Capítulo 10: La guerra por Lycaion

—Estamos todos listos, es ahora o nunca, ¡adelante Alianza! —dijeron Lucy y Ray con furor.

—¡AlLIADOS JAMÁS DERROTADOS! —gritó Ingrid a todos, acompañando en su grito de guerra a los maestros Lumen.

—¡POR EL REINO VENIDERO DE NUESTRO SEÑOR! —emitieron en contraposición Felixio y Afisteo.

En la oscuridad de la noche que era acompañada por una luna llena, ambos grupos empezaron a correr para encontrarse e iniciar la pelea, Ray activó su Lumen Ascendido, Lucy usó su Aura Completa, y tanto Liu como Ingrid utilizaron el Lumen Concentrado. Annasei realizó un rezo de forma rápida y en sus manos aparecieron unos círculos llenos de símbolos, Hansel aprovecho el satélite natural y reveló su forma más poderosa, la de un licántropo.

Lucy empezó luchando contra un par de bestias devora-humanos, derrotándolos fácilmente, mientras que Arturo procedió a luchar contra el espíritu de Felixio, ambos reyes tenían su encarnizada batalla, por otro lado Francine se dirigió a enfrentar a Alan, dado que podía sentir la gran capacidad psiquíca de aquél sujeto. 

Ray recibió con un Disparo Mental a los espíritus de ambas Angélicas, y a su vez dirigía otro contra Al-Majesh, Kashack, Ente y Tomoko fueron contra el grupo de Alphonse, al otro lado estaban Donovan y Carter combatiendo contra Mei, Lilith y Miranda, en el conflicto también había una pelea entre Isaías, Jinete y Aoki contra Afisteo. 

Pyra y Hans enfrentaban a Iridia del futuro, y la del pasado tenía su combate personal con Ingrid, así como Annasei y Jean intercambiaban golpes con Alphonse, Lissa y Laura, y los ejércitos de magos y elfos frenaban la avanzada de numerosos monstruos.

Ray siguió luchando contra Al-Majesh, pero las dos Angélicas le atacaban por la espalda, así que decidió mostrar su poder, activando su Concentración Mental Completa, su simple aura repelía los ataques de aquellos espectros por lo que ya nada le detenía de acabar con Al-Majesh.

—¡CAÑÓN MENTAL! —gritó Ray con inmensa furia, ahora mismo contaba con más de siete millones quinientos mil puntos de pelea que aumentados por el ataque daban quince millones, sin embargo no eran suficiente para detener al semidiós, aunque si para herirlo.

Lucy usó su Dominio Animal Amaestrado y al igual que su marido, lanzó un Cañón Mental con una cantidad aproximada de veinte millones debido al aumento, combinados ambos ataques acabaron con medio cuerpo de Al-Majesh pero este se quitó del fuego justo a tiempo para regenerarse. 

Ingrid cargó su Lumen y daba golpes contra el espectro de la asesina, pero no había efecto, hasta que recordó una técnica que había entrenado hace meses, cuando quiso poner un negocio para cazar fantasmas y nadie la contactaba. 

—¡Impacto Aureo! —gritó con fuerza, mientras daba un golpe al aire y una onda de expansión dorada impactó a su objetivo.

El fantasma de Iridia resultó afectado, por lo qué huyó de su rival, Ingrid la siguió solo para encontrarse en medio de la batalla de Arturo contra Felixio, así que ahora luchaba contra otro espectro. 

Iridia fue directo con Al-Majesh pero Pyra la siguió, un un proyectil envuelto en fuego dio directo en el semidiós, ahí el pelador se dio cuenta que las heridas de su rival tardaban en sanar con el fuego. Ray fue directo con el chico y le pidió que volviese a lanzar ese ataque, así el podría aumentar el daño.

Pyra atacó de nuevo, Ray usó su Lumen para potenciar el calor y logró herir a su rival, hasta que, de repente, el suelo comenzó a temblar, la tierra se agrietó, un portal se abrió y de él emergió una figura demoníaca bastante conocida para Ray, era Lican que con sus Llmas Infernales acabó con Al-Majesh en instantes debido a su estado anterior infligido por el maestro Lumen.

Todos los invasores huyeron ante la llegada de Lican ya que no estaba presente su líder para hacerle frente a la furia de ese demonio, dejando inconclusas sus batallas, aunque otros ya sentían temor desde que habían sentido el poder de Ray y Lucy pero lo confundían con el de Al-Majesh. Desde la distancia Vaktagran veía la llegada de su primo y la retirada de sus tropas:

—Parece que es mi turno de hacer el trabajo de mis incompetentes súbditos —dijo con hartazgo.

Al campo de batalla llegó el familiar de Lican, mediante un estraño movimiento de manos capturó lo que parecía ser un SPIRIT, era el de Al-Majesh, y procedió a llevárselo a la boca para después liberar un aura morado, al parecer había consumido el alma del semidios para hacerse más fuerte.

Ray, Lucy y Lican daban un paso al frente para luchar contra el demonio, mientras los demás miembros de tan improvisada alianza se posicionaba de nuevo para enfrentar al recién llegado enemigo.

Francine entonces dejó caer sus vendajes, revelando una piel llena de tatuajes de ojos, empezaron a brillar mientras ella ponía sus brazos extendidos y con sus manos formaba un triangulo, entonces gritó:

—¡OJOS DEL ABISMO! 

Un gran haz de color negro salió disparado hacia el Vaktagran, acertando y dejando una herida considerable. Lucy aprovechó esto y atacó con una Ráfaga Mental, a su vez Lican activó el Acto Tres de su SPIRIT y lanzó un poderoso proyectil de energía mientras Ray lanzó su Cañón Mental.

La combinación de los ataques dejó hirió más al demonio, entonces Isías y Jinete disparon contra él, impactando en sus piernas dejándolo inmóvil. Por primera vez en su vida, Vaktagran sentía que sería derrotado, hasta que Alan llegó acompañado por un hombre desconocido que portaba una armadura dorada, aunque debajo de él se podía ver una vestimenta muy propia de jefes militares del siglo XIX, un gran portal se abrió una extraña nave aérea surgió de él, mientras bombardeaba la zona, sin embargo, Ray y Lucy reaccionaron a tiempo para sacar a todos del lugar.

Otra vez estaban en el punto de teletransportación, entonces se procedieron a contar las bajas, la mayoría de soldados de Annasei había caído, de aquellos ciento cincuenta hombres que partieron tan sólo regresaban cuarenta, mientras que los cincuenta caballeros de Arturo ahora eran diez. Como cierto alivio se daba fe de que todos los cabecillas de esa cruzada habían sobrevivido, el grupo central de la Alianza había sobrevivido.

Habiendo pasado aquello, Ray decidió volver para ver si aquella cosa había desaparecido, y acertó, ya no había rastro de ni siquiera los invasores, al parecer lo que habían presenciado era el plan de retirada.

Lican procedió a reinstalarse en el castillo y pidió a Ray y Lucy la ayuda de los Estados miembros de la Alianza en la recuperación del reino, ellos intentarían lo que pudieran, aunque dado el poco apoyo dado por Lican, no creían que quisieran ayudar. 

Jean y Lucy ofrecieron a Annasei y Arturo el formar parte de la Alianza Universal, ellos tan sólo se limitaron a contestar que lo pensarían, a lo que Jean aseguró que todos los daños en la medidad e lo posible iban a ser pagados y que en caso de una emergencia estarían dispuestos a cooperar en agradecimiento en el sacrificio de ésta batalla.

Para hacer valer su palabra, Jean se quedó con los elfos para ver cómo se desarrollaba la situación en los siguientes meses, mientras Liu solicitó ser el enviado al reino de Arturo, a su vez Donovan y Lucy enviaron la solicitud para una misión con tal de ayudar a Firiant en recuperar su lugar. 

En el paso de unos cinco meses, no sólo Mark había cumplido ya ocho años, sino que las solicitudes enviadas fueron aceptadas, aunque las de Lucy y Lican fueron condicionadas. Lucy no podría ir a la misión debido a su puesto de guardia permanente que había le había sido de nuevo asignado, mientras que a Lican se le amenazó con retirar el apoyo si la ayuda no era recíproca. 

Mientras tanto en Daedelion, un hombre de nombre Luis se reía mientras hablaba con los invasores de Lycaion:

  —¿Así que le tuvieron miedo a un montón de fenómenos?, descuiden que aquí estarán a salvo hasta que demos el próximo golpe, y no creo que falte mucho tiempo...

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