Capitulo 1: Un paso en falso
La luz de la llama iluminaba el lugar. Ya había anochecido, y tanto Frisk como Izuku se encontraban allí, sentados cerca del fuego.
El bentō estaba medio lleno, ya que ambos se habían detenido de comer al darse cuenta de su situación actual.
Izuku, por un lado, no podía creer como era tan descuidado. ¿Quien va a escalar y olvida el equipo necesario? ¿Quien se olvida de calentar y estirar antes de forzar su cuerpo a un exigente ejercicio?
Frisk, por su parte, tenia un notable sonrojo debido a la fiebre que había aumentado. Lo que mas anhelaba era descender de aquel lugar. Los días allí, varada, no fueron para nada agradables, y el cansancio que sentía era inmenso.
«Bueno...» Frisk suspiró y se recostó en el suelo. «Al menos ya no estoy sola en esto...»
―F-Frisk... lo siento... de verdad ―se decidió a hablar Izuku, muy avergonzado.
Frisk suspiro nuevamente. ―No estoy enfadada... lo que importa es la intención ―le dijo―. Siempre me decían eso, y creo que es verdad.
Al escuchar aquello Izuku sonrió, ya algo mas tranquilo. ―Gracias... ―aun así, se sentía mal por aquello, y por eso guardo silencio, pensando, buscando una forma de bajar...
―Sin embargo ―habló de la nada Frisk, llamando la atención de Izuku―. Trajiste contigo mi mochila, ¿Donde estaba?
Izuku se sobresalto un poco. ―¡Oh! Emm... la encontré abajo ―respondió.
Frisk sonrió. ―Gracias por traerla contigo, Midoriya.
Izuku devolvió la sonrisa y asintió. «En todo caso... ¿Que tendrá dentro? Era bastante liviana cuando la cargue, así que víveres no deben de ser...»
Frisk se estiro un poco, alcanzando su mochila. Sin rodeos la abrió, captando toda la atención de Izuku. Sin mas saco...
―...
―Otro suéter... ―parecía que todas las neuronas de Izuku se habían quemado. «De todo lo que podría haber sido... equipo... agua... un teléfono...»
Sin embargo, Frisk pareció feliz, ya que al sacar aquella prenda de color exactamente igual al que llevaba puesta, una gran sonrisa apareció en su rostro, y lo abrazo con mucho cariño. Izuku por un momento se recordó a el en la niñes, con aquel trajecito de All Might. Era una pena que se había desteñido después de tantas lavadas... ¿Ahora donde estará?
―Se lo que debes de estar pensando... ―Frisk observó a Izuku―. "¿Subiste nada mas con un suéter?" ―Izuku asintió. Su pregunta inicial había sido esa―. Bueno... en realidad las cosas "importantes" las llevaba encima, y termine consumiéndolas para... ya sabes... ―ella comenzó a buscar en su ropa algo... y de el bolsillo del pantalón saco una botella de plástico sumamente aplastada―. ¿Ves?
―E-Eso explica mucho... ―Izuku observó el suéter de repuesto―. ¿P-Piensas ponértelo ahora o...?
Frisk asintió. ―S-Si no te molesta... ¿P-Podrías darte la vuelta?
Izuku trago saliva y se levantó. ―M-Mejor me ma-marchare un rato. En mi mochila hay agua y el resto del bentō, si es que lo necesitas ―sin dar tiempo a mas, ya que esto era demasiado para el, se dio vuelta con la intención de marcharse.
Frisk inmediatamente entendió. ―Ya... y gracias.
Por su parte, Izuku no volteó. No era un idiota. No la espiaría ni nada extraño. Es mas, ya que Frisk no le había avisado si su fiebre había subido, aprovecharía para alejarse y buscar una forma de bajar que fuera segura.
Lamentablemente su dolor muscular no se había calmado, por lo que no podría intentar nada mas que explorar. Una bajada... o tal vez encontrar el resto de la cuerda de Frisk para utilizarla de alguna manera...
La noche anterior no era tan oscura como esta, esto fue rápidamente notado por Izuku quien, ni siquiera forzando la vista lograba ver algo... y eso le daba un aspecto muy, muy espeluznante al lugar.
Para sumar puntos, Izuku saco una linterna de bolsillo que, por suerte, su madre había colocado en su abrigo. Esta iluminaba bastante, aunque sea solo de bolsillo.
Sin embargo Izuku sintió un escalofrío «Me siento como si jugase Slender» Pensó con algo de humor. «Tengo un poco de miedito...»
Sin mucha opción Izuku comenzó a iluminar su camino mientras andaba, buscando algún lugar por donde bajar con seguridad... o al menos encontrar el lugar "seguro" por donde había escalado. Mientras caminaba, arrastraba su pie para dejar una marca lo suficientemente reconocible como para saber como regresar.
Mientras iluminaba su caminó, llegó el momento en donde vio que la luz de su linterna se reflejó en alguna superficie. Su primera impresión fue asustarse, como era obvio... pero luego...
¿Eso era... roca?
[...]
Mientras tanto, Frisk se encontraba cerca del fuego, limpiando con sus manos la suciedad que podía sacar del suéter que ya hace semanas que llevaba puesto. ―Menos mal que llevaba puesto el de repuesto... ―reflexionó―. Odiaría haber arruinado los tejidos.
Se detuvo, y suspiró. «Menudo lió...» Pensó, ya cansada. Mientras seguía limpiando superficialmente aquella prenda, recostó su espalda en el árbol que tenia detrás.
Ahora que lo pensaba... Midoriya no había vuelto. Eso significaba que no se había escondido detrás de un árbol ¿No?
En cualquier caso, se notaba que no era un chico del todo normal. ¿Por que no uso su Don en todo este tiempo? Cabria la posibilidad que también sea un Quirkless ¿Verdad? ¿Y por que se preocupaba tanto por una desconocida?
Frisk se vio algo molesta. Sabia que le había visto en algún lado, pero no lograba ubicar donde. ―Vamos... ―se alentó―. No se supone que sea tan difícil recordar a alguien... ―pensó, forzando sus recuerdos.
Por alguna razón miro al fuego de la fogata, aun pensando en aquello...
Fuego...
Por alguna razón asocia esa palabra con lodo... ―¿Lodo...? All Might... ―de repente Frisk abrió sus ojos lo mas que pudo. En la televisión... hace unos meses... un villano de lodo había secuestrado a un chico. El callejón donde sucedía todo estaba completamente en llamas y ocurrían explosiones, tal vez por el Don del chico. All Might apareció y le había salvado utilizando su famoso "Detroit Smash"...
Antes de eso... un chico se había abalanzado al lugar, saltando la valla seguridad y a los héroes que estaban allí, y intento sacar al chico.
Esa persona..., que parecía una persona temeraria a los ojos de Frisk...
Aquella persona era Izuku Midoriya.
Frisk pareció satisfecha consigo misma. ―Así que de allí era... ―recostó su cabeza en el tronco―. Así que Midoriya es...
Su pensamiento se vio interrumpido por algo muy extraño, ya que el cielo nocturno se había iluminado por unos segundos.
Lo observó por algunos instantes. Ahora que se daba cuenta... estaba nublado...
De la nada, se escucho y sintió un fuerte estruendo que la descoloco un poco. Aquello fue un trueno.
―¡No puede-! ―Frisk comenzó a percibir un olor extraño―. Eso es... olor a ozono...
¿Que como sabia que era olor a ozono? Ella vivió gran parte de su vida con su abuela, y esta le enseño una que otra cosa. Entre ellas... que el ozono es transportado por los vientos en situaciones de... ―Este cielo, los truenos... ¡Viene una tormenta!
Rápidamente Frisk se puso nerviosa. Las tormentas no eran para nada agradables en Japón. Claro, no se comparaban a una tropical, pero aun así...
Estar en medio de la intemperie no era una de las mejores ideas, menos en invierno ¡Mucho menos si es eléctrica!
―¡Frisk! ―ella escuchó la voz a la lejanía. Izuku llegó al lugar, y parecía cansado―. ¡Viene una tormenta Frisk! ¡Necesitamos buscar un lugar donde refugiarnos!
―¡¿P-Pero donde?! ―preguntó mientras se colocaba de pie.
Izuku tomo ambas mochilas del suelo, una de ellas vacía. ―¡Acabo de encontrar una cueva! No se que tan profunda es... ¡Pero servirá para refugiarnos!
Frisk asintió, sujetando su manta y el suéter con fuerza. ―¡Te seguiré, Midoriya! ―este asintió, comenzando a correr al lugar, siendo seguido por Frisk.
Y allí estaban, ambos corriendo por el bosque, mientras Izuku iluminaba el camino. Por suerte había hecho aquella marca en el suelo... así que podría orientarse fácilmente.
«Maldición...» Frisk notó que no lograba seguir el paso a Izuku. Este no era el momento para empeorar...
De repente un fuerte viento recorrió el bosque entero y, luego de aquello, la fuerte lluvia comenzó a caer.
Izuku cubrió su mochila con cuerpo. ―¡Maldición! ―se volteó levemente―. ¡Hay que apurarnos, Frisk!
Esta asintió. Ambos aceleraron el paso con dificultad.
Nuevamente Izuku observó atrás. Estaba bastante alejado de Frisk. Ella no podía seguirle el paso...
Se acercó. ―¡¿E-Estas bien?! ―coloco su mano en la frente de la castaña. «Su fiebre... subió. Maldición... ¡No! ¡No ahora!» Izuku rápidamente tomo de la mano a Frisk. ―¿Puedes seguir? ― preguntó serio.
Frisk asintió. Podía... no... ¡Debía esforzarse mas!
«Si se llega a mojar demasiado... puede que empeore...» Izuku se sacó su abrigo con rapidez y lo coloco encima de Frisk para evitar aquello.
―¡E-Espera! ¡Tu-!
―¡No hay tiempo! ―con eso, Izuku comenzó a correr, arrastrando a Frisk quien intentaba seguirle el paso. Esta era una carrera contrarreloj, y aquello Izuku lo sabia bien. Cuanto mas tarden, mas probabilidades habían que Frisk enferme de peor manera... o que el mismo enferme. Además que el lodo generado le harían tardar mas y mas...
El cuerpo de Frisk comenzó a dolerle. Esto era demasiado. La fuerza que intentaba utilizar era mas de la que sentía tener...
A este paso ambos terminarían enfermándose. ¡Seria el fin! ¡Tenia que esforzarse, mas y mas!
De repente Izuku resbaló y cayo al lodo, llevándose a ella consigo. Sintió su cuerpo hundirse en el suelo bastante profundo... ¡¿Que demonios pensaba?! ¡No podía forzar sus limites! ¡Apenas y podía mantenerse en pie!
―¡I-Idiota! ―se grito a si mismo Izuku. Rápidamente se levantó y observó a Frisk en el suelo. Era obvio que no podía continuar. Apenas hoy pudo comer algo y recomponer algo de energía...
Rápidamente la ayudó a ponerse de pie. ―¡Vamos!
Al sentir esto, Frisk rápidamente pensó en algo. Claro... Izuku era un... héroe. Lo que hizo en las noticias no lo hicieron ni siquiera los profesionales. Claro que en su momento pensó que era una completa estupidez... pero ahora...
No la dejaría. El daría mas y mas inconscientemente... hasta verla a salvo...
Ella soltó la manta y el suéter para sujetarse con fuerza del chico. Izuku, comprendiendo que aquello era lo mejor, dejó atrás las mochilas y se sujetó de ella. Comenzaron a correr nuevamente a la mayor velocidad que sus cuerpos les permitían por el dolor y la poca resistencia que les quedaban.
La prioridad eran sus vidas. A cada segundo que estaban bajo esa lluvia empeorarían, y ninguno de los dos podían permitir algo así.
Allí no se escuchaba mas que el sonido de la fuerte lluvia. Aquello impulsaba a ambos a dar mas de si para llegar lo mas rápido posible a la cueva.
Rápidamente Izuku observó la cueva a lo lejos y apuntó a ella.
[...]
Lo lograron.
La respiración de Izuku se tornaba pesada. igual que la de Frisk. Estaban... bajo techo...
Ambos cayeron de rodillas y se arrojaron al suelo.
Izuku entre esos suspiros cansados sonrió. ―¡S-Si!
Lo había logrado. Frisk apenas se había mojado. Sin embargo, si ella no hubiera ayudado... bueno... dudaba que pudiese cargarla con sus propias fuerzas.
La observó de lado. Ella estaba con el cabelló mojado, y con algo de lodo encima, tal y como el.
Frisk abrió sus ojos luego de recuperar el aliento, notando que Izuku la estaba observando. ―M-Midoriya... gracias.
―G-Gracias a ti por esforzarte... Frisk... ―Izuku observó el techo―. ¿Te sientes un poco mejor?
Negó. ―Lo siento por no avisarte sobre mi fiebre... ―se disculpo, avergonzada. Ni siquiera ella lo había notado...
―S-Solo avísame si llegas a sentirte peor ¿Si?
―Espera ¿Y tu? Estas empapado...
El la observó. ―Tu salud es mucho mas importante ―aseguró.
Frisk solo pudo reír por lo bajo ante aquella afirmación, confundiendo al chico. ―No te preocupes tanto por mi ―explico entre risas―. Parece que si eres una persona algo temeraria.
―¿T-Temeraria? ―preguntó confundido. Las personas temerarias eran valientes y no pensaban con claridad a la hora de saltar al peligro, cualidades que Izuku sentía que no tenia, a decir verdad.
―Si... ―Frisk se sentó―. Te recuerdo... Midoriya. Hace unos meses apareciste en televisión, cuando saltaste contra el villano de lodo. ¿Lo recuerdas?
Izuku se vio impresionado. Claro que recordaba aquel día. Era prácticamente inolvidable para el. ―S-Si... pero...
―Parece que llevas lo del héroe en la sangre... ¿Como le decían...? Oh si, correr al peligro antes que te des cuenta, ¿Verdad?
―Pe-Pero... ¿Por que piensas e-eso de mi?
Frisk sonrió. ―Ya comprendo. Todo lo que hiciste fue por mi bien. Cuidarme, abrigarme, darme comida, hasta cediste tu abrigo sin dudarlo para evitar que la lluvia me moje. ―nuevamente lo observó―. Eres... ¿Quieres ser un héroe, verdad?
Izuku estaba en shock. Esto era un poco repentino... demasiados cumplidos...
En todo caso, eso le alegraba. Eran algo incomodo no hablar de nada en todo el día. Un tema de conversación...
―S-Si. Es mi sueño desde que era pequeño ―explicó―. Pero... bueno... soy un Quirkless... ―confesó bastante avergonzado.
Frisk se vio algo sorprendida, ya que sus sospechas eran correctas. Aun así... aunque existía un 20% de la población que no había desarrollado un Don... era bastante difícil encontrar a otro Quirkless, y aquello lo sabia por experiencia.
Por eso... era agradable encontrar a un igual. ―Y-Yo... también soy Quirkless ―se decidió a decir. Observó como Izuku la miró rápidamente, notablemente sorprendido. Ella sonrió de forma algo tonta―. Podemos evitar la parte donde hablamos de nuestros Dones ¿No?
Izuku se quedo callado unos segundos, para luego entregar una sonrisa. ―Creo que si.
Ambos encontraron algo en común. Con suerte y algo de esfuerzo, luego de salir se esta, tal podrían ser buenos amigos.
Izuku se coloco de pie, ahora animado. ―¡Esta bien! ¡Hay que volver a prender fuego!
Frisk asintió. ―¡Tienes razón! Las raíces de los arboles llegaron hasta aquí. Solo tendríamos que encontrar una marchitada y arrancarla.
Izuku asintió dudoso. No había pensado en eso. ―¿Tu... lograste hacer fuego...?
―N-No... ―Frisk mostró sus manos, ahora llenas de benditas gracias a Izuku―. Estas fueron por intentar crear una chispa.
Izuku comprendió. El tampoco sabia producir una chispa. Por suerte llevaba el encendedor encima, por lo que estaba decidido a hacer una fogata. Lo ultimo que necesitaban era que el también enfermase y no poder ser de algo ayuda para Frisk.
Se dispuso a buscar, mientras Frisk se limitaba a buscar con la vista...
Izuku comenzó a buscar mas profundo en el lugar. Palpo sus bolsillos, buscando su linterna. De repente lo recordó. «Deje la linterna atrás para llevar hasta aquí...»
―¿Sucede algo Midoriya?
Izuku se dio vuelta. ―A-Acabo de recordar algo... solo eso... ―dicho aquello volvió a darse la vuelta, caminando mas a la oscuridad...
De repente, un trueno cayo, iluminando por un instante el lugar. En ese instante, un nudo se formo en su garganta como en la de Frisk al observar...
Un gran agujero, apenas a unos centímetros de Izuku. Este rápidamente se detuvo.
―... ―ninguno dijo nada, o mejor dicho... pudo decir algo. Lo que acababan de sentir era algo indescriptible...
Frisk suspiró aliviada. ―Por los pelos...
―R-Realmente por los pe- ―la roca debajo de Izuku se había desmoronado, dejándolo prácticamente vendido.
Pero rápidamente pudo sujetarse con fuerza de las rocas, quedando en una muy mala situación.
Frisk saltó a su rescate. ―¡I-Izuku!
―¡F-Frisk! ¡N-No te acerques! ―le avisó―. ¡Ten cuidado!
Frisk se detuvo y observó la situación. Si la roca debajo de Izuku se desmorono... significaba que el suelo alrededor no era nada estable. ―¿C-Como puedo... a-ayudarte?
―¡P-Puedo salir por mi cuenta! ―Izuku empleo mas fuerza, comenzando a subir lentamente.
Frisk al observar esto suspiró aliviada. «Menos mal...» Pensó. «Tampoco es que podría...»
―M-Maldición... ―Izuku apretó los dientes, empleando cada vez mas fuerza.
―¡¿Q-Que sucede?!
Un gota de sudor bajo desde su frente. ―N-No lo se... no puedo... ¡No puedo subir...!
Frisk rápidamente se arrodillo y comenzó a acercarse lentamente. ―¡Toma mi mano, Izuku! ―gritó mientras la extendía lo mas que podía.
Este negó. ―¡N-No podrás soportar mi peso, Frisk! ―le recordó―. ¡Yo... yo...! ―de repente la roca en la que se estaba sujetando cedió al peso.
Rápidamente intento sujetarse de las raíces que tenia al lado... pero sus manos resbalaron. En ese instante, Frisk le sujeto del brazo, evitando que caiga.
―¡Oh no! ¡No! ―Izuku se vio desesperado―. ¡Frisk! ¡No puedes-!
Afirmativamente, Frisk estaba siendo arrastrada por el peso de Izuku. Este intento hacer pie en alguna roca o algo, pero le era imposible. Estaba por gritarle nuevamente... pero ella...
―¡No te soltaré! ¡No lo haré Midoriya! ―gritó con firmeza, aunque en su voz se percibía el miedo. Ella había anclado su pie para dejar de ser arrastrada.
―¡Si no lo haces tu también cae-!
―¡Lo se! ¡Lo se y no me importa!
Izuku negó. Esto era malo... ¡¿Y si este agujero no tenia fondo?! ¡¿Y si caer era una muerte segura?! ―¡E-Estaré bien! ¡Lo prometo! ¡Solo suéltame, por favor!
Sin embargo... el agarre de Frisk era impecable. ―¡Si te suelto, nunca podría perdonarme! ―comenzó a resbalarse―. ¡Yo también quiero ayudar a la gente, ser un héroe! ―gritó a todo pulmón.
Izuku quedo congelado ante tal revelación. Ella no lo soltaría...
Aquel anclaje de Frisk no duro mucho mas tiempo, y ambos cayeron al vacío.
Fin del capitulo.
¡Terminamos con la superficie! Ahora toca el lugar mas ansiado, ¡El subsuelo!
Próxima semana:
Capitulo 2: Aquella voz conocida
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top