Capítulo 29: El Corazón de la Humanidad

El reseteo... ocurrió sin ningún problema, llevando a Asriel al ultimo momento donde estaba medianamente a salvo.

Llevándolo hasta el momento donde empujó a Chara, y estaba a punto de intentar liberar su máximo poder por primera vez.

Frisk reaccionó con enorme rapidez, sintiéndose viva. «Esto es...»

En el mismo momento de percatarse que todo había cambiado, Asriel se lanzó contra Chara en menos de un segundo. «Hermano...»

Un recuerdo vivido cruzó por la mente de Frisk en aquel instante, haciéndole ignorar todo lo que pasó en la anterior línea temporal.

Ese recuerdo era... El ambiente.

El ambiente que generó Asriel cuando casi la asesina. ¡Esa voluntad inquebrantable de...!

Rápidamente intentó tomar el tridente de Asgore y lanzarlo contra Asriel... pero no lo logró, ya que aquel tridente aun no había llegado a sus manos. Faltaban algunos pocos minutos para que llegase Mettaton junto a aquella arma...

No...

En aquella arremetida en donde nadie logró reaccionar a tiempo, Asriel se inclinó, tomando una roca del suelo con su brazo izquierdo y generó una espada del caos con el derecho, y tras un sonido inmensamente desagradable... todos en el lugar quedaron en shock.

El cuerpo entero de Frisk comenzó a temblar... ―¿Qué...?

«Lo siento».

Ni siquiera tuvo que inclinarse él mismo. Chara estaba parado sobre un gran escombro, después de todo.

Un notable hilo de sangre se escurrió por la boca de Chara. ―As...riel... ―y tras aquellas palabras, vomitó una enorme cantidad de sangre, manchando a ambos aun mas.

Asriel no se inmutó. ―Lo siento, Chara ―retirando su brazo con violencia, solo sonrió―. Necesito de tu alma una vez mas.

―Bas... ―la mirada de Chara se nublo...― tardo...

Y se desplomó hacia atrás, haciendo regresar a todos al presente.

¿Por qué...?

Frisk y Undyne apretaron sus puños enormemente, y en un salto producido únicamente por la ira mas pura, arremetieron contra Asriel. ―¡¡Chara!!

Asriel solo observó el cuerpo en el suelo, pacientemente, sin encontrar sentimientos por asesinar con sus propias manos a su hermano.

Aunque ciertamente era una muerte algo violenta. Al poseer un cuerpo mágico, lógicamente Asriel no podría atravesar la carne con esa facilidad. Por lo cual, tuvo que empujar aquella roca ―que si era física― atreves del cuerpo Chara.

―Oh, si ―Asriel simplemente se hizo a un lado, esquivando a Frisk quien llegó primero con sus capacidades mejoradas, y le dio un simple tajo con su espada mientras esta seguía delante, arrastrada por la inercia.

Y cuando llegó Undyne, la tomó del rostro y la estrelló contra el suelo con inmensa fuerza. ―Cálmate, salvaje.

Chara palpó débilmente la zona afectada. Un agujero. Un ataque que le atravesó el estomago. «Esto... no... ―el brillo en sus ojos, aquella ventana al alma, se apagaba...― no debió de... haber... pasa...do...»

―...

Y en el momento que el brillo se apagó por completo, lentamente el alma roja brillante del castaño se desprendió de su cuerpo prestado... y Asriel, con su brazo izquierdo libre, la tomó con rapidez, absorbiéndola, liberando un gran pulso de energía mágica que alertó inmediatamente a los presentes.

¿Por que el alma de Chara? Sencillo. Además de que él era un gran problema mientras estaba en control de ese cuerpo, el mismo Asriel no podía aumentar su poder en las almas. Se repetiría el problema con Papyrus y Undyne. Por eso, decidió no intentar aumentar inútilmente el porcentaje de poder mágico que estaba utilizando.

Al sumar un alma humana mas dentro suya, seguiría manejando el mismo porcentaje de poder, pero este seria mayor al contar con un alma mas. Ahora mismo... era tan poderoso como cuando logró sacar su alas.

Y antes de hacer nada, Asriel cruzó sus brazos, alertando enormemente a Sans. ―¡Planea liberar el poder de las almas!

Asriel solo sonrió de lado al momento que Undyne le atravesó lado a lado con su lanza mágica desde el suelo. «Claro que no, idiota. Esto va mas allá».

En su interior, una clase de Chara materializado arremetió contra Asriel sin dudarlo un segundo. Asriel ya se esperaba esto. Después de todo, en aquella vez que ambos llevaron a cabo su plan, Chara fue capaz de robarle el propio control de su cuerpo, y eso... no lo permitiría.

Asriel fue rodeado por las 7 almas humanas, quienes tambien poseían forma pero tenían una mirada nublada por la influencia del monstruo, y utilizando su poder, logró detener a Chara.

Este apretó los dientes al no poder si quiera dar un paso mas adelante. La presión era enorme. Era como si fuera aplastado por 7 humanos a la vez.

A causa de esto, cayó de rodillas. Intentó reincorporarse, pero rápidamente aquellas almas humanas lo sujetaron y le hicieron pegar la cara al suelo.

Chara solo observó de reojo a sus carceleros personales. Midoriya...

Con la mirada nublada, Izuku solo mantenía sujetado a Chara de la cabeza, manteniéndola en el suelo. Yo... Tengo... Que... Salvarte...

El castaño apretó sus dientes con enorme fuerza. ¿Izuku estaba luchando contra la influencia de Asriel en todo este tiempo o solo era un divague?

En cualquier caso... Bastardo...

Asriel sonrió con agrado. Como en los viejos tiempos. ¿No crees, Chara?

De repente una gran roca se estrelló al chocar contra la cabeza de Asriel, haciendo a este solo la necesidad de sonarse el cuello. ―Eso... ―extendiendo su mano derecha hacia Frisk, quien fue la causante de ese ataque guiado solo por la rabia, y solo murmuró― Hyper Goner.

Frisk comenzó a ser arrastrada por aquel poder. ―¡Esto es...! ―sin perder el tiempo, ella se sujetó del escombro en el que estaba parada y, con violencia, enterró su brazo entre la apertura entre escombro y escombro, evitando ser absorbida.

Asriel solo sonrió. ―No eres Chara, pequeña idiota.

Inmediatamente Frisk sintió un hueso de aquel brazo romperse con violencia, provocándole un repentino y fuerte quejido. ¡La presión en su brazo atrapado era demasiada!

Esto... Chara no lo comprendía bien. ¿Por que tenia esta sensación? La misma que antes, una y otra vez...

No te preocupes. No planeo nada nuevo, Chara él castaño observó a Asriel, quien estaba en frente suya, levemente inclinado frente a él―. Me causaste problemas en la anterior línea temporal. ¿Sabes?

... ¿Un reseteo?

Asriel asintió con simpleza. Tus golpes, tu manera de actuar, tu manera de preocuparte, tus diálogos hacia mi... Todo es tan familiar y a la vez tan lejano. Es como-

Es como ver a tu agradable hermano convertirse en un maldito genocida de un día para el otro.

Si, pero a la inversa se vio serio tras decir aquello. Los humanos, la vieja bruja, esa bruta, ese patético esqueleto y su hermano, ese intento de estrella de tv... Todos te están nublando el juicio, Chara. Me di cuenta de ello... y planeo liberarte de esas cadenas para que vuelvas a ser el mismo nuevamente sonrió amablemente. Para que no vuelvas a llorar.

―¡Sans! ¡¡Sans!! ―Frisk ignoró por completo su mas que evidente dolor a causa de la fractura―. ¡Usa ese truco tuyo! ¡Trae a Mettaton que esta en camino y dile que olvide las presentaciones y active su forma NEO rápido! ¡Tenemos que matar a Asriel de nuevo!

Sans lo comprendió inmediatamente. Ya sentía que esto no debería de ser así. Que Chara no debió de haber muerto. Que la actitud de Asriel era muy diferente a lo que esperaba.

Dejó las teorías de lado y corrió, perdiéndose de vista tras cruzar un trozo de pared aun en pie.

Asriel deshizo su ataque y tomó aquella lanza mágica atravesada en su cuerpo, y sin dudar la lanzó contra Frisk quien tenia el brazo atrapado aun.

Sin embargo, aquella lanza fue literalmente incinerada. Asriel solo sonrió levemente y observó a Toriel. ―¿Que pasa, vieja bruja? ¿Ver a Chara morir de nuevo te rompió?

―¡Te detendré, Asriel! ―embarrada en lagrimas, Toriel le disparó una gran ola de fuego―. ¡Juro que lo haré!

Soltando a Undyne, Asriel solo esquivó aquel ataque.

Aquel llanto de Chara frente a Asriel había ocurrido hace tan solo unos pocos minutos para el castaño, por lo que sabia muy bien a que se refería Asriel. Sin embargo... Hagas lo que hagas... Ya los asesinaste una vez, ¿No? Por algo ocurrió el reinicio. Me parece extraño que teniendo el poder de un Dios, hallas reiniciado por que así lo hubieras querido. ¿Acaso te forzamos a hacerlo?

Asriel mantuvo el silencio, dándole su afirmación a Chara.

Ya veo... sonrió astutamente. Al final... la esperanza es lo ultimo que perderé, Asriel. Has lo que quieras... pero ten seguro que siempre estaré allí para defenderlos a todos.

Asriel apretó los dientes con enorme fuerza al sentir aquella gran Determinación en las palabras de Chara. ¡¿Por que mierda te haces el héroe ahora?! ¡Cuando me arrinconaste y cuando hablamos! ¡Todo esto me hace parecer a mi como el villano y a ti como el héroe que debe detenerlo! ¡¿Desde cuando mereces si quiera perdón por todo lo que hiciste como para que te hagas el bueno ahora, Chara?! ¡¿Eh?! ¡Tu y yo no merecemos perdón! sonrió como un maniaco. ¡Nuestro destino es seguir hundiéndonos en la oscuridad como los genocidas que somos! ¿No lo crees, hermano?

...Chara mermó aquella sonrisa.

Asriel lo sintió. Duda, temor, resignación, duda. Tocó varias fibras sensibles sin quererlo... y obviamente lo aprovecharía.

Sonrió. Chara estaba dudando. Lo estaba logrando.

Chara ablandó su mirada. Eso...

Tengo la razón. Lo sabes bien... Chara. La esperanza, la felicidad, la risa, la compañía, estar junto a nuestros seres queridos... No te niego que se siente bien. Llegué a experimentar algunas de esas cosas cuando, luego de convertirme en una flor, intenté recuperar mis sentimientos junto a Asgore y luego junto a Toriel. Sin embargo... no podemos engañar a la realidad. Ninguno de ellos me hizo sentir completo. Yo solo quería amar a alguien. Yo solo quería preocuparme por alguien ―Asriel sonrió cálidamente―. Chara. Había decidido quitarme la vida. No tenia sentido vivir una vida sin amor. No tenia sentido vivir una vida sin ti ahí. Tu lo entiendes... ¿No? Al final... el mundo me comprobó que esas cosas no son para mi. Y finalmente supe lo que siempre sentiste. Sentías que esas cosas no son para ti. Por fin me di cuenta que esas cosas no eran para demonios como nosotros.

...

Pero aun hay esperanza Asriel sonrió cálidamente. ¿Recuerdas cuando salíamos a jugar aquí afuera? Hoy puede ser igual de divertido.

¿A... que te refieres?

Asriel intentó liberar su poder ya que había logrado una brecha, pero Papyrus le interrumpió lanzando varios huesos, los cuales Asriel no se molestó en esquivar. Los recibió de lleno, quebrándose estos al impactar contra él. ―Eres patético ―murmuró mientras apretaba el mango de su espada del caos―. Solo muere.

En un movimiento veloz, arrojó aquella espada con todas sus fuerzas.

Sabiendo que la defensa seria inútil, Papyrus solo afiló su mirada y esquivó por nada aquella estocada, recibiendo un daño mas que considerable por el rose. ―¡Ya lo se! ¡No soy tan genial como Undyne! ―sonrió mientras mantenía aquella mirada desafiante―. ¡Pero le prometí a Sans que lo relevaría, y planeo que devuelvas el alma de mis amigos!

―Tu... ¿Amigo? ―Asriel bufó, generando su cañón―. ¡Chara es solo mi amigo, pequeño inútil!

Undyne tomó desprevenido a Asriel, golpeando aquel cañón ya cargado, desarmándolo. ―¡Los amigos no se matan entre si! ―sonrió mientras le lanzó un estoque, atravesándole nuevamente―. ¡Solo eres un bastardo sin amigos!

―No lo creo ―Asriel simplemente se volteó, observándola con atención―. Tengo 8 almas en mi interior haciéndome mucha compañía, ¿Sabes? Izuku habla estupendamente de ti ―se lanzó contra ella, tomándola del rostro―. ¡¿Por que no te le unes?!

Undyne de repente sintió sus fuerzas mermarse. «¡¿Esta... absorbiendo mi alma?! ¡Maldición! ¡No puedo-!»

Asriel recibió un golpe triple, siendo este un fuerte golpe de parte de Papyrus en su rostro con un gran hueso, el cual nuevamente se partió como en la anterior línea temporal. Junto a aquello, Frisk hundió su puño en el costado de Asriel, y Toriel concentro suficiente magia en fuego como para lanzar un ataque concentrado lo suficientemente capaz de cortar de un tajo su brazo.

El príncipe se vio enfurecido. ―¡Malditas cucarachas! ―gritó a la vez que ejecutaba Shoker Breaker, forzando a todos a alejarse debido a los repentinos ataques.

Estoy cansado... Chara Asriel observó a los alrededores de su propio interior. Estoy cansado de esta gente. Del subsuelo. Y hasta hace algo de tiempo... estaba cansado de ser una flor. Pero el destino, el autor, Dios o quien sabe que... nos trajo aquí. Ya no soy una flor. Ya no estoy solo, Chara. No estoy solo por que tu regresaste.

Chara ablandó su mirada. ―Asriel...

Todo este tiempo fantaseaba con tu regreso... por que sabia que eras un demonio tal y como yo. Por que sabia que tu eras el único que me entendería... y yo seria el único que te entendería, no como sucedía en el pasado, antes de que me convierta en una flor. Ahora que ambos estamos juntos, no hay necesidad de luchar de nuevo. Finalmente podemos terminar lo que empezamos. Podemos liberarlos a todos. Podemos hacer valer todo nuestro sufrimiento, y juntos, aniquilar a la humanidad y volvernos Dioses sobre estas criaturas, y así, finalmente... podríamos vivir juntos en la superficie. ¿Que te parece?

Chara tenia la mirada perdida.

Ahora que se tomó el tiempo de prestarle atención y escucharle...

Todas aquellas ideas resonaban en el fondo de su alma. Vibraban en la misma frecuencia. Su alma... deseaba aquella conclusión. Esa era su naturaleza como ser humano. Su naturaleza como Chara Dreemurr. Aniquilar a la humanidad. Ser un genocida.

Ser "bueno" era difícil. Debía aceptar sus errores, cargar con sus pecados y horrores cometidos. Sin embargo, cuando simplemente los ignoraba y seguía delante... todo se sentía tan bien... Era liberador.

Tal y como sucedió cuando hizo su entrada y golpeo a Asriel... Él no es un héroe.

Aniquiló la esperanza de los monstruos llevándose al príncipe consigo, terminó el matrimonio de sus padres, llevó a la creación de la guardia real y al asesinato de 6 humanos inocentes... y corrompió a aquel príncipe.

Él no-

¡P...ara... To...riel! ¡P...Para...!

Aquellas palabras oídas hicieron a Chara abrir su ojos levemente. Con la mente nublada, Izuku solo murmuraba incoherencias apegadas a sus sentimientos y a su alma.

Pero, aunque esas palabras no significaban nada... le traían ciertos recuerdos. Esas palabras eran cuando él atravesaba aquella barrera en llamas, ¿No? Que recuerdos...

Recuerdos como aquella vez...

Ambos humanos sintieron pena por su amigo ―Chara...

Apretó los dientes ―Mucho después... terminaría llevando a cabo un plan para liberar a los monstruos del Subsuelo... en donde Asriel y yo terminamos muertos... ―no pudo evitar comenzar a llorar―, y los monstruos terminaron mucho peor de lo que ya estaban..., yo les quite la única esperanza que les quedaba..., yo... mate a mi mejor amigo..., yo lo arruiné todo...

El chico estaba lleno de impotencia y tristeza. No podía evitar llorar. Ahora que aceptaba toda aquella responsabilidad... el peso en sus hombros se sentía mucho mas pesado...

Izuku trato de expresarse ―T-Te esforzaste mucho... Chara...

―¿E-Esforzarme...? ―Chara apretó sus dientes, aun en lagrimas―. ¡Soy un maldito monstruo!

―¡Claro que no! ―le grito Frisk con enfado―. ¡Pensaste en los monstruos! ¡No dejaste que te amen por que creías que habías hecho algo malo en el pasado! Y aun... hasta ahora, cargas con todo. No lo olvidaste, ni lo que sucedió ni a Asriel. Aunque las cosas no salieron como querías... aceptaste la responsabilidad...

Izuku sonrió ―No importa las equivocaciones que cometiste en el pasado..., lo único que importa es lo que hiciste luego de ellas. Regresaste. Viste tu error. Lo aceptaste y te sientes mal por ello. Eso te hace muy humano... Me demuestra que sientes tanto amor por los monstruos como ellos por ti.

Chara no podía creerlo.

Se sentía horrible... pero ellos estaban dándole otra perspectiva.

Aun así... bajó la mirada. ―Aun así... no creo que pueda con eso...

―Ey... ―Izuku le llamo―. No tienes que hacerlo solo. Aquí estoy yo... y Frisk ―mencionó con confianza a la vez que sonría.

Chara levanto la mirada, encontrándose con ambos humanos ―¿Por qué..? ¿P-Por qué se esfuerzan tanto por mi?

Ella sonrió. ―Por que te queremos... Chara.

Lo... ¿Lo querían?

Luego de escucharlo... No lo juzgaron.

Esas palabras de Izuku... ¿Eran verdad? ¿No importaba las equivocaciones que halla cometido en el pasado?

Que tonterías. Si que importaban. Izuku era un idealista del mas alto nivel. Aun así...

―No importa las equivocaciones que cometiste en el pasado... Lo único que importa es lo que hiciste luego de ellas. Regresaste. Viste tu error. Lo aceptaste y te sientes mal por ello. Eso te hace muy humano.

Muy humano...

Y si, consiente de sus errores pasados, siguiera por aquel camino... ¿En que se convertiría entonces?

No había que ir ni muy lejos ni al extremo para hallar esa respuesta.

―¡Me han enseñado mucho, humanos! ―agradeció Papyrus―. ¡Por ello les otorgo el permiso de pasar por aquí! También les daré direcciones a la superficie.

―No es necesario ―le interrumpió Frisk―. Ya sabemos el camino.

―¡Oh, eso hace las cosas mas fáciles! ―Papyrus levantó su dedo pulgar―. ¡En fin! Estaré en casa siendo un amigo guay. ¡No duden en venir! ―el esqueleto comenzó a marchar riendo de su manera tan particular―. ¡Adiós, humanos!

Frisk y Izuku le despidieron manteniendo una sonrisa en sus rostros. Finalmente podían salir de Snowdin...

Sin embargo, Chara se acercó a ellos, enormemente confundido por aquella afirmación de la chica. ―Ey ―se dirigió a Frisk―, ¿Por que dijiste eso?

Esta volteó e inmediatamente le sonrió. ―Te tenemos a ti como guía, después de todo.

―¿Qué?

―Frisk tiene razón. Confiamos en ti, Chara ―apoyó Izuku―. ¿Waterfall es el siguiente lugar?

Asintió ―Si...

Si ignorase todo por lo que pasó... solo se convertiría en una cosa.

Ni en un monstruo, ni en nada parecido.

Él...

―¿Sabes...? Todo esto me preocupa... ―el chico pasó a observar el techo de esta gran cueva. Aquel techo que no paraba de brillar debido a sus piedras―. Cada vez que avanzamos... observo todo lo que paso tras mi muerte. Me preocupa... saber la verdad. Tengo miedo que me halla equivocado y ahora todos estén... ―mantuvo un corto silencio, para luego suspirar― sufriendo por mi culpa...

Frisk no sabia de que estaba hablando exactamente, pero... ―Yo... también me pregunto si hice bien en hacer ciertas cosas, Chara. Pero, gracias a todo esto, logre descubrir mucho sobre mi misma. Se que puedo hacer amigos. Ahora estoy segura que, pese a mi ausencia de Don... puedo hacer lo correcto... y ahora se que no siempre es necesario pelear para resolver las cosas ―Frisk sonrió―. Si... Aprendí mucho sobre mi misma...

Chara guardo silencio. Aprender sobre uno mismo...

¿Que aprendió sobre si mismo en todo este tiempo?

Conoció a dos humanos que no eran tan malos como el pensaba. Aprendió que... sus acciones tenían consecuencias... Y ahora estaba preocupándose por quienes odiaba y echaba la culpa por el sufrimiento de los monstruos.

Asintió. ―Si... Creo que tienes razón...

Él se convertiría en un ser humano que se traicionó a si mismo. Un ser humano que no merece la confianza de sus amigos.

Desde aquel momento en Waterfall lo supo. Él deseaba arreglar sus errores. Extrañaba lo que había perdido...

Él deseaba recuperar lo que había perdido. Recuperar la esperanza de los monstruos. Recuperar a aquellos que le adoptaron. Recuperar la felicidad y... a Asriel.

Solo deseaba... eso. Nada mas que eso. Un sueño imposible tras otro.

Un sueño imposible tras otro...

―Ellos salvan personas, pelean contra villanos pero no los asesinan... si no que los detienen... ya que todas las personas pueden cambiar en algún momento... si se lo proponen...

La mujer le apuntó con su lanza. ―¡Esos héroes de los que me hablas son débiles! No todas las personas cambian. Incluso entre los monstruos hay quienes dejarían a toda su gente encerrada aquí abajo para siempre, solo por un boleto de fama... ¡¿De verdad piensas que perdonando a todos puedes defender a tu gente?! ¡Eso es llevar la ingenuidad al extremo!

Sin dudas el perdonar a todo el mundo era llevar la ingenuidad al extremo. Izuku era un ingenuo. Frisk era una ingenua. Papyrus, Undyne, Alphys, Sans, Mettaton, Kid, Asgore, Toriel... Todos eran ingenuos a mas no poder.

Pero... si no fuera por esa ingenuidad, él no estaría aquí.

Si hubiera visto a estos humanos asesinar, incluso en defensa propia, eso solo hubiera reforzado su pensamiento antes de darse cuenta de sus errores. Su pensamiento sobre que en este mundo era matar o morir. Se hubiera convertido en un demonio en toda la expresión de la palabra.

Pero no fue así. Fue gracias a la ingenuidad y buenas acciones de todos que ahora está aquí, pudiendo tener una nueva oportunidad para ceder ante sus viejos deseos que le arrebataron todo.

Aunque nunca pueda compensar sus pecados, y los arrastre siempre en su memoria... él había hecho amigos ingenuos, los cuales le perdonarían. Los cuales le perdonaron ya.

Dándose cuenta de aquella verdad...

―Si acepto todo lo que hice y empiezo a hacer lo correcto... eso probaría que todos mis actos pasados eran inservibles ―Chara mantenía la mirada baja―. Todo lo que hice en el pasado me convertiría en un demonio...

―Tienes toda la razón, Chara.

―Pero... ―Chara sonrió levemente, recordando nuevamente al ingenuo de Izuku mientras observaba a su versión distorsionada― los héroes creen... Mis amigos creen... que incluso los demonios tienen redención.

Un leve recuerdo cruzó por la mente de Asriel, desconcertándolo. Ese recuerdo... no era suyo.

¿Era de Izuku? ¿Por qué...?

―Es por eso que no volveré a cometer los mismos errores, Asriel. ¡No planeo volver a ser ese Chara nunca! ¡No sabiendo que tengo redención! ¡No sabiendo que tengo a mis héroes que creen en mi!

Asriel... no esperaba para nada esa respuesta. Un inmenso desconcierto nació desde el fondo de su ser. ―¿Por... qué...?

―Por fin acepto una verdad dolorosa, Asriel ¡Soy un humano! ¡Y los humanos incansables a los que acompañé todo este tiempo me enseñaron una verdad invaluable! ―sonrió enormemente, determinado, intercambiando miradas con Izuku―. ¡La verdadera fuerza de los humanos... es negarse a rendirse! ¡Eso es lo que Frisk y Izuku me enseñaron! ¡Es la verdadera esencia de la determinación! ―Chara mantuvo aquella sonrisa, observando la mirada de Izuku esclarecerse levemente―. ¡Soy un humano, y como tal, no me rendiré en mis sueños imposibles! ¡Recuperaré la esperanza de los monstruos! ¡Recuperaré la felicidad de mamá y papá! ¡Te recuperaré a ti, Asriel!

―...

―Dime, héroe... ―Chara mermó su sonrisa―. ¿Todo lo que me enseñaste fueron mentiras?

Asriel observó sin palabras a aquella forma de Izuku, quien tacleó con todas sus fuerzas a el resto de almas humanas aun nubladas.

Había perdido el control sobre ella. Eso solo significaba una cosa.

Izuku se puso de pie y extendió su mano a Chara. ―¡Por supuesto que no!

Chara tomó aquella mano y se colocó de pie con su ayuda. ―Eso creí, Izuku.

―¡Asriel! ―Izuku le encaró― ¡Nadie volverá a morir!

―... ―Asriel amargó su mirada―. ¿Es esto una traición... Chara?

El chico solo miró a su hermano con seriedad. ―¡Haré que tus sentimientos regresen! ¡Volverás a ser esa cabra mimada, Asriel! ¡Lo prometo!

―Eso es imposible ―Asriel sujetó su pecho―. ¿Que sucede si algo sin alma obtiene la voluntad de vivir? Eso fue lo que me trajo de vuelta. Mi alma esta perdida para siempre. Mis sentimientos están perdidos para siempre, Chara. La única forma para que yo sea feliz... ―Asriel pisó con todas sus fuerzas el suelo del lugar, tanto física como en su interior― ¡Es hacer que seas el Chara de antes aunque te asesine miles de veces!

Todos sus enemigos se prepararon. Asriel comenzó a hacer el trabajo de regenerar su brazo amputado por Toriel, impactando a los monstruos al observar su inconmensurable poder capaz incluso de regenerar el cuerpo.

Izuku apretó sus puños y se preparó. ―¡Nunca nos rendiremos! ¡No importa cuantas veces reinicies, yo siempre estaré allí para detenerte incluso si Chara vuelve a estar vivo! ¡Incluso si reinicias cuanto puedas, siempre estaré dentro tuyo! ¡No puedes desacerté de mí!

Asriel solo apretó los dientes. Ahora contaba con el poder de 6 almas humanas. Eso significaba...

Un fuerte rayo de energía mágica chocó contra él. Asriel rápidamente clavó los pies en el suelo y se cubrió de aquel ataque con sus brazos. ¡Este ataque era...!

Frisk logró sacar su brazo de entre los escombros y sonrió enormemente. ―¡Mettaton!

―¡NEO! ―gritó este aun en su espectáculo. «Por un momento y me emociono. Este Dios parece no ser la gran cosa. Pensé que mis reservas de energía no serian suficientes para arrinconarlo de esta manera ―pensó a la vez que apagaba su cañón, notando a Asriel notablemente afectado».

Undyne tambien notó esto. ―Ese ataque no debería de ser nada para él. ¡Es como si su poder hubiera decrecido de golpe! ¡Ya no es invencible!

―¡Entonces no perdamos el tiempo! ―Papyrus generó un hueso y lo tomó con fuerza―. ¡Debemos aprovechar la apertura y atacar todos juntos!

La heroína sonrió enormemente. ―¡Esa es la iniciativa, piltrafa!

El mettabot nuevamente trajo el tridente a las manos de Frisk, y esta lo blandeo. ―¡Algo esta sucediendo! ¡Tenemos que atacar todos a la vez! ¡No se dejen tocar por Asriel o él absorberá sus almas!

Todos asintieron, incluso Toriel, quien estaba lista a no contenerse incluso si sea su hijo.

Asriel no perdió un solo segundo. «¡Debo reiniciar! ¡Si no regreso en un punto en donde Chara esté con vida, no podre hacerles frente a todas estas cucarachas a la vez! ¡Debo...! ―apretó enormemente los dientes―. ¡¿Por que... mi determinación no funciona?! ¡Nadie en esta línea temporal me supera en determinación! ¡Debería...! ¡Debería...!»

―¡Vamos, todos!

¡Vamos, Izuku!

¡Si!

Mientras todos sus enemigos arremetían contra él a la vez... pareció comprender lo que estaba sucediendo. El por que estaba perdiendo.

La Determinación consistía en manipular la misma existencia, en doblegarla ante la voluntad de una persona. Si esta persona estaba determinada a no morir, no moriría. Si estaba determinada a volver en el tiempo, volvería en el tiempo. Si estaba determinada a ganar un combate, tarde o temprano su enemigo se doblegaría.

En este mismo momento debería de reiniciar... Pero no podía hacerlo por una simple razón.

Deseaba reiniciar... pero no estaba determinado a que suceda. Algo en él no quería que reinicie.

Ese algo era...

Sonrió levemente. ―Chara...

El chico solo mantenía sus dientes apretados. ¡¡Asriel!!

Asriel sonrió enormemente. ¡Maldito infeliz! gritó a la vez que se lanzaba al combate en ambos campos de batalla. Aquellos combates contra todos esos monstruos y esa humana, y contra un intento de héroe y su propio hermano, su mejor amigo.

Esto se sentía muy distinto. No eran sentimientos arraigados a la misma vida. Era un sentimiento genuino. Un profundo sentimiento del deber y adrenalina. Valentía con un toque de fe. Esperanza y, en lo mas profundo, tristeza.

Estos sentimientos no eran suyos. Eran de Chara y Izuku en combinado.

Después de tanto tiempo, por fin siente un coctel de sentimientos genuinos que cualquier ser con alma sentiría. Si llega a reiniciar... ¡¿Acaso podría sentir esto de nuevo?! ¡Por que se sentía de maravilla!

Extasiado, y convencido que esta era una oportunidad única que volvió posible lo que él consideraba imposible, Asriel lanzó un golpe en ambas realidades. ―¡Denme mas!

Aquel golpe en el rostro fue recibido por Chara y Frisk. Estos tomaron el brazo de Asriel, sujetándolo con fuerza, y este recibió un fuerte golpe en el costado derecho de parte de Izuku y Undyne respectivamente.

Asriel nuevamente apretó sus dientes, pero una sonrisa temblorosa rápidamente ocultó su dolor. ¡Los golpes si que dolían con solo 6 almas humanas!

Intentó generar una espada del caos, fallando patéticamente. Parece ser que sus poderes de Dios estaban anulados.

En el mundo real, rápidamente golpeó con su codo a Undyne y le propinó otro golpe a Frisk, soltándose de su agarre y despegando sus pies del suelo. ¡Aun podía volar!

Y con aquella pequeña ventaja, solo observó un poderoso rayo de energía impactar sobre su cuerpo.

Mettaton enterró su pie en el suelo. ―¡Parece distraído! ¡Es como si no estuviera prestándonos atención!

Sans no lo vio muy claro. ―¿Que esta sucediendo en su cabeza...?

Chara ejecutó una barrida a la misma vez que soltaba a Asriel. Este apoyó sus manos en el suelo y envió a las almas humanas tras Izuku, quien rápidamente se tomó su distancia y observó bastante desconcertado a aquellas figuras con la mente nublada. «Es como si estuvieran muertas por dentro...»

¡Eso es obvio, estúpido! gritó Asriel a la vez que encaraba a Chara. ¡Estuvieron décadas o hasta siglos encerrados en un frasco! ¡Su cordura se marchó junto a su humanidad hace tiempo!

Chara y Izuku compartieron la reacción. ¡¿Puede leer sus pensamientos?! ¡¿Entonces como es posible que hallan logrado encajar esos primeros golpes si él ya los conocía de antemano?!

De Izuku era de esperar que no lo entienda, pero Chara lo captó de inmediato. Asriel. Tu- fue cortado por un fuerte golpe del príncipe, el cual respondió sin ninguna duda. ¡Maldito enfermo!

¡Asriel se estaba dejando golpear! Estaba tan enfermo... Estaba tan perdido... que incluso hallaba deleite en esta batalla. Batalla en donde todos se estaban dejando la vida, y él estaba allí, alimentándose de los sentimientos de todos...

Asriel se había cubierto del ataque de Mettaton con... ¡¿Raíces?! ¡Era su poder de cuando era una flor! ¡Salían de debajo de sus mangas formando una esfera!

Frisk rápidamente apretó su tridente. ―¡¡Sans!!

Asriel aumentó aquella sonrisa temblorosa. ¡Pena! ¡Chara estaba sintiendo pena por él! ¡Y Izuku estaba realmente confundido! ¡Las emociones se acumulaban cada vez mas y mas!

Izuku fue sujetado con fuerza por una de aquellas almas, pero logró liberarse al empujarlo y nuevamente tomó su distancia.

Chara lo observó de reojo mientras encajaba otro fuerte golpe en Asriel. ¡¿Que demonios haces?! ¡Si esas almas te someten, Asriel volverá a tener el poder de un Dios! ¡Los de afuera la pasaran horrible de nuevo!

Izuku se veía enormemente centrado, pero Chara logró ver desde la distancia algo extraño en su rostro. ¿Eso era una vena marcada? ¿Por que demonios...?

¡Lo se! respondió Izuku. ¡Pero ellos son simplemente personas que fallecieron aquí abajo! ¡No puedo golpearlos! ¡¡Ellos no tienen la culpa que este maldito villano los este manipulando!!

Chara levantó una ceja. ¿Maldito villa-? nuevamente recibió un golpe, esta vez un izquierdoso, haciendo que mentalmente coincida con Izuku. ¡Sin dudas este tipo se había vuelto alguien asqueroso!

Oh si. Ahora podía sentir el desprecio.

Izuku nuevamente esquivó a aquellas personas con una agilidad envidiable y apretó sus puños con frustración. ¡Prometo liberarlos! ¡Por favor, solo aguanten un poco mas...!

Asriel se vio sorprendido al sentir aquello. Aquella sonrisa suya se amplió un poco mas. Este era un sentimiento sumamente agradable. Confianza. Ese humano realmente creía en sus palabras...

Esa voluntad suya... ¡Eso debe ser lo que les movía a continuar y continuar pese a todo! ¡Era la voluntad de un héroe!

¡¡Esto ya es suficiente, Asriel!!

Asriel cedió un poco mas ante aquellos sentimientos. ―¡Jamás será suficiente! ¡Por favor, luchemos por toda la eternidad! ¡Hagamos de estos sentimientos algo eterno!

―¡Es como si estuviera... ―Frisk encajó un potente corte en la zona del estomago de Asriel gracias a los poderes de Sans, cortando así tambien las raíces mágicas que le protegían― volando en las nubes! ¡Su mirada esta perdida!

Undyne sonrió de lado, lanzando olímpicamente varias lanzas en el cuerpo de Asriel, encajando todas sin menor problema. ―¡Entonces maximicemos los daños!

―Oh. Es verdad.

El ambiente se volvió aplastante de repente.

Asriel observó debajo de sus pies, ignorando por completo que Frisk estaba flotando gracias a los poderes de Sans detrás suya. ―Si me vuelvo polvo esto no durará mucho mas... ¿No? ―aquella sonrisa emergió desde lo mas profundo de su ser―. Por favor, ayuden a Chara y a Izuku a sentir mas y mas.

Todos quedaron impactados. Ellos... ¿Estaban consientes?

Unas pequeñas raíces se enredaban entre si, poco a poco bajando del cuerpo de Asriel hasta la tierra. Tras enterrarse y pasar tan solo 3 segundos, colosales tallos emergieron del suelo, movilizando rápidamente a todos allí.

Sans y Frisk no perdieron el tiempo, lanzándose ella contra Asriel una vez mas. Sin embargo, ante el inminente golpe, Asriel solo sujetó del mango aquel tridente. ―El arma de Asgore realmente es una molestia, Frisk ―mencionó mientras regeneraba sus heridas con su magia.

Frisk no pudo creerlo. ¿Que estaba sucediendo con él? Era como si fuera otra persona...

No solo su sonrisa. Tambien su misma mirada y su manera de expresarse a los demás. Sonaba hasta mas... amable, cosa que chocaba enormemente con sus actos, ya que al alrededor de ellos aquellos grandes tallos continuaban emergiendo, moviéndose con violencia y atacando a cual monstruo se atraviese en su camino.

Asriel apoyó su mano libre suavemente en las de Frisk. Lentamente, y con enorme fuerza, retiraba los dedos de esta, haciendo imposible para la chica ofrecer resistencia.

Tras pocos segundos de un intenso forcejeo, Asriel sujetó aquel tridente con sus raíces y tomó de la camisa a aquella castaña. ―Procura no ser una molestia, niña.

―... ―Frisk cayó en cuenta.

Era imposible que Asriel cambiara así como así.

Además...

¡Es hacer que seas el Chara de antes aunque te asesine miles de veces!

Esto... no podía ser...

A si que así era... ―¿Chicos...? ¿Están-?

Asriel, con enorme versatilidad, sujetó aquel tridente a la vez que la soltaba, encajando un profundo corte inclinado en el pecho de la chica, haciendo a esta quedar paralizada por breves momentos a la vez que Sans la alejaba rápidamente y deshacía su magia en ella, ya que le era enormemente difícil estar al tanto de ella y los ataques que, en caso de rozarle, lo matarían al instante.

El castaño y el peliverde no tardaron en darse cuenta de aquello pese en estar enfrascados en su propia batalla. ¡Frisk!

Preocupación. Una honesta y pura preocupación hacia un amigo.

De todos los sentimientos que Asriel experimentó hasta ahora... este era el primero que originalmente sintió cuando era un niño. Se sentía especial de alguna manera.

Los labios de Frisk temblaron levemente mientras intentaba cubrir su herida, la cual era demasiado grande. Sangraba abundantemente...

Aterrizó torpemente en el suelo junto al cuerpo de Izuku. Sin dudar, rápidamente y a paso adolorido se acercó, le sacó la camisa a la fuerza y la rasgó con su brazo sano y dientes para atársela alrededor de la herida en un intento de vendaje improvisado.

Por suerte, al absorber el alma de Asgore, su tolerancia al dolor aumentó. Aun no podía rendirse. Aun la batalla estaba lejos de terminar.

Y con aquel pensamiento en su mente, y con gran determinación, gritó con todas sus fuerzas. ―¡¡Sans!! ―logrando captar su atención, solo hizo lo imposible. Levantó aquel brazo roto, haciendo que sangre y duela como el infierno―. ¡¡Acomódalo!!

Izuku, Chara, Sans y Asriel se vieron sorprendidos al escuchar aquello. Un recuerdo vivido cruzó por la mente de Chara y Sans, casi como si fuera un recuerdo de una vida anterior.

Y este recuerdo fue lo que cambió rápidamente la mentalidad de ambos. Por su lado, Sans encendió su ojo izquierdo con todas sus fuerzas y afecto el cuerpo de Frisk con su magia. ―¡A la orden! ―y tras aquel grito, acomodó a la fuerza aquel brazo roto.

Inmediatamente tras aquello, Frisk contuvo su grito mas pudo de dolor y cayó de rodillas. ¿Por esto tuvo que pasar Chara tantas veces? Era una locura...

Pero... ―Vamos...

No era tiempo para compadecerse ni por ella ni por su amigo. Solo había una misión en su mente.

Apretó levemente sus labios temblorosos. ―Muévete...

Ahora que sabia que Chara y Izuku estaban vivos... solo había una tarea que ella podía hacer en esta situación.

Frisk tomó su suéter que por suerte aun estaba unido en una pieza... y, desde los puntos de costura en donde Izuku mismo lo había arreglado en Snowdin, lo rasgó por completo.

Izuku se sorprendió enormemente al escuchar aquello. Asriel la observaba de reojo, inmóvil, atento.

Se arrodilló frente al cuerpo y tan rápido como pudo rodeó aquella herida en el estomago y la ató con fuerza. Parece que quería evitar que las entrañas de Izuku caigan al suelo, ¿pero para qué?

Frisk pasó su brazo debajo de las rodillas y la espalda alta de aquel cuerpo. ―Va... ―y empleó todas sus fuerzas en levantarlo― ¡¡mos!!

―¿Que demonios estas haciendo cargando un cadáver... idiota?

A paso pesado y con enorme esfuerzo, Frisk intentaba estabilizar su respiración mientras se alejaba cuanto podía. «¡Tengo que... alejarlo! ¡Aun podemos arreglarlo! ―desde lo mas profundo de su alma, sabiendo que esto era inútil, leves lagrimas se derramaban de su rostro mientras hacia aquel esfuerzo inhumano―. ¡Si este cuerpo volvió a la vida... puede volver a hacerlo! ¡Lo se! ¡Tengo que hacer que vuelva a hacerlo! ¡Solo tengo que evitar que sufra mas daños! ¡Solo tengo que... protegerlo de Asriel!»

Sin embargo, ella no sabia que Asriel no tenia un solo gramo de interés en ella. Al menos no ahora.

Izuku estaba conmovido por el acto de su amiga, sintiendo un gran afecto por ella, lo que sorprendió a Asriel enormemente, ya que ese sentimiento le hizo recordar a uno de sus sentimientos originales.

Amor. La suma de la admiración, el estar conmovido por los actos de una persona y, por supuesto, el aprecio profundo hacia ese mismo individuo... daba luz al amor. Aquel sentimiento primordial en los monstruos.

Aunque este amor era de Izuku, no el suyo. Se sentía bien, pero no estaba dirigido a nadie mas que no sea esa humana, algo desagradable para su gusto.

Hablando de amor...

Asriel sonrió levemente. ¿Ya te dije que te quiero, Chara?

El castaño sobrepasó la torpe defensa de Asriel y encajó un potente gancho derecho en el estomago de este. ¡No volveré a caer en tus tonterías, Asriel!

El príncipe sonrió. El desprecio de Chara creció aun mas tras creer recordar lo que pasó en la anterior línea temporal. Tu desprecio hacia mi es cada vez mas grande. Mezclado con ira... ¿A caso planeas asesinarme como en la anterior línea temporal, Chara?

El chico se vio serio.

Aquellos recuerdos que se sentían tan reales que Frisk le despertó al pedir que Sans acomode su brazo con su magia...

Y en tan solo un segundo, y empleando todo su poder, Asriel generó una espada del caos y dio un tajo de cabeza a pies directo a Frisk.

Mientras aquel cuerpo caía al vacío, Asriel lo observaba de reojo sin moverse de su sitio. ―Si no me concentro en asesinarlos uno por uno, estaré en desventaja. Después de todo... ―sonrió mientras generó su habitual cañón― mi único objetivo es traer a Chara. No asesinarlos en conjunto.

...

Asriel sonrió levemente. ―¿Y que importa si me equivoqué o no? Lo acabas de decir. El Chara que no le preocupa nada mas que su objetivo, que el resultado final, que el avance... regresó. Un Chara que no teme asesinar a su hermano para lograr avanzar ―extendió sus brazos―. Esta constante sensación de inseguridad al estar frente a ti me abraza con fuerza. Estoy sintiendo miedo y temor sobre mi propia vida después de tanto tiempo, Chara. No te imaginas el hermoso regalo que me estas dando sin darte cuenta.

―¡Estas trastornado, Asriel! ―Chara pisó con fuerza, agrietando el enorme escombro donde estaba parado―. ¡Y es mi culpa! ¡Yo te acostumbre a esos sentimientos! ¡Yo fui un insensible y un mal ejemplo para mi hermano! ―apretó sus puños―. ¡A si que es mi responsabilidad salvarte de ganarte aun mas el infierno haciendo regresar a Undyne, a Mettaton y a Frisk, aunque eso signifique asesinarte con mis propias manos!

―Si... ¡Si! ―Asriel generó dos espadas del caos y incrementó su poder mágico hasta tal punto que el lugar temblaba nuevamente―. ¡No sabes cuantas veces fantasee con luchar a muerte contigo cuando era una flor! ¡Concédeme ese deseo tambien, Chara! ¡Oblígame a reiniciar y repitamos esto una y otra vez! ―gritó sumamente extasiado, cediendo ante sus deseos.

Ante la sorpresa de Izuku, Chara oscureció su mirada, viéndose indiferente. Ya... veo. Ya no tienes salvación, hermano.

―¡¡Sans!! ¡Dame un impulso!

El esqueleto rápidamente observó a Undyne junto a Papyrus, y sin dudarlo asintió. ―¡No esperen mucho mas de mi después de esto!

La mujer sonrió. ―Esto será mas que suficiente.

Los pies de ambos se despegaron del suelo, y fueron disparados contra Asriel.

Tú... Chara apretó sus puños y dientes con enorme fuerza, sintiendo una frustración aplastante que Asriel pudo percibir con facilidad, ya que ese sentimiento le abrumó, ¡¡Tú...!! ¡Se que tu estado actual es mi culpa! ¡Enteramente mi culpa! ¡¡Pero eso no es escusa!! ¡¡No puedo soportar que juegues con mis amigos, que juegues con mi gente, que juegues con todos!! ¡¡Que busques placer en asesinar a otros!! ¡¡Solo te aprovechas de todos y buscas controlarlos!! ¡¡Continuando esta pelea, solo estas burlándote de todos los que solo quieren un final feliz!! ¡¡Que por una vez toda esta locura termine!! ¡Y eso...! se lanzó con todas sus fuerzas contra Asriel.

Asriel se vio enormemente sorprendido. «Esos sentimientos... ¡Esa ira asesina...! pensó para luego llenarse de ilusión. ¡Eso era-!»

Un impacto critico triple le desconcentró por completo. Undyne, Papyrus y Mettaton arremetieron contra él a la vez con sus respectivas armas a corto alcance, encajando sus golpes a inmensa velocidad.

Golpes como una estocada de Undyne, un fuerte golpe contundente de Papyrus y un corte que terminó por amputarle el brazo derecho con el cual sujetaba el tridente de parte de Mettaton.

Golpes que, en su estado actual, infringieron un enorme daño, tan considerable como para que Asriel no reaccione ante Chara, quien no se detuvo.

¡No puedo... encajando un duro golpe en el rostro de Asriel, Chara lo estrelló contra el sueloperdonarlo!

De repente Izuku dejó de ser buscado por las almas y observó rápidamente a Chara, quien sujetó con enorme fuerza a Asriel en el suelo, tomando el control. Cha...ra... murmuró enormemente sorprendido. Esas palabras de antes...

Esas palabras habían sido las de un verdadero héroe.

Yo gano Chara amargó levemente la mirada. Tu cuerpo ahora es mío.

Asriel, aun impactado, solo sonrió por reflejo. Como en los viejos tiempos... ¿Eh?

...

Asriel solo recuperó el aliento. Chara golpeaba duro aunque solo sea un alma, y sin contar los daños externos que sufrió. Por suerte, no se volvería polvo. Era necesario mas que eso para derrotarle con 6 almas humanas en su poder. Lo... Lo disfrute... Chara...

Chara cambió su rostro. ¿Lo disfrutó? ¿Disfrutar qué?

Esos últimos golpes... fueron del Chara original. Esos sentimientos... fueron tantos tuyos... como míos... Todo pasó... como si hubiéramos viajado en el tiempo... Tu eres...

Asriel sonrió enormemente, producto de la ilusión. Incluso sus ojos brillaron.

―¡Tu volviste a ser mi amigo! ¡Mi mejor amigo! ignorando por completo el rostro levemente asqueado de Chara, Asriel aumentó su sonrisa. ¡Realmente fueron como en los viejos tiempos! ¡Ahora que volviste, somos iguales ¿Cierto?! ¡Continuemos Chara! ¡Suéltame y volvamos a-!

―Eso no va a pasar.

Todos se vieron sorprendidos al escuchar aquello. El tono de Asriel había cambiado por completo.

Y Frisk no tardó nada en reconocerlo. ―¿Chara...?

―... ―Chara cerró sus ojos levemente―. Todo este tiempo... lo estuve ignorando, pero ya es imposible. Realmente estas enfermo. Encuentras placer en hacer sufrir a otros. Ya no ves la diferencia entre el bien y el mal, y piensas que eres un Mesías, un Dios. Eres... yo. Al menos el yo en el que me hubiera convertido si hubiera seguido delante con mis locuras. Respóndeme, Asriel... ¿A caso estas arrepentido por si quiera una cosa de lo que hiciste?

¿...? ¿Lo preguntas de verdad, Chara? el príncipe solo miró delante. Solo me arrepiento de haber perdonado a esos humanos. Si no lo hubiera hecho, nada de esto hubiera pasado. No hubiéramos sufrido inútilmente. Nosotros estaríamos felices en la superficie.

―¡¿De verdad?! ¡¿Nada?! ¡¿Solo en lo que puedes pensar es en eso, Asriel?!

¿Y que quieres que diga, Chara?

―Nada... Yo no... ―Chara solo suspiró―. Solo actúas por tus propios intereses. No hay manera de que te suelte para que te salgas con la tuya. Tu... ―Chara amargó aun mas su mirada― estas completamente perdido, Asriel. Esta victoria fue... nada menos que un milagro, no pienso desperdiciarla. Solo hay una manera de... salvarte. Aquí es donde encontraras tu final.

Izuku no lo entendió. Fi... ¿Final? ¿De que estas-?

Para sorpresa de todos, Chara cambió el rostro de repente mientras apretaba sus dientes.

Y sin basilar, levantó su brazo izquierdo, y él mismo se atravesó el pecho.

Todos en el lugar quedaron impactados, inclusive Izuku quien no lo comprendió. ―¿Qué...?

Impactado, Asriel solo observó de reojo a Chara.

Aquel castaño mantuvo aquella mirada determinada. ―Nuestro sufrimiento acaba aquí... hermano.

[Fin del Capitulo]

Ultimo paso... Apertura hacia un nuevo final.

Oh si, todas las piezas están encajando.jpg

Créditos por el dibujo a... oh, él no quiere que de créditos. Uhm... Bueno. ¡El coloreo lo hice yo! Ni tan mal, ¿No? XD Obviamente esta inspirado en los trazos del Rengoku Dona. No es necesario que me lo recuerden jsjs

Próximo Capítulo:
Capitulo Final 2: Salvación

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