Ubicado en algún momento del capítulo 40. Después de la pelea con Tsubaki.

Advertencia: Lime (?)

Se pueden contar, con los dedos de una mano, las raras ocasiones que él se despierta antes que su novio. Y Kuro no tiene ganas de recriminarse aquello porque la única manera digna de despertar -y la única que él tolera- es cuando los labios de Mahiru dan besitos esporádicamente en su rostro. En esas ocasiones Sleepy sólo abrirá los ojos hasta que los labios de Shirota lleguen a los suyos.

Pero hoy es diferente. Kuro se ha despertado antes por algún motivo cruel de la vida, sin embargo es gracias a ello que puede deleitarse con la vista.

Justo a su lado, con más de tres cobijas cubriendo su desnudes, Mahiru duerme plácidamente.

Los ojos escarlata recorren lo que es la frágil figura de su persona más importante. El cabello castaño revuelto apuntando en diferentes direcciones, el rostro tranquilo y una ligera sonrisa adornando los labios rosas. Kuro pone más atención en ese rostro porque sus ojos vampíricos le dan a ver cosas más allá que los insulsos humanos no notarían jamás: Como que las cejas de Mahiru aunque son delgadas están bastante tupidas; también que tiene pecas, casi imperceptibles sobre el puente de la nariz -este pequeño detalle terminó gustándole a Kuro de una manera nada sana-; y también que el frío, en estos momentos ocasionado por el Jinn en el aire, reseca los labios de su niño. Aunque también podría ser por la manía del castaño a estar mordiéndose el labio cada que tiene oportunidad.

Y esos son otros pequeños detalles que hacen que el Servamp se sienta especial. Le gusta creer que hay cosas, quizás diminutas e insignificantes, de las que él se ha dado cuenta y el resto del mundo ignora. Como por ejemplo el hecho de que, cuando está lavando los trastes, Mahiru tararea muy bajito y mueve la cadera y los pies al ritmo de la música en su cabeza; O qué cuando hace la tarea muerde el lapicero en la parte del centro, a diferencia de sus compañeros que muerden la parte trasera -cosa que ha visto en su forma gatuna cuando es arrastrado al Instituto-; El castaño también se pone siempre el zapato derecho primero; En las noches que duerme con calcetines, siempre pierde el izquierdo entre las profundidades de las sábanas; Hace galletas de vainilla -las favoritas de su madre- cuando se despierta de alguna pesadilla ó sólo porque el recuerdo de su progenitora lo ha puesto demasiado triste; Mahiru adora bañarse con agua tibia, pero la calienta de más porque sabe que a Kuro le gusta así y quiere que se bañen juntos; Aún si es muy bueno en los deportes, no ha practicado mucho la natación; Cuando tiene alguna herida se cura en algún lugar donde el vampiro no lo vea porque sabe que se preocupa aunque éste jamás lo admite. Entre muchas otras cosas en las que no quiere pensar porque ya está poniéndose a suspirar como idiota.

Y porque Mahiru a comenzado a despertar.

Ash se acomoda en su costado, sin querer penderse la salida de los soles gemelos. Frunciendo las cejas un par de segundos, los párpados sonrosados le dan pasó a las gemas ámbar que Shirota tiene por ojos, los diferentes matices del dorado al café saludan a Kuro, quien se limita a parpadear. Cuando su novio por fin enfoca la vista y se encuentra con los ojos rubí, sonríe. La sonrisa causante de los problemas cardíacos de Sleepy Ash.

Es bastante cómico que él, al ser un vampiro, no pueda estar bajo los rayos del astro rey. Pero tampoco pueda vivir sin la sonrisa brillante como el sol de Mahiru.

Quizá sea eso: Ha vivido miles de años bajo el manto de la oscuridad, huyendo de la luz hasta que olvidó el motivo y comenzó a anhelarla de una forma u otra, entonces algo o alguien, compadeciéndose e ignorando todo lo malo que ha hecho en su existencia, le envió un ángel. Un ser de luz, con sonrisa brillante y ojos cálidos para enseñarle lo bueno que puede ser vivir.

O quizás los ojos de Mahiru por las mañanas lo ponen extremadamente cursi y estúpido.

"—Buenos días, Kuu-chan" No, ni de joda. No hablara de lo imbécil que lo pone la voz de su Eve porque quiere mantener un poco de dignidad.

"—Hola, MahiMahi"

El humano agranda su sonrisa y se estira bajo las mantas. El cuerpo esbelto de Shirota tiene la gracia de un gato y Kuro encuentra otra cosa que anotar a su lista "Porque MahiMahi es perfecto para mí".

Entonces Shirota lo distrae de sus pensamientos al estremecerse y buscar su cuerpo. Queriendo encontrar más calor. Kuro le da la bienvenida y lo deja acurrucarse entre sus brazos. Porque de los dos, Mahiru es quien irradia más calor corporal.

"— Aún hace mucho frío, ¿Sigue nevando?" El aliento de su Eve calentándole el pecho le hace cosquillas.

"— Ajá..." contesta aunque realmente no tenga la menor idea que como está el mundo fuera de la cama de su niño "— Pero... aquí dentro está soleado"

Mahiru levanta la vista confundido hasta que se topa con la pequeña sonrisa en labios de su vampiro favorito y comprende el comentario alucibo al chiste privado referente a su propia sonrisa. Así que, un poco enfadado y avergonzado, saca la lengua en una mueca que revela lo maduro que puede llegar a ser en esas situaciones.

Sabe que lo logra cuando la risa ronca de Kuro lo hace vibrar sutilmente. Y cree que, antes de comenzar un nuevo día,  debe recibir un incentivo.

El Servamp observa como su Eve se eleva con los brazos y  se acerca a su rostro con las mejillas rojas. No lo deja avanzar tanto, él mismo va a su encuentro y lo tira sobre su espalda reclamado sus labios.

Esa mañana Mahiru está más cooperativo que de costumbre. Busca su lengua con la misma ansía con la que Kuro marca cada rincón de su boca con caricias perezosas. Las manos calientes de su chico en la espalda le roba un suspiro al vampiro y eso parece encender algo dentro del humano porque de un momento a otro los papeles se invierten y ahora es Kuro quién está bajo Mahiru. Y la sonrisa pícara de su novio pierde un poco de valor con la mirada tímida, pero provoca el mismo escalofrío placentero en el peliceleste.

Los labios húmedos del castaño hacen un recorrido desde la barbilla hasta la clavícula del vampiro y cuando Kuro creyó que hasta ahí llegaría, la sorpresa lo sacudió como si lo hubiesen electrocutado cuando la hambrienta boca del humano siguió bajando por su pecho y su estómago.

Ash se eleva sobre los codos para ver a su novio en el segundo exacto que el aliento del chico acarició su miembro.

"—... MahiMahi..."

"— K-kuro... yo... quiero... " La mirada significativa que Mahiru le dio a su entrepierna fue todo lo que Kuro necesito para empujar su cordura a algún lugar lejano en su mente.

"— Hazlo." Dijo con voz aún más ronca.

Al tiempo que Mahiru da un beso a la punta de su miembro Kuro deja caer su cabeza de golpe a la almohada y suelta un suspiro tembloroso cuando Shirota acompaña las caricias de su boca con movimientos ascendientes y descendientes de su mano por toda la longitud de su deseo.

Cuando la húmeda calidad en el interior de la boca de Mahiru lo rodeó, un ronroneo salió del fondo de su garganta.

Si no fuera porque lo estaba sufriendo en carne propia, no podría creer realmente que su niño, el humano vergonzoso y tsundere que es su Eve estuviera de rodillas entre sus piernas, con su miembro en la boca y las manos sobre él. El morbo de la situación fue lo que le impulsó a bajar la vista, topándose con los ojos ambarios dilatados por el deseo. Por la forma en que Mahiru movía las piernas, apretando los muslos, era más que obvio el hecho de que el chico también necesitaba atención.

"— Ven, MahiMahi. Girate, déjame probarte también..." no reconoció su propia voz , pero parece que a Mahiru le gustó porque dejó salir un gran gemido y le obedeció de inmediato. Sin dejar su trabajito, Shirota se subió en su Servamp exponiéndose a la boca voraz del vampiro.

Cuando la lengua del de ojos escarlata acarició el miembro de Mahiru y éste jadeó con el pene de Kuro dentro de su boca, ambos gimieron.

[...]

Le pesan lo párpados. Gracias a la exhaustiva mañana en cama Kuro se siente morir de sueño.

Pero no se arrepiente. No mientras ve a su novio diendo de aquí para allá en la cocina, haciendo su arte culinaria con una gran sonrisa en los labios y aire soñador.

Ambos con ropa abrigada por el frío -y por el reciente baño- esperan al par avaricia para desayunar. Aunque Kuro ya lleve dos donas y esté saboreando la tercera.

"— Kuro, deja algo para Lawless y Licht-san." Regañó Mahiru mientras se acerca y dándole un beso en la frente se va rumbo a la habitación de su tío, dispuesto a llamar a su hermano y el ángel violento. "— Lamento despertarlos, chicos, pero... ¡Oh, mi...! "

Al escuchar el grito ahogado de Mahiru, Kuro se levanta a regañadientes y espera que Lawless y su Eve no rompieran nada con otra de sus peleas o MahiMahi se pasaría otro día pidiéndole que lo ayudara a limpiar.

Grande fue su sorpresa al ver -sobre el hombro de su sorprendido y sonrojado Eve- al par codicioso acurrucados en el lecho, profundamente dormidos. Hyde abrazando de manera sobreprotectora y amorosa a Todoroki.

Diablos, su hermano nunca aprendía...

"— ¿Qué pasó aquí?" Aunque... si le da una mirada al cuello de Mahiru puede apreciar las marcas rojizas que su boca dejo en la piel de su novio... Su novio.

No, no. Él no era quién para juzgar al Servamp de la avaricia.

Pero debía tener una charla con su hermano menor.

Jodidamente molesto.

🍒🍒🍒🍒🍒🍒

Esto vendría quedando después del ataque de Tsubaki. Cuando el C3 hizo que el par avaricia se quedara en el departamento de MahiMahi.

Y porque me llegó al ver un pequeño doujinshi Law-Licht del cual perdí la mayoría pero les dejo el final.

ByeByeNya🐾