Parte 3
En otra parte de Oceanside.
En una casa que se estaba siendo vendida por Agatha Gillman llega un auto de donde allí salieron una pareja siendo recibidos por Agatha que salió de la casa.
—Bienvenidos a su nuevo hogar, si me permiten decirlo —Dice Agatha a la pareja.
—Uh.
—Es increíble.
Dentro de la casa
—Es el lugar perfecto para criar un hijo todo es muy seguro de Oceanside, mudar a mi familia aquí fue la mejor decisión que pude tomar.
—De hecho, nuestro Doc creció en este pueblo y decidimos mudarnos para tener cerca a sus padres cuando llegue nuestro bebe.
—Niñeros gratis y convenientes.
—Que lindo, solo no dejen que digan como tienen que vivir su vida y criar sus hijos. Mas bien, que bueno que estarán cerca de su familia tienen mucha suerte... —Luego habla en voz baja para sí misma—, en especial si uno de sus hijos se anda comportando como a ella.
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De regreso con Ruby y Zafiro.
Ruby llega a la biblioteca dándose cuenta que estaba cerrado.
—¡Cerrado! —Pero por fortuna una puerta se encontraba abierta entrando con prisa.
—¡Ruby espera! —Llega igual Zafiro entrando por la puerta.
Ya dentro Zafiro mira como Ruby se tropieza un poco sin querer con algunas cajas y globos que se encontraban adentro de la biblioteca.
—De seguro estas cosas son para el baile de la escuela —Todavía siguiendo a su hermana teniendo cuidado no tropezarse como a ella.
Zafiro llega en donde se encontraba Ruby sentada cubriendo su mano brillante grande con unos libros.
—¡¿Por qué está brillando?! Brillar no es bueno, nunca volveré a meterme el océano. Aprendí la lección —Cuando saco su teléfono con su otra mano se dio cuenta que igual se volvió grande—. —¡Ahhh! ¿Qué me está pasando? ¡Llama a mamá!
En lugar de eso, su teléfono inicio a videollamar a Connor.
—¿Qué? ¡Yo no dije eso! ¡Llama a mamá! —Hasta que en su pantalla apareció Connor.
—¿Ruby? ¿Dónde estás?
—Oh, hola —Inicia hablar en voz baja—. —¡Ya cuelga, cuelga, cuelga! —Aleja su teléfono con su brazo, mientras que la videollamada de Connor se termina—. —¡Estoy cruzando un túnel! ¡Llama a mamá! ¡No! Si le digo a mamá va matarme.
Entonces ve como sus zapatos saliendo volando para ver que ahora sus pies eran grandes tentáculos que se movían.
—¡Ahora hay más! —Los sujeta fuertemente mirándolos de forma seria haciendo que se calmaran.
—Si en serio crees que mamá te matara por esto, pues a mí me matara el doble cuando piense que fui yo quien te metió al océano —Ruby alza la mirada para ver a Zafiro que le da la mano—, ahora arriba mi hermanita menor.
Ruby le da la mano a Zafiro ayudándolo a levantarlo del suelo.
—Y te gustara saber que esto no es malo ya que es de familia para que sepas y que tarde o temprano lo ibas saber.
—¿Cómo que de familia?
—Pues... —Zafiro le muestra su mano derecha que igual se encontraba grande, pero sin brillar como la de Ruby—, ya que no eres la única que le pasa esto.
—¿Tú también? —Sorprendiéndola
—Si, pero esto tiene su explicación...
De forma inesperada el tentáculo de Ruby sale disparando aun lado de ellos pegándose a una pared cercana de la biblioteca.
—Sin olvidar que igual tiene es aprender a manejarlo.
Ruby jala su pierna tentáculo con fuerza, pero sin querer arranco un pedazo de la pared dejado un agujero en la misma como ser llevada para atrás por la fuerza del pedazo.
—¿Estas bien?
—Si.
Los dos ven que el tentáculo suelta el pedazo del muro y después voltean en donde una gaviota apareció en el agujero de la pared.
—No hay, no hay, no hay —Dice la gaviota.
Hasta que fue agarrado rápidamente por la pierna tentáculo de Ruby.
—¡Espera no! —El tentáculo le metió la gaviota a la boca de Zafiro, que después se lo saca escupiendo las plumas—. —¡Oye! ¡No comemos gaviotas sueltas! —Sujeta con fuerza su tentáculo.
—Blah, de por si yo odio a estas ratas con alas —Lanza bien lejos a la gaviota por el agujero de la pared.
—Tenemos que salir de aquí.
—Lo mismo digo, Ruby, es una suerte que la bibliotecaria no se encuentre aquí.
Ruby trato de moverse, pero no pudo ya que sus tentáculos se encontraban pegados al suelo.
—¡Vamos cuerpo haz lo que digo!
Entonces sus piernas tentáculos se inician a mover para adelante.
—Sigue así, Ruby, que lo haces bien.
—Si, si, si —De pronto sus piernas se inician a crecer, estriarse para adelante convirtiéndose ahora eran 3 tentáculos—. —¡Ahora tengo tres!
—¿Qué raro? Usualmente son cuatro.
—¿¡Cuatro!?
Vio cómo se Ruby iniciaba a crecer teniendo estirar su brazo para arriba sujetándose de nuevo en ella.
—Aquí vamos de nuevo.
—¡No, no, no, esto sin duda es una pesadilla! —Zafiro se inicia a escalar llegando a la espalda de Ruby.
—¡Calmada Ruby, recuerda que no eres el único que metido en esto! —Hablándole fuertemente Zafiro, a lo que llegaba a su cabeza.
El enorme tamaño que estaba obteniendo Ruby inicio a mover los estantes haciendo que cayeran libros y las luces iniciaran parpadear. Lo que hizo que llamara a la atención de la bibliotecaria que salió de su oficina para ver qué estaba pasando caminando hasta que se detuvo cuando un vio un libro tirado.
—Oh, olvide un perjuicio —Agarra el libro—, estas lejos de casa, ¿no? ¿Qué estás haciendo en crímenes reales? —Lo vuelve colocar su lugar.
Pero se cae del lugar con más libros lo que le hizo extraña a la bibliotecaria hasta que vio a través de estante las ventosas luminosas de uno de los tentáculos de Ruby para después mirar para arriba poniéndose los lentes mirando con claridad a Ruby y a Zafiro encima de su cabeza.
—¡Shhh! —Dijeron ambos hermanos Gillman.
—¡Ahhhhhhhhh! —Inicia gritar la bibliotecaria.
—¡Ahhhhhhhhh! —Grita Ruby.
—¡Otras marinas! —Hasta que fue estampado contra el techo de vidrio de la biblioteca—. —¡Auch!
—Lo siento, Zafiro. ¡No, no, no, no!
Debido que Ruby siguió creciendo se observa como afuera de la biblioteca se le rompía los vidrios hasta que el techo se rompió por completo saliendo de ahí Ruby completamente enorme y Zafiro se sujetaba con la mayor fuerza que podía de la cabeza de su hermana.
—Sin duda ella alcanzo el tamaño de mamá y la abuela.
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En otra parte de Oceanside, en mar.
Gordon en su autobús barco, que ahora estaba en modo barco, se encontraba hablando con los turistas.
—Recibo muchas preguntas de como cuidado mi barba —Hasta que se dio la vuelta dándose cuenta de Ruby a lo lejos—. —¡Kraken! ¡Kraken a la vista! ¡Ha vuelto! —Alarmándose, como igual al cangrejo Davy y toma el teléfono de uno de los turistas—. —¡Vino para llevarme!
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De vuelta con Ruby y Zafiro encima de ella.
—Bien hermana, será mejor que tengas cuidado donde pises.
Ruby se mueve con cuidado, pero destruye por completo la biblioteca, mientras se veían a la bibliotecaria huir gritando pasando aun a lado de Chelsea y Marina observando lo que acaba de pasar hasta mirar al frente de como Ruby y Zafiro que se encontraban ocultos en unos árboles cercanos observando los globos que eran para el baile, hasta que Zafiro se dio cuenta de ellas dos.
—¡Hijo del guachinango! —Nota igual a Marina a lado de Chelsea—. —Y como ese debe ser la otra chica nueva.
—¿Qué pasa? —Mira para abajo dándose cuenta de Chelsea y Marina.
—¡Es hora de irnos!
Ruby inicia irse con Zafiro lo más rápido posible de la escuela dejando a las dos chicas atrás.
—Sin duda tenías razón de que una kraken de la realeza se encuentra aquí en Oceanside —Dice Mariana a Chelsea—, lo cual eso es bueno para ti.
—Lo cual eso significa es que ella debe ser hija de la gran guerra Agatha, la misma guerra que mato a mi madre.
—¿Y cómo harás para conversarla que te lleve al tridente de oceanus para que puedas cumplir tu sanguinaria venganza personal?
—Fácil, usare unas tácticas que me enseño mi querida madre para ganarme la confianza de la kraken, pero eso sí, quiero que mantengas alejado a su hermano mayor ya que parece será un estorbo para mis planes.
—¿Y solo porque te dijo que eres una narcisista, vanidosa y egoísta? ¿En serio?
—Aparte, si aquí hay dos krakens de la realeza, talvez igual se encuentra aquí ese kraken rojo que tanto buscas.
—En eso tienes razón, está bien, pero si encuentro al kraken rojo dejare un lado al hermano mayor para ir tras por ese kraken rojo.
—De acuerdo.
Las dos chicas se inician a irse del lugar destruido.
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De regreso con Agatha con la pareja de humanos.
Los tres se encontraban saliendo por la parte de atrás para mostrarles una buena vista del océano, lo que asombra a la pareja.
—Ah, la vista al océano es maravillosa.
—Tienes razón, la vista es bien perfecta. ¿Qué tú dices amor? —Pregunta a su pareja.
—Yo digo, que es nuestra.
—¡Uh, fantástico! —Agatha se acerca a ellos—. —Voy preparar los contractos y haremos esto rápido para que se concentren en su pequeño bebe.
Mientras que la pareja de humanos se encontraba hablando de la casa, Agatha mira a lo lejos en la hermosa vista de cómo la biblioteca de la escuela de Oceanside estaba destruida y lado arriba de una colina cercana estaba Ruby en su forma de kraken gigante y también mira que Zafiro esta encima de su cabeza. Lo que hizo que Agatha pusiera una cara de histórica para luego reírse un poco.
—No olviden pasar cada minuto de silencio —Se va para atrás para empujar la pareja de vuelta a la casa—, ya que cuando llegue él bebe va poner su mundo al revés.
Mas adelante, Agatha se sube al coche arrancándolo e iniciar retrocederla.
—Exploren sienta la vibra del lugar —Llegando a la calle—, dejen la llave en la caja fuerte cuando terminen... ¡Quédensela! —Les lanza las llaves de la casa a ellos.
Se va a máxima velocidad por la calle mientras inicia a llamar a Ruby dentro del coche.
—¡Contesta Ruby! ¡Contesta Ruby! —Pero no le contesta—. —¡Hay contesta el teléfono! —Después piensa marcar en otra persona, pero se detiene en hacerlo—. —No, si le marco a Zafiro pensara que lo voy a matar, aunque sea cierto es parte —Suspira—, porque tenía que ser como su abuela. Bueno Agatha, puedes resolver esto, ya verás que todo saldrá bien.
Por andar distraída no mira al frente del camino llevándose algo por adelante con el coche.
—¡Ah! ¡Hijo del guachinango! —Frena el coche a tiempo para ver por el esposo lo que atropello cubierto de hojas.
Ella sale del coche estando asustada y nerviosa.
—Talvez sea un cono de tráfico —Acercándose mirando bien—. —¡Hay no! —Lo iba tratar con su dedo—. —¿No estas muerto?
Pero lo que atropello se inició a levantarse quitándose las hojas revelando que se trataba de su hermano Brill.
—Hola hermanita —Lo abraza—, el adorado tío Brill vino a ver su sobrina favorita Ruby y también igual a su sobrino favorito Zafiro.
—¡¿Qué?! ¡Brill! ¿Estás bien? —Lo sacude.
—Si. ¿Por qué no estaría bien?
—¡Te atropelle con el coche!
—¿Cómo se mueven aquí con la gravedad en la tierra? Esta de locos —Riéndose un poco—, en fin, solo vine a felicitarlos en que Ruby ya creció y se convirtió en un gigantesco kraken —Hasta que Agatha lo caya.
—¡Shhh! ¡Deja de gritar! ¿Espera? ¿De dónde sacaste esa ropa que tienes puesto? —Observando la ropa que tiene puesto Brill.
—Ah esto, me lo dio un viejo humano que me estaba acompañando cuando llegue aquí.
—¿Viejo humano?
—Sin duda ustedes los krakens tienen una buena ventaja en no tener huesos —Aparece el viejo humano que se refería Brill—, ya que ese fuerte golpe lo pudo haber matado —Lo que sorprendió a Agatha ya que la conocía—. —Buenas tardes, señora Agatha Gillman.
—Hola, maestro Randall.
—¿Maestro Randall? ¿Yo creía que su nombre era maestro Oogway?
—¿Oogway?
—Ya que una vieja humana le llamo por ese nombre.
—Solo mis amigos me dicen por ese nombre, ya que mi nombre completo es Randall Kim Zambrano Oogway, por cierto, será mejor que nos vayamos ya que parece que tiene un asunto familiar por atender —Yéndose al coche para entrar en la parte de atrás.
—¡Ruby y Zafiro! Es cierto.
—¡Espera! ¡Igual Zafiro se enteró lo de Ruby! —Es jalada fuertemente por Agatha.
—Ah, todavía tienes brazos fuertetotes.
Agatha lo empuja con fuerza metiéndolo adentro del coche y ella igual se metió para arráncalo de nuevo para seguir para adelante.
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Mientras con Ruby y Zafiro que se encontraban ocultos en lugar con árboles.
—¿Se puede saber a dónde vamos Ruby? —Pregunta Zafiro.
—Vamos al faro del pueblo ya que parece ser el único lugar donde puedo ocultarme y además porque está cubierto de niebla.
—Buen punto, bien pensado hermanita.
—Por cierto, ¿cómo es que tu...? ¡Auch!
—¿Pasa algo?
—No es nada, ¿ahora que chucha pise? —Levanta su tentáculo pie descubriendo que lo que piso fue un cartel del capitán Gordon.
—Solo es un estúpido cartel del chiflado de Gordon.
Los dos miran que tenían una carretera al frente así que Ruby recoge dos árboles para pasar de incognito para seguir su camino al faro.
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En el coche con Agatha, Brill y el maestro Randall.
—¿Qué estás haciendo aquí Brill? —Pregunta Agatha.
—Sentimos el pulso.
—Entonces mamá lo sabe.
—Ah, sí. Y me envió a mí a buscar a Ruby.
—Y eso es la razón que no debía entrar al océano y es una suerte que Zafiro a pesar lo problemático que es ese chamaco no se haya metido tampoco.
—¿Y porque viven al ladito del océano, eso no tiene sentido?
—Lo hacen para mantenerse húmedos —Responde Randall a la pregunta de Brill.
—¡Puaj! Húmedos.
—Por cierto, maestro Randall —Pregunta Agatha—. —¿Desde cuándo sabia sobre nosotros?
—Desde que llegaron a Oceanside hace 15 años, ya que la diferencia de los demás del pueblo costero de Oceanside que son unos ignorantes y que la historia ha demostrado que son buenos al uno al otro, me pareció obvio que ustedes fueran krakens y porque durante mi juventud conocí a una kraken que me conto mucho sobre cultura y de su guerra contra las sirenas.
—¿Ósea sabe igual que?
—Si, que las mujeres de la realeza son las que toman la forma de kraken gigante —Mira lado de la ventana descubriendo a Ruby caminado al faro con Zafiro encima de ella —O eso creía yo.
—¿Me pregunto que fue esa kraken que le dijo todo eso?
—Solo digamos que esa chica tenía un gran espíritu y sabia pelear muy bien —Pone una sonrisa de nostalgia.
—¿Dónde estan? Debo esconder a Ruby y ocultara de todo.
—¡Wow! —Brill saca su cara por la ventana mirando el enorme tamaño de Ruby—. —Pues eso ya está a punto de verse.
Los dos observan como Ruby escala para llegar al faro, mientras que Agatha le sube la velocidad al coche para llegar más rápido al faro haciendo que Brill se fuera para atrás.
—Lo siento, maestro Oogway.
—No te preocupes.
¿Y qué hay de Zafiro? Ahora ya sabe que su hermana se puede hacer gigante.
—Bueno, de seguro esto le traerá recuerdos viejos recuerdo cuando tenía un año aun cuando vivamos en el océano.
Ya una vez llegando al faro se observan como Ruby se ocultaba atrás del faro para después voltear notando ambos que del carro salió de ahí la madre de ambos.
—¡Hay no es cierto!
—¡Otras marinas! Ya estoy muerto.
Cuando Brill pretendía salir del coche, Agatha le cierra la puerta de coche con fuerza.
—¡Quédate!
—No deberías ser tan brusca con tu hermano, Agatha —Aparece Randall asustándola sin querer de la nada.
—¿Espera cómo es que? Olvídelo.
Los dos caminan acercándose al faro.
—¡Ruby te quiere aquí y Zafiro baja de la cabeza de tu hermana ahora!
—No gracias, prefiero vivir a que me mates echándome la culpa de esto —Responde Zafiro a su madre, hasta notar a su maestro de kung fu a lado ella—. —¡Maestro Randall!
—¿Espera? ¡Tu maestro de kung fu hasta con mamá! —Lo que lo sorprende igual a Ruby.
—¡Ah! Este chamaco deberás.
—Sin duda lo conoce muy bien, señora Gillman.
—No me diga, por favor podemos hablar.
—Pero mamá... soy un monstruo —Lo que impacto a Zafiro cuando lo escucho salir de esas palabras.
—¡Oye, oye, oye! ¡No, no, no, no! Hermanita no pienses en esa tremenda estupidez de que eres un monstruo, te recuerdo que no eres el único metido en esto.
—Tu hermano tiene razón, Ruby. No eres un monstruo, ni un poquito hija.
—Así es joven Gillman, mírame soy un viejo humano que no salido corriendo por tu enorme tamaño.
—No quiero gritar, podemos hablar, lo mismo digo para ti Zafiro, solo háblame.
—De acuerdo —Suspira—. —Ruby, una ayudita a mamá para que pueda subir.
Ruby extiende su brazo dejando caer su enorme mano de la cual Agatha se sube siendo subido para arriba para mirar de frente la cara de Ruby.
—Eso, ahí está mi niña y Zafiro, ahora baja aquí conmigo.
Zafiro da un brinco para bajo aterrizando en la enorme mano de Ruby.
—Por favor, no te enojes, sé que te debería haberte hecho caso, pero me metí al océano.
—Te metiste al océano —Hablan al mismo tiempo Agatha y Ruby.
—Aparte no le heches la culpa a Zafiro, yo fui quien se metió al océano por decisión propia.
—Pero eso si mamá, debes saber que la razón que lo hizo fue para salvar a Connor que había caído al agua ya que se estaba ahogando.
—¿Eso es cierto?
—Si.
—Bueno, por ahora quiero mantenerte a salvo y por eso tienes que ir a casa.
—Mamá mírame no voy acabar con este tamaño —Inicia a llorar un poco cayendo una lagrima encima de Zafiro.
—Ruby, hermanita calmada, recuerda que mamá no te está regañando.
—Ya —Agatha se acerca a la cara de Ruby consolándolo—, te volverás achicar solo se tarda un poquito.
—Calmada y respirada hondo ¿Y se puede saber cómo sabes?
—Solo se de acuerdo y nos quedaremos esperar.
—Está bien —Los dos sientan en la mano de Ruby.
—Qué bueno que estas aquí mamá.
—Por cierto, desde aquí hay una buena vista de Oceanside.
Zafiro para señala donde en la niebla se aparta revelando una parte de Oceanside con unas cuantas casas siendo vista por los tres.
—Recuerdas cuando encontraste una ballena en la playa.
—Hablas de Claudio Josefo Cetáceo.
—Perdón, lo olvide, Claudio Josefo Cetáceo.
—Recuerdo que Ruby se quedó con él durante 7 horas hasta que regreso la marea para que pudiera ser libre en el océano.
—Yo le pregunte a mamá si nos pudiéramos quedarnos con él.
—¿Pero dónde lo podríamos verlo puesto?
—Si, ya que era obvio que era una enorme ballena y aparte ya tenemos a Nessie.
—Teníamos una manguera y una cochera era obvio, saben que lo hubiera cuidado bien.
—Yo sé que si hija y también recuerdan la primera casa que vendí en Oceanside.
—¡Guácala con esa casa!
—Oh sí. La casa del zorrillo —Ruby se asquea con solo recordar eso.
—Si, la casa del zorrillo.
—Si hubiera cerrado la puerta para perros. Probablemente no me hubieran conocido como "Agatha Gillman: la asquerosa de los bienes raíces", durante esos primeros años.
Lo que hizo que Ruby y Zafiro se iniciaran a reír por eso.
—Pasaron meses para que el horrible olor de zorrillo desapareciera.
—Juro que todavía puedo olerlo cuando paso —Dice Agatha—, por cierto, recuerdas el cumpleaños número cinco de Zafiro.
—¡Ostras marinas! Mamá, por favor no lo menciones.
—Te refieres que cuando Nessie se emocionó tanto —Ruby siguió riéndose, pero ahora Zafiro no se reía—, que entintó a todos los niños en el castillo inefable.
Pero Ruby no se daba cuenta que se empezaba a encogerse siendo notado por Zafiro y Agatha.
—Lo peor es que yo fui quien metió a Nessie al castillo inefable y uno de los niños afectados fue Jackie, pero tal parece que no le importo tanto.
—Se notaba por su cara que lo disfruto e intente explicar porque 12 niños de jardín de niños estaban completamente morados a sus padres atónitos.
—En especial que sé que tuvieron bañar por unos días para que se les quitara la tinta de Nessie —Menciona Zafiro—, pero si hay algo bueno de mi cumpleaños fue la patineta que me regalo Jackie que sigo usando hoy en día.
A medida que Ruby se encogía riéndose menos, Agatha y Zafiro bajaron de la mano para ver que Ruby volvió a su forma normal con su ropa puesta, con a la excepción de los zapatos.
—Nuestras vidas pueden volverse un poco desordenadas a veces —Agatha y Zafiro se acerca a Ruby—, pero siempre logramos arreglar las cosas.
—No por algo somos la familia Gillman.
Cuando Ruby dejo de reírse se dio cuenta que volvió a su tamaño normal.
—¡Si! Ya soy normal, bueno medio normal y gracias mamá y también Zafiro por estar encima de mi cabeza.
—De nada hermanita mía.
Los tres se abrazan un cálido abrazo familiar, hasta que apareció Brill abrazándolos también asustando sin querer a Ruby que lo inicio a golpear para después parar.
—Wow, tienes los brazos fuertes de tu mamá.
—Ah, hola tío Brill, cuanto tiempo sin verte ya han pasado "años" desde que ti vi —Zafiro le guiña el ojo y Brillo lo entendió.
—¿Tío Brill?
—¿Cómo es que...? —Agatha mira a Zafiro sorprendida.
—Mamá, tenía un año y medio cuando nos fuimos, así recuerdo al resto de la familia incluyendo a la...
—¡Ya entendí, ya entendí! —Interrumpiéndola en esa última parte—. —Se nota que tienes buena memoria.
—¿Mamá? ¿Qué cosa esta pasando?
—La joven Ruby tiene razón, señora Agatha —Vuelve aparecer a Randall hablándoles—, y tal parece que usted tiene las respuestas de esa pregunta.
—Maestro Randall —Lo saludo con el tradicional saludo del kung fu—, olvide que se encontraba aun aquí.
—Por favor, no diga nada sobre esto a nadie.
—No te preocupes Ruby, de por si lo he guardado muy bien durante los 15 años que han pasado desde que llegaron.
—¿Ósea que ya sabía que un kraken desde que nos conocimos cuando me comía los duraznos del durazno de la sabiduría celestial?
—Si, por cierto —Le da a Brill la bolsa de duraznos que tenía—. —Espero que lo disfrutes y no se te olvide compartirlo con el resto de tu familia.
—Gracias, maestro Oogway.
—¿Oogway? ¿Qué solo sus amigos lo llamaban así?
—También me pueden llamar así si quieren, no me molesta para nada.
—Pues la verdad lo hace sonar más cool, poderoso y sabio para que sepa maestro.
—¿No quiere que lo llevemos de vuelta a Oceanside, maestro Oogway? Lo podemos dejar en su casa si quiere —Pregunta Agatha.
—No gracias, de por si iba venir al faro ya que este lugar es uno de mis lugares favoritos por la buena vista al océano.
—Bueno, entonces nos veremos después maestro Oogway.
Entonces Agatha abre las puertas del coche siendo primero entrar Brill.
—Pero eso sí, un consejo para ustedes —Los tres Gillman le presentan atención—. —Uno suele hallar su destino en el sendero que toma para evitarlo.
Ya una diciendo eso el se va a la niebla desapareciendo de la vista de los Gillman que los dejo confundido.
—¿Qué quiso decir con eso? —Dice Ruby a Zafiro.
—Digamos que mi maestro le gusta dar ese tipo de consejos, pero una vez que los entiendas te asombran —A lo que los dos se metían al choche.
—Uno suele hallar su destino en el sendero que toma para evitarlo —Repite Agatha en voz baja, para después pensarlo un poco. Pero luego se mete al coche —Bien, le recomiendo que se pongan los cinturones de seguridad.
—¿Por qué?
Agatha gira llave rápidamente arrancando el coche pisando con fuerza el aselador para irse rápidamente del faro en camino para irse a casa.
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Bueno mis lectores vaya que para esta tercera parte si que estuvo larga, pero deben saber que la mayoría de estos cambios como de la biblioteca y del faro me base en algunos storyboards y escenas eliminas oficiales de la pelicula para que sepan, que hasta incluso estan en YouTube.
Como le hecho que aquí acabo de revelar que Chelsea es hija de Nerissa y no Nerissa en sí, ya que resulto igual por un viejo storyboard que originalmente Chelsea si era en verdad hija de Nerrisa y sus motivaciones era vengarse de la muerte de su madre a manos de Agatha.
Espero que les haya gustado y a les manda un gran saludo su amigo Optimus1986.
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