3-Billy

Hospital psiquiátrico Saint Patrick. En algún lugar del estado de Massachusetts.

—Ella viene —Susurró para sí, Billy.

La había visto venir en uno de sus sueños. Una niña rubia, triste. Sabía que se había escapado de algún sitio...¿un hospital como el suyo? No, era algo más...no le salía la palabra, algo relacionado con el ejército, con militares y también con doctores. Por lo menos llevaban batas blancas como los médicos.

Soñó con fuego, las llamas rodeaban a la niña.

Era algo más pequeña que él, pero no mucho, quizás uno o dos años a lo sumo. Y no parecía asustada. Él lo habría estado, porque también veía muchas armas y gritos...y muertos.

Y ahora ella se acercaba a donde él se encontraba.

No había logrado averiguar su nombre. Sus sueños, esos que tenía desde hacía muchos años y en los que veía cosas que aún estaban por pasar, a veces no eran muy claros. Las imágenes se superponían sin orden y luego él tenía que interpretar lo que veía.

Lo habían ingresado allí, en aquel centro médico debido a sus sueños. Sus padres no habían comprendido que lo que él veía no eran "imaginaciones suyas" como le dijeron, si no sueños premonitorios. Lo había leído en un libro hacía ya algún tiempo y reconoció que eso era exactamente lo que a él le ocurría. Sus padres no quisieron verlo así pensaron que su hijo estaba loco y allí estaba ahora. Encerrado, abandonado...olvidado por todos.

No importaba. Ahora venía hacía él su futura amiga. Porque sabía que ella sería su amiga. De eso estaba completamente seguro. Se lo habían comunicado sus...sueños.

                                                                                               ...

Luna no sabía dónde estaba. Cuando se escapó del laboratorio, lo primero que hizo fue correr. Estaba segura de que la perseguirían, no se iban a dar por vencidos...Ella era su arma y querrían recuperarla para matar gente y se había prometido no matar a nadie más. No sabía si podría mantener su promesa. Si intentaban hacerle daño ella no tendría más remedio que usar sus habilidades, y cuando lo hacía, la gente moría.

Había esperado a que se hiciera de noche para salir del bosque. No muy lejos se veía un pequeño pueblecito con unas pocas casas y decidió acercarse con mucho cuidado. Tenía hambre y frío, solo llevaba la bata del hospital e iba descalza y sus pies estaban llenos de arañazos de andar por el bosque.

Frente a ella había una gasolinera y pudo ver dentro de una caseta a un joven de unos veinte años que leía una revista, mientras esperaba pacientemente a que llegara alguien para llenar el depósito o a que acabara su turno.

Justo frente a la gasolinera había un restaurante de bonita fachada azul y roja y grandes ventanales. Se llamaba Mary Ann's y estaba cerrado a esas horas.

Tenía mucha hambre y sin proponérselo se vio sujetando el pomo de la puerta. Estaba cerrada por supuesto, pero solo tuvo que pensar en que se abría para que está se abriese.

Una vez dentro del local, pasó junto a la barra bonitamente decorada al estilo de los años cincuenta, había una máquina jukebox a su derecha que aún seguía iluminada con una luz azulada y fue directa hacia las cocinas. Había de todo, panqueques, mermelada de cacahuete, tocino y beicon y Luna se dio una comilona sentada en el suelo en un rincón del restaurante.

Al salir continuó por la calle amparándose en las sombras y vio en la acera de enfrente una tienda de ropa. No le gustaba robar, sabía que estaba mal, pero no tenía más remedio que cambiarse de ropa y no tenía dinero. Ni dinero, ni nada de nada.

Entró en la tienda y fue directamente a la sección infantil. Vio un vestido que le llamó la atención inmediatamente, era sencillo, sin mangas y de color naranja, en la cintura llevaba un pequeño lazo de color blanco. También cogió calcetines, ropa interior y unas zapatillas de deporte naranjas con rayas rojas, a juego con el vestido.

Entró en uno de los probadores y se quitó la bata del hospital, poniéndose la ropa que había tomado "prestada". También se puso unos pantalones vaqueros cortos debajo del vestido y al salir cogió una rebeca azul marino, por si hacía frío.

Estaba lista, aunque no sabía cuál sería el siguiente paso. No tenía a donde ir, no conocía a nadie y nadie la esperaba. De sus padres no se acordaba apenas. Había pasado mucho tiempo desde que la encerraron en esas instalaciones secretas y la habían sometido a tantas pruebas que había perdido todos sus recuerdos. En realidad no sabía quién era.

Solo sabía que era distinta a los demás...muy distinta.

                                                                                                     ...

Billy estaba en su habitación. A aquellas horas de la noche el manicomio (aunque lo llamaran hospital, él sabía perfectamente lo que era) estaba muy tranquilo. Era el momento que más le gustaba al muchacho. Era cuando volvían sus sueños...Y esta vez estaba ansioso por soñar con la niña.

Esta vez averiguaría su nombre.  

Espero que os haya gustado y gracias por leer.

El restaurante que cito más arriba, existe en realidad. Su nombre verdadero es Merry ann's diner y está en Derry, New Hampshire. Derry es la famosa ciudad de la novela de Stephen King:  It (eso) Si no la habéis leído deberíais hacerlo inmediatamente.

Nuestros protagonistas están a punto de juntarse,  ¿qué les esperará más adelante?












Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top