*5*

Entré volando en el Gremio de Aventureros, mirando a un lado y a otro. ¿Dónde estaban esas pequeñas mamarrachas? Ah, ¡ahí estaban!

"¿Estás segura de que deberíamos haberle enviado algo así?" Preguntaba Cielo.

"¡Claro que estoy segura! Te garantizo que es cuestión de tiempo que venga a rogarnos que nos unamos a su grupo." Replicó Erika.

"¡Ningún rogar! Ya las tengo, mamarrachas." Divisé la fuente de toda mi miseria y, casi antes de saber lo que hacía, le di una sonora bofetada a la cabeza rosada.

"¡¿Quién se acerca a alguien y le golpea en la cabeza?! ¿Y si me convierto en un idiota por tu culpa?"

"¡Ya lo eres! Te lo mereces por enviarme un paquete enfermizo como ese. Gracias a ti, todos los miembros de mi grupo creen que soy una especie de desviado."

"¡Tienen razón! Quiero decir, ya pensábamos que eres una especie de enfermo, pero tú entrega fue la gota que colmó el vaso. ¿Qué se suponía que debíamos pensar?" Dijo Aqua.

"No te metas... Espera, ¿qué fue eso? ¿Ya pensaban que yo era un pervertido?" ¿Qué estaban diciendo de mí cuando estaba de espaldas?

Iba a tener que investigar esto muy de cerca. Pero más tarde.

"N-Nos disculpamos por causarle tantos problemas. Pero Erika estaba desesperada. Quiere unirse a su grupo." Dijo la muchacha, Cielo, me pareció recordar. Al menos estaba dispuesta a disculparse. Casi parecía madura. Pero yo sabía que no debía bajar la guardia.

"Hey, Kazuma... Empiezo a pensar que quizá estas chicas tengan una historia."

"¡¿Y una historia significa que pueden hacer lo que les dé la gana?! ¡De ninguna manera les voy a dejar entrar en mi grupo después de que hayan hecho una payasada como esa!"

Cielo se ofreció voluntaria: "Verás, el carro con todas nuestras cosas voló por los aires..."

"¿Tu carro voló por los aires?" Dije. Me sonaba extrañamente familiar. Las chicas se miraron y Lia empezó a abrir la boca. ¡No!

Dijera lo que dijera, no quería oírlo. Ni una palabra más.

"Sí. Explotó durante el ataque de las coles por la magia de alguien. Nuestros trajes, nuestros enseres... Todo se hizo humo..."

"Si vamos a montar un espectáculo, necesitamos dinero para el vestuario, el local y todo lo demás. Teníamos la esperanza de que, si emprendíamos una misión difícil, podríamos conseguir algunos fondos." Dijo Erika.

"Pero no confiábamos en poder manejar algo así nosotras solas. Por eso buscamos gente que nos acompañe." Añade Cielo.

¡Maldita sea, esto me estaba sonando demasiado! ¡¿Así que el carro que Megumin hizo estallar ese día llevaba todas las posesiones mundanas de esas chicas?! El conductor había mencionado algo sobre unas bailarinas...

"Hey." Empezó Aqua. "¿No crees que es ese carro que

Megumin...?"

Le tapé la boca con la mano para que se callara. "¡Aqua! DDefinitivamente estoy contigo. Estas chicas obviamente tienen una historia trágica. Y hey, la gente debería ayudarse mutuamente, ¿no? Así que busquemos una misión difícil y vamos a por ella."

"Hifo esflotar..." Lo que sea que Aqua estaba tratando de decir, yo no quería oírlo. Ya había dicho mucho. Para ser sincero, no quería tener nada más que ver con esas chicas, pero si sus problemas eran culpa nuestra (bien, sobre todo culpa de Megumin), no podía quedarme callado.

"Espera... ¿Irás con nosotras?" Preguntó Erika.

"¡Claro que lo haré! ¿Cómo podría rechazar a tres damiselas en apuros?" Respondí. De acuerdo, puede que sonara sospechosamente impaciente, pero distraerlas mostrándome valeroso parecía buen plan...

"Hey... resulta que eres muy buen tipo." Dijo Lia.

¡Ay! ¡Mi conciencia! Me dolía saber que yo también era en parte responsable de la destrucción total de todo su equipo.

"¿Pero estás seguro de que podemos aceptar nuevos miembros para el grupo sin preguntar a Megumin o a Darkness?" Soltó Aqua con una severa advertencia para no empeorar las cosas, vaya, por una vez estaba diciendo algo sensato.

"Llamémoslo un arreglo provisional. Podemos hacer una misión, a ver qué tal. Me gustaría ver de lo que son capaces estas jóvenes." Dije. Si resultaban no ser gran cosa, sería la razón perfecta para rechazarlas de plano.

"Nos parece bien." Dijo Erika. "¡Adelante! Verán que no somos sólo un puñado de caras bonitas."

"S-Sí, de acuerdo. Estoy deseando trabajar con ustedes." Dije.

*6*

Así que pasamos el día en una misión con tres jóvenes bailarinas a las que habíamos conocido apenas unos días antes. Estaba esperando en la puerta de la ciudad de Axel con Aqua y las demás cuando aparecieron los Corazones de Axel. Cada chica llevaba el arma que decía dominar; parecían auténticas aventureras.

"Estoy deseando aventurarme con ustedes." Dijo Lia.

"¡Esto es una mierda! ¡¿Creen que necesitan probarnos antes de dejarnos subir a bordo?!"

"No seas grosera, Erika... Somos nosotras las que les pedimos un favor..."

Erika, con sus coletas rosas, era la única que parecía descontenta con la situación.

"No pasa nada. Te aseguro que no hay nadie en este grupo tan mezquino como para enfadarse por un comentario así." Dijo Megumin con estudiada calma. Detrás de ella, Darkness asentía ajá-ajá con la cabeza.

No hay nadie mezquino, ¿eh? Es curioso que lo digas, teniendo en cuenta que si te burlaras de Megumin por su magia Explosión, de Darkness por su verdadero nombre o de Aqua por ser una diosa inútil, cada una de ellas se enfadaría contigo.

"Eso no es importante. Lo que importa es que por fin estamos en una misión real. ¡Todos, vamos a dar nuestro mejor esfuerzo!" Dijo Darkness.

"¡Sí! No puedo esperar que Cielo me demuestre sus habilidades mi Arcipreste-kouhai." Comentó Aqua.

"No te pongas competitiva." Le dije.

Una secuencia de acontecimientos aparentemente inevitable nos había llevado a esta misión, pero no pude evitar preguntarme si realmente era una buena idea. Pensé que sería mejor poner mucha distancia entre nosotros y esos bailarinas antes de que descubrieran que habíamos sido nosotros quienes habíamos incinerado su material escénico.

Mi atareado pensamiento se vio interrumpido por una voz desenfadada que decía: "¿Hmm? ¿Quién es ese que veo ahí?" Me giré para encontrar a Dust viniendo hacia nosotros. "¡Kazuma! ¡Lo sabía! ¿Qué haces dando vueltas por aquí? ¡¿Y qué pasa con todas esas encantadoras señoritas?! ¡Vaya! No me digas que has embaucado a más chicas para..."

"¡Hey, mira cómo hablas de un amigo! ¡Yo no he engañado a nadie!"

"Claro, hombre, si tú lo dices, pero apuesto a que estas chicas no llegaron así como así y pidieron unirse a tu grupo. Aunque te haré un favor: no te preguntaré los detalles. Hey, lo de las coles del otro día fue muy duro, ¿eh?"

"¡Hrk!" No iba a hablar de eso... ¿Verdad?

"¿Qué pasó el otro día?" Preguntó Lia, mirándome. ¡Mierda! ¡Me estaba dando muy, muy mala espina!

"Estas coles estaban haciendo un alboroto, ves. ¡Estaban golpeando un carro de porquería de aquella compañía de teatro! Así que Kazuma dijo que..."

"¡Ahhhhhh!" Grité. Estaba a punto de decir algo que definitivamente, ¡definitivamente no debería!

Pensé que mi arrebato había conseguido ahogar el final de su frase.

¿Lo habían oído?

"Hey, ¿por qué gritas?" Dijo Dust.

"Lo siento, ¡tenemos que seguir con nuestra misión! ¡Vamos, todas!"

"¡Muy bien, chicas! ¡Andando con paso firme! ¡No podemos perder ni un momento más!" Dijo Lia.

"Eh, ¿Kazuma? En serio... ¿Qué le pasa?" Dijo Dust.

Sabía que no era la forma más elegante de salir de aquella situación, ¡pero tenía que sacarnos de allí antes de que dijera algo aún más condenatorio! 

+++KONOSUBA DIAS FANTASTICOS+++

En fin, agradezco bastante a Ferindrad por la traducción. Si quieren apoyar los demás trabajos, y también al traductor original, pueden hacerlo yendo a visitar a su pagina, o también apoyandolo donando en su Patreon:

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