Segunda Temporada: La odisea por la manzana. (Parte 2)

Este viaje comenzó de una forma irritante para mí, pensar que tendríamos que ir a distintos lugares para poder conseguir la reliquia divina y peor aún, nuestra primera parada sería Alcanretia. No crei volver a ese lugar después de todos los problemas que he tenido con todos idiotas de Axis.

–Si íbamos a ir a Alcanretia pudimos pedirle a la compañera de Vanir que nos llevará, ¿sabes?

–Claro que lo sé, ¿pero en donde está lo divertido en solo teletransportarse? ¡Tomaremos el carruaje como buenos aventureros!

–Haa~, bien, iré por los boletos.

–¡Gracias! Oh, y que sean de primera clase.

Está chica era molesta, casi al mismo nivel de Aqua, peor por lo menos Aqua no era tan… muy bien, creo que no puedo encontrar la diferencia en estas dos.

Después de conocer a más dioses aparte de Eros y Aqua ahora me doy cuenta, Eris es el caso especial… es la única diosa normal.

Cuando regrese de comprar los boletos ví a Elisa hablando con uno de los aventureros con los que suelo beber en el gremio, este hablaba con ella como si la conociera de toda la vida. En el momento en el que me acerque el aventurero se notó nervioso y se fue antes de que siquiera yo llegara a dónde estaban ellos.

–… ¿puedo preguntar de qué estaban hablando?

–Oh ya sabes, cosas de aventurero y así.

Tan solo porque el aventurero estaba de espaldas no pude leer sus labios, pero en el momento en el que alejo claramente pude ver cómo llamo Chris a Elisa. Después de eso me moleste por una razón en particular, ese tipo trato de coquetear con mi novia sin saber que era su hermana.

–¡Bien, vayamos ya en este viaje por carroza!

Grito Elisa emocionada mientras tomaba su boleto. Cómo si fuera una niña pequeña camino hasta la carroza y se subió a esta con dificultad… parece ser incluso más infantil que Darkness.

–¡¿Que esperas?! ¡Súbete! ¡Es hora de irnos!

Haciendo otro alboroto apuro a la caravana para que el viaje empezará, en esta ocasión estaba de acuerdo con ella, entre más rápido empezará esto más rápido terminaría.
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Han pasado casi 5 horas desde que salimos de Axel y digamos que este viaje se vuelve cada vez más insufrible por segundo.

–¡Ahhh, me aburro! ¿Acaso está cosa no puede ir más rápido? ¿Cuánto falta para llegar? Si hubiera sabido que esto tardaría tanto hubiera aceptado que Wiz nos llevará.

Está chica no ha parado de quejarse desde el inicio del viaje. Al principio sus quejas fueron sutiles, simples suspiros o quejidos mientras se movía en su asiento, pero no tardó en comenzar a gritar molesta hasta el punto de incluso molestar a los pasajeros con nosotros.

Con tan solo ver sus miradas sé que piensan en sacarnos del carruaje… realmente lamento el comportamiento de mi acompañante, por favor no nos apuñalen en la noche.

–Sabes, creo que iré a dormir.

… Está chica, realmente sigo sin creer de que sea la hermana de la tranquila Eris.
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Llevábamos más de la mitad del viaje y ya había caído la noche, los conductores junto con los aventureros necesitaban descanso después de todos los problemas que tuvimos en el camino, por suerte está vez no causados por mi acompañante.

Fuimos atacados por un pequeño grupo de Kobolds que parecían estar extraviados, los aventureros los enfrentaron sin la necesidad de que yo interviniera…, pero hubiera preferido pelear contra Kobolds que tener que escucharla.

–¡Oye, deberías pelear, eso se ve bastante divertido vamos ¿por qué no peleas?!

Y eso lo dijo en una sola bocanada de aire. Ya que muchos aventureros estaban cansados me ofrecí para recolectar leña para las fogatas, haría lo que sea para alejarme un solo momento de Elisa.

–¡Vaya, jamás pensé que Chris fuera tan amigable! Normalmente parece que solo hablas con nosotros cuando quieres algo, ¡peor es bueno saber que no es así!

Claro muchos de los aventureros conocían a Chris y confundieron a Elisa con ella, para este punto ni siquiera ella se molestó en mencionar de que realmente era su hermana.

–Eh, y no solo soy carismática, también soy buena en, otras cosas.

Ella comenzó a hablar con una voz seductora como si intentará coquetear con los aventureros, antes de que pudiera llegar a más tuve que intervenir. Tome a Elisa del brazo y la jale a un lugar alejado de los aventureros y del resto de la caravana.

Al estar lo suficientemente alejados ella se sentó sobre una roca mientras yo la regañaba.

–Oye, muchas personas creen que eres Chris, así que deja de actuar de esa forma o acabarás con su reputación.

–¿A quien le importa? Solo quiero divertirme.

–Si quieres hacerlo entonces di que no eres Chris.

Guardó silencio unos minutos mientras se acostaba sobre la roca, dándome la espalda.

–… Sigue sin importar, al fin y al cabo es lo mismo… somos lo mismo.

Eso último lo dijo en voz baja. Siempre que parecía hablar de algo triste siempre bajaba el volumen de su voz, pero siempre era capaz de escucharla. No sabía si ella lo hacía a propósito o simplemente no se daba cuenta, pero está vez no me quedaría callado como antes.

–¿A qué te refieres con eso? ¿Son lo mismo?

–… No quiero hablar de eso ahora, estoy cansada.

En ese momento fingió estar dormida ignorandome por completó, yo simplemente me acomodo en el suelo y me fui a dormir… este viaje es una verdadera pesadilla.
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Después de anoche Elisa dejo de estar tan emocionada por el viaje, todo el camino que faltaba se mantuvo en completó silencio, incluso cuando intenté entablar una conversación ella solo me ignoro.

Por primera vez tuve un viaje tranquilo…, pero también se sintió como un viaje vacío.
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–Uahh, finalmente llegamos, Alcanretia Sabes, deberíamos dejar una queja por como nos echaron del carruaje.

Cómo si su actitud sería jamás haya existido, Elisa volvió a su usual manera tan infantil de actuar una vez llegamos a Alcanretia.

Cómo sucedió la primera vez, al igual que la última vez, el carruaje en el que veníamos nos lanzo fuera y salieron corriendo a toda prisa todo por el miedo que los locos de Axis provocaba.

–Bien, ¿en dónde está el pedazo de esa reliquia? Por favor dime qué no…

–Esta dentro de la ciudad.

–Me lo imaginé.

Si se podía quería evitar entrar la ciudad por los diversos traumas que he vivido dentro de ella, claro tuve buenos momentos, pero siento que olvide ya la mayoría de ellos.

Elisa comenzó a caminar a la ciudad como si nada, ignorando por completo el peligro que nos aguardaba… yo solo caminaba detrás de ella para evitar cualquier contacto directo.

–¡Miren, visitantes!

Cómo era de esperarse, al momento en el que entramos a la ciudad una estampida de seguidores de Axis corrieron hacia nosotros para intentar reclutamos.

–¡Hola, ¿les interesa unirse a la orden de Axis?!

–¡Si se unen ninguna clase de amor será prohibido, podrías casarte con una Loli si así quisieras!

–¡Adoren a la gran Aqua-sama ahora!

Cada vez parecían volverse más locos al punto de que ni siquiera podía soportarlos, pero a comparación mía, Elisa estaba bastante tranquila y no parecía ser afectada por el acoso de estas personas.

–¡Oh mi dios, ¿de que hablan?, claro que adoro a Aqua-sama! ¡¿Quien no lo haría con ese bello cabello azul suyo, es imposible no adorarla!

En un instante Elisa se convirtió en uno de ellos… jamás creí que esto fuera contagioso, pareciese que un apocalipsis Zombie estuviera sucediendo y todos los zombies amen a Aqua… tengo miedo de que un mundo así exista.
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Gracias a la actuación de Elisa nos libramos de todos los creyentes de Aqua, claro que los tuvimos que hacer creer que éramos parte de su orden.

–Oye, sé que no pregunte antes, pero ¿conoces a Aqua?

–¿Hee~? Claro que conozco a Aqua, la conozco desde que era una niña, siempre ha sido una chica especial.

Está chica se ponía cada vez más misteriosa. Sus palabras de nostalgia sonaban como las de un anciano recordando su juventud, tal vez ella sea mayor que Eris por muchos años.

–Bien, siento que estamos cerca de la reliquia.

El camino que estábamos caminando me era bastante familiar, era el mismo que tomamos la primera vez que venimos, este camino llevaba directamente a la iglesia de Axis dónde nos esperaba el sacerdote más molesto del mundo, Zesta.
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–¡Oh, es un verdadero gusto verlo de nuevo joven Kazuma! Y dígame, ¿quien es la belleza que viene con usted?

Este era el sacerdote principal de la orden de Axis, un hombre mayor adicto al neroid y un enorme pervertido que no le importa si es una chica o un chico, intentaría cualquier cosa pervertida con ambos grupos.

–¡Oh, pero si usted debe de ser el gran sacerdote, he escuchado mucho sobre usted! Mi nombre es Erie y acabo de unirme al culto de Axis, me dijeron que usted podría darme algunos consejos.

–¡Oh, claro, claro, lo que sea por un compañero de Axis! Lamentablemente para usted Kazuma-san, lo que estoy por decir solo es para oídos de cultistas de Axis, así que tendrá que escribir su nombre en esta hoja si quieres escuchar.

Saco una hoja de su bolsillo y la puso frente a mi, yo por simple cortesía la tomé y la partí a la mitad.

–No gracias, puedo esperar afuera.

Decidí salir de la iglesia y esperar por Elisa. No entendía su necesidad de haber mentido a la vez que ocultaba su nombre real, pero seguramente tiene algo que ver con el artículo que estábamos buscando.

–Haa~, tal vez tarde, sera mejor que vaya a comer algo.

Decidí ir a un restaurante, no he comido nada desde esta mañana y ya empieza a atardecer rápidamente. Fui al mismo restaurante de la vez pasada, el mismo lugar donde trataron a Darkness como un perro. Podía ser un lugar lleno de locos, pero tenían buena comida, eso debo de admitirlo.

–Bienvenido, ¿puedo tomar su orden?… Espere, ¿acaso usted es…? ¡Sí, es Kazuma-san!

De repente la mesera grito el nombre de un completó desconocido.

–¡Vamos Kazuma-san, ¿acaso no me recuerda?! ¡Soy yo, Karen, fui la recepcionista en su luna de miel y cuando trajo a su amante!

¡¡Ahhh, ¿cómo es posible que de todas las personas que haya podido encontrarme tuviera que ser está loca?!! Todos me volteaban a ver raro tras lo que grito la mesera… cierto, olvide que estábamos en Alcarentia, todos me miraban mientras parecían decir "buen trabajo" con sus expresiones.

–No sé de qué habla, además, quiero el almuerzo especial.

–Hee~, ¿sigue apenado por lo que pasó la última vez? Tranquilo, eso solo queda entre nosotros dos.

La mesera anoto la orden en una libreta y se fue dando saltos a la cocina… ¿por qué siempre me encuentro con problemas?
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Finalmente termine de comer y me fui de aquel lugar, en ningún momento logré tener un tiempo a solas con mi comida, todo el tiempo que estuve en el restaurante la mesera estaba hablando sobre lo que ha sucedido en su vida desde que dejó de trabajar en el hotel, yo simplemente trate de ignorarla, pero su voz era tan molesta que no fue sencillo.

–Haa~, espero que Elisa ya haya conseguido eso que vinimos a buscar.

–Claro que lo hice, ¿acaso dudaste de mi?

Elisa apareció de repente detrás de mi sorprendiendome. Ella me miró con una sonrisa triunfante en su rostro mientras sostenía una pequeña bolsa de tela.

–¿Acaso eso es?

–Sí, el primer trozo.

Ella lo había conseguido tan fácil, eso me hacía preguntarme ¿para que necesitaba un aventurero que la acompañará si ella era completamente capaz de hacerlo sola? No lograba entender todo lo que hacía está chica, pero estoy seguro de que me asustaría si lo descubriera.

–Bien, ahora iremos a un hotel a descansar, que preferentemente tenga aguas termales.

–… conozco un lugar.

Sabiendo que aquella mujer ahora trabajaba como mesera sabía que podría disfrutar un hotel sin que ella esté molestando.
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–Bienvenidos, ¿cuarto para dos? ¡¿Hee~, Kazuma-san y otra amante?! Veo que usted no pierde el tiempo.

–Matenme por favor.

//Fiuu, al fin termine este capítulo. Hola chicos, tiempo sin verlos… bueno, solo pasaron un par de días desde que publique el capítulo anterior, pero todos pidieron la siguiente parte y aquí está. Elisa y Kazuma consiguieron el primer pedazo de la reliquia divina, ¿pero realmente fue tan sencillo?, ¿acaso Elisa nos oculta cosas? Bueno, esa última es claro que sí, así que una mejor pregunta sería ¿qué nos oculta Elisa-sama? Las respuestas se darán en futuros capítulos, ahora, disfruten del sufrimiento de la Loli xD//

Interludio: Orgullo carmesí.

De cierta forma quería disculparme con Kazuma, pero yo también estaba molesta por lo que había hecho mientras no estábamos. Sé que él tiene una relación con Chris y que tiene todo el derecho de hacer esas clases de cosas…, pero yo fui quien tomo su primera vez, pensé que de esa forma yo sería más especial para él.

Haa~, no tengo derecho a quejarme, después de todo el no recuerda lo que sucedió esa noche por mi culpa y no le he contado sobre eso… ya no estoy segura de si sirva de algo hacerlo.

Todo el día se había ido y no supe nada sobre él, decidí darle su espacio ya que había pasado por una terrible experiencia no hace mucho. Sé que regreso en la noche, pero desde entonces no ha hecho acto de presencia en todo el día.

–Oigan, ¿alguna ha visto a Kazuma?

Estábamos en la sala, ya era de noche por lo que estábamos en la chimenea calentando nuestros cuerpos, incluso si es inicio de otoño se puede sentir bastante frío.

–De seguro está en su cuarto llorando por sus Pudines. Ughh, en verdad que no lo soporto a veces, y pensar que yo…

Decidí ignorar la rabieta de Aqua, en especial porque Darkness tocó mi hombro llamando mi atención. En sus manos tenía un plato de comida el cual reposo sobre mis manos.

–Ten Megumin, llévale a Kazuma esto, estoy segura de que estará feliz de verte.

No sé porque la sonrisa en el rostro de Darkness en ese momento me regreso todas mis energías. Con tan solo asentir me levanté del suelo y fui corriendo al cuarto de Kazuma, ya frente a la puerta estaba dudando si tocar o simplemente dejar la comida en el suelo. Sé que Kazuma no querrá verme después de todo lo que hice y dije… no, vamos Megumin, debes dejar de dudar, si vas a ganar a Kazuma devuelta tienes que ser más asertiva.

Nerviosa toque la puerta de Kazuma mientras decía su nombre tímidamente.

–Ka-Kazuma, t-te traje algo de comer.

El no respondió, seguramente porque seguía molesto…, pero eso no iba a detenerme.

–Kazuma… tengo algo que quiero decirte, es algo que te he estado ocultando mucho tiempo… t-tu y yo, hicimos algo, en una de nuestras citas…

Sentía como me falta el aire mientras intentaba hablar, jamás había estado tan nerviosa en mi vida.

–… no-nosotros, cuando estábamos ebrios tu-tuvimos sexo… ¡Sé que suena como si estuviera mintiendo, pero lo digo en verdad, verás…!

Le expliqué a Kazuma todo lo que sucedió esa noche, hablé del porque lo hicimos y porque no lo recuerda. Estaba tan avergonzada que podía sentir mi rostro ardiendo y como lágrimas comenzaban a salir de mis ojos…, pero incluso después de eso no recibí respuesta alguna de Kazuma.

–¡Kazuma, ¿en serio no piensas responderme después de todo lo que me esforcé?!… Me-mentira, ¡esto debe ser una mentira, pensé que eras mejor que eso!

De cierta forma comencé a sentirme desesperada, herida…, pero aún no había respuesta de Kazuma. Una vez ya no pude soportar más abrí la puerta de Kazuma… para mí sorpresa Kazuma no estaba en su habitación.

–… Kazuma, ¿a dónde fuiste?

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