aire, cansado.

Prefería haber saltado directamente desde arriba y hacer desaparecer las escaleras como la última vez, cuando revivi a Rachel, pero sabía lo torpes que eran mis amigos asi que preferí no arriesgarme.

Al fin logré respirar normalmente y entendí el dolor que pasaba Jade al querer subir o bajar alguna escalera. Esta estaba esperandonos ella y Piscis, ambas con una sonrisa burlona en la cara.

-¿No me has traído aquí para devolverme al infierno, o si?-susurró Rachel y vi que esta estaba asustada y temblaba ligeramente.

Pase un brazo por su hombro y abrí la boca para contestar pero alguien me cortó.

-¡Wow, Johann, veo que te conseguiste pareja!-dijo una voz muy conocida.

-Oh, hola David-lo salude con una sonrisa-¿Que tal va todo?

-Todo esta bajo control, señor-contesto haciendo una reverencia.

David era mi brazo derecha, la persona que se encargaba del infierno cuando no estaba y un amigo que conocía desde hace miles y millones de años. Este tenía el pelo negro y los ojos azules y parecía ser un niño de 15 años, pero bajo esa faceta inocente se encontraba una persona que me había apoyado en todo y que era tan respetada en el infierno como yo.

Me avance y lo abracé. Este me devolvió el abrazo y me miró con una sonrisa pervertida.

-¿No me vas a presentar a la afortunada?-susurró divertido.

-Aún no somos nada-le dije sintiendo el calor subir por mis mejillas.

-¿"Aún"?-preguntó-entonces tienes pensado declararte, ¿Cierto?-preguntó con una sonrisa pervertida.

-Cállate-le susurre. Me daba miedo la facilidad con la cual era capaz de adivinar lo que estaba sintiendo o pensando.

-No te preocupes, ella también esta interesada en ti-me susurró guiñando un ojo y me di vuelta para mirar a Rachel. Esta había estado mirándome porque cuando nuestros ojos conectaron esta desvió la mirada sonrojandose.

Miré de nuevo a David y este sonrió como un niño.

-Gracias-le dije sonriendo también.

-No hay de que-contestó dándome una palmadita en la espalda-supongo que quieres que les de una visita guiada a tus amigos, ¿Cierto?

Asentí. Este miró a mis amigos y de repente me miró con los ojos abiertos.

-¿Cuantos son?-me encogí de hombros y intenté contarlos, pero cada uno estaba moviéndose y hablando con alguien más que no pude pasar el número 10.

-Son más de 10-dije cansado. David se rió y los saludó de un gesto de la mano.

-¡Wow un niño lindo!-dijo Sophie sorprendida-ya va tiempo que no veo una belleza como esta.

Casi todos los chicos tosieron falsamente, visiblemente ofendidos. David se sonrojo y lo miré con una sonrisa pervertida.

-¿No me vas a presentar a la afortunada?-repetí su misma pregunta. Este me miró frunciendo el entrecejo pero se rió.

-Supuestamente tu debes presentarme a todas esas personas-me reprendió. Los miré a todos y empecé.

-Él es Hiromi, ella Seijun, ella Sam, el Hiroshi, ella lea, él...-me paré de golpe-son muchos, presentense por si mismos.

Estos se rieron y se presentaron uno por uno. Después de unos minutos empezamos a caminar, mostrandoles las maravillas del infierno. Todos parecian molestos por el calor del infierno menos yo y David.

A cada paso que dábamos, vi como mis amigos parecían más cansados por caminar y por el calor. De vez en cuando nos parabamos para mostrarles algo en concreto y estos se quedaban sorprendidos. Leo no dejaba de soltar gritos de sorpresa y sus ojos parecían brillar de felicidad. Me sentí tan bien viéndolo disfrutar de mi lugar.

Rachel caminaba al final de la fila, al lado de Jade y Rachel, quién la estaban tranquilizando. Esta parecía asustada y vulnerable así que me acerque a ella y de repente Jade y Seijun salieron corriendo y nos dejaron solos.

Rachel me miró con el ceño fruncido pero no dijo nada. David dejó de caminar y empezó a explicarle a los demás lo que había atrás de una puerta, así que aproveché el momento para hablarle.

-¿Oye estas bien?-pregunté preocupado. Esta asintió y bajó la mirada al suelo-se que me estas mintiendo-le dije agarrando su cara y haciendo que me mirara-además quiero que me mires a la cara cuando estoy contigo.

Esta me miró a los ojos y se sonrojo.

-No quiero que me dejen aquí-susurró-no quiero volver a quedarme aquí sola.

-No te vamos a dejar-le dije con una sonrisa-eres parte de nuestra família ahora-esta me miró sorprendida-ademas, ya te perdone, y es imposible que vuelvas a estar aquí, a menos que mueras de nuevo.

Esta sonrió y bajó la mirada.

-¿Lo prometes?

-Si, lo prometo-le dije soltando su cara y agarrando su mano-y mientras estes sujetando la mano de cualquiera de nosotros, nadie te separa de nosotros. Lo prometo.

Esta sonrió y apretó mi mano.

-¡Awww que lindo!-dijo Seijun con una sonrisa.

-Los voy a shippear-comentó David.

-Y lo que dijo Johann es verdad, mientras estés con alguno de nosotros, seguirás siendo parte de la familia-le dijo Sam.

Les sonreí y avance hacía el principio de la fila, aún agarrando a Rachel de la mano.

-¿Ya, seguimos?

Holaaaa

Que tal?

Que les pareció el nuevo capítulo?

Que piensan del progreso que hizo Hiroshi?

Y de la casi abertura del portal?

Están de acuerdo con la teoría de Jade?

Que piensan de David?

Y de lo que le dijo Johann a Rachel?

Hasta luego👋😁💖