Nash:

-¿Que ocurre?-pregunté con el ceño fruncido-¿Estas bien?

-¿Yo?-preguntó después de unos segundos, dándose cuenta de que le estaba hablando-¡Sí, sí, estoy bien!

-¿Que me quieres decir?-pregunté sentándome en el banco que había a unos metros de la casa.

-Quiero que me creas-dijo este sentándose cerca mío-yo realmente soy bueno. Que haya trabajado para Jack solo fue por una buena razón, pero ahora ya renuncie.

-Yo sí te creo-le dije con una sonrisa-no necesitas explicarte. Siempre confiare en ti, después de todo me salvaste la vida y mataste a una de las mujeres de Jack. Eso es una enorme señal de tu bando.

-¡Igual...!-suspiró este cerrando los ojos-¿Estas listo para escuchar mi historia?

-Una larga historia-me acordé que había dicho Dan riéndose.-quizás algún dia Ted te lo cuente. Parece que eres en el que más confía de ustedes 5-dijo señalandome a mi y a mis amigos.

-Sí, estoy listo-le dije con una sonrisa para tranquilizarlo.

-Realmente quiero que me creas-dijo este cerrando los ojos, como recordandose de todo lo pasado-tú, sin contar a mi familia, eres la persona más importante para mi, y no te quiero perder porque desconfíes de mi. Así que aquí voy.

Alargue la mano y agarré la suya, acariciandola, como señal de apoyo. Este abrió los ojos y me miró, y con solo ver sus ojos le hubiera perdonado, ya que en ellos había el más profundo dolor y arrepentimiento.

-Primero necesitas saber que yo tengo 19 años. Connor y Caleb, los gemelos, tienen 17 y Bianca solo 15-empezó este-por ende yo soy el mayor, y sobre el cual recae toda la responsabilidad de la familia. Aún me acuerdo del día en el que nació Bianca, y como yo y mis dos hermanos prometimos protegerla pase lo que pase... Quien habría pensado que realmente su vida estaría en peligro, al igual que todos.

Este bajó la mirada y unas lágrimas aparecieron en sus ojos. Un sentimiento raro me invadió al verlo llorar, ya que Ted era la persona más alegre que había conocido, y verlo en esta situación suponía un shock para mí.

-¡Oye no tienes que seguir si no te sientes bien!-le dije nervioso, frunciendo el entrecejo.

-No te preocupes, no es nada-este tomó una larga respiración y apreté su mano en la mía-La primera desgracia ocurrió cuando tenía 4 años. Mi mamá llegó a casa desangradose. Mi papá en ese momento estaba de viaje por asuntos del trabajo, por lo que la única persona mayor en casa era yo.

-¿Desangradose?-pregunté nervioso.

-Mi mamá había escuchado ruidos raros afuera, y como en ese momento vivíamos en el campo, no había ninguna casa a casi un kilómetro alrededor-siguió-le pareció sospechoso, y salió a ver que ocurría, pero una hora después volvió con una herida en la costilla.

Mi mano empezó a temblar de miedo y frunci el entrecejo, nervioso y confuso. Ted tomó unos segundos para que pudiera digerir la información y siguió.

-Fui al único al cual habló en ese momento. Me dijo que había un oso cerca de casa, y que un cazador en vez de darle al oso le dio a ella. El cobarde se escapó sin brindarle ayuda, y mi mamá murió frente a mis ojos, por culpa de mi cobardía y por la distancia entre el hospital y nuestra casa.

-¿Murió? ¿Entonces como sigue viva?-pregunté confuso.

-Eso lo explicaré más tarde-dijo Ted riéndose y limpiandose las lágrimas-esa fue la primera desgracia de mi vida. Mi papá volvió el día de después, y aún después de 2 años no lo pudo superar, lo que causó el segundo problema.

Nervioso y inconcientemente, intenté soltar mi mano de la de Ted, pero este la agarró rápidamente y me lanzó una mirada de cachorrito.

-Porfavor no me dejes-susurró triste-al menos quédate un poco más, hasta que sepas toda la verdad.

Volví a agarrar su mano pero este se alejó de mí y se acostó en mis piernas, agarrando mi mano y dejándola justo encima de su corazón. Suspiró y cerró los ojos.

-¿Te molesta que me quede así?-susurró abriendo los ojos y mirándome con el ceño fruncido.

Negué rápidamente con la cabeza y miré al cielo oscuro. Había oscurecido muy rápido.

-Terminé viviendo con mis 3 hermanos, mi papá y mi abuela-siguió, tomándome desprevenido-mi abuela no es el tipo de personas que quieres tener en tu vida, y ya verás después. Aún después de 2 años, mi papá seguía sin poder superar la muerte de mi mamá, y salía cada 6 del mes para tomar y festejar con sus amigos.

-¿Porque hacía eso?-pregunté confuso.

-Mis papás se conocieron el 6 de enero, y él para que mi mamá siguiera viva en su corazón, festejaba ese día de su unión-explicó-pero una vez todo se le fue de las manos, y...

Ted suspiró de nuevo y sentí su corazón latir rápidamente bajo mi mano. Me quedé callado, sin hablar, ya que sin que lo dijera con palabras, sabía que había ocurrido.

-Mi papá estaba muy borracho, y queriendo volver a casa dio un largo desvío en un lugar desierto. Había un hombre conduciendo a su casa a las 2:00 de la mañana, y como según él nunca había visto a nadie ahí, y menos a esas horas... el conductor no pudo frenar, y mi papá no puedo salir vivo de eso. Él murió atropellado por el auto, dejándome solo con mis hermanos y mi abuela.

-Lo siento mucho...-susurré horrorizado.

Una pequeña lagrima brilló en los ojos de Ted, pero este la limpió rápidamente. Quité mi mano de su pecho y empecé a acariciar su pelo desordenado, esperando a que este se sintiera mejor.

-Como te dije, mi abuela no es alguien que quieres tener como familia. Ella era una persona insoportable, solo servía para tomar espacio y insultarnos a nosotros. Ella claramente me culpó de la muerte de papá, diciendo que si no me hubiera quedado de brazos cruzados hablando con mi mamá hasta que se murió, mi papá no se habría emborrachado ni tampoco se habría muerto.

-¡Pero no es tu culpa!-dije ofendido.

-Lo sé. Tenía 4 años al perder a mi mamá, y 6 al perder a mi papá. Un niño de mi edad no habría podido hacer nada para ayudar. ¿Pero que se le puede hacer? Ella es así, y nunca cambiará.

-¿Ella sigue viva?-pregunté preocupado.

-Ella murió cuando tenía 7 años, un año después de la muerte de su hijo-explicó-pero estoy seguro que ella lo sigue ahora, como mis papás y hermanos.

-¿Tus hermanos? ¿¡Espera ellos también murieron!?-pregunté impactado.

Ted asintió y desvío la mirada, mientras yo le seguía acariciando el pelo.

-Con 8 años, volvimos a mudarnos, pero esta vez solo yo y mis hermanos, ya que no tenía nadie mas de la familia para cuidar de nosotros. Fuimos a una casa en la cuidad, viviendo yo, con los gemelos de 6 años y Bianca de 4.-explicó-Por suerte, los vecinos venían de vez en cuando para cuidarnos, comprarnos de comer o llevarnos a la escuela.

Cerré los ojos y sentí las lágrimas en mis ojos, pero las limpié rápidamente antes de que Ted abriera los ojos y me mirara. Sentía un horrible sentimiento en mi pecho, y estaba odiando la vida por hacerle todo esto a un niño de 8 años, pero no dije nada.

-Aún así yo tenía que ocuparme de todo-explicó Ted frunciendo el entrecejo-tenía que darles de comer, hacerlos dormir, llevarlos al colegio, ayudarlos con sus tareas y protegerlos de todo.

-¿Que ocurrió?-pregunté con la voz temblorosa, esperándome lo peor.

-Un día salí en la noche a comprar comida, aprovechando que ellos estaban durmiendo. Cuando llegué a media noche, encontré un montón de bomberos, de vecinos y gente que no conocía, frente a mi casa, quemandose. Intenté entrar y sacar a mis hermanos, pero uno de los vecinos me agarró con fuerza y no me dejó irme. En el fondo agradezco eso, si no lo hubiera hecho me habría muerto también.

-¿Ellos... murieron?-pregunté horrorizado-¿Connor, Caleb y Bianca murieron también?

-Sí, fue un shock para mí porque las únicas personas que me quedaban habían fallecido, dejándome solo y perdido.-explicó Teddy escondiendo su cara con ambas manos-Abandoné mi casa, y viví durante una semana entera en la calle. Quería cortar todas las conexiones con los demás, dejar todo atrás, olvidar todo. Me volví un chico frío, cruel y vacío por dentro. Empecé a odiar mi corazón, me empecé a odiar a mi mismo. Había prometido proteger a Bianca cuando esta nació, pero no fui capaz de protegerla, ni a ella ni a los demás.

Mi mano empezó a temblar, posada sobre el pelo de Ted. Este quitó sus manos de su cara, y se quedó mirando el dorso de la derecha, antes de levantar la mirada y sentarme rápidamente.

-¿Estás llorando?-preguntó preocupado.

-Lo siento. Supuestamente tu eres el que debería llorar, pero esto es tan horrible que no me pude controlar.

Ted apretó los labios con tristeza y alargó su mano, limpiando las lágrimas que aún caían por mi mejilla. Este se acercó más a mí y me abrazó, apretandome con más fuerza.

-Si no puedes soportarlo ahora, creo que mejor lo dejamos para después—susurró este.

-¡No, no, continúa!—le dije limpiando rápidamente las lágrimas y intentando sonreír.

-Después de una semana de vagar por las calles, al fin una persona me dirigió la palabra. Esa persona me dijo que yo era alguien especial y poderoso, y que si me uniera a su grupo me lo iba a recompensar—explicó.

-¿Jack?—pregunté, ya sabiendo la respuesta.

-Sí, era Jack—asintió—él me dijo que iba a revivir a toda mi familia, y que además de eso iba a deshacerse de mi corazón para que no volviera a sentir nada desde entonces. Acepté, y el cumplió con su promesa, reviviendo a mi familia y llevándolos a un lugar pacífico donde empezaron a vivir de nuevo.

-¿Y que pasó contigo?

-El me dio un poco de tiempo con mi familia, y después me uní oficialmente a su equipo, volviéndome un malo y trabajando para él. Desde entonces nunca tuve mas problemas, ni en peleas, ya que era muy fuerte, ni en sentimientos, ya que no tenía más un corazón. Viví 11 años de mi vida sirviéndole, hasta que los conocí.

Ted miró el suelo, como recordando el momento exacto en el que ocurrió eso.

-Fueron Hiromi, Seijun, Sam, Tyler, Edward, Emily y Henry—dijo nombrando a 7 personas—esa fue mi última pelea siendo malo. Fue una muy fuerte, ya que maté a Hiromi al cabo de poco, y justo después heri a casi todos sus otros amigos, sin contar a Henry ya que aún no estaba.

-¿Que pasó después?—pregunté curioso.

-Justo cuando estaba a punto de encargarme del pequeño, Edward, Hiromi revivió bajo la imagen de un monstruo, todo eso para proteger a sus amigos. Eso me tocó muy en el fondo, ya que con solo sentir una relación de amistad con los demás, dio su vida y razón para protegerlo. Ahí me di cuenta que aún sin corazón, en el fondo seguía teniendo sentimientos y que aún sentía piedad por ellos.

Este se quedó callado unos segundos, rascándose la cabeza con nerviosismo.

-Debo admitir que nuestra pelea no fue equitable, ya que mientras Hiromi utilizaba todo su poder bajo la imagen de un monstruo, yo utilizaba muy poco, no queriendo causar más problemas. Hiromi me terminó aniquilando, dejándome al borde de la muerte. Si solamente hubiese terminado así... Hiromi, sin conocimiento, intentando acabar para siempre conmigo, sin piedad ni corazón, pero llegó Henry y le dijo que parara, que pasara lo que pasara yo iba a morir, y que no hacía falta perder su dignidad y dar el último ataque.

-¿Entonces no moriste?—pregunté aliviado.

-Sí lo hice. Como dije, Hiromi no se controlaba en ese momento, por lo que terminó atravesando a su amigo con su espada, y quería seguir, pero yo no lo dejé. Use mi último esfuerzo para saltarle encima y cortarle uno de sus cuernos, logrando que su transformación en monstruo fallara y que recuperara la razón.

-¡Wow!—dije sorprendido—tu eres...

-Lo sé, era muy cruel y malo—se disculpó este, bajando la cabeza.

-No era lo que iba a decir—dije rodando los ojos—tu eres un héroe, aún sin corazón y trabajando para él lado malo, siempre tuviste piedad y una pizca de compasión.

-¡Gracias!—dijo este sonriendo por primera vez desde el principio de la discusión.

-¿Que pasó después?

-Me morí. Pero solo hace un día, revivi sin saber porque, pero estoy agradecido. Ahora ya no soy un malo. Nunca lo fui. Ahora soy un héroe, y acabaré con Jack como venganza de todo lo que nos hizo.

-Yo se que lo harás bien. Confío en ti y haré todo lo posible para ayudarte. ¡Lo prometo!

-¡Enserio estoy muy afortunado de tenerte en mi vida!—dijo Ted sonriendo y acercándose a mi para abrazarme.

Le devolví el abrazo y sentí lágrimas de nuevo en mis ojos, pero esta vez me controle. Ted se separó y sonrió.

-Iré a dormir, me esta dando sueño. Si quieres dormir conmigo puedes venir a mi cuarto, pero mas te vale esperarte a estar abrazado por mi toda la noche. Ando algo sensible.

Este sonrió con ternura y se acercó a mí, tanto que nuestras caras estaban a pocos centímetros.

-Cada historia tiene un final, pero en la vida, cada final anuncia un nuevo comienzo—susurró antes de dejar un pequeño besito en mi mejilla y alejarse mientras se despedía con una sonrisa.

Holaaa

Que tal?

Que les pareció el nuevo capítulo?

Que piensan del pasado de Ted?

En el capítulo 5 solo les di el resumen de cada muerte pero ahora saben exactamente que ocurrió.

Que les pareció el hecho de que Nash y Ted se acerquen cada vez más?

Y la escena final? Con la frase de Ted?

Ya casi llega el especial, prepárense para sentir muchas cosas a la vez😉

Hasta luego💖👋😁