La destruida sala del trono, el Núcleo, Waterfall, incluso Snowdin. Asriel no estaba por ninguna parte.

Izuku se sujetó el estomago, sintiendo molestar. Por poco lo ve Papyrus en Snowdin...

No quería evitar a sus amigos, pero no podía dejar que le vean, por que si fuera el caso le seguirían. Si realmente sucede lo que cree que sucede, eso no debería de pasar.

Tenia que encontrar a Asriel por su cuenta.

Y solo quedaba un lugar en donde avanzar. Las Ruinas.

Tras pasar el portal a paso cada vez mas pesado, Izuku no sacaba su mano apoyada en su estomago mientras continuaba.

Era obvio. Él no lo estaba llevando bien.

Este cuerpo había sufrido demasiado. Aunque sea sanado mágicamente... eso no era lo que el cuerpo humano necesitaba.

Y aquello se evidenció aun mas cuando Izuku se tuvo que detener forzosamente para toser. Tos muy similar a la de Frisk cuando ambos aun no habían caído.

Izuku retiró su mano levemente de su cara. ―...

Solo cerró aquella mano en un puño y miró delante. «Frisk... no es la única con determinación aquí ―despegó su otra mano de su estomago y avanzó con torpeza―. No puedo rendirme... ¡No puedo! ¡Estoy Determinado! ¡Tengo que estar Determinado! ―apretó sus dientes―. ¡Tengo que enfrentar a Asriel!»

¿Por que se portó tan extraño cuando despertó? Eso era sencillo. Desde el fondo de su ser, sabia que algo no marchaba bien. Ni con Asriel, ni con él.

Pero él no importaba. No ahora.

Nada de lo que rodeaba a Asriel tenia sentido. Todas aquellas acciones que observó mientras su alma aun estaba en el interior de ese príncipe... Incluso esas palabras al momento de regenerar su cuerpo y regresarle a la vida...

Claramente no se dejaría llevar y pensaría que Asriel se había dejado vencer, por que si fuera el caso, ¿Por que conservó a propósito un alma humana? ¿Por que mantuvo consigo la Determinación?

Además... ¿Por que le había traído a la vida? La escusa de que él le estaba resultando una molestia no era convincente.

Asriel no era bueno... pero tampoco era el Dios de la Hypermuerte que decía ser. Estaba en un incomodo todo de gris, siempre al borde de ser un monstruo y ser un héroe.

Tragó saliva con fuerza. Estaba casi deshidratado...

Pero no importaba. Debia de encontrar a Asriel cueste lo que cueste. Aunque eso llevé a su cuerpo aun mas al limite.

Apretó sus dientes. Siempre fue débil. Nunca logró darle una ayuda significativa a nadie. Ni a Frisk, ni al resto de sus amigos.

Si no fuera por Frisk él no hubiera llegado hasta aquí. Si no fuera por todos los amigos que hizo aquí abajo no hubiera podido avanzar tanto. Si no fuera por Chara él no hubiera despertado del control de Asriel.

Y la única oportunidad que tuvo de ayudar... fue un banal sacrificio. Una decisión egoísta que tomó al sentirse tan inútil que el único valor que tenia su alma era ser usado como poder para destruir la barrera.

¡No hizo nada! ¡¡Nada!!

¡Mientras sus amigos lucharon con todas sus fuerzas, incluso entregando sus vidas entre líneas temporales, él no hizo nada!

Se los debía. Debia solucionar esto por su cuenta.

Frisk debía de poder descansar y abandonar aquella ansiedad. Sus amigos tenían que estar seguros de que Asriel no intentaría nada mas.

Todos deberían de saber que realmente estaban frente a un futuro brillante. Frente a un final feliz.

Él debía esclarecer aquello. Cueste lo que cueste, debía encontrar a Asriel.

Cueste lo que cueste, debía ser de ayuda.

Cueste lo que cueste...

Cayó de rodillas.

Cueste lo que cueste... tenia que esclarecer las cosas.

―... ―Izuku se concentró en recuperar el aliento. Su cuerpo se sentía extraño.

Era casi como si ya no fuera suyo. Sin saberlo... era como Chara lo sentía mientras fue su poseedor.

En vez de observar sus brazos y sentir que era "él"... era casi como jugar un videojuego. Veías esos brazos que no eran tuyos, pero sabias que podías controlarlos a voluntad.

Su alma... estaba desvinculada de su cuerpo. No al grado de dejar de sentir cosas o tener fuerza desbloqueada... pero Izuku sentía como si su alma estuviera atada al cuerpo. No unida naturalmente. Sentía una extraña sensación en el pecho, casi como si fuera a morir en cualquier momento. Era como si existiese la posibilidad de que su alma se despegase del cuerpo cuando menos se lo espere.

Pero aquellas consecuencias eran casi obvias. No podía esperar morir y revivir sin consecuencias. Mucho menos que su cuerpo funcione bien despues de haber muerto 2 veces, y de maneras tan truculentas.

Por eso debía encontrarlo. Debia aclararse. Debia hallar respuestas. ¿Moriría? ¿Necesitaba de alguna clase de tratamiento mágico? ¿Podría si quiera continuar vivo? Sabia que Asriel tenia esas respuestas.

Con esfuerzo se levantó, y continuó el camino.

Viejos recuerdos en estos lugares. Aquellas púas de metal que resultaron ser lo mas inofensivo del mundo, Chara al final del túnel, los monstruos dándole una paliza mientras buscaba maneras rebuscadas de no hacerles daño...

Aquellos cálidos recuerdos hacían sentir caliente su alma, lo que se reflejaba en una cálida sonrisa adolorida en el rostro de Izuku, junto a una fuerza invisible que le impulsaba a llegar una ultima vez hasta el final del túnel.

Y clavando sus pies firmemente en el suelo, se herguió como pudo.

―¿Quien es?

Izuku mantuvo el silencio, en cierta manera impactado por lo que sus ojos veían.

Flowey se dio la vuelta.

Él no le había visto luego de la batalla. Despues de todo, Asriel en su forma de Dios le habia dejado inconsciente de un golpe seco.

Es por eso que ver a aquella flor casi moribunda, con su cuerpo parcialmente destrozado y lleno de moretones y cortes era sin lugar a dudas impactante.

―¿Como...?

―Ya se. Preguntaras como tengo moretones si soy una flor ―Flowey sonrió adolorido―. Eres un estúpido.

Ambos mantuvieron un silencio mutuo durante algo rato. Flowey solo esperaba algo, e Izuku esta pensativo, ya que, tal y como esperaba... Flowey era muy diferente a la imagen mental que tenia.

El peliverde, en un acto que sorprendió a Flowey ya que fue un "estoy indefenso" en toda la palabra, tomó asiento en el suelo. ―Estas... ¿A que vienes exactamente? No quiero verte.

Izuku no sonrió, pero se notó algo tranquilo. ―Pensé que... conservarías tus sentimientos.

Aquello hizo que Flowey inclinara su cabeza levemente. ―Oh. Mantengo el alma de amabilidad. ¿Quieres una taza de té?

―Sarcástico como siempre... ―Izuku sonrió levemente. Parece que su esfuerzo fue inútil. Flowey estaba tan perdido como él―. Solo... gracias por darme este regalo, Asriel.

―Oh. No fue nada ―Flowey le dio la espalda―. Simplemente pegué un adorno costoso con saliva. En cualquier momento se desmoronará y se romperá aun mas.

Al recibir tal pronostico de golpe, claro estaba que Izuku se asustó.

―Las almas no son un juguete que puedas sacar de su caja y volver a guardar cuando quieras. La caja queda arrugada, rota y arruinada, lo que no le permite contener el juguete como antes. Entendí eso luego de haberte cerrado el estomago, pero... ―Flowey levantó la mirada―. Supongo que incluso sabiéndolo quise intentarlo.

El peliverde solo mantuvo el silencio ante aquellas palabras.

Ante el silencio que perduró un minuto entero, Flowey le observó de reojo. ―Negación. Dolor. Miedo. Llanto. Odio. Muestra algo, Izuku. Si quieres matarme esta bien ―nuevamente le dio la espalda―. Lo merezco.

―Cuando... ¿Cuándo volveré a morir?

―No lo se. Puede que en el próximo segundo. Supongo que depende de tu Determinación a que eso no suceda.

―... ―Izuku observó sus puños, para luego apretarlos―. Entonces no moriré.

―Eso era predecible. Nadie quiere morir. No lograrías cumplir tus sueños ni hacer felices a tus amigos si dejases que eso pasara.

―Te equivocas.

Ante aquella afirmación tan elocuente, Flowey se volteó rápidamente con un rostro sorprendido, observándole directamente a los ojos.

Esa mirada...

―Si yo vuelvo a morir... seria tu culpa. Y no quiero que tengas mas pecados de los que arrepentirte ―Izuku realmente, lejos de estar determinado a no morir, estaba determinado a salvar a Asriel―. Claro que no quiero morir... pero tampoco quiero que mi salvador sufra.

―¿Sal...vador...? ―Flowey sonrió en acto reflejo, confundido―. ¿Estas seguro que no te quieres morir? Me daría miedo saber que alguien como tu sigue con vida.

Izuku captó la ironía en esas palabras. ―Supongo que para ti soy un rarito...

―Un rarito. Un loco. Un desquiciado. Un suicida. ¿Sigo la lista?

―Asriel... ―Izuku apagó levemente ese brillo en su mirada―. ¿Por qué estas así?

Este rodó los ojos. ―¿De verdad lo preguntas? Se llama "recibir una paliza". Es lo que suele pasar cuando 1, 2... 5 personas luchan contra ti a la vez.

Izuku negó. ―No me refería a eso. Frisk ya no puede resetear. Tu continuas siendo el dueño de la Determinación. Que yo recuerde... hablaste de puntos fijos en el tiempo, y tu derrota no es uno de ellos ―aclaró con una expresión mas que seria―. Podrías volver a poseer 8 almas humanas al resetear, ¿No?

―Oh, genial. No me había dado cuenta. Ahora reiniciaré y los mataré a todos. ¿Eso es lo que quieres?

Negó nuevamente. ―Quiero saber por que no lo hacer. Quiero saber por que me resucitaste. Quiero saber por que... ―levantó la mirada― por que te rendiste.

―¿Rendirme? ¿Que te hace pensar-? ―rápidamente se calló. Claro. Izuku pensaba eso por todo lo anteriormente dicho―. Bueno... ¿Por que solo no desapareces de mi vista? Si no reinicio mejor para ti, ¿No? Sal allá fuera y ten tu final feliz.

―No lo haré hasta saber tus razones.

Flowey amargó la mirada. ―Tengo unas ganas increíblemente indescriptibles de asesinarte aquí mismo. Lo repetiré una vez mas ―utilizando las fuerzas restantes de su única alma humana, Flowey hizo emerger un tallo del suelo frente a Izuku, el cual se enredó en su cuello―. Vete o... ―tras leves segundos de silencio, bajó levemente la mirada― o yo te...

Izuku solo guardó el silencio, observando el como Flowey abandonó aquel intento, desenredando ese tallo de su cuello.

Nuevamente le dio la espalda. ―Solo vete, por favor.

―Tu... ―Izuku se frotó el cuello― no eres tan malo... ¿No?

―No importa. No te importa. Eso no le importa a nadie, ni siquiera a Chara. Lo importante que ya estoy lejos y no le causaré daño a nadie.

―Esas son las palabras que diría alguien preocupado por la gente que ama. Asriel, tu-

―Lo acepto. Si me rendí ―confesó, notándose en su voz un tono cansado―. Yo hice todo por Chara. Quería estar con él. Quería que volvamos a ser hermanos. Que volvamos a esos viejos tiempos en donde nos divertíamos juntos. Quería recuperar a mi único hermano. A mi única familia que le daba sentido a mi vida mientras mamá y papá estaban ocupados lidiando con todo este pueblo de monstruos.

―Pero... dijiste varias veces que harías lo que sea para que Chara vuelva a ser el de antes... ¿Te rendiste con ello?

―... ―Flowey levantó la mirada, observando la luz filtrándose de la superficie a este lugar de Las Ruinas―. Decidí... solo decidí dejar de molestarlo. Realmente lo quiero, y cuando él me decia todas esas cosas horribles, cuando tomé conciencia que el hecho que intentase asesinarme con sus propias manos no era un motivo de celebración... supe que solo me estaba alejando mas y mas de mi objetivo. Tal vez con un par de miles de reinicios hubiera quebrado la mente de Chara... ¿Pero hubiera vuelto a ser el de antes... o se convertiría en una personas completamente distinta como contra la que estaba luchando? ¿Lo que estaba haciendo... si quiera tenia sentido...?

―Estabas... ¿Confundido?

―¿De que hablas? Claro que no ―Flowey bajó la mirada, observando las flores―. Sabia lo que estaba haciendo. Era tan claro como el agua.

Izuku bajó la mirada. Eso sonaba como alguien que no estaba arrepentido...

¿Tal vez se estaba equivocando?

―No te entiendo... Asriel.

―Yo si te entiendo, Izuku ―respondió bajo la entera sorpresa de este―. Tu y al resto. Incluso a Chara.

Ante el silencio despues de esa afirmación, Izuku negó levemente. ―¿En que sentido nos entiendes? ¿Que entendiste?

―Entendí que... cuando creía haber visto todo lo que el mundo tenia para ofrecer, solo estaba viendo el contenido dentro de una caja ―se volteó completamente―. Cientos de años. Durante siglos estuve reiniciando y explotando las posibilidades para saciar mi aburrimiento. Cada dialogo de cada persona en cada situación posible a mi alcance. Lo se todo de todos. Pero no me había dado cuenta que no era suficiente. Que antes de comenzar a matar... habían mas posibilidades, las cuales estoy seguro que eran virtualmente infinitas... y no me di cuenta de ellas.

―¿A-A que te refieres con esas posibilidades?

―Las que tu y Frisk trajeron, Izuku ―Flowey sonrió levemente―. Con nuestra batalla... me di cuenta de algo. Algo tan estúpido que simplemente no tiene el mas mínimo sentido que no me halla dado cuenta antes. Las personas son impredecibles... Papyrus viéndose tan cool, Toriel enfrentando a su hijo para defender a sus seres queridos, Mettaton luchando por algo mas grande que él mismo, Sans moviéndose un centímetro, Undyne mostrándose tan fiera, Chara luchando por el "bien"...

Ambos se observaron con algo de intensidad, compartiendo esos recuerdos tan vividos que experimentaron al estar en el mismo cuerpo.

―Todos ellos... cambiaron. Gracias a ti y a Frisk... nuevas posibilidades fueron explotadas. Nunca pensé en intentar hacer a Undyne y a Alphys dar el primer paso, o intentar hacer reconciliar a mis padres. Nunca pensé en explotar las posibilidades que abarcan el hacer un grupo de amigos. Uno que se impulse con el otro para alcanzar metas imposibles. Francamente... ―sonrió honestamente― fue muy divertida esa batalla a muerte.

―Oh... ―eso no solo tan bonito...

―No quiero pensar mas en ello. 

Despues de todo... Flowey ocultaba media verdades. El caso era que la decisión de su rendición no estaba tanto en las manos de Frisk e Izuku... si no en Chara.

―Yo tampoco quiero esto... pero así como la única manera de detenerme era asesinándome... pienso hacer lo mismo con Asriel. Quiero devolverle el favor. Aunque signifique cargar con una muerte antes de irme al infierno... quiero que no sufra mas. Estoy completamente dispuesto a matarlo con mis propias manos para que todos sean felices, incluso él. Mis sentimientos al respecto no importan.

Chara... seguía amándolo. Y el dolor que le habrá causado haciéndolo pensar que se volvió un demonio por su propia culpa posiblemente le hizo sufrir, cosa que Asriel nunca tuvo la intención de hacer. Al menos no sin un propósito.

Ya esta. Había llegado demasiado lejos. Simplemente, ahora que había recuperado su amabilidad... no podía seguir provocando sufrimiento si razón. El alma de este humano como sus propias experiencias se oponían a ello.

Por eso decidió hacerse a un lado.

―Sin importar mi elección personal... Humanos y Monstruos no pueden coexistir. Las diferencias entre ambos causan sufrimiento, y ese sufrimiento solo genera odio. El respeto se vuelve envidia, lo que genera aun mas dolor. Sin mi intervención... una de ambas razas esta destinada a dejar de existir para prevalecer la existencia de la otra. Esa es la verdad... Izuku... ―Flowey suspiró―. Y por Chara... no intervendré. Para que Chara sea feliz, yo debo desaparecer, y eso mismo haré. Por eso vuelve y solo diles que perdí la conciencia permanentemente. Que estoy en coma o algo parecido.

―... ―Izuku hizo el esfuerzo por levantarse―. Pero si decidiste rendirte por Chara... ¿Por que conservas un alma humana? ¿Es para conservar algún sentimiento que evite que vuelvas a actuar... o es por otra cosa?

Flowey le observó con fastidio. ―Eres demasiado perspicaz para tu propio bien. Simplemente decidí quedarme con la Determinación.

¡¿Ah?! ¡¿Tan simple como eso?! ―¡¿Por que?! ―gritó un perdido Izuku.

―... ―Flowey solo bufó levemente, sonriendo―. El poder de Resetear es una maldición. Simplemente les saqué ese peso de encima, como tambien decidí revivirte. No hay una razón. Simplemente lo quise así.

Izuku negó. ―Mientes.

―¿Perdona?

―Mientes ―repitió―. Se que lo que hiciste no fue simple casualidad.

―... ―Flowey nuevamente miró el techo y suspiró con fastidio―. Si te lo digo, ¿Por fin desaparecerás y juraras nunca mas volver?

Oh. Esa era una promesa muy fuerte...

Pero... había llegado tan lejos por esas respuestas...

―No tengo opcion.

Flowey solo asintió. ―Ustedes cambiaron a Chara. Si es para bien o para mal supongo que no me importa... Pero lo importante ahora es que estaban... bueno, horribles. Tu estabas muerto y la psicología de Frisk estaba cayendo mas rápido que el autoestima de Alphys.

Izuku se indigno levemente por la analogía del final.

―Por eso decidí hacer dos cosas. Tras tus palabras y las de Chara... bueno, todos en general, decidí usar el poder de las almas para destruir la barrera. Luego resucitarte aunque no fuera a arreglar mucho... y cuando fingí mi derrota, decidí conservar un alma para robarle a Frisk la capacidad de Reiniciar. Mas que nada por su propio bien, supongo.

―Pero... ―Izuku lo entendía, pero se vio preocupado de igual manera― ese era le único poder real de Frisk. Sin él...

―Esta mejor sin poder resetear ―le calló Asriel―. Allá afuera deben de pasar muchas cosas. Con el poder infinito de los reseteos, ella nunca podría vivir una vida. Siempre abría alguien que salvar. Algún evento que arreglar. Alguna información que seria mas valiosa si se supiese en el pasado. Eso no es vida, pero como tu y Frisk están locos... estoy seguro que lo hubieran aceptado sin problemas ―Flowey observó su pecho―. Esta mejor conmigo. Ella esta mejor sin poderes que con este poder maldito.

Poder... maldito...

En cierto sentido tenia toda la razón. Un poder que puede conducirte para arreglarlo todo y conseguir un final feliz con mucho esfuerzo... o dejarte llevar y hacer un genocidio sin aparentes consecuencias, solo para saber "que pasa" o simplemente enfrentarte a Sans al final.

Despues de todo, Flowey estuvo en ambos espectros. Y sin saberlo, muchos lo entendían.

―Ya tienes tus respuestas. Que sepas que no me importa en lo mas mínimo que pienses sobre todo esto. Es mi decisión permanecer aquí abajo. Y no cambiaré de idea por nada.

―... ―aquellas palabras cargadas de seriedad y determinación no mentían, y mermó por completo aquellas intenciones de Izuku.

Asriel...

Realmente él... Izuku aun no lo entendía con claridad.

Era un loco. Una victima de su poder y de Chara. Un tipo que en el principio fue un héroe hasta que perdió sus sentimientos, la única barrera que le impedía cometer atrocidades.

Estaba empeñado en no estar solo en su camino al infierno, guiándose puramente por la lógica de su mente... pero en el momento que adquirió sentimientos, todo cambió poco a poco, incluso su logica.

Y dispuesto a exiliarse por si mismo... decidió observar a lo lejos a la persona que mas quería ser feliz mientras el se pudría en la oscuridad, siendo guardián del poder de Resetear para así Frisk pueda vivir tranquila.

Y no solo eso. Fue el libertador de los monstruos y salvador de Izuku.

En todo sentido, por lo que Izuku entendía... Asriel era un héroe perdido. Perdido entre sus desgracias, sus pensamientos entre siglos de vida, y sus sentimientos abrumadores y amor inconmensurable.

Cometió atrocidades y casi dirige el mayor genocidio de todos los tiempos... pero logró detenerse a tiempo.

Si tantas desgracias no hubieran ocurrido... ¿Asriel tan vez hubiera sido un gran héroe?

Sin saberlo, Izuku nunca podría sacarse esa pregunta de la cabeza.

―Lo prometiste ―Flowey lo observó una ultima vez―. Vete e invéntate algo convincente.

―... ―Izuku simplemente asintió, comenzando a retroceder―. Gracias Asriel.

―No las merezco ―el chico sonrió astutamente―. Solo compensé algo de todos mis errores.

El peliverde solo sonrió levemente, aceptando aquel final, y decidió darle la espalda para marcharse.

Sin embargo... ―¡Izuku!

Este rápidamente se detuvo, observando a aquella flor malherida.

Se vio seguro de las palabras que diría. ―Si algún día tienes problemas con tu alma inestable... ya sabes donde encontrarme.

Aquello provocó una espontanea sonrisa en Izuku. ―¡Si! ¡Muchas gracias!

Asriel le dio la espalda, dispuesto a continuar vigilando estas flores, hasta qué...

Un sonido seco llamó su atención. Se dio vuelta rápidamente, viendo a dos personas. ―Oh.

Un cuerpo en el suelo y una persona de pie... ¿Persona era el termino correcto? Mejor dicho alma.

Izuku no podía creerlo. Observaba sus manos con absoluto terror. Podía ver el suelo de piedra debajo de ellas... ―¡¿Ah?! ¡¡¿M-M-Mo-Morí?!!

―Me pregunto si es a causa de la magia acumulada del Subsuelo que las almas humanas toman forma... ―murmuró Asriel, sin preocupación alguna.

Izuku estaba al borde del pánico. ―¡¿Asriel?!

―Guarda silencio un maldito segundo ―ordenó este con seriedad.

Ante aquella orden, Izuku hizo el esfuerzo por corregir su respiración agitada, la cual hacia por instinto ya que realmente no necesitaba respirar.

Y cuando logró acallarla... un sonido...

Un simple sonido lo dejó el shock.

Eso era... una respiración ajena a la suya.

Observó su cuerpo físico en el suelo.

No estaba muerto. Su cuerpo no estaba muerto.

Pero... ¿Cómo...? ¿Por qué estaba muerto si su cuerpo continuaba con vida...? Esto era...

Observó sus manos trasparentes. Antes de poder plantearse mas preguntas... observó entre ellas a cierta flor malherida salir del suelo frente a su cuerpo.

Rápidamente lo observó con impacto. ―¿Qué...?

―Supongo que tendré que pegarla con saliva de vuelta... ―Asriel comenzó a enrollar sus raíces y tallos en el cuerpo del peliverde―. Con un poco de magia deberías de estar como nuevo.

El chico no podía procesar lo bizarro de esta situación.

―Por suerte no son heridas físicas. Como antes decía, tu cuerpo ya no es tuyo, pero gracias al vinculo que forcé en él puedes regresar. Hasta entonces, estarás en un estado como el de los monstruos cuando están por morir. Como si estuvieras durmiendo.

―Como si estuviera en coma...

Asintió. ―Izuku, piensa siempre en paralelo. No te descuides. Mantente determinado en continuar dentro de tu cuerpo. En el momento que te olvides de eso, será cuestión de tiempo para que entres en coma, y me necesitaras para traerte de vuelta. Que eso no pase. ¿Lo entendiste?

―... ―el chico asintió con seriedad ante aquel mandato.

Claro estaba. Tambien debería preocuparse por si mismo. Toda esta aventura paso factura a su persona tambien.

―Esto es lo ultimo que tengo. Un poco de magia convertida en electricidad mágica.

―Asriel.

―¿Que pasa ahora?

―... ―Izuku sonrió antes de desvanecerse―. Gracias.

Y Flowey hizo fluir la electricidad. ―Guárdatelo, humano.

[...]

―¿Dices que él... esta en coma?

Todos se observaron mutuamente. No podían creerlo.

Izuku bajó la mirada. ―Parece que no despertará.

Sans le observó. ―Pero si lo hace, ¿No devastará todo cuando menos lo esperemos? Posee un alma humana.

Ante aquello, el peliverde solo le sonrió. ―No lo hará. Estoy convencido de eso.

―¡Claro! ¡Despues de todos estaremos todos juntos para derrotarlo! ―declaró Papyrus con seguridad y alegría―. ¡Ya soy un guardia real despues de todo!

Undyne le observó incrédula. ―¿De verdad? ¿Cuando...?

Papyrus endureció su mirada. ―Lo sé. Pero soy un Guardia Real. No me echaré atrás.

Undyne aumentó su sonrisa. ―Aun estas en practicas ―y se lanzó con todas sus fuerzas, seguida por Papyrus―. ¡Derrota a este tipo y te ascenderé de inmediato!

―Oh... ―Undyne solo podía observar los ojos ilusionados de Papyrus―. Bueno... La Guardia Real se disolvió, a si que-

―¡¿Como?! ―Papyrus se tomó la cabeza―. ¡Estuve tan cerca!

Sin embargo, Toriel apoyó su mano en el hombro de aquel esqueleto. ―Conozco un trabajo perfecto para ti, Papyrus.

Nuevamente el esqueleto se vio ilusionado. ―¡¿Un trabajo especial de la Reina?!

Toriel solo sonrió con resignación. No le gustaba ese titulo despues de todo lo que paso... pero bueno. Asgore se lo había encargado... ―Si... Solo sígueme.

El esqueleto adoptó posición militar. ―¡Si, señor! ¡Señora!

―Tu tambien, Undyne. Tenemos que conversar sobre algunas cosas.

La mujer asintió. ―Si... Supongo que la división de responsabilidades... ―rápidamente emprendió el camino, siguiendo a esos dos.

Izuku solo suspiró. Parece que se creyeron la menti-

―Izuku.

Se tensó enormemente. ―¡¿S-Si, Undyne?!

―... ―esta desvió la mirada―. Te encargo a Frisk. Tienes que prometer que la protegerás cuando no este, ¿Esta bien?

Aquellas palabras sorprendieron enormemente a Izuku...

Claro estaba. Ella continuaba golpeada por la muerte de su maestro, la muerte de Asgore.

Y Frisk, siendo la heredera de sus sueños e incluso de su alma...

Asintió. ―Ella no necesita que la cuiden... pero estaré allí para ella.

Sonrió, y tras asentir, continuó su camino.

Nuevamente Izuku suspiró. Ahora si. Parece que se creyeron la mentira sobre Asri-

―Chico.

Nuevamente se tensó enormemente. ―¡¿Sa-?!

―¿Cuanto de lo que dijiste es verdad? ―preguntó con un tono de voz neutro, observándole de reojo.

Aquello hizo subir la temperatura en el rostro de Izuku. ―E-Eso... ¡Todo!

―... ―Sans bufó, ligeramente divertido―. Te creo. Si él no supondrá problemas, supongo que puedo volver a holgazanear.

Aquello dejó sin palabras a Izuku. ¿Que le cree?

Pero...

―Este consciente o no... tu regresaste, y confió en tu palabra. Diste la vida por todos nosotros, despues de todo ―le guiñó un ojo―. Cuando acabes aquí arriba, baja con todos los demás. Estoy seguro que esta noche será la mas alegre y movida que tendremos en nuestras vidas.

Y razón no le faltaba. Despues de todo, y estando bajo la luz del atardecer despues de tanto tiempo, ¿Que pueblo no organizaría una gran fiesta en honor de sus salvadores?

¡Y claro estaba que los protagonistas aquí eran los humanos que lo dieron todo en batalla!

Izuku cerró sus ojos y sonrió enormemente. ―¡SI!

Y cuando los abrió... Sans no estaba en el lugar.

Debería de preguntar por eso mas tarde. No parecía algo mágico...

Es mas, ¡¿No lo había conversado brevemente con Asriel?! ¡Pero el estaba en blanco en ese momento, a si que no recuerda mucho!

Y con ello...

El viento sopló con suavidad, meciendo los cabellos del peliverde.

Un viento que hacia mucha diferencia con el de la otra vez. Con el de la tormenta que les obligó a caer en este lugar.

―... ―Izuku respiró hondo y exhalo con tranquilidad, siempre al tanto de mantenerse unido a su cuerpo.

Desde ahora su vida no seria como la de siempre... pero no era quien para quejarse. Si estaba aquí parado, era por un milagro. Fácilmente hubiera tenido que despedirse de todo...

Poco sabia que estaba parado en el final perfecto, donde todas las piezas encajaron en su sitio. Sin embargo, no todo estaría bien.

Cierta persona se detuvo a su lado. ―La fiesta de esta noche definitivamente llamará la atención de los humanos...

El peliverde asintió. ―Estoy listo.

―Todos lo estamos ―le observó de reojo―. ¿Que harás tu? Por lo que pasó con ese tipo... puedo deducir que tu capricho de ser un héroe va completamente en serio.

―... ―Izuku levantó la mirada, observando el cielo―. Si... pero creo que aquí me necesitan aun mas.

Aquello tomó por sorpresa al castaño. ―¿Qué?

Izuku le observó y sonrió. ―No quiero dejar a Frisk sola con todo el problema administrativo que esto generará. Es mi amiga, despues de todo. Creo que ayudaré mucho mas siendo el portavoz de los monstruos que luchando contra villanos.

Chara solo tenia un rostro incrédulo. ―¿Y que tal la idea de ser el héroe de monstruos y humanos?

El viento nuevamente llegó. ―No creo que me necesiten en ese futuro ―miró delante―. Los chicos que son admitidos en U.A. son lo mejor de lo mejor... y confió en que ellos aceptaran a los monstruos y formaran una nueva generación de nuevos héroes.

―No digas tonterías... Izuku.

Aquellas palabras desde sus espaldas hizo voltear a Chara e Izuku.

Sentada en el suelo, sujetando sus ropas que Asriel había abierto con aquel ataque con el tridente, Frisk se veía seria. En cierta manera, la luz del atardecer que se reflejaba en sus ojos marrones la hacia ver mucho mas seria y determinada. ―Tu tienes que ser un héroe. Tu sueñas con ser un héroe.

Izuku se volteó completamente. ―Pero... tu tambien.

La chica hizo el esfuerzo por levantarse, y sonrió levemente. ―Seré una heroína a mi manera.

Aquellas palabras...

Haciéndose a un lado de la conversación, la cual comenzó entre ellos... Chara se frotó la cabeza levemente.

Estas mierdas de nuevo... Como si fueran memorias de un reseteo, como si supiera que esto no era normal... Pero Frisk no estaba actuando como si este fuera un reseteo de ese tipo...

―Bien... ―Frisk le sonrió―. Creo que el titulo de embajadora se vería mejor en mi.

Izuku no tuvo palabras. ―¿Frisk...?

¿Pero que...?

―Tu serás el próximo heredero del OneForAll... Izuku ¿Lo recuerdas?

Espera... ¿Por que le suenan tanto estas palabras...?

No... Lejos de eso...

Sabia cual seria el resultado de todo esto... El resultado que llegaría si ambos se separan...

Frisk frotó sus ojos, cansada. Ya eran las 2AM...

―Vamos. Aun no acabamos ―intentó alentar Chara―. Si un monstruo llega a utilizar magia en publico, ¿Que harías?

Frisk intentó aplicar la poca concentración con la que contaba. ―Uhm... yo misma me encargaría de evitar eso con mi poder...

Chara puso cara de poker. ―¿Le responderías eso a esa gente?

―... ―Frisk sonrió levemente, continuando con sus palabras―, y... lo ultimo que quiero es que no logres ser un héroe. Que no logres convertirte en el heredero de All Might. Prácticamente tu destino es ser un héroe, y no quiero que nada se entrometa en eso.

Izuku apretó sus puños levemente. ―Pero... ambos íbamos a...

Ella negó. ―Seré una heroína... pero a mi manera. A si que... ¿Por que no soy yo la embajadora?

El chico guardo el silencio. No sabia como sentirse. Esto se... en parte se sentía como un sacrificio...

―¿2... de la mañana? ―Izuku lo observó, preocupado―. ¿Su horario de sueño esta bien?

El castaño negó. ―Bueno... ahora que lo dices... ―Frisk solo dormía 3 horas. Ayer por suerte logró dormir 6...

A la larga... eso estaba afectando a su salud.

―... ―Chara... estaba recordando cosas...

No. No eran recuerdos...

―¿Por que hablas así...? ―Frisk se sorprendió al escuchar esas palabras―. ¿Que importa si seré o no el próximo portador? Lo dices como si... tus sueños no valieran la pena como para que sean cumplidos directamente. Lo dices como si mis sueños valiesen mas que los tuyos ―miró a un lado―. Todo lo que logramos aquí fue nuestro esfuerzo. No me siento mas calificado que tu para ser un héroe...

Chara se sujetó el rostro. ―Sabes que nuestras almas están casi unidas, ¿No? ―lo observó―. Puedo escuchar a tu alma gritar. ¿Crees que estas evitando que Frisk viva?

Izuku solo miro al suelo. ―Estoy harto de no poder esconder mis sentimientos...

―... ―sabia que eran como una predicción. Frisk sufriría. Izuku sufriría. Ellos, los héroes de sus historias, no podían terminar así, pero...

Frisk amargó levemente su sonrisa. ―¿De que estas hablando? Este no fue nuestro esfuerzo. Tu fuiste quien sacrifico sus brazos contra Toriel, quien entendió a Papyrus, el que y se enfrentó en combate y en cocina contra Undyne, quien incluso sacrifico su vida por los monstruos...

El chico asintió. ―Y tu fuiste quien se expuso varias veces utilizando su poder. Tu fuiste quien hizo que continuáramos adelante. Tu fuiste quien se preocupó por todos entre el pasado y el futuro. Tu fuiste quien hizo posible que venciéramos a Asriel. Literalmente... tu salvaste mi vida varias veces, y la del todo el mundo.

―O-Oh... ―Frisk observó al suelo. El... ¿Pensaba eso de verdad?―. B-Bueno...

―Un traje de heroína. Soñabas con ser una antes de que todo esto pase, ¿No? ¿Que te parece?

Hace mucho tiempo que no veía a Frisk con una sonrisa ilusionada en su rostro. ―Fantástico... ―susurró.

―Ese es nuestro regalo, Frisk. De verdad que te esforzaste mucho todo este tiempo. Mereces esto y mas ―mencionó, sonriente.

Frisk mantenía esa sonrisa ilusionada... pero miró abajo. Merecer esto y mas... ―Chara... ¿Tu ya lo sabes...?

―¿El qué? ―preguntó estúpidamente para luego caer en cuenta―. Oh, lo siento. Si, ya me di cuenta.

―¿Q-Que crees que debería hacer...? ―preguntó con nerviosismo. Hablaban de Izuku, despues de todo. El chico que... parece que le gustaba.

Chara se recostó en la pared con cuidado de no atravesarla. ―Me hago una idea de tu situación. No pueden estar juntos, ni llamarse, ni verse, ya que eso arruinaría su plan de integración para los monstruos. Se sabría que tu historia, al menos en parte, es una mentira, y perderían credibilidad. Es una visión algo desesperanzadora...

―... ―Chara... no sabia si intervenir. ¿Seria lo correcto? Era el asunto de ambos. Era...

Izuku la volvió a observar.

Realmente no quería, pero...

Esa determinación de ella...

Simplemente... simplemente no podía decirle que no. Por ello suspiró. ―Esta... esta bien... ―Frisk sonrió al escuchar aquello, ya que no sabia como responder a lo que el había dicho. Pero, para su sorpresa, Izuku la observó a los ojos, determinado―. Juró que yo también me esforzare. No será como cumplir un capricho o ser popular. Cambiaré el pensamiento de las personas como un héroe. Siempre estaré preparado y seré lo suficientemente fuerte para proteger tanto a humanos como a monstruos. Prometo esforzarme hasta el final para convertirme en un héroe para ambas razas.

―Sabes... no es necesario que... bu-bueno... ―Frisk estaba apenada―. Yo... yo no soy una tonta, y se que tu no eres un tonto sobre... estos sentimientos...

El peliverde se vio sorprendido, y no pudo evitar sonrojarse. Así que... así estaban las cosas...

La chica amargó su mirada. ―Odio esto... de verdad... lo odio... ―apretó sus puños―. Se que esto es un milagro. Se que... es prácticamente un regalo que ambos podamos estar aquí conversando. Pero... no es suficiente. Siento que no es suficiente. Mañana todo regresará a como era antes. Es mas... Ambos estaremos mas y mas ocupados. Yo con la política y tu con tu entrenamiento. Hasta que todo ya este resuelto... ambos simplemente no podremos...

―... ―apretó sus puños. Esto...

Frisk sonrió enormemente. ―Entonces esta decidido ―extendió su mano derecha―. Esforcémonos al máximo mañana, Izuku.

El chico sonrió tristemente, acercando su mano para estrecharla con la de ella. ―Bien.

―¿Y por que hacerlo así?

Aquellas repentinas palabras les hicieron detenerse. Chara captó la atención de ambos.

Miraba abajo, apretando sus puños. ―¿No hay otra opcion?

Peliverde y castaña se observaron con confusión. ―¿Otra... opcion? ―se preguntó Frisk.

Izuku retiró su mano y observó a Chara. ―No creo que halla otra solución, Chara. Uno tiene que ser un héroe y el otro el embajador. De otra manera-

―¿De otra manera... qué? ―Chara levantó la mirada, notablemente hostil―. ¿Creen que Toriel y Undyne son tan débiles y estúpidas como para no poder ocuparse de la política con los humanos? ¿Creen que los héroes de los que tanto hablan y admiran intentaran rechazar y exterminar una raza de inocentes?

Aquellas palabras impactaron en ambos humanos.

―¿Por que son ustedes los que deben encabezar todo? ¿No acaban de salir a la superficie, recuperando sus vidas y teniendo familias que les esperan? ¿No merecen un poco de descanso despues de haber pasado por tantos infiernos seguidos? ¿No merecen descansar? ¡¿No merecen ser felices?!

―¡C-Chara! ¡¿Que pasa?! ―gritó un nervioso Izuku, sin entender por que su amigo actuaba tan extraño―. ¡Entiendo por que dices todo eso, pero entiende! ¡Si algo llega a salir mal, mucha gente inocente podría morir!

―¡¿Y estas dispuesto a sacrificar tu vida para que eso no suceda?! ¡Ya lo hiciste una vez, Izuku! ¡¿Fue agradable?! ¡¿No deseaste tener al menos una mínima posibilidad para ser un chico normal?!

Aquello simplemente calló a Izuku. No tenia respuesta, ya que todo eso que dijo Asriel era un rotundo "Si".

La muerte no estaba hecha para un adolescente de 16 años. Le faltaba madurar. Le faltaba por vivir y experimentar.

Simplemente enfrentar de cara un destino similar... era aterrador. Y cuando Izuku lo enfrentó... claramente deseo otro final.

―Pero... ¿Hacernos a un lado...? ¿Para qué? ―preguntó Frisk, mirando abajo―. Asgore me confió su legado. La responsabilidad de integrar a los monstruos. Yo... no puedo ignorarlo.

―Eres una estúpida.

Frisk alzó rápidamente la cabeza, encontrándose con la mirada hostil de Chara. ―¿Qué? ―preguntó con sorpresa.

―¿De verdad piensas que mi padre, un tipo apodado "Señor Felpudo" por su esposa y su gente... es capaz de cargar un peso demasiado pesado para llevar en los hombros de una niña humana? Nunca lo entendiste. No mereces cargar con su alma ―comentó bajo la completa sorpresa de ella―. Asgore siempre fue un buen hombre. Con sus errores... Pero nunca le deseo el mal a nadie, y nunca quiso hacer daño de verdad. Si la misión que te impuso es demasiado pesada para ti, déjasela a otro suficientemente fuerte y ve a vivir una vida feliz. Es lo que él diría. "Si no estas lista, ve y haz lo que tengas que hacer".

Aquello dejó sin palabras a Frisk.

Ambos humanos... ―¿Por que... nos dices todo esto...?

―Por que ustedes merecen ser felices... como todos los demás. Y el futuro que planean seguir hará todo menos llevarles felicidad ―Chara no sabia que era lo que había visto. No sabia que Izuku y Frisk se enamorarían o si siquiera lo que había visto se haría realidad...

Pero sus sentimientos se sintieron reales. Sentía pena y frustración por no poder ayudar a sus amigos, llegando al punto de preparar un regalo sorpresa para la castaña de lo culpable que se sentía...

No quería eso ni para él, ni para Izuku o Frisk. Para nadie.

―... ―Izuku solo bajó la mirada. Estaba nervioso... y sentía que esto seria incluso incorrecto, pero era su oportunidad―. Tiene razón.

Frisk lo observó con sorpresa.

―Undyne y Toriel son Reinas. Ellas pueden encargarse de la política, Frisk ―extendió su mano hacia ella, sorprendiéndola aun mas―. Tu me lo dijiste. Siempre soñaste con ser una heroína... y ambos entonces hicimos una promesa.

―Pero... ―Frisk se vio a avergonzada por lo que diría― si llegas a heredar el One For All... Tal vez podríamos, ya sabes... ―Izuku la observó, intrigado― ¿Formar una agencia juntos... lu-luego de graduarnos?

―Cursemos en la academia de héroes, Frisk. Graduémonos y hagámonos héroes juntos.

―Pero... ―Frisk negó levemente, dudosa― yo ya no tengo la Determinación...

―Que curioso ―Chara rodó los ojos―. Curiosamente tienes un potenciador que aumenta tu fuerza, resistencia, velocidad de reacción, agilidad y anda a saber que mas. Me suena como un super poder, pero quien sabe.

La chica quedó de piedra ante aquello.

Desde el fondo del alma de Izuku brotó una leve risa, que luego se convirtió en una sonrisa. ―Cumplamos nuestros sueños juntos... y cambiemos la sociedad desde dentro mientras nuestros amigos lo hacen desde fuera. Establezcamos una nueva era de paz entre humanos y monstruos... Frisk.

Con el sol ya a punto de ocultarse... un ultimo brillo de el se reflejo en los ojos marrones de ella.

La ilusión y la visión de un brillante futuro...

Era una acción egoísta. Abandonar a su suerte a Undyne y Toriel en un nuevo mundo en donde tendrían que aprender muchas cosas para ejercer sus tareas correctamente.

Pero...

Extendió su mano lentamente.

Ser egoísta... no podía ser tan malo.

Solo por una vez... quería hacer algo que le beneficiase a ella. Y eso era...

Ella quería ser una heroína fuerte que derrote a los villanos. Quiso ser una desde que su abuela habló por primera vez de su fascinación por los héroes.

Y ella deseaba... cumplir ese sueño.

Estrechando la mano con Izuku, ella sonrió radiantemente. ―¡Bien! ¡Hagámoslo juntos!

―... ―Chara se frotó la nuca con incomodidad―. Me siento como el mal tercio aquí...

Frisk rio con alegría. ―¡Tu tambien, Chara!

El castaño sonrió y se acercó.

―¡Seamos héroes los tres!

Izuku asintió, completamente de acuerdo. ―¡Esforcémonos!

―Soy un fantasma, ¿Pero por que no? ―Chara extendió sus manos a los hombros de sus amigos―. Hagámoslo, huma-

Una de sus manos atravesó a uno de ellos.

Aquello no le sorprenderia ya que antes solía pasar, pero ahora...

Todos observaron a Chara atravesando el hombro del propio Izuku, mientras su otra mano se mantenía tocando sólidamente el hombro de Frisk.

Parecía ser que... las cosas habían cambiado luego de la batalla final...

El vinculo entre Chara e Izuku se rompió tras la muerte de ambos... y uno de repuesto se creó entre el castaño y Frisk.

Okey. ¡Esto abría todavía mas posibilidades!

Lejos de asustarse o entristecerse, Izuku sonrió enormemente. ―¡Frisk! ¡Puedes acceder a la fuerza desbloqueada!

El rostro de la chica se iluminó. ¡Se rompería los huesos y era una carta de ultimo recurso, pero sin dudas era genial cuando veía a Izuku hacerlo! ―¡¿Cómo sucedió?! ¡Eso me dará aun mas posibilidades!

El rojo en el rostro de Chara subió rápidamente. ―¡¡Ey!! ¡¡No hablen de mi como un simple power up!!

Sin dudas, y aunque el sol ya se halla ocultado entre las montañas... el futuro brillaba mas que nunca.

«FIN»

Logro desbloqueado: Ruta pacifista verdadera con 0 bajas (menos Asgore... F)

Con unos buenos cimientos y una pizca de imaginación, solo se necesita un empujón para hacer que alguien cambie. O que una historia entera cambie. Dependiendo de donde se mire.

Que quieren que diga. Me gustó demasiado. En especial la segunda parte. 

¡Perdón por actualizar tan tarde! Dos meses en especifico. Simplemente no sabia como enfocar este capítulo.

Sin embargo...

Presentado el final verdadero... comienza el Show. ¿Tienen ganas de que esta historia continúe? ¡En mi caso, todas las ganas del mundo!

Así que no haré una nueva historia. Continuaré esta pero bajo un segundo arco. ¿Que tal: "La Aventura de 3 Héroes"? Ni tan mal.

Y eso. Aquí les recomiendo quedarse... pero si quieren acompañarme en este segundo arco, no los detendré. 

Comenzaremos en noviembre :)

En cualquier caso, y ya con demasiado relleno, mil gracias por leer una historia tan larga y tenerle tanta paciencia. Me esforzaré con ganas en esta segunda parte.

¡Hasta la próxima, y gracias por leer!