El fuerte Almgren, uno de los fuertes entre el camino entre Belzerg y Elroad, y el cual protege el camino a la capital del primer reino, se encuentra bajo asedio de las fuerzas de la república, lideradas por el general Naofumi.

Esta fortaleza, está en una posición estratégica, desde ella, se controlan todos los senderos que conducen a múltiples regiones del reino, y ya que cruzar a través del bosque y montañas sería tedioso, las fuerzas del reino se han acuartelado en dicho fuerte.

Hasta hace unas semanas, las fuerzas de la coalición que se encontraban en ofensiva, y cerca de capturar la capital de Elroad, ahora se encuentran replegadas y a la defensiva dentro de su propio territorio; y para empeorar, el ejército del Rey Demonio, el cual se suponía que había sido derrotado, ha lanzado una nueva ofensiva y ha logrado capturar el pequeño pueblo de Axel, un pueblo al otro lado del reino, el cual se hizo famoso por un aventurero ladrón de bragas, una maga del clan carmesí y usuaria de la magia explosiva, una paladín y miembro de la familia Dustiness, y una arcipreste de cabello azul y con el mismo nombre de la diosa de los locos del culto de Axis.

Mientras el ejército acampaba en aquella fortaleza, el príncipe Reinhard volvió a su castillo, solo para encontrar todo hecho un desastre.

- ... ¿¡Pero qué ha pasao!?

- ¡Príncipe Reinhard! ¡La situación es delicada! Hace unas semanas, el ladrón de cabello plateado y su acompañante, secuestraron a Iris-sama, desde entonces, no hemos sabido nada Reinhard-sama.

- ¿No tienen idea de qué pasó con mi hermana? ¿Díganme dónde está?

Los sirvientes del castillo, no esperaban tal reacción, ya que el príncipe Reinhard siempre fue distante con su hermana Iris, Reinhard siempre se la pasaba en el ejército, o practicando con la espada, casi nunca se vio o habló con ella, y esta es la misma razón, por la que Iris-sama decidió aceptar a Kazuma como su onii-chan, ya que su verdadero hermano, nunca estuvo ahí para ella. Ahora, es extraño que ese mismo príncipe, demuestre preocupación por la hermana que prácticamente es una desconocida para él.

- ¿¡Y dónde carajos está Claire!? Se suponía que debía proteger a Iris, ¡dímelo Rain! ¡Dime ahora!

- Claire-san ha estado encerrada en su habitación durante días, y no ha salido aún, varios sirvientes están tratando de abrir la puerta, pero parece que está sellada por Magia, esto me tiene preocupada Reinhard-sama.

- Entonces entren por la ventana, ¿qué más da?

Parece que querían evitar esa idea, ya que la habitación de Claire, está en una de las torres del castillo, así que la maniobra sería arriesgada y peligrosa.

Tras la maniobra peligrosa, un soldado logró entrar a la habitación por la ventana, abriéndole la puerta a los demás desde adentro, sin embargo, la escena que estarían a punto de presenciar, generaría aún más problemas y dudas que respuestas.

- ¡Príncipe! ¡Majestad! ¡Reinhard-sama! Encontramos a Claire-sama.

- Bien, díganle que venga ante mí, quiero saber todo lo que ha pasado aquí en este mismo instante.

- Creo que no va a ser posible Reinhard-sama.

- ¿Qué? ¿Por qué?

- Será mejor que lo vea con sus propios ojos.

Todas las autoridades estaban en la habitación de la señorita Claire; al entrar, Reinhard pudo sentir un olor nauseabundo.

Al entrar al fondo de la habitación, se veía a Claire en la silla del escritorio, tenía un agujero en el pecho, como si una espada o lanza caliente y encendida al rojo vivo lo hubiera hecho.

Por el estado del cadáver, parece que sucedió hace varias semanas.

- ¿¡Quién... Quién hizo esto!? Primero secuestran a Iris-nee, ahora Claire...

Lo que no sabe el príncipe, ni los guardias, ni Rain, es que Claire recibió castigo, directamente de la mano derecha y ejecutora del Rey Demonio, por haber fallado en su misión. Ese... es el precio de fallarle al Rey Demonio, un error que Claire cometió, al subestimar al aventurero de ojos verdes, al cual quiso separar de Iris.

-- Mientras tanto, a cierta distancia de la capital –

Las fuerzas del general Naofumi, están a punto de tomar la fortaleza, la cual ha sido debilitada por las constantes bolas de fuego y picos de hielo, y otros hechizos, así como la lluvia de flechas y los continuos ataques del ejército multi-especie de la república.

Hubo bajas incontables en ambos bandos, cientos o incluso más de mil, sin embargo, la determinación de vencer al enemigo sin importar el costo del general del escudo, estaba a punto de vencer al enemigo.

Un hombre lobo que estaba herido, mantenía su hacha en alto con su brazo aun sano, rodeado por enemigos en todos los bandos, sin embargo, esto aumentaba más su coraje.

- Estás rodeado – Dice un soldado enemigo.

- ¡Manos les van a faltar... Raaaaaah!

El hombre lobo empezó a cortar a sus oponentes con su hacha, a otros, los muerde con sus colmillos, sin embargo, había un caballero, a punto de clavar al hombre bestia con su lanza, sin embargo...

Un escudo redondo lanzado al aire, impactó en la cabeza del caballero, incapacitándolo.

El lobo se distrajo por el ruido, dándole oportunidad a otro caballero para cortarlo, pero antes de que pudiera matarlo, el dueño de aquel escudo bloqueó el ataque, contra atacando con su puño y noqueando al paladín.

- Estás bien.

- Gracias, general Naofumi – Dice el hombre lobo agradecido con su comandante.

- ¡Vamos!

Liderando la batalla, está Naofumi en persona, con hombres, elfos y hombres bestia a su espalda, combatiendo contra el enemigo. Dentro de ellos, destaca una chica mapache, la cual es la subordinada del general.

Tras terminar la batalla, y replegar al enemigo de vuelta a la fortaleza, la teniente se acerca a su general para informarlo de los acontecimientos.

- Naofumi-sama, tengo noticias del canciller.

- ¿Qué es teniente Raptalia?

- Nuevas revueltas se están produciendo en la capital, el canciller requiere nuestra presencia de inmediato, Elroad podría peligrar.

- Tsk. ¡Justo cuando estoy a punto de ganar!... ¡Maldito destino! Bueno, la gloria vendrá después, está bien teniente Raphtalia, díle a los soldados que comiencen la retirada.

- De inmediato, Naofumi-sama.

...

-- Capital de Elroad, tiempo después –

Tras reencontrarse con el príncipe Levi, Kazuma y compañía continuaron su viaje hasta la capital.

El príncipe de cabello rojo, estaba muy débil, desnutrido y sin comer por días, tal vez semanas, es ilógico que haya sobrevivido solo durante tanto tiempo, sin embargo, ahora está en sus últimas.

Iris, quien en el pasado fue totalmente indiferente al chico, ahora se encontraba preocupada por su salud, después de todo, ella también es de la realeza, que todo tu reino, que toda la gente esté en tu contra, es algo que ella no podía ni imaginar, así que verlo así, a punto de morir, no es para nada agradable.

El grupo, llegó caminando a la capital, obviamente con capuchas para evitar ser reconocidos por algún conocido, sobre todo los dueños de los casinos a los que Kazuma dejó en la ruina.

Pero para sorpresa de Kazuma, Darkness e Iris, de aquella Elroad reluciente de elegancia, con hoteles, casinos y lujosos restaurantes, ya no queda sino el recuerdo. Ante ellos, se ve una ciudad con casas en ruinas, con losas de la calle faltantes, ya que fueron usadas por los manifestantes.

Los antiguos casinos, ahora cerrados, sus edificios saqueados, o convertidos en hospitales improvisados, barricadas por toda la ciudad.

Si, aun con el nuevo gobierno, la violencia no terminó en Elroad, grupos con diferentes ideales, incluso antiguos pro-monarquistas se levantan para destruir a la república, la capital de Elroad, así como otros pueblos, se han convertido en campos de batalla, agravando la situación teniendo en cuenta que Elroad está en guerra con las naciones vecinas; algunas, ya han firmado la paz, gracias a las hazañas de varios jóvenes generales que han tomado el comando del nuevo ejército, entre ellos, Naofumi, quien ha sido llamado desde el frente para ocuparse de los rebeldes aún en la capital.

Al llegar a la plaza, Kazuma vió en el centro una tarima, una imagen que le recordó a algo que estudió hace mucho tiempo en su escuela, antes de ser un hikikomori.

"Revolución", algo que Kazuma jamás conoció en su natal Japón, algo que solo leyó en libros de historia, o veía en noticias de otras regiones de su mundo, como en latino américa; ahora, Kazuma se encuentra en medio de ese escenario en este mundo de fantasía, algo que nunca habría imaginado ni en un millón de años, al pensar que aquel mundo sería igual a los cliché que él conocía.

-> Continuará.