[33]
Jeon Jungkook se asomó a la cuna de sus hijos, contemplaba con curiosidad aquellas pequeñas criaturas idefensas. Desde que le había dicho a su prometido que descansara después del embarazo, no había permitido que Min Yoongi se sobreesforzara, solo llevaba a los bebés cuando estaban tranquilos o tenían hambre. De allí, no dejaba que sus hijos lloraran en el mismo cuarto en el que Min Yoongi se mantenía, sabía que el sueño del híbrido era sagrado, por lo que con ayuda del doctor, hizo una formula especial para darle biberon cuando estos estuvieran hambrientos muy temprano en la mañana.
Escuchó como la puerta del cuarto se abrió, ingresando Yoongi en una silla de ruedas y siendo empujada por Sejeong, quien saludó al duque con sumo respeto, el híbrido contempló al Sangre pura con una cálida sonrisa en su rostro y alzó la mano. Jeon Jungkook se le acercó y le ofreció un beso sobre la frente.
—¿Cómo amaneciste?—preguntó con suma preocupación el vampiro tomando con cuidado las manos ajenas.
—Bien, vine a ver como se encuentran los bebés.
—Comieron hace dos horas, asi que no te preocupes. Están bien alimentados, deberias haberte quedado en la cama, apenas ha pasado un mes desde que diste a luz.
—El médico aconsejó que estuviera en constante movimiento, aunque estoy en sillas de ruedas no estoy haciendo mucho esfuerzo, no debes preocuparte.
—Aún así, tu cuerpo sufrió mucho en el parto, no es algo que vayas a recuperar de la noche a la mañana ¿Ya desayunaste, quieres que le pida a los sirvientes que te hagan algo especial de comida?
—Duque...estoy bien–sentenció Yoongi con una sonrisa—, ya que me levanté de la cama, podemos pasear por el jardín. Pronto empezará el invierno y la nieve caerá, con el frio me será más dificil salir.
—Comprendo...¿Quieres ver a tus hijos?—pregunto y se hizo de lado, dejando ver las cunas de los bebés. Yoongi afirmó y sonrió, el Duque le siguió con la vista.
Yoongi se acercó a sus bebés y se levantó con cuidado, siendo ayudado por Jeon Jungkook que lo sostenía de una mano y la otra la posaba sobre la cintura del pelinegro. Min Yoongi miró a los mellizos, quería protegerlos a como diera, suspiró un poco abatido, recordaba que en la novela de Santé, la tragedía llegó en invierno.
"Fue la tercera nevada del inicio del invierno, el dia más frio fue cuando el cuerpo del Duque colapsó sobre la nieve y está se pintó de un rojo carmesí, el Duque de Santé había caído."
Yoongi dejó caer unas lágrimas al recordar aquella parte de la novela y solo tener la imagen en su mente, se rompió. Jungkook lo sostuvo a tiempo cuando sintió las piernas de su amado volverse un poco débiles.
—¿Joven Min? le dije que no hiciera mucho esfuerzo.
—Lo siento...mi mente divagó—subió su rostro viendo el rostro de Jeon Jungkook, quien le comprendía con unos ojos amorosos que no supo comprender cuando fue que el vampiro le empezó a ver con tanta calma.
—¡Está nevando!—escuchó un grito de emoción a la lejanía, viendo como las doncellas que arreglaban y limpiaban el cuarto, se asomaron por la ventana, el ceño del omega se frunció—, parece que el invierno se adelantó hoy.
—¡Mi señor!—llamó Sejeong a su amo con una gran sonrisa—, mire la nieve.
Jeon Jungkook se giró y alzó a Min Yoongi entre sus brazos para cargarlo, se fue acercando a la ventana, viendo los primeros copos del invierno. Min Yoongi abrió los ojos en par, el tercer dia de la nevada, sería el ataque a la mansión.
Soohyuk enarcó ambas cejas, consternado por lo que sus ojos veían, el antiguo cazador, aquel veterano conocido por haber aniquilado más de mil vampiros impuros a lo largo de su vida, sacó un puro y lo metío a su boca, lo encendió con la suma tranquilidad. El joven cazador se acercó a la vampira híbrida que se encontraba atada de sus manos con largas cadenas, también de los pies y en su boca, un bozal de metal ya algo oxidado. Ella le contempló con su ojos cargados de dolor y sin vida.
—Esto...¿Cómo atrapó a esa híbrida?
—Hace unos 50 años, su madre fue ordenada a que sea asesinada, encontrar a esta niña fue una casualidad, yo llevé la orden de su ejecución—rió un tanto divertido—. Con el tiempo he hecho experimentado en ella. Se lo digo, joven Soohyuk, esta es la mejor forma de aniquilar a los monstruos esos.
—¿Está seguro que puede controlar a este monstruo?
—Si, ella sabe que es lo que debe de hacer, le prometí algo y si no cumple con mi orden...nunca volverá a ver a la persona que mas anhela.
La hibrida contempló al chico frente a ella, su ceño se frunció, recordando el nacimiento de su bebé, en como trató de tocarla con su manos pero cuando la pequeña cayó en la colchoneta bajo ella, si seguía la ordenes de ese hombre, podía volver a verla.
Seojoon ingresó a la casa, al hacerlo, pudo ver a su padre contemplando con Lee Sohyuk, sabía muy bien que su padre había puesto un ojo sobre ese muchacho, ya que era bueno en la caza, sin embargo. No entendía que estaba queriendo hacer su progenitor, dado que se había retirado hace muchos años como cazador, se suponía que no tenía que ver nada con los gremios. Tampoco entendía porque su padre no estaba muy interesado en encontrar a su hija, como si la hubiera dado por muerta.
Sejoon sabía que Boyoung no era su hermana se sangre, el aún recordaba la noche lluviosa en que la pequeña llegó arropada en unas mantas blancas y fue entregada a su madre, diciendo que la encontró tirada en la calle.
—Padre—llamó ofreciendo una sonrisa, contempló a Soohyuk con leve pesar dado que se enteró sobre la muerte de su madre y hermano menor—, lo siento mucho por lo sucedido.
—Gracias, Seojoon—respondió con tono cortante aquel humano y contempló al señor Park—, muchas gracias...nos mantendremos en contacto y le daré mañana temprano mi respuesta final.
—Eso espero. Que te vaya bien.
El joven salió por aquella puerta, bajo la mirada increpulosa del líder del gremio. El señor Park contempló a su hijo y cuando se iba regresar al sótano, su hijo lo detuvo con rostro serio.
—¿No piensas seguir buscando a mi hermana? ¡No siento que estás poniendo tu mayor esfuerzo al respecto!
—Ella...ya está muerta para mí, Seojoon.
—¿De qué demonios hablas? fue secuestrada por un sangre pura y-...
—Tu hermana no fue secuestrada, ella se decidió ir con él. Yo fui a buscarla un día de estos—el señor Park bajó su mirada y juntó sus manos—, la encontré y estaba de la mano con ese vampiro Conde de Kim Seokjin, dijo que no la volvieramos a buscar, que era feliz y-...que no eramos nadie para ella ¡Ese monstruo la sedujo y le lavó el cerebro!—exclamó fingiendo molestia—. Por eso mismo, ya no se puede hacer nada, ella se ha unido a ese lado, Seojoon. Debes comprenderlo, estamos en una guerra y creo que debes saber lo que eso significa.
—¿De qué hablas?
—Pronto habrá una reunión de gremios de cazadores, piensan atacar a los vampiros más poderosos, es un hecho. Entre ellos está el monstruo que tiene a tu hermana...empieza a despedirte de ella.
—Tu deber era traerla—setenció Park Seojoon al darse cuenta que su padre se había dado rápido porvencido, o es lo que interpretó—¡Incluso si tenías que morir...debías de haberla traido de regreso con nosotros, es Boyoung padre! ¡Mi hermana pequeña!
—¡Esa no es mi hija!—gritó alterado aquel humano, suspiró y bajó su mirada—. Algún dia lo entenderás...si hay que matar a ciertas seres, para salvar a millones...hay que hacerlo, aunque en eso vaya incluida tu hermana. Es por la humanidad, hijo.
—Yo mataría a la humanidad si tuviera que proteger a mi hermana padre, eso te incluye a tí.
El señor Park solo hizo una media sonria, incredulo ante las palabras de su hijo, quien dio unos suaves golpes sobre el hombro a Park Seojoon, quien se quedó consternado ante lo que acaba de escuchar, se giró en cámara lenta, con leves lágrimas en la esquina de sus ojos, a lo lejos pudo contemplar a su madre, quien agachó la cabeza y rompió a llorar, volviendo a pasos apresurados de nuevo a su cuarto. El joven cazador sabía quien estaba sufriendo más la perdida de Boyoung era su madre, que no había dejado de llorar día y noche, pasaba solo en el cuarto de ella e incluso estaba más delgada debido a que el apetito se le había reducido.
<< 28 años atrás: La señora Park sonrió y extendió una cuchara con un poco de puré, la pequeña Boyoung alzó el rostro mirando extrañada aquel objeto frente a ella.
—¡Aquí viene la cucharita, con el movimiento de una abejita..bzz, bzz, bzz!—exclamó la señora que metió la comida a la boca de la niñas de 2 años, quien empezó a comer y masticó con una gran sonrisa—¿Está rica, mi pequeña?—preguntó su madre con tono cargado de preocupación.
—¡Shi!—afirmó la pequeña Boyoung extendiendo sus manos.
El pequeño Seojoon de 5 años, se asomó y sonrió al ver los grandes ojos de su hermana, le extendió una flor, el cual la pequeña miró con curiosidad y la tomó, empezando a jugar con ella.
—¡Hermanita, debes comer mucho o te quedarás pequeña!
La señora Park contempló a su hijo con una cálida sonrisa y le ofreció un beso sobre la frente. En eso, una doncella se acercó a la joven para querer limpiar un poco de comida que le había quedado en los labios, pero cuando lo hizo, la bebé sacó unos finos colmillos de su boca y mordió con fuerza la mano de la sirvienta. Quien pegó un grito de dolor.
La señora Park se sobresaltó, viendo como la pequeña niña, absorbió la sangre y pasó su lengua por los labios, quitando los restos y saborenado, dejó a la vista sus pequeños colmillos. Seojoon enarcó ambas cejas sorprendido y miró a su madre, señalando rápido a su hermana, asustado.
—¡Mamá...hermanita-...
—Escucha bien, Seojoon. Aquí no sucedió nada, no le vayas a decir a papá sobre esto o matará a tu hermana—setenció su madre que tomó a la pequeña y terminó de limpiar rápido la comisura de la bebé.
La sirvienta miró a la señora Park con los ojos horrizados.
—Monstruo...¡Es un monstruo!—gritó aquella sirvienta señalando a la bebé y buscó correr a la puerta; pero la mujer logró agarrarla a tiempo de la coleta del pelo.
La señora Park dirigió su mirada al balcón del tercer piso y volvió su vista de nuevo sobre la sirvienta.
La cocinera iba llevando una hoya con agua para preparar una gallina cuando enfrente de ella cayó un cuerpo sin vida, la mujer dejó caer el objeto y cubrió su boca, horrorizada y pegando gritos, alzó la vista al tercer piso, viendo que solo las cortinas se movían y la puerta mantenía abierta. Bajó su mirada de nuevo, si no se equivocaba...esa era la nana de la nueva señorita.
Cuando llegó la tarde, la señora Park mintió diciendo como la niñera de su hija se había suicidado y se tiró desde el tercer piso, después de querer atacar a la pequeña Boyoung y que en defensa, la bebé le mordió. Sejeoong que sabía la verdad, no quería que su padre matara a su hermanita, por lo que también afirmó aquella mentira.>>
Park Seojoon lo sabía, desde que era pequeño, que su hermana no era humana, por eso decidió convertirse en cazador, aprender más sobre los quirópteros y así proteger a su hermana en el futuro de otros. Pensaba que de seguro ese vampiro de Kim Seokjin había reconocido un poco de su sangre vampireza y por eso se la había llevado, aunque tuviera que ir en contra de su padre, no pensaba dejar que su hermana menor muriera.
Kim Seokjin se mantenía en su oficina leyendo algunos documentos, en eso escuchó un ruido a la lejanía, se giró de un solo y sus ojos se pusieron de un color rojo intenso, sus pupilas se expandieron, logrando ver a la lejanía una orda de vampiros impuros sin control—¿Qué demonios?—musitó y se giró con suma preocupación.
La vigilante de aquella casa grande soltó un enorme chillido y luego una onda expansiva, dando aviso a las demás compañeras, quienes abrieron sus ojos de un golpe, las que estaban durmiendo colgando en los techos, salieron por las ventanas y empezaron a escalar las paredes hasta llegar al techo.
La escritora que se encontraba en el jardin leyendo un libro, frunció el ceño extrañada, en eso vio una flecha con fuego entrar a una ventana de un cuarto y empezó a quemar las cortinas, luego una flecha de ballesta impacto contra la silla, ella pegó un grito y tiró el libro al cielo, empezando a buscar donde refugiarse.
Las vigilantes se tiraron desde el techo y empezaron a volar en dirección de aquella horda de vampiros. Desde tierra unos cazadores le apuntaron una y otra vez, empezando a caer al ser atravesadas en la cabeza y el corazón. La escritora no daba crédito ante lo que veía—¡Corre perra, corre!—se gritó a si misma y entró a la mansión, haciendose espacio entre las demás sirvientas que ya habían sacado sus armas para defender el lugar.
Kim Seokjin iba en dirección del jardín cuando sintió una rafaga de viento pasar a gran velocidad y un grito que se iba haciendo pequeño a la lejania, se giró viendo a la joven Boyoung. El mayordomo apareció frente a su amo y empezó a poner las balas de la escopeta.
—¿A dónde demonios va esa chica?—se preguntó consternado, miró a su sirviente—, por lo que logré ver son 20 cazadores y 100 de vampiros impuros, sin embargo, esos impuros no son como los que conocemos—setenció—Ten cuidado.
—Si, mi amo.
Jin y el mayordomo se dirigieron a pasos apresurados para ir al jardin trasero.
Boyoung abrió la puerta principal y cuando vio a un tipo que alzó el rostro y le apuntó con su arma, le ofreció una gran sonrisa, le cerró la puerta de un golpe, pegando otro grito para correr por donde vino, escuchando unos disparos, cayó al suelo para cubrirse y se giró muy asustada.
—¡Esperen!—se dijo a si misma y se señaló—¿Por qué estoy huyendo? ¡Soy el dios de este mundo, soy inmortal!—en eso una bala le rozó el brazo y le hizo una herida, ella se quedó pálidam gritó de dolor—¡Ah, duele! ¡Aprendí mi lección! ¡No quiero morir, aún soy virgen y no he probado un pene en mi puta vida!
Kim Seokjin que se había regresado para salvar a la humana, abrió y cerró la boca y suspiró ya que había escuchado todo lo que esa mujer dijo. Vio aquel hombre ingresar a la casa y apuntar con su arma a la joven. El vampiro se sintió muy molesto, sus ojos se pusieron rojos y el cuerpo de ese humano ardió en fuego. Ella se giró sorprendida, viendo a Kim Seokjin, quien le mostró sus incisivos, arrugando su nariz en forma de disgusto.
—Me salvaste la vida–susurró casi en un hilo de voz.
—No lo hice porque quise, odio que hayan intrusos en mi casa—exclamó quejoso—¡¿Y qué es eso de decir que no quieres morir antes de tener un-...—el hombre no pudo terminar aquella frase un tanto avergonzado— ¡Mujer, estas loca como una cabra!
Boyoung pegó un grito de emoción y se tiró sobre Kim Seokjin, rodeando sus piernas y le abrazó con fuerza, el vampiro se quedó tieso ante aquel accionar.
Más personas ingresaron a la mansión y apuntaron con su arma al vampiro, ella se bajó con cuidado, muy asustada. En eso el mayordomo ingresó lastimado de su hombro, contempló a su amo.
—Mi señor...han acabado con todas nuestras vigilantes, estamos rodeados.
—¿Y las demás sirvientas?—preguntó algo frustrado, en eso vio como el cuerpo de una de sus ayudantes atravesó el vidrio de una ventana y fue clavada a la pared con una gran flecha de ballesta en su corazón y cabeza—. Mayordomo—Kim Seokjin alzó a la joven Boyoung y la acomodó en los brazos de aquel vampiro mayor—, necesito que huya con ella y vayan donde el Duque...yo me encargaré de los que quedan. Sabe por donde escapar.
—Si...mi señor.
La escritora vio como las cortinas, los muebles y las paredes de aquella mansión empezaron agarrar fuego y aquellos que querían atacar al anciano y a la joven, eran quemados de inmediato. Kim Seokjin suspiró y sus ojos volvieron a un color rojo intenso, para alzar su rostro.
Yoongi estaba dando de amamantar a la melliza, enarcó una ceja ya que el Duque estaba mirandolo con demasiada intensidad hace cierto tiempo, el híbrido cubrió a su bebé y su pecho con una manta, Jungkook sonrió un tanto divertido.
—¡Es un pervertido! ¡Deje de verme de esa forma!
—Dicen que la leche materna sabe dulce, no creo que nuestros hijos se molesten porque se queden sin comida si pruebo un poco.
La melliza dirigió de un golpe su mirada a su padre y succionó con más ganas la tetilla de Yoongi, quien pegó un suave grito cuando sintió la presión en su pezón. La puerta del cuarto fue tocada, el mayordomo ingresó y se acercó rapido al Duque, para susurrar algo a su oido. Yoongi les miró con un poco de curiosidad, queriendo escuchar. Jeon Jungkook miró con suma molestia a su mayordomo y se levantó de un golpe.
—Min Yoongi, quedate aquí y no te muevas...¡Mijoo! ordena a las vigilantes que protejan la mansión.
—¿Qué sucede?—interrogó con preocupación el hibrido al ver al vampiro en ese estado.
—Atacaron la mansión del Conde Kim Seokjin.
—¡Ah! ¡Mi amiga Boyoung!—gritó Yoongi—¡Ella-...
—Ella está bien, acaba de llegar con el mayordomo de Seokjin.
Yoongi terminó de darle de comer a su hija y la entregó a la nodriza, quien tomó con sumo cuidado a la bebé. El vampiro bajó su camisa y se levantó de la cama. Jungkook se le acercó y lo detuvo.
—No hagas esfuerzo, descansa. Yo me encargaré.
—¡Esto también me concierne, necesito saber si mi amiga está bien!
Jeon Jungkook miró por varios segundos a su prometido y al no poder decir: "No". Lo tomó entre sus brazos y lo cargó para llevarlo consigo al lugar donde resguardaba aquella joven y el mayordomo.
Al llegar, Boyoung alzó el rostro, viendo al Duque y Min Yoongi, el pelinegro se bajó de los brazos de su amado y corrió donde la escritora. Apareció también el mayordomo del Duque y la ama de llaves.
—¿Estás bien?—Yoongi se le acercó y tomó de las manos a la mujer.
—¡Casi muero, no tienes idea! ¡Yo pensé que era inmortal por ser la diosa de este mundo pero soy una simple humana!—lloriqueó.
—Estás sangrando—dijo Yoongi al ver la herida en el brazo—Jennie, trae medicina para curar esta herida.
—¿Oh? lo había olvidado,estoy sangrando...estoy...sangrando.
Boyoung cayó de un golpe desmayada en los brazos del mayordomo de Kim Seokjin. El duque frunció el ceño y rozó la punta de su nariz, pensativo.
—¿Dónde está el Conde?
—Se quedó peleando, si no fuera por él...no hubieramos escapado.
—Sobrevivirá—afirmó Jungkook—, no es un tipo débil.
Min Yoongi vio a Jennie ingresar con el botiquín de medicinas, el hibrido abrazó el cuerpo de la escritora.
—Duque...vendrán por nosotros—afirmó Yoongi—, debemos estar preparados para el tercer dia del inicio del invierno. Lo sé...es el día que atacarán esta mansión.
Yoongi se preguntó si el Duque creería sus palabras o lo tacharía como un loco, la mirada de aquel Sangre pura se posó sobre su pareja y luego sobre la amiga inconsciente del pálido.
—Despierten a las vigilantes restantes, rodeen los puntos ciego del bosque. Quiero ver a todas las vigilantes protegiendo cada rincón de esta mansión y saquen las armas.
—Si señor—afirmó el mayordomo que soltó un enorme chillido dando aviso que estaban bajo ataque.
Mijoo escuchó aquel sonido y soltó un alarido desgarrador mientras sus dientes se afilaron. Varias vigilantes que estaban paradas y en modo hibernación, abrieron de un golpe sus ojos, dejando ver unos de color amarillo. Sus huesos empezaron a tronar para poder acomodar mejor sus articulaciones. Empezaron a subir las escaleras como si marcharan y al salir de aquella puerta que las mantuvo refugiadas, salieron por las ventanas para empezar a correr en dirección del bosque.
Jeon Jungkook se acercó a Min Yoongi, tomó su mano y le ofreció un casto beso, dejando en claro que iba a proteger a los suyos y su familia, aunque tuviera que dar su vida.
Lun-6-febrero-2023:
Gracias a todos por su paciencia, por fin ya tengo internet y como prometí, iba actualizar hoy UwU ya faltan pocos caps par que este fanfic termine. Estaba viendo que hay escritores que hacen como playlist de los fanfics que hacen ¿Quieren que haga uno de esta historia? claro que debo aprender como se hace eso, porque no se mucho de eso jejeej. Pero si me dicen que si, lo hago por ustedes mis amores.
¡Gracias por su infinito apoyo y esperen el siguiente capitulo que será el dia miercoles y el último será el viernes!
[Cualquier error de ortografía o redacción serán corregidos cuando este fanfic pase a edición]
¡Recuerden el lema de la familia: Somos Sol que calienta pero no quema!
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top